Capítulo 1: camino del Mictlan

Una oscuridad inmensa fue lo que pude ver al abrir de nuevo mis ojos. Lo último que recuerdo, es solo haber cerrado los ojos para descansar. Miré a mis alrededores y comencé a caminar. Siento que estoy avanzando más no encuentro con que lograr guiarme así que solo continuaré adelante.

Tiempo después de tanto andar pude notar unas siluetas parecidas a personas que al igual que yo estaban caminando hacia adelante. Me acerque poco a poco a una de ellas que tenía rasgos femeninos.

"Hola, disculpa ¿sabes dónde estamos?"

"...….."

"¿Hola? Se encuentra bien"

"..."

Al no recibir respuesta alguna me aleje de ella para ver si alguien más me podría responder. Fui de una persona a otra más ninguna me contestaba. Estaban caminando siempre adelante sin mirar atrás como si fueran zombis, más sé que no lo eran porque nadie me atacó y todos se veían normales. Sin caminas cojeando o lo que suele caracterizar a los zombis. Sin que nadie me contestaba seguí caminando en la misma dirección que todos ya que había un buen tramo como para querer regresar.

Tiempo después de que andar sin rumbo pude ver un gran arco que tenía decoración con huesos. Traté de echarme para atrás para no entrar más una ola de gente me empujó hacia adelante. No me quedo más que entrar a través de ella. Al entrar pude notar que mucha de la gente que no me contesto comenzaba a hablar entre ella, más lo más aterrador es que muchos de ellos tenían heridas letales como el pecho la cabeza a algunos les faltaba un brazo o una pierna no pude evitar gritar al igual que muchos otros.

"aaaaaaaaaaaah"

"aaaaaaaaaaaah"

"aaaaaaaaaaaah"

"Oigan que les pasa, por que gritan como locos" pregunto una persona a la cual le faltaba una mano.

"¿Qué es esto, ¿dónde estoy?"

"¿Por qué ay tanta gente aquí con heridas?

Fueron algunas de las cosas sé que podían escuchar en los alrededores. Después de un raro me pude calmar y examinar más a fondo la situación, y pude deducir que todos aquí estaban muertos incluyéndome. No me sorprendió descubrirlo ya que desde ya un rato lo venía pensando y todavía podía recordar lo que me había pasado. También pude encontrar un agujero que me atravesaba la espalda y que eso me había perforado un pulmón así que lo empecé a tomar más con calma después de eso.

Pasaron los minutos y me volví acercar a la chica con la que traté de hablar en un principio.

"¿Hola?"

"¡Ah! ¿Hola? Disculpa por no contestarte hace rato. Intente hablar más no podría hacerlo"

"No te preocupes, Ahora entiendo por qué era. ¿Por casualidad sabes dónde estamos?"

"No la verdad es que no, también te iba hacer esa pregunta"

Antes de poder continuar, un gran paisaje se empezó a formar delante de todos nosotros. Como una gran pradera con montanas llenas de vida. En el fondo con diversos árboles y más. La misma tierra se empezó a separar dejando un gran espacio el cual no se le veía un fin alguno.

"Conozco este lugar" pude decir muy levemente sin que nadie me pudiera escuchar.

Como si respondiendo a mi murmullo, el agua comenzó a fluir continuamente sin parar un momento. Cuando llegó hasta el borde el agua comenzó a correr hacia delante creando un río. El pasto se empezó a expandir por ambos lados y una pequeña esfera brillante parecida a un sol, se estaba asomando detrás de las montañas. Cuando todo eso acabó trate de explicar lo que venía, más unas cuantas personas se metieron en el agua comenzando a nadar. Pero al llegar a cierto punto dejaron de avanzar y en ese momento la corriente se los llevó para no verlos más.

Me hacerte para que nadie más entrará y poderme explicar. Más el suelo comenzó a templar y muchos pasos se podían escuchar a lo lejos. Mucha de la gente comenzó a entrar en pánico más no podían ir a ningún lado. Por la puerta donde entramos solo era de entrada y no de salida parecía que una barrera nos impedía salir. Después de la conmoción inicial la gente se empezó a tranquilizar viendo que solo eran animales inofensivos. Como caballos, perros, gatos, y entre muchos más. Lo cual me pareció raro ya que se suponía que deberían de ser solo perros más no voy a quejarme.

Varios de los animales se quedaron a una distancia considerable de nosotros, muchos de ellos mirando fijamente a una sola persona. Algunas de las personas se encogían de miedo más otros los miraban con curiosidad.

Un tipo bastante arrogante se acercó a un elefante que estaba por ay, pateando y gritando que se quitaran a los demás animales que estaban en su camino. El chico al llegar le pareció gracioso llegar y jalarle la oreja y jugar con su trompa. Unos cuantos más les pareció unirse a él y maltratar a los animales inofensivos.

No me iba a quedar mirando eso así que tuve que intervenir.

"! ¡Oigan que les ocurre dejen a los animales en paz!

"Que dijiste idiota" me dijo el tipo que estaba con el elefante acercándose a mi peligrosamente.

"Eh dicho, que los dejes, o acaso no escuchas" Conteste también acercándome a el

"No te pases de listo conmigo niño. Que vas a hacer para detenerme. Acaso me piensas golpear" comenzó a decir casi empezando a reír cuando un golpe le llegó de su derecha impactando en su mejilla y haciéndolo retroceder unos cuantos pasos cerca del río.

"Vas a ver maldito bastardo" comenzó a decir, pero simplemente me acerque a él antes de que se recuperará y con una patada espartana lo tire al río dejando que la corriente se lo llevara.

"¡Eh dicho, que los dejaras!" grite a los demás en tono amenazador para que dejaran a los animales en paz. Al ver mi arrebato todos lo que empezaron hacer algo a los animales se calmaron y se alejaron. Yo mismo me hacer al elefante. Al estar frente a él nos miramos fijamente por un momento cuando su trompa, tomó una de mis manos dándome permiso para que lo tocara. Así que me acerque para acariciarlo suavemente. Muchas de las personas se quedaron viendo perplejos de lo cariñoso que era el elefante. Pensando que podrían hacer lo mismo poco a poco se fueron acercando a distintos animales para que pudieran convivir.

Después de alejarme del elefante. Un perro se acercó a mí, empezando acariciarse en mis piernas esperando que le devolviera en gesto. Al momento de tocarlo pude ver lo siguiente que tenía que hacer, me arrodillé en uno de mis pies acercando mi cabeza a la suya.

"Estoy listo" Le murmure al perro así que él se levantó y comenzó a moverse hacia el río. Yo fui detrás de él. Un momento antes de que entrará. Alguien me habló por la espalda.

