[SEQUENCE 1 | Rebirth?] [PT.1]

『PROLOGUE』

Despertando en la habitación de un hospital. Un joven con el cabello rojizo se sintió aturdido. 

"...¿¡Dónde estoy!? ¿acaso, he reencarnado? No!, eso es imposible, pero yo..."

Con recuerdos vagos de un lugar oscuro, aquel joven trató de pensar en quién era esa persona que veía en sus adentros. 

"Y-Yun... Yu — Ugh!, ¡¡¡Maldición, No puedo recordarlo!!!"

Por supuesto. Después de tratar durante varios minutos; aquel joven logró recordar, era una voz, la voz de una niña. 

Dulce, pero no empalagosa, alegre, pero al mismo tiempo le despertaba un sentimiento de tristeza y soledad en su interior.

※※※

Aturdido, aquel joven trató de sacudirse esas emociones que fácilmente le roían. Sin embargo, su mente se quedo en blanco, ahora no podía sacar conclusiones sobre estas sensaciones que parecían consumirlo, y después de un tiempo de contemplación, aquel joven se quedó en silencio. 

Todavía no lograba encontrar las respuestas a sus preguntas, pero tampoco lograba borrar sus deseos de conseguirlas y con ganas de hacerlo, el joven se forzó a recordar aquél 'sueño' que parecía increíble.

El sudor pronto empapó su ropa, mientras las venas en su frente se retorcían y su mente se nublaba, sin embargo, logró verla, aunque borrosa, la dueña de esa voz era hermosa.

Con el cabello rosado y un par de coletas desordenadas, vistiendo un uniforme escolar junto con su estatura pequeña, era fácil imaginar que ella era una estudiante de secundaria, Pero como si el destino lo negará, aquella sensación de recordar se fue volando.

Pero incluso con eso, aquel joven continuó tratando de recordar el rostro de esa persona que creyó especial.

Por suerte para cuando pasaron los minutos, como por arte de magia, logró escuchar algo más...

Era una pequeña frase que lo golpeó como una flecha.

"Para salir de aquí debes devorarme"

Ahora parecía que su esperanza estaba totalmente rota y debido a la emoción que lo abrumaba no pudo evitar derramar lagrimas mientras su pecho se apretaba.

Esa simple frase fue un golpe directo a su alma, pero a pesar de ello, aquel joven se negó a rendirse.

Todavía deseaba encontrar una pequeña esperanza de que ella siguiera viva, de que su conversación con ella no terminará allí.

Lastimosamente, un rugido enojado fue lo único que salió de sus adentros, ya no importaba cuanto lo deseará o cuanto se esforzará por recordarla, le resultaba imposible saber algo más...

Y después de intentarlo durante horas mientras aguantaba el inmenso dolor que lo azotaba.

Lo único que ganó fue un dolor severo que lo dejó inconsciente...

...

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Pronto pasaron los días de 'coma' y con su mente adormilada, aquel joven se sentó en la cama; mientras lo hacía vio su reflejo. 18 años, tal vez 20, el joven no lo sabía. Pero le gustó lo que vio. Y después de divagar durante varios minutos, aquel joven vio al otro lado de la ventana, ahí el cielo que estaba adornado por la bruma oscura y grisácea se empezaba aclarar...

Pero al ver que no había nadie a su alrededor, el joven se puso a pensar en algo que nunca había tratado de recordar desde que se despertó...

"¿Quién era él?", Él joven no lo sabía, en su cabeza sólo había un recuerdo roto de su vida, pero al mirar por la ventana y ver el cielo azulado, se sintió extraño; el joven recuerda cosas sobre este mundo, sobre su raza. Pero siempre da la sensación de ser algo falso, como si todo su pasado hubiera sido moldeado.

Pero mientras el joven trataba de pensar en su vida, escuchó la voz de una mujer.

"¿Te encuentras bien?"

Esas palabras lo tomaron por sorpresa, pero luego de verla le respondió avergonzado, —"N-no lo sé, mi cabeza me duele, ¿me puedes decir, qué me pasó?"

El joven la vio e reojo, una hermosa mujer vestida como enfermera, ella tenía el cabello dorado y los ojos morados; el joven simplemente se quedó fascinado con esta mujer. Con su aura pura, pero seductora, sin dudarlo el joven quiso halagarla, pero las palabras de esta bella enfermera lo dejaron en blanco...

