Así comienza mi historia.

Mi nombre es Pedro y vivo en España. Llevo casi dos meses en el paro, por culpa de una epidemia mundial, que ha dejado a mi país bastante mal, económica y moralmente.

Hoy, como de costumbre me he levantado tarde, más o menos a las 12:30 o así y después de rascarme el trasero con las dos manos, durante el tiempo que he creído oportuno, he desayunado un café y unas cuantas galletas.

Después de desayunar, sin nada que hacer, me doy una ducha y me pongo ropa cómoda de estar en casa.

Una vez limpio y cómodo, enciendo el ordenador y veo el correo electrónico, que como de costumbre, no hay nada interesante. Está lleno de correo basura y propaganda.

Abro el portal de novelas y la página web donde veo cómics y manga, para ver las actualizaciones.

Para mi sorpresa, hay muchas de las novelas que sigo actualmente, que tienen el indicador de actualización, dándome bastante satisfacción.

Empiezo a leer con ganas los capítulos que han escrito mis autores favoritos, pero para arruinar la mañana, la mayoría de las actualizaciones, eran para decir que tenían bloqueo de autor, o simplemente escriben un capítulo, en el que dicen que hoy no van a escribir y que lo sienten.

Para quitarme la decepción, voy a la cocina, abro la nevera, lleno una jarra de medio litro de zumo de naranja, agarro un paquete de bollos de chocolate, con forma esférica y un agujero en el medio y después vuelvo al ordenador.

Cuando estoy delante de mi ordenador y empiezo ver vídeos de Internet, mi pantalla se apaga.

Para intentar encenderla, compruebo que está todo bien enchufado , pruebo a encender y apagar varias veces y le doy unos golpes en el costado cuando veo que lo anterior no funciona.

Cuando ya lo doy por imposible y estoy pensando que voy a tener que comprar una pantalla nueva, sin hacer nada, vuelve a encenderse ella sola y entonces aparecen una letras blancas sobre el fondo negro, que me hacen una encuesta.

Después de buscar una cámara oculta por unos minutos, vuelvo a apagar y encender el ordenador.

La misma encuesta sigue apareciendo en la pantalla,pienso que es alguna especie de virus informático o que algún maldacido ha pirateado mi ordenador. De todos modos como no tengo nada mejor que hacer me pongo a leer lo que aparece escrito en mi pantalla.

Al menos no tengo que comprar una pantalla nueva y con suerte solamente sea una un virus o algo así que podré limpiar cuando formateo el ordenador.

"¿Si te dijeran que has muerto y puedes elegir a donde ir, al cielo, al infierno, reencarnar o transmigrar, que elegirías?" (????)

Aparece un espacio en blanco para escribir una respuesta.

"Hablar con el responsable, para conseguir una explicación si fuera posible." (yo)

Cuando respondo, automáticamente cambia la pantalla y aparecen unos puntos en el medio, como si algo estuviera cargando.

Todo se oscurece a mi alrededor y se desvanece.

Lo siguiente que veo, es que estoy en una silla, es más cómoda que la mía vieja, pero me doy cuenta de inmediato, que ya no estoy en mi habitación.

Estoy delante de una mesa de oficina, con una chica muy hermosa con el pelo rubio como la miel, que le llega hasta los hombros.

Lleva puesta un traje gris y gafas que le dan un aire de ejecutiva.

La miro de arriba a abajo y me quedo mirando su cara y su pecho que queda bien marcado.

Ella no ha dejado de mirarme desde que llegué hace unos momentos y

después de unos minutos de mirarnos en silencio, soy el primero en abrir la boca para romper este silencio.

"¿Podrías decirme dónde estoy?" (yo)

"¿Ahhh?, si claro, sin problemas, estás muerto y en un espacio intermedio del mundo espiritual y el mundo físico." (???)

"Perdón, pero ¿podrías repetir eso?" (yo)

"En un espacio intermedio del mundo espiritual y el mundo físico." (???)

"La otra parte, por favor." (yo)

"Claro, sí, perdona, estás muerto." (???)

"¿Podrías decirme cómo he muerto, no logro recordar?. Le pregunto bastante sorprendido, por qué lo último que recuerdo es estar enfrente de la pantalla de mi ordenador." (yo)

Ella me responde mientras juega con sus dedos en la mesa haciendo círculos.

"Creo que te he matado por error y he intentado arreglarlo con la encuesta que te he enviado a la pantalla de tu ordenador." (???)

"¿Como puedes haber matado a alguien por error?, ¿no se supone que eres una diosa?" (yo)

"Solamente soy una becaria en prácticas del dios encargado de gestionar tu mundo, pero él, está de vacaciones." (diosa becaria)

"Ya entiendo" (yo)

"Esperaba poder arreglarlo, para que no me despida cuando vuelva." (diosa becaria)

"La última vez que cometí un error, sucedió la segunda guerra mundial y me dió el último aviso. Si volvía a cagarla, me despedirá y pondría en mi lugar, un modo automático de gestión." (diosa becaria)

¿Podrías elegir una de las opciones, para que no se dé cuenta que la he cagado?" (diosa becaria)

"¿Me matas por error y me pides que acepte tu cagada, sin ninguna compensación y no diga nada? Le pregunto a la diosa becaria con bastante ironía en mis palabras." (yo)

"Sí, eso sería fantástico, gracias." (diosa becaria)

Me responde sin la más mínima vergüenza o signo de comprender mi ironía.

Cuando veo que no ha entendido la ironía, le respondo, que no, y empieza a hacer pucheros rompiendo la imagen de fría ejecutiva que pretendía poner, es bastante inocente en mi opinión.