"¿Qué crees que haces?" pregunto la chica con la que estuve platicando hace unos minutos atrás.

"Es momento que continuemos con nuestro viaje"

"¿cuál viaje?, ¿Sabes que si te metes al río te va a llevar cierto?"

"Eso, es lo que estoy a punto de averiguar" sin esperar a que me respondiera. Volví a ver al perro y le asentí con la cabeza. Se pudo ver raro desde el exterior, pero no me importo.

Ambos saltamos al río al mismo tiempo. Al caer al agua me comenzó a llevar. Más el perro se acercó dándome la espalda para poner mi brazo alrededor de él. Una vez que ambos estuvimos seguros en perro comenzó a nadar hacia enfrente llevándome a la otra orilla del río sin ningún incidente. Al llegar regresé mi mirada para ver a la gente que se me quedaba viendo con sorpresa Nadie más se atrevió a saltar así que me quedé esperando para ver quién era el valiente.

Al pasar diez minutos se pudo escuchar como salpicada en agua, dando a entender que alguien más avía saltado de primeras no pude ver quien era así como esperé que saliera a flote. Al salir vi que era la chica que al igual que yo traía a un perro de compañía que también la estaba acercando a la orilla. Cuando ella llegó se pudieron oír que más gente se aventaba al agua más unos pocos fueron los que se los llevó la corriente una lástima por ellos.

"¿Cómo supiste que teníamos que saltar?"

"No lo savia solo lo supuse"

"Entonces me dices que arriesgue mi vida por una suposición" contesto medio gritando.

"Tranquila. En primer lugar, ya no estamos vivos. En segundo más o menos si sabía lo que iba a pasar, más no dije nada para que nadie se espantara"

"jaja muy gracioso. Bueno Entonces habla, que fue eso y por qué unos pasaron y otros no"

"Bien, bien. Todos aquellos que en vida trataron bien a los animales se les permite pasar y aquellos que no están destinados a vagar"

"Valla, no savia que tendía algún beneficio tratar bien a los animales, Dime como supiste eso"

"Ay, está escrito hay" respondí señalando un pequeño cartel cercano.

La chica puso una de sus manos en su cien tratando de evitar un dolor de cabeza. Yo solo me encogí de hombros y me volví a sentar a lado de mi amigo can.

Luego de un rato y que la gente cruzara el río me levanté y comencé a caminar por el sendero que ya estaba marcado, por un camino hecho de pisadas. Después de subir por unas cuantas horas se podía escuchar como sonaba el choque de grandes cosas. Y así fue, la vista que nos recibió fue la de las dos rocas chocando una contra otra.

"segunda prueba, Cruzar en el momento justo" murmure para mí, más la chica que no me había parado de seguir. Me logro escuchar y frunció el ceño en desaprobación.

"¿Cómo quieres que crucemos eso?" dijo haciendo que varias cabezas voltearan en nuestra dirección

"No te preocupes, esto no requiere nada en especial solo velocidad"

"Entonces si es así, quiero ver que lo intentes tu primero"

"Será un placer" conteste medio en broma. Más aun así yo tenía que ser quien lo hiciera primero.

Mi pequeño amigo perruno camino conmigo unos pasos hacia atrás, poniéndome en una posición de carrera. Las piedras tenían una distancia de quinientos metros de largo y trescientos de alto. Y el tiempo en el que chocaba era casi de un minuto y retrocedía en uno y medio.

Cuando las rocas chocaron entre ellas corrimos hacia adelante a toda velocidad. Unos pocos metros antes de topar con pared, comenzó a abrirse de par en par al ver la pequeña entrada que se había formado el perro corrió delante de mí con más velocidad. Al igual que el trate de ponerme a su ritmo. Ambos corrimos por doscientos metros cuando las piedras llegaron a su tope. Lo que daba la señal de que solo tenía un minuto más antes de que se soltaran pensando que no lo iba a conseguir pensé en rendirme ya que mis pies quemaban y me costaba respirar.

"Este puede que sea, en fin, de este viaje. Voy a morir" comencé a divagar para mí mismo. Cuando pude darme cuenta de lo que había dicho.

"Morir. ¡Ja! Si ya estoy muerto. Lo que quiere decir que no tengo el limitador de los vivos no necesito respirar y es solo una ilusión que me duelen los músculos"

Con mi nuevo conocimiento cerré mis ojos apagando mi dolor y mi respiración. Al pasar un segundo mi teoría era correcta. No me cansaba ni nada de eso así que corrí mucho más rápido de lo que estaba haciendo. Justo en ese momento que comencé a acelerar un chasquido sonó fuertemente dando entender que ambas rocas se aproximaban más rápido de lo que pensaba ya solo estando a varios metros.

"55, 56, 57, 58 ,59 ,60"

Al terminar mi cuenta atrás se pudo escuchar el choque de las rocas. Frente a mi pude ver a un pequeño perro sacudiendo su cola en felicidad al verme llegar.

"Ey amiguito, ¿piensas acompañarme todo el viaje? Le pregunte

"Wuuf" ladró poniéndose de pie recargándose, en mi meneando su cola con más felicidad.

"En ese caso te pondré un nombre" dije

"wuuuff" Me respondió con un ladrido.

"Sombra. Ese será tu nombre que te parece" a pesar de que el perro no era de un color oscuro, se me ocurrió ya que desde que nos vimos no se ha separado de mi como si fuera mi sombra.

Al decir su nombre. Como si fuera algo místico, el mismo perro cerro sus ojos como si se estuviera concentrando. Yo en silencio me quedé mirando. Un momento después sus orejas se empezaron a extender en forma triangular sus dientes comenzaron a crecer su pelaje se comenzó a oscurecer y el mismo empezó a crecer, todo esto delante de mí. Ahora parecía a unos de esos perros siberianos.

"No sabía que se podía hacer eso" pensé para mí mismo parpadeando un par de veces para ver si no estaba viendo mal. Y al parecer si vi bien ya que se acercó a mi comenzando a caminar en mi alrededor.

Las piedras chocaron una vez más detrás de mí, voltee para ver si alguien se animaba a seguir y en realidad así fue. Y como ya me esperaba era esa chica que al igual tenía a su acompañante, que era un perro Golden retriever, si no me acuerdo mal. La apertura se fue extendiendo poco a poco y al parecer al igual que yo se dio cuenta que ya no tenía sus limitadores humanos.

Me acerqué en el limité de donde chocaban las rocas. Y extendí la mano asía ella, esperando que lo tomara ella también extendió la suya más las rocas se estaban acercando cada vez más. Su perro logró cruzar y antes de que chocarán las rocas, nuestras manos se tomaron haciendo que instintivamente la jalara hacia mi haciendo que ambos tropezáramos ella cayendo encima de mí.