"...Tuviste un accidente cuando tus compañeros trataban de crear un mundo basado en un hentai de tentáculos", la enfermera también vio que el joven no parecía estar del todo bien, por lo que le explicó su situación con una hermosa sonrisa.

"¿Hentai? ¡¡¡¿Tentáculos?!!!"

Esas palabras hicieron eco en la mente del joven y sin duda lo obligaron a recordar varias cosas subidas de tono, pero aquel joven no lo pensó demasiado, no después de que escuchó las siguientes palabras de la enfermera.

Ella comenzó a narrarle algunas cosas que creyó importantes, pero al mismo tiempo le dieron una sensación de incongruencia, obviamente lo que le decía no se parecía en nada a lo que recordaba.

Quizás no lo recordaba bien o mágicamente fue transportado a una dimensión paralela. Sea lo que fuera, el joven no lo sabía, pero aun así fingió escuchar.

"Bueno empecemos desde cero. Según nuestra historia, el mundo se forjó en base a la guerra; dos grandes razas peleaban para el disfrute de una criatura desconocida que llamaban el 'creador de mundos'.

Ya sea fantasía o no. La guerra de las dos razas fue real e incluso se le llama la guerra de los mil años, claro que seguramente pelearon por millones de años hasta que conocieron a los humanos."

Sintiéndose sin palabras, el joven pelirrojo solo pudo poner los ojos en blanco mientras trataba de descubrir si lo estaban engañando o si había llegado a otro mundo...

"¿Humanos?", fue una pregunta que extrañamente produjo un silencio incómodo.

"..."

Pero la enfermera solo lo miro con calma y continuó:

"¿Bromeas?, todo el mundo sabe que cuando los protoss fueron a ese planeta para conquistarlo, se enamoraron de sus historias. Novelas, anime, videojuegos, en fin todo ese tipo de entretenimiento nos resultó útil para crear los muy conocidos sistemas."

"..."

"Debes saber que somos una raza belicosa casi eterna y esas novelas nos dieron la idea de crear los mundos sin necesidad de pensar en como desarrollarlos, no olvidemos que como devoradores o destructores de mundos, nuestro deber está escrito en nuestro "código" y necesitamos devorar las 'auras' para poder mantenernos como la raza más fuerte, pero bueno, crear un mundo es lento y aunque suele ser más rápido si solo volvemos real una novela, un mundo creado de un libro no se puede comer por lo que enviamos humanos a esos mundos para generar nuevos tipos de 'auras' y luego devoramos sus historias"

Ok!, el joven maldijo en sus adentros mientras trataba de pensar en por que estaba siendo "engañado" por esta enfermera que a simple vista parecía un ángel; ni hablar de sus curvas y su...(tos)

Con una cara de idiota, el joven habló mientras trataba de desviar sus pensamientos mundanos, —"¿S-Soy igual?"

"Enserio chico, ¿ni siquiera recuerdas nada?", negando con la cabeza, la chica entrelazó los brazos bajo su abundante pecho mientras le respondía al chico pelirrojo frente a ella.

Pero el chico rápidamente apartó la mirada del busto de la chica y le habló con una voz profunda, —"...Tengo un recuerdo de un mundo destrozado en donde conocí a una mujer de cabello rosado, ¿crees que sea un sueño?"

"Eso es tonto, los protoss no soñamos; pero... Hmm... Un mundo negro puede significar que tú regresaste de otros mundos, pero al revisar tu código genético, resulta casi imposible."

La enfermera lo negó sin dudarlo, pero luego no pudo evitar responderle su teoría junto con sus quejas:

Tú no tienes nada de poder real, por lo que sólo puedes ir a mundos falsos creados por estudiantes y esos mundos son en 2D, por lo que ¿tal vez sea un sueño?...Bueno, al menos eres el primer protoss que sueña... Ok, ya vete... En unos días estarás mejor"

"¿Así nada más?", El joven también pensó que tendría que firmar algún tipo de papel o algo similar para poder salir del hospital, pero al ver que ella ni siquiera se molestó en mirarle, decidió seguir su camino después de escucharla asentir con un suave, —"Mm-Hm..."

"Hmm... Gracias por la ayuda", El joven pelirrojo se despidió.

Pero al parecer, a ella tampoco es como sí le importará y le respondió con un simple, —"Lo que sea", mientras él solo asintió antes de tomar el pomo de la puerta, pero mientras lo hacía, le hizo una pregunta en un tono avergonzado, —"Por cierto ¿Cómo me llamo?"

"¿Tú? Era... no sé ¿Ryan Goshling?"