"Si quieres mi silencio, vas a tener que compensarme con algunos beneficios." (yo)

No se muy bien como funciona esto, pero viendo que ella es muy inocente y que tiene un gran sentimiento de culpa, voy a intentar sacar todo el partido que pueda a esta situación y si todo va bien puede ser una bendición encubierta.

Ella se queda pensando un momento y responde.

"De acuerdo, eso puedo hacerlo, ¿qué tipo de compensación quieres?" (???)

"Quiero que me concedas cinco deseos, además quiero reencarnar en un mundo que yo elija, con los antecedentes y apariencia que yo quiera?" (yo)

"Eso es demasiado" (diosa becaria)

Me responde enfadada.

"Solo tres de los deseos y eliges el reencarnar como quieras." (diosa becaria)

"Está bien, pero no puedes alterar mis deseos." (yo)

Le digo como un ultimátum, a lo que me responde.

"Estoy de acuerdo." (diosa becaria)

"¿Tienes una hoja de papel que puedas darme y un bolígrafo?" (yo)

"¿Es ese el primer deseo?" (diosa becaria)

Pregunta ella sorprendida.

"No, es para poder planificar bien mis deseos, no quiero dejarme nada a medias, si lo escribo pienso mejor." (yo)

"Claro, aquí tienes, pero no tardes demasiado, quiero terminar con todo esto cuanto antes." (diosa becaria)

Chasquea los dedos y aparecen un montón de hojas de papel y un bolígrafo sobre la mesa.

Tras un rato de pensarlo y escribir en el papel, le paso la hoja con mis deseos escritos de la forma más detallada que puedo y ella se queda mirándola sorprendida.

1: Deseo una habilidad espacial ligada a mi alma, que sea una fusión de las habilidades de la Granja en otro mundo, Asora, y el mundo interno del colgante ,de la técnica de fortalecimiento antiguo.

2: Deseo un sistema como en las novelas que he leído, que no tenga inteligencia propia, tiene que tener inventario con capacidad infinita, tener una opción que me permita viajar a otros mundos por el omniverso, y también tiene que tener una tienda, en la que puedo conseguir absolutamente todo y que todo sea gratuito.

3: Deseo una habilidad para capturar y esclavizar a cualquier ser, incluso los seres más poderosos, incluso a los mismos dioses y seres del origen, sin que pierdan su conciencia, voluntad y racionalidad, no quiero marionetas a mi alrededor, sino que sean ellos mismos, y sepan que han sido esclavizados por mi.

Ella se me queda mirando y me dice.

"No entiendo nada de lo que está escrito." (diosa becaria)

"¿Puedes leer mi mente o mis recuerdos?" (yo)

Le pregunto mirándola a los ojos y me responde con la cara orgullosa.

"Claro que sí, soy una diosa después de todo." (diosa becaria)

Pone las manos en mi cabeza y después de varios minutos, me dice que ya lo entiende.

Después de haber leído el papel varias veces, fruncir el ceño y vuelve a revisar mi mente. Empieza a brillar como una bombilla incandescente y yo siento como algo cambia dentro de mí.

Siento una sensación hormigueo en todo mi cuerpo y una gran presión en la cabeza, como si me fuera a explotar por el dolor que estoy sintiendo.

Cuando deja de brillar, la presión desaparece.

Me siento recuperado y una sensación de ser poderoso como nunca antes había sentido, recorre todo mi cuerpo.

Para hacer una prueba, digo en mi mente.

"Sistema." (yo)

Aparece una ventana de color azul translúcido enfrente de mi cara, me muestra mi estado personal, como si fuera una hoja de personaje de un videojuego.

Algunas pestañas de habilidades, entre las que se encuentra el inventario, los esclavos capturados, que actualmente está vacío y otras mas.

Ella se ve muy cansada, exhausta y cerca del colapso, como si conceder mis deseos, hubiera sido un gran esfuerzo.

"¿Estas bien?" (yo)

Le pregunto con cierta preocupación y ella me responde con la mirada cansada y deseando cerrar los ojos para descansar.

"No te preocupes, en unos cuantos años de descanso recuperaré todo el poder gastado, tus deseos eran muy exigentes y requerían todo mi poder divino, además de gastar toda la reserva que había dejado el dios jefe, para casos de emergencia." (diosa becaria)

Al pronunciar esas palabras, ella misma se da cuenta de que ha vuelto a cometer un error y está deprimida.

"Ha sido un placer, pero ya va siendo hora de que vaya a reencarnar, si eres tan amable de decirme como hacerlo." (yo)

Sin molestarse en responder, abre un portal a un lado y lo señala con el dedo.

"Cuando entres podrás elegir los antecedentes y mundo que quieras." (diosa becaria)

Dice mientras permanece acostada sobre la mesa.

Me levanto, me dirijo hacia el portal y antes de entrar, le digo dándome la vuelta.

"Gracias por todo, pero me gustaría hacer una última consulta antes de partir en mi nueva aventura." (yo)

"¿Qué quieres ahora?" (diosa becaria)

"¿Cuál es el nombre de mi primera esclava?" (diosa becaria)

"¿Cómo quieres que sepa como se llama tu primera esclava?" (diosa becaria)

La diosa me mira con cara confundida, no sabe qué responder, pero en un instante ella empieza a gritar horrorizada al verme sonreír con picardía.

"No te atreverás, ni se te ocurra hacer lo que creo que estas pensando." (diosa becaria)

La señaló con el dedo y con un pensamiento activo las habilidades.

Esclavizar y capturar.

La Diosa que no tiene energía suficiente para defenderse o evitar ser capturada, desaparece y siento como entra y se guarda dentro de mi alma, de alguna manera siento su presencia en mi interior.

Después de atrapar a la diosa, cruzo el portal con una gran sonrisa en mi cara.