"Haah, Haah. Eso fue, aterrador gracias por ayudarme" dijo la chica respirando con dificultad a pesar de no era necesario

"No ay de que, es lo menos que podía hacer" Le sonreí levemente. Ella aun estando encima de mí se sentó en mi estómago.

"Oye me da gusto que estés bien, pero te podrías quitar de encima" dije algo nervioso.

Al escuchar mis palabras ella rápidamente se levantó de donde estaba y avergonzada miró hacia otro lado.

"Creo que no nos hemos presentado mi nombre es Atletl Zeia" dije a la chica para cambiar el tema.

"O es cierto, mucho gusto Atletl mi nombre es Lua" me respondió extendiendo su mano la cual yo respondí

"Es todo un placer el por fin saber tu nombre, señorita Lua" dije poniendo mi mano en mi pecho e inclinándome levemente

"No tienes que ser tan educado conmigo. Ya una vez que nos presentamos, ¿sabes que es lo que sigue después de esto?" me pregunto Lua con duda

"Claro es la montaña de los pedernales. Donde unos tienen que pasar con el riesgo de ser cortado" le respondí sin más.

"No suena, muy atractivo que digamos" digo Lua frunciendo su cara.

"Lo sé, yo pensaba continuar ya que nadie más se está atreviéndose a cruzar" dije sin más

"No crees que deberíamos espera un poco más para que siguiéramos en grupo"

"No creo" Al decir esas últimas palabras me di la vuelta para continuar caminando. Voltee para ver si Lua me seguía más ella estaba con su mirada fija en las rocas que chocaban. Al dirigir la mirada a ellas pude ver que las personas decidieron corres en grupo, casi todos al mismo tiempo. Uno por uno fue pasando junto con sus compañeros, más unos pocos fueron aplastados por las paredes haciendo que regresaran para el otro lado, como si se hubieran teletransportado al principio. Me quedé viendo en espectáculo de las personas contentas de pasar, más no fue la gran cosa y continué con mi camino. Viendo que Lua y yo comenzamos a caminar los demás también empezaron a seguirnos algunos platicando entre ellos y también otros en silencio.

Al caminar se podía ver en los alrededores, como sobresalían del piso algunos picos de piedra de distintos tamaños. Entre más caminábamos se fueron viendo más y más. Dándonos a entender que ya estábamos en la tercera prueba. Entre más avanzamos la nieve se comenzaba a formar poco a poco haciendo que muchas de las piedras se escondieron entre ella.

Un chico en particular continúo avanzando sin ninguna precaución, y piso accidentalmente una de ellas perforando su pie.

"aaaauuugh" el grito de dolor de aquel chico fue tan intenso, como si se estuviera quemando. Me acerqué a uno de los picos y pinché uno de mis dedos sobre ella. Espere un rato para ver si pasaba algo más nunca sucedió nada. Lua al ver mi acción también pincho uno de sus dedos y tampoco reacciono a ningún dolor, ni nada. Nos volteamos a ver para confirmar lo que sospechábamos.

"Crees que no sintamos esto, porque ya aceptamos a no apegarnos a lo que solíamos ser" dijo Lua preguntando algo de lo cual también tenía duda.

"Supongo que tienes razón, muchos de ellos han de pensar que esto será un sueño o que nada de esto es real, por ello aun sienten dolores o cansancio. Creo que no esperaban, que ya nos hubiera desecho de nuestras dudas al principio" empecé a decir mis teorías a Lua

"Estoy de acuerdo contigo" empezó a sentir Lua dándome la razón

"¿Sabrás de una forma de pasar?, porque a pesar de no sentir dolor no quiero dañarme la piel. Ya que no va a crecer otra vez" dijo Lua algo preocupada

"Por supuesto. Con aquellos lasos que as formado, ya sean nuevos o viejos serán los que guíen tu camino" comencé a decir sin duda en mi voz

"Me sorprende que sepas todo esto, a pesar de que sea tu primera vez aquí" dijo Lua con sorpresa en su voz.

Simplemente apunte mi dedo en una dirección, y al final del dónde estaba señalando avía un cartel. Lua se quedó perpleja al mirarlo.

"No digas nada"

Simplemente me encogí de hombros, con una pequeña sonrisa mientras me arrodillada alado de sombra.

"Confío en ti compañero" Le dije mientras acariciaba su cabeza. Al escuchar mis palabras sombra se pudo enfrente mío comentando a olfatear, mientras caminaba hacia adelante. Ambos entramos en la nieve haciendo un camino de pasos, más al instante que íbamos pasado comentaba a rellenarse. Lua siguió mi ejemplo depositando su confianza en su perro. Unos dudosamente lo hicieron y unos pocos sin confiar en ellos. Para mí y Lua el camino fue sencillo ya que nuestros respectivos guías ni una sola vez se equivocaron, lo que confiaron a medias tenían uno que otro raspón y los que nunca confiaron estaban con, cortes aquí y allá. Más no avía sangre por la razón que fuera.

"Bien lo hicimos y sin daños ¿pero ¿cómo supiste si el cartel no decía nada de eso?" cuestiono Lua moviendo su cabeza a un lado

"Confiar demasiado puede llevar a que te traiciones, más un animal nunca tendrá ni celos ni envidia, así que confía en ellos y siempre te ayudarán" respondí a su pregunta

Lua comenzó a mover su cabeza como si buscará algo, me di cuenta de lo que buscaba así que solo apunté hacia el suelo donde una pequeña placa estaba enterrada.

"¿Cómo es que tú siempre la vez?" comenzó a cuestionar Lua

"La verdad no tengo ni idea, es como si solo aparecieran" le respondí con la verdad más parecía no haberme creído.

"Bueno, me podrías decir que es lo que sigue" volvió a cuestionar Lua

"Se llama en hogar del viento y la obsidiana" Simplemente respondí.

"Que significa eso"

"No tengo idea, así que sigamos para averiguarlo" dije algo animado

Esta vez Lua comenzó a dirigir el camino hacia adelante. No sé qué le habrá motivado hacer eso, pero silenciosamente la seguí. Al salir del campo de nieve se podían ver a lo lejos un cañón que estaba rodeado de unos acantilados, uno de cada lado donde no se alcanzaba a ver nada simplemente todo era desierto. El mismo camino donde nos encontrábamos nos llevaba a lo profundo de él. Seguimos caminando hasta que nos quedamos a unos pasos de entrar esperando que los demás se terminaron de reunir.

"Lo veo, Lo veo" comenzó a decir animadamente Lua

"Así, que vez" la cuestioné ya que se veía muy feliz.

"El cartel Lo veo" me contesto Lua igual de animada como una niña pequeña y una sonrisa en su rostro.

