Ve al psicólogo

OFICINA PRIVADA DE PEDRO

Ish, tocando la puerta. – ¿Puedo?

Pedro –Adelante

Andrés ya está adentro sentado, igual que Pedro; Ishtar se acomoda en la otra silla

Ish –Aquí está el expediente entero de la Sra. Guadarrama

Andrés – ¿Hablaste con ella?

Ish –Si, esta mañana. –Ellos la observan, esperando que continúe. – abogados ¿Cuál es la solución a este asunto?

Pedro –Investigamos el historial de la propiedad antes de ser privada

Andrés –Tenemos preparada la denuncia para que la firme mañana la Sra., junto con la contestación de la demanda civil

Pedro –otras demandas, quejas y denuncias, en diversas vías preparadas en contra de esas personas.

Ishtar – ¿Investigaron en el registro civil?

Pedro –no

Andrés – ¿investigar qué?

Ishtar – a las personas que están demandando a la Sra. Guadarrama, al que le vendió y a la misma Sra. Guadarrama.

Andrés –No

Ishtar – ¿Y no les llamó la atención los nombres, la curiosa coincidencia de los apellidos?

Pedro –No, creí que era eso coincidencia

Ishtar, niega con la cabeza– llamen a la Sra. Guadarrama, cambien su cita para la tarde, investiguen eso; vayan a hablar con esas personas personalmente y obtengan su versión de los hechos, sus pretensiones reales no las de los abogados; y busquen la posibilidad de un acuerdo coherente

Andrés – ¿Quieres revisar la contestación de la demanda?

Ishtar -¿debería? –levantándose de la silla, estando por salir. – quiero saber las conclusiones antes de que vean a la Sra.

Pedro – No te vayas –deteniendo a Ish que estaba por salir. – ¿podemos hablar de otro… asunto?

Ish –Si, dime –regresándose. –

Andrés, que entendió que eso no le incumbía– Bueno, me pondré a trabajar; permiso

Ish –Este asunto es de ustedes dos –Andrés asiente con la cabeza y se retira– dime

Pedro –Tenía la impresión de que querías hablar conmigo hace rato

Ish, suspira y niega con la cabeza– ¿qué te hizo pensar eso?

Pedro –que te conozco Ish; y tu mirada suplicante de querer salir corriendo decía que necesitabas hablar

Ish duda de sus palabras – ¿Crees que debería…? Es complicado hablar después de lo que tú y yo…

Pedro –Entiendo, pero hemos sido buenos amigos a pesar de ello; antes y después, eso no debería cambiar

Ish – Lose… solo que… –Se sienta en la silla y recargándose pesadamente en el respaldo, pasa su mano por su cabellera con un gesto de frustración y queja; tomando aire comienza– discutí con Sandro por lo del baile con Daniel; discutimos por el viaje con Josué; discutimos por el beso con Jarrett; dis…

Pedro – ¿qué? ¿Te besaste con el imbécil que trabaja para Vega?

Ishtar que se detuvo de golpe por la pregunta de sorpresa que le lanzo Pedro; se excusa – ¡Ops! ¿No sabías? ¿No te conté?

Pedro – ¡No!

Ish – ¿tienes algo que me invites?

Pedro –No, aquí nada –ella suspira. –

Ish – Bien, pero después debemos salir para que te cuente pormenores

Pedro – Podrías resumir la historia

Ish le cuenta en breve quien es Jarrett, lo que sucedió, el pleito con Sandro por ello, luego por el viaje con Josué y por el baile con Daniel. Ish concluye –Sandro, me propuso que vivamos juntos

Pedro – ¿No viven juntos? –ella suspira y le explica el punto de vista de Sandro y lo que quiere, así como su miedo a perder su libertad. –

Ish –No sé qué hacer

Pedro – sí el acudiera con el psicólogo, para superar el engaño y dejar de ser tan posesivo; tu deberías ir para que te ayuden a superar esa necesidad de aferrarte a ese mal concepto de libertad

Ish – ¿Cómo?

Pedro –Ish, el que estés con él en la situación que se encuentran, a que vivan bajo un mismo techo, es exactamente igual, no tiene por qué cambiar tu estilo de vida; son una pareja y deben adaptarse poco a poco a los cambios; es lo que implica compartir tu vida con otra persona. La libertad radica en el hecho de seguir siendo tú, hacer lo que te gusta y compartirlo con él; no es algo que pierdas por vivir con él, o casarte, tampoco, nunca la perderás mientras mantengan el dialogo

Ish se queda pensativa un momento, con gesto de disgusto, le dice –Tienes razón; pero me cuesta trabajo aceptarlo

Pedro –Ve a terapia, también; te servirá

Ish –lo pensare; gracias. Y gracias por escuchar –se levantan para despedirse. –

Pedro –Sabes que estoy para ti; te quiero y espero que seas feliz –se dan un fuerte y emotivo abrazo. –

Ish –También te quiero