"Si es así ¿Qué tenemos que hacer? Volví a preguntar. Más ya sabía, más o menos lo que teníamos que hacer. Pero estaba equivocado.

"Déjame ver, Solo dice Esquiva, protege y aguanta" dijo Lua leyendo en cartel que estaba frente a ella.

"Ya veo cuatro y cinco gustos" dije con una mano en mi barbilla pensando.

"Entonces que debemos hacer" Me pregunto Lua

"Quiero suponer que lo de proteger a de ser a nuestros compañeros. Lo de esquivar a de ser que en cierto momento va a venir algo con fuerza que nos puede cortar, y lo de aguanta ha de ser que el mismo viento nos tratara de arrastrar hasta hacernos volar"

"Eso parece bastante difícil"

"Supongo, mira allá puedes ver que hay varias grietas y también rocas por el camino, han de ser para esconderse o algo por el estilo" decía mientras apuntaba a varios lugares

En lo que estábamos hablando. El aire comenzó a soplar con fuerza y otras veces más despacio y luego dejaba de soplaba. Parecía haber un patrón en ellos más no lo parecía.

"Suele cambiar de intensidad y de duración, lo mismo pasa con las pausas" comencé a comentar en voz alta

"Así parece" Dijo Lua dándome la razón

"OK, entonces no te alejes de mi" dije esperando su confirmación

"Emmm, vale" se quedó pensando Lua antes de asentir

Al instante de que deje de hablar el aire paro. Dándonos la oportunidad de avanzar y así fue como lo hicimos. Corriendo detrás de unas piedras del tamaño justo, para que pudiéramos ponernos de pie junto a los perros. Como si fuera algo natural se pusieron debajo de nuestras respectivas piernas, donde estaban más seguros. Después del primer choque de aire. Vino un suave viento haciendo frotar algunas piedras pequeñas el nuestro alrededor. Nuestras miradas estando dirigidas a donde aviamos salido. Se pudo ver como dos chicos entraron donde ya les afectaba en viento, que te hacia levitar. Trate de gritarles más mis palabras no llegaron a ellos, la única que me logro escuchar fue Lua.

Momento después, el aire se calmó dejando que todo lo que había frotado callera de nuevo al piso, incluidos los dos chicos. Sin voltear para ver lo que ya era obvio, comenzamos a correr de nuevo esta ves hacia una apertura que estaba en el muro, ambos entramos en ella y de igual manera los perros. Era bastante amplia para que los dos entráramos y nos pudiéramos sentar.

"Oye, y cómo fue que moriste" pregunto de repente Lua

"Valla, veo que eres directa" dije con ironía

"je je, lo siento, pero como tienes un pequeño agujero en la espalda, me intrigó el saber cómo moriste" me respondió Lua con duda en su voz

"O ya veo, estuve involucrado en una explosión, que aventó un pedazo de metal a mi espalda perforándome un pulmón "comencé a explicar

"Y que hacías, para que pasara eso" me pregunto Lua aún más intrigada que al principio.

"Bueno veras, estaba en mi restaurante favorito cuando paso la exposición. Y a mi defensa entre para ayudar a la dueña que aún estaba dentro, y al salir con ella pues esto paso" Le seguí contando de lo sucedido

"Eso fue inesperado, no es así" dijo Lua algo sorprendida

"Así es, lo último que recuerdo es estar en los brazos de una amiga" dije con un suspiro y algo de tristeza en mi voz.

"O una verdadera lástima moriste en sus brazos" dijo Lua algo apenada

"Así párese, Pero bueno y tu como falleciste" Comencé a decir para cambiar en tema.

"Yo, no tiene nada es especial, morí por una enfermedad cardíaca cuando dormía" dijo sin más

"Que suerte tuviste" respondí con algo de celos

"Eso dicen, más es una pena dejar a mis seres queridos atrás" respondió Lua con algo de tristeza.

Solo pude asentir a sus palabras, ya que yo también dejé a mis amigos y familiares atrás, más no era tiempo de llorar. Al terminar nuestras platica El viento se estaba calmando. Así que nos preparamos para salir y continuar. Así pasamos todo el rato escondiéndose donde se podía y esperando a que pasara. Al llegar al final ambos salimos con varios cortes en la ropa, como en partes del cuerpo. Más nosotros corrimos con suerte ya que los más imprudentes estabas con la ropa ya hecha jirones y a muchos ya se les podían notar parte de sus huesos, pero aun así todos logramos pasar a excepción de los que se llevó en viento, que fueron unas cuatro personas, las que nunca más volvimos a ver o solo de momento.

Al igual que otras veces nos quedamos a descansar. Más no fue por mucho tiempo, comenzamos a caminar para adelante el único lugar a donde se puede ir. Al salir del cañón. El aire se empezaba a sentir más seco y el sol que no era el sol, irradiaba con mucha intensidad. A intervalos iguales se podían ver estanterías con armas, escudos, y armaduras de diferentes tipos.

"Esto la verdad me confunde" dije sin más ya que no sabía nada de esto

"¿El que?" pregunto Lua igual de confundida que yo

"En todo lo que eh leído, nunca menciona nada de esto" dije en voz baja

"Crees que vamos a pelear con algo" respondió Lua mirando en los alrededores algo nerviosa.

"No creo, solo ay que seguir adelante" dije aun estando confundido

"Te sigo entonces" dijo Lua casi como una pregunta.

No sé en qué momento me gane la confianza de Lua, Siempre me va siguiendo y casi no duda en lo que digo, Le dije a las demás personas lo que pensábamos, más unos cuantos se mantuvieron firmes y se equiparon con armaduras y tomaron algunas armas. Al ver que no los iba a convencer simplemente me encogí de hombros y entramos en el desierto. No pasaron ni diez minutos, cuando una de las primeras personas se desplomó en el suelo por el calor y el peso de la armadura, uno a uno fue cayendo por todos lados.

"¿Y ahora que, los ayudamos?" pregunte dirigiendo mi mirada a Lua que también me miraba esperando que dijese algo.

"Si te párese, Más no entiendo cómo se desmayaron" respondió Lua inclinado la cabeza con perplejidad.

"A de ser porque ellos, todavía persisten en sostener su humanidad y les afecta más a ellos. Por qué a pesar tú y yo ya estemos de acuerdo de dejar atrás nuestra humanidad aun siento algo de calor. No tan fuerte como para colapsar, pero si para estar incómodo" contesté lo más natural que pude mientras me acercaba a uno de los desplomado y comenzar a quitarles su equipo.

Al igual que yo Lua estaba haciendo lo mismo al grupo femenino. Después de un rato pusimos a todos debajo de una carpa improvisada que hicimos con las cosas que teníamos a mano.

"¿Deberíamos continuar?" pregunto Lua algo ya cansada

"Claro, que ellos se las arreglen solos de aquí en adelante" dije ya cansado de que nos retrasarán más.

Ya que los dos nos pusimos de acuerdo, Se podía ver que ya nos estamos coordinando mejor. Seguimos con nuestro camino dejando atrás a las demás personas. También muchos de los animales que los seguían se habían ido, sombra y el compañero de Lua seguía con nosotros puede que sea por el simple hecho de confiar en ellos desde el principio.

Continuamos caminando. No se podía ver a que dirección ir. Más siempre seguimos un camino recto. Cinco, diez y los minutos continuaban pasando más no se podía ver nada o eso quise creer, cuando de repente justo cuando nuestra conversación estaba llegando a lo trivial una flecha cayó al suelo saliendo de un lugar desconocido.

Volteé a ver a Lua con la tez volviéndose un poco pálida y solo pude gritar.

"¡CORRE!" solo pude decir eso y comenzar a correr. Al igual que yo Lua sin preguntar, corrido detrás de mí. Como si esperara eso las flechas comenzaron a llover por todos lados y aleatoriamente.

"Como esperaba. Estas son todas las flechas perdidas a lo largo de tantas batallas" dije algo nervioso mientras seguía esquivando las flechas.

"¿Cómo rallos sabes eso? Grito en respuesta Lua.

"Lo vi en un cartel" Le contesté sarcásticamente

"Esto ya no es divertido, Yo no vi nada" grito Lua con tono reprochado

"Pues pon más atención" dije mientras sonreía de la ironía.

Nos seguimos hablando a gritos y con una broma entre medias para quitar la tensión del momento. Ambos perros también corrían de un lado a otro esquivando. Voltee a mirar hacia donde corría Lua para ver cómo iba cuando, una de las flechas aleatorias estaba casi en su cabeza como si la fuera siguiendo. Corrí directo a ella embistiéndola para que los dos cayéramos al suelo. Yo estando encima de ella nos miramos directamente. Entonces ella me empujó hacia un lado haciéndonos rodar hacia un lado. Ahora ella estando encima de mí, nuestras miradas estaban fijas el uno en el otro. Despegué mi mirada de ella y pude ver que barias flechas estaban volando en nuestra dirección y si no esquivaba se le iban a clavar en la espalda. Así que volví a rodar hacia un lado al igual que ella hizo conmigo.

Entonces me levante de encima de ella, estirando mi mano para que se apoyara para levantarse más no la tomo y se levantó por ella misma con sus mejillas algo sonrojadas por el calor.

"¿Qué crees que hacer?, hay que continuar" dijo comentando a correr de nuevo dejándome a tras todavía con la mano estirada.

Parpadee unas cuantas veces antes de salir de mi estupor y seguir corriendo detrás de ella.

Después de una hora corriendo pudimos ver a la distancia que algunos árboles se comenzaban a ver. Tiempo después llegamos a la sombra de un árbol donde las fechas dejaron de llover.

"! Haah¡¡Haah!"

"¡Haah¡¡Haah ¡"

Comenzamos a respirar con dificultad, más por reflejo que necesidad

"Esos ha sido, más que intenso no crees" dije aun respirando pesadamente

"Si, por lo menos estamos ilesos" dijo Lua medio en broma

"Al igual que sombra y tu acompañante" decía mientras mi mirada iba a los dos perros

"Se llama Nube" exclamó Lua

"O ya veo, mucho gusto nube" salude a Nube con una mano

"wuuuff" respondió ella

Me sorprende que también le allá puesto un nombre a su compañero, más ha de ser algo normal de hacer después de pasas tantas cosas juntos. Nos quedamos un rato sentados debajo de uno de los árboles.

"Cuantas pruebas nos faltan" pregunto Lua rompiendo en silencio

"Tres, Si no mal me acuerdo" respondí algo dubitativamente ya que no estaba tan seguro

"¿Y cuáles son" Volvió a preguntar Lua?

"Uno es donde estamos, de cruzar la selva, El siguiente es un lago donde nos quitamos del resto de cosas que aún nos atan y finalmente es recorrer un río" estaba diciendo aun no estando del todo seguro.

"¿Déjame adivinar lo viste en un cartel?" pregunto Lua casi en un suspiro

Le sonreí divertido por lo que acababa de decir y solo apunté mi dedo a donde estaba el ya dicho cartel. Lua al volver a verlo también sonrió divertida, por el pequeño acto que teníamos. Así estuvimos bromeando entre nosotros hasta que comenzó a oscurecer. No era un problema el ver, ya que la luna que salía también iluminar, pero más tenue mente. En ese momento decidimos continuar con nuestro viaje a través de la selva.

Al entrar se podía ver que la vegetación era muy exuberante por todos lados y uno que otro animal se podían ver. Paso bastante tiempo hasta que salimos a un claro, comenzamos a pensar en qué dirección seguir. Más varías sombras se comenzaban a mover por los alrededores.

"Ahora que" me dijo Lua con pánico en su mirada y temblor en su voz.

"No te alejes de mi" fue lo único que le pude decir, a pesar de que se lo que pasaría a continuación más no quise decir nada más para no espantar a Lua de lo que ya estaba. También Sombra y Nube estaban en guardia a cada lado de nosotros gruñendo a lo que se acercaba.

La presión que se sentía a nuestro alrededor era lo suficiente para sentir miedo. Todo lo que se nos acercaba nos miraban con ojos de ser solo una presa para ellos. No sabía que hacer o que decir para salir de esta situación. Un momento antes de que me diera cuenta seis jaguares salieron de los arbustos y los matorrales de nuestros alrededores. Fueron haciendo un círculo mientras caminaban lentamente, sin apartar la mirada de nosotros. Uno de ellos corrió para abalanzarse hacia mi cuando un gran rugido sacudió todo alrededor.

"uuuuuuaaaaahh"

Todos los jaguares se escogieron de miedo paralizados en su lugar alguna asta estaban temblando.

"Que puede ser lo que les da miedo" pensé para mí mismo esperando que fuera nuestra salida de aquí. De uno de los árboles salto otro jaguar, pero más grande y eso no era lo más importante si no el hecho de que tenía distintos patrones de colores.

Lua al ver el gran animal que se acercaba, se agacho tomando a Nube en sus brazos agarrándome fuerte para tratar de quitarse el miedo de encima. En lo que a mí respecta me quedé de pie, no por que fuera valiente sino porque el miedo me paralizó en mi lugar. El jaguar se fue acercando con pasos lentos pero contantes.

Cuando se acercó lo suficiente comenzó a olfatear e inspeccionarnos, con una fuerte mirada sin permitir que nos moviéramos. Después de unos segundos hizo algo que nunca pude a ver imaginado ni en mis más locos sueños y eso fue hablar.

"Tu Atletl, que moriste protegiendo a otros y que ha ayudado como a hombres como a bestias y a recorrido este camino sin dudar y conseguido un buen aliado. Y tú Lua que vivió su vida siempre postrada en cama, hasta que la enfermedad con la que nació pudo vencerte y que también has conseguido un buen aliado para este camino" la voz del jaguar era bastante digna y calmada, pero con fuerza.

"A ustedes dos que por asares del destino se han encontrado, aquí no es necesario quitarles lo que los hace ustedes. Así que permítanme que yo mismo los lleve al siguiente lugar donde al igual que yo hice, serán juzgados"

Volvió a rugir haciendo que los demás jaguares se volvieron a esconder entre la maleza sin mirar atrás. Lua también ya se avía tranquilizado por todo lo que dijo y estaba parada a mi lado esperando a que dijera algo.

"¿Lo vamos a seguir?" pregunto mirando entre el Jaguar y yo

"supongo que sí. Dudo que después de lo que dijo tenga otras intenciones" le respondí aun analizando la situación

Lua quedo pensativa, de todo lo ocurrido en tan solo unos minutos, más no teníamos el suficiente tiempo para eso ya que el jaguar comenzó a caminar por lo profundo de la selva. Tome a Lua de la mano para continuar. Al hacer eso Lua trato de apartarla de mi más yo la tome con más fuerza sin dejar de caminar.

"A donde nos vas a llevar" pregunto Lua más el jaguar no contesto y siguió caminando en silencia.

"Crees que me allá escuchado" volvió a cuestionar Lua, pero esta vez preguntándome a mí.

"supongo que si más dudo que quiera responder" respondí en un susurro como izo ella

"No es que no quiera responderles, más lo que sigue tienen que averiguarlo ustedes mismos "contesto cuando no esperábamos que lo hiciera, sin dejar de caminar ni mirar atrás. El silencio se propagó a nosotros dos sin saber que decir cuando Lua lo rompió espléndidamente.

"¿Tu antes avisas visto a un jaguar así de muchos colores?" decía Lua muestras apuntaba al jaguar

"No nunca, pero puede que sea algún tipo de alebrije" comencé a decir mientras le daba miradas periódicas a los colores que tenía

"¿Y que son esos alebriges o como se diga" dijo Lua aún más confundida

"Son aquellos animales que guían a las almas hasta el más allá. Pueden estar entre este mundo y el otro es igual que estos pequeños, pero de un nivel superior" estaba explicando mientras señalaba a los dos perros.

¿Cómo, también Sombra y Nube son alebriges" respondió Lua sorprendida mientras los miraba

"Si lo son más este es uno de sus primeros viajes, hasta lo más fondo de este lugar. Por qué crees que avía distintos animales al principio" dije mientras explicaba lo sucedido del principio.

"Oh, ya veo ahora todo empieza a cobrar sentido" exclamó emocionada por mis palabras. Seguí explicando uno que otro detalle de lo ocurrido, con anterioridad. Hasta que el jaguar se detuvo frente de un gran lago que estaba lleno de agua cristalina donde se podía ver sin ningún problema el fondo, donde nadaban algunos peces y se veían las rocas del fondo.

"Ya hemos llegado a donde serán juzgados. Así que les deseo suerte" decía el jaguar mientras comenzaba a darse la vuelta

Después de decir esas palabras salto a uno de los árboles y salió de nuestra visión.

"¿Y entonces tendremos que nadar hasta el otro lado?" Comenzó a cuestionarse Lua mientras estaba agachada jugando con el agua.

Solo pude asentir y ver a la distancia donde no se podría ver la orilla.

"Entonces entramos por separado o quieres que vallamos juntos" pregunte dirigiendo mi mirada a Lua que también me miraba.

"Pervertido" dijo esas palabras tan acusadoras mientras se cubría el pecho y volteaba para otro lado con sus mejillas sonrojadas.

"No, no, no, me malinterpretes nunca se dijo que teníamos que quitarnos la ropa a algo así. No tengo ninguna otra intención lo juro" comencé a decir rápidamente mientras extendía y agitaba mis brazos nerviosamente.

Al terminar de hablar Lua solo volteo a mirarme por un segundo aun con sus mejillas sonrojadas, y sin volver a mirar atrás comenzó a entrar en el agua. Yo la seguí hasta donde me tapaba las rodillas.

"¿Qué crees que tengamos que hacer?" Se comenzó a cuestionar Lua con su voz al aire.

"Eso tenemos que averiguarlo, No es como si siempre aparecieran carteles convenientemente" dije bromeando con una sonrisa

"Cuff. No me refiero a eso, pero supongo que tienes razón" Lua comenzó a fruncir el ceño.

Solo seguimos parados dentro del agua mientras pensábamos el que pasaría.

"Creo que es hora" dije rompiendo el silencio después de un rato

"Si" contesto Lua

Ese fue todo nuestro intercambio. Al momento siguiente entre el agua seguido por Lua. Primero comenzamos a caminar hasta el momento de nadar. Más no paso ni un minuto de que entramos cuando una espesa niebla se esparció por todos lados, haciendo que perdiera de vista a Lua. Lo último que pude ver fue que volteaba a verme en pánico y trato de alcanzarme más se detuvo cuando vio que yo no tenía preocupación en mi rostro.

Ella se tranquilizó y antes de que se cubriera totalmente de neblina se escuchaba como el agua salpicada. Dándome a entender que continúo nadando. Al igual que ella yo hice lo mismo y seguí nadando en la dirección acordada.

"Atletl, por qué te fuiste antes que nosotros"

"Querida, tenemos que deshacernos de todas sus cosas"

"Por qué me tubo que salvar tenía mucho porque vivir"

Varias voces familiares comenzaron a sonar por todo mi alrededor. Algunas llenas de tristeza y amargura otras de culpa y muy pocas de enojo. Ante mí la neblina se comenzaba a mover, dejándome ver una pequeña isla en la cual un círculo en mitad de ella y en el centro se podría ver a una chica que estaba llorando, sosteniendo una almohada y es su rostro se podían ver los ojos de un color rojo de tanto llorar.

En la pequeña isla y del otro lado de una puerta se podía ver a Yuu la cual estaba enfrente mío. Me acerque y me quede viendo como mi mejor amiga, se culpaba y maldecía ahogando su cara en la almohada. Quise entrar más algo me lo impedía trate de entrar, pero sin éxito alguno, solo pude ver impotente lo que sucedía. En ese momento Yuu sacó una botella de algún liquido desconocido y una tableta de pastillas.

"Si ya no te puedo ver en esta vida lo haré en la siguiente" decía entre su llanto

Un miedo, la angustia y la desesperación comenzaron a apoderarse de mí. Corrí con toda mi fuerza, comenzando a chocar y a golpear con lo que me impedía pasar. Las lágrimas comenzaron a juntarse en mis ojos pensando que solo podría ver como ella se hacía daño. Es eso sombra al notar mi desesperación se acercó a la pared colocando, una de sus patas en la pared invisible donde comenzó a salir una pequeña grieta haciendo que la pared se abriera como una ventana, al ver eso voltee a ver a sombra perplejo por lo sucedido.

"Wuuuff" el simplemente ladró.

"Gracias" Le agradecí por milésima vez y entre.

En el otro lado se podría ver un cuarto muy familiar, pintado de color negro con varios pósteres de distintas cosas, los cuales ahora estaban tirados o rasgados en el suelo. No perdí más el tiempo y me acerqué al lado de Yuu tirándole las cosas que tenía en la mano.

Yuu que tan solo sintió que le arrebataron las cosas, puso cara de perplejidad trato de tomarlas de nuevo más una fuerza desconocida se lo impedía. Ella puso toda la fuerza que tenía más era imposible levantar lo.

"Qué crees que estás haciendo idiota" sintió como si esas palabras se pudieran escuchar en lo más profundo de ella.

"Tlea" como voz volviéndose a quebrar dijo ese nombre. Más el silencio de su cuarto era lo único que tenía, al igual que el tic tac del reloj.

Ella estaba a punto de llorar una vez más. Pero una suave sensación se extendió por su mejilla secando la lágrima que estaba a punto de salir.

"Mi pequeña Yuu, ya no te culpes por lo sucedido nada de lo que paso fue tu culpa. Yo tome mi decisión y paso lo inevitable. Por favor ya no llores más y sonríe como siempre lo has hecho, no puedo continuar sí sé que estas llorando y sufriendo aquí. Quiero que me recuerdes por lo que fui para ti y solo para ti, quiero que sigas viviendo. Puede que ya no pueda acompañarte más. Pero siempre estaré a tu lado en la forma que me recuerdes. Así que mi pequeña Yuu por favor vive tu vida y sigue sonriendo, yo siempre te voy a querer"

Después de un rato Yuu abrió sus ojos y pudo sentir como algo o alguien le apretaba la mejilla, y una pequeña fuerza sostenía una de sus manos que lentamente se desvanecía. Yuu después de sentir que su querido amigo vino a impedir que hiciera una estupidez, sonrió y derramó lágrimas, pero de felicidad. Se levantó de su cama con nueva energía y se prometió seguir adelante por esa persona que a pesar de no estar aquí aun la ayudaba.

Se acerco a una pequeña fotografía donde estaba ellos justos y la abrazo. Antes de salir de su habitación pudo jurar que escucho a su amigo.

"Espero podernos reencontrar algún día"

"Yo espero lo mismo" dijo en un susurro sin dirigirse a nadie. Salió de su cuarto sonriendo con nueva luz.

Ay igual que ella yo también salí a donde estaba, donde sombra me esperaba. Al verme comenzó a menear su cola así que me agaché y comencé a acariciarlo.

"Muchas gracias, una vez más amigo"

"wuuuff" el solo ladró feliz.

Debido a nuestro intercambio que tuve con Yuu, la visión se esparció dejando que el viento se la llevara, remplazando por dos puestas más. En una de las dos también se podían ver a gente que conocía como a mis padres y ellos ya avían aceptado mi perdida y solo me deseaban buen viaje donde quiera que estuviera, y a los dueños del restaurant que ya avían abiertos un nuevo local y en uno de sus murales estaba una foto mía donde decía (Que el fuego que es tu nombre nunca se extinga y te guíe en un nuevo comienzo), al igual que la primera visión las dos desaparecieron. La niebla también se fue dispersando, dejando ver más allá. Un pequeño cárter que estaba escondido entre la niebla se dejó ver.

"Nunca sueltes a los que te han amado y su recuerdo, Solo olvida el dolor y todo aquello que un te ata"

Después de leer, en la distancia donde un gran árbol yacía. Sin más fui directo hacia allá pero no se veía nada ni a nadie. Pensé que Lua ya estaría en la isla. Al llegar me senté un rato a esperar para ver si aparecía, más el tiempo siguió pasando. Comencé a desesperarme y a pensar en irme por mi cuenta, pero algo dentro de mí me lo impedía. Así que me acosté en el suelo para esperar. Cerré mis ojos para dormir un rato dejando a sombra vigilar.

Después de un rato, pude sentir como alguien se sentaba a mi lado. Abrí mis ojos para ver a la persona que había llegado era Lua. Al fijarme mejor se podían ver que en la esquina de sus ojos se formaban pequeñas lágrimas. Me senté para instantáneamente acercarme y arrodillándome delante de ella.

"¿Estas bien?" pregunte algo preocupado

Ella solo asintió con la cabeza sin decir nada. Me acerque más a ella comando su cabeza entre mis manos y acercándola en un abrazo. Instantáneamente ella rodeo sus brazos alrededor de mi espalda. Así nos quedamos unos minutos más hasta que ella se separó de mí.

"Muchas gracias necesitaba eso" decía algo apenada sin querer mirarme a los ojos

"No fue nada, sabes que puedes contar conmigo"

Le sonreí sinceramente y le palmé la cabeza, ella también me sonrió y se puso de pie. Al igual que ella ice lo mismo, nos miramos por un segundo y comenzamos a caminar. Quise preguntarle qué es lo que había visto, más por respeto no pregunte nada y ella también se veía que quería preguntar, pero también se contenía. Así fue nuestro camino por unos pocos minutos hasta llevar a un río.

"Se párese al río del principio" cuestione en vos alta. Sin recibir alguna respuesta

Antes de continuar con nuestra platica, muchos pétalos de flores amarillas comenzaron a caer desde los árboles cercanos. Todas ellas cayeron dentro del río cubriéndolo poco a poco. Al momento de estar completo comenzó a brillar tenuemente.

"Esto no tendría que pasar" dije intrigado

"Por qué lo dices" pregunto Lua de igual manera

"Se supone que nada más tendríamos que entrar y dejar que el río nos llevara"

Antes de que Lua dijese algo. Un cartel comenzó a surgir del piso. Con las siguientes palabras

- Este camino es el final del viaje, representa en camino a lo más allá si estás listo para seguir –

Al terminar de leer voltee a ver a Lua por milésima vez ese día y ella también ya avía terminado de leer y también me regreso la mirada.

"Creo que es hora de terminar esto" dije algo apenado

"Es una lástima, pero disfrute pasar este tiempo contigo" respondió ella de igual manera.

Me acerqué al río para poner uno de mis pies en el río de flores, al ver que no se hundía puse la otra sombra siguió y se pudo a mi lado al ver que no pasaba nada Lua y Nube también entraron.

"Vamos a seguir a donde parpadea la luz verdad"

Solo asentí y comenzamos a caminar de nuevo, pero a un lugar totalmente desconocido. Y así fue nuestro viaje siempre hacia adelante. Algunas vistas también se podían apreciar como la vegetación y muchos animales con unos de colores apagados y otros de muchos colores.

También se podían ver montañas, praderas y muchos paisajes más. En cierto momento se podía escuchar como caía en agua en una cascada. No nos preocupamos ya que seguíamos en el camino y no podíamos caer, así que solo seguimos hacia adelante. En cierto momento el camino se detenía en lo alto de una cadena de montañas en forma circular de donde también se podía ver que caían cascadas innumerables. En el centro del fondo se alzaban una estructura hecha de mármol blanco con tonos dorados y negros.

Alrededor del edificio de la isla del centro, todos los ríos que se formaban de las cascadas se juntaban en una gran laguna. Donde unas pequeñas aberturas la dejaban caer el excedente de agua. Jardines también se podían ver a intervalos iguales, en todos los lados con formas triangulares que también poseían diferentes ecosistemas y dentro de ellas se veían flores de ese mismo ambiente, Dos jardineras rodeaban un solo canal. Encima de los ríos se podía ver un camino de adoquines de distintos colores y formas.

Después de quedarnos perplejos por la maravillosa vista que teníamos enfrente de nosotros, regresamos a nuestros sentidos frotando nuestros ojos un par de veces. Ya que era irreal lo que estaba frente a nosotros.

"Es Hermoso" Ambos Dijimos al unísono con suspiros de admiración

Seguimos mirando por un poco más de tiempo. Fue en ese momento que el agua que estaba fluyendo a nuestro lado se detuvo repentinamente dejándonos ver como unas escaleras salían del suelo, que estaban completamente seca sin ninguna gota de agua. Un pequeño cárter salió de una barandilla haciendo un pequeño sonido de "puff"

"Sigan adelante"

Era lo único que decía. Después de leerlo con el mismo sonido con el que apareció se fue. Nos miramos y sin decir nada comenzamos a bajar las escaleras. Al llegar al final y poner ambos pies sobre el suelo la escalera se volvió a sumergir de donde salió y la cascada volvió a fluir.

Si estando en la cima era impresionante estando ya más cerca era aún mejor. Ya que los pequeños detalles estaban aquí y allá. Como que en los barandales de los jardines se podían ver figuras de animales.

"¡Oye!, mira allá también ay más gente"

Tirando de mi brazo Lua dijo esas palabras mientras apuntaba a otros lugares, y tenía razón ay se podía ver a la gente caminando al igual que nosotros. En algunos caminos la gente era escasa y en otros la gente desbordaba. También de las cascadas de podía ver a gente nadando en ella, y en varios un cierto barquero los traía que solo se movía con incentivos monetarios.

En nuestro camino solo fuimos nosotros dos. Unos traían armas, otras joyas, pero la mayoría no traía nada, solo sus ropas que también estaban harapientas. Que caminos abran tenido que cruzar. Mientras analizaba todo eso, seguimos caminando y cada vez más nos acercábamos al edificio del centro.

No paso mucho tiempo para llegar. Donde una gran plaza circular se encontraba y en el medio el imponente monumento.

"¿Qué va a pasar ahora?"

"¿Dónde estamos?"

"¿Qué es este lugar?"

Eran las preguntas que se podían escuchar por todos los alrededores, más nadie tenía respuesta alguna. La gente se siguió llegando una tras otra sin parar, Lua y yo no nos separamos ni un solo instante el uno del otro ya que la gente se comenzaba a empujar poco a poco.

Antes de que cualquiera se diese cuenta todas las cascadas dejaron de soltar agua. Un pequeño haz de luz comenzó a apuñalar el suelo que salía del edificio central. Nadie entró en pánico al ver eso, sino que se quedaron mirando fijamente la luz como si fueran moscas.

La luz comenzó a pintar los adoquines de blanco con toques azulados. Cada uno de ellos se fue pintado del mismo color. La luz del centro se apagó un instante para después salir con mucha más intensidad dejándonos segados unos instantes. Como si alguien abriera la cortina de repente justo después de levantarse.

Al siguiente instante de recuperar la visión lo que se podía ver en los alrededores era estar dentro de una estructura circular como un coliseo gigante. Dónde más de miles de personas nos encontrábamos. No había ningún espectador y tampoco avía gradas donde sentarse, sino que solo eran grandes pasillos circulares y escaleras que conectaban a esos pasillos. Un gran pilar de piedra salió del suelo letras comenzaron a tallarse en él y decía lo siguiente.

"Todos ustedes sean bienvenidos al Mictlan el que conecta a los mundos. Todos ustedes tendrán que elegir la puerta o al mundo donde van a renacer sin problema así que tomen su decisión sabiamente"

Después de que el que se animó a leer por todos nosotros terminara miles o millones de puestas se comenzaron a formar de la nada. Todas con distintos patrones colores y formas eh incluso el nombre que tenía pegado en ellas.

"Eso significa que podemos volver a la tierra" Exclamó Lua en una pregunta que solo fue un murmullo haciendo que poca gente volteara a verla y eso me incluía.

"Puede que tengas razón. Pero sería algo complicado encontrar la puerta que nos lleva a ella no te párese" dude de lo dicho por ella

"Si eso creo"

"Que te párese si vemos por los alrededores" dije algo emocionado ya que esto pareciera ser sacado de un anime.

"OK vamos"

Comenzamos a caminas en a una de las puestas que era la más cerca. Al llegar leímos el nombre de la puerta que era DONZIK, tome la perilla en mi mano para abrirla y hechas un vistazo. Al abrirla lo que se podía ver del otro lado era la imagen de una batalla encarnizada donde ambos bandos eran de mujeres. Inmediatamente cerré la puerta.

"Nop ese no" dije eso y Lua asintió ferozmente.

Al igual que nosotros toda la gente abría puestas de aquí y allá, unos trataron de empujar a otros dentro de ella, pero estas lo rechazaban ya que si uno no quería entrar en ella era rechazado. También unos que otros entraban en la primera puerta que abrían. Esta vez fue Lua quien abrió una nueva puerta de nombre DONZUK y la imagen que se mostraba era una batalla, pero en lugar de mujeres eran hombres los que estaban luchando.

"Creo que este en igual al otro, pero con algo distinto" comencé a divagar pensando en que podría ser.

Y así estuvimos abriendo y cerrando puestas por todos lados, más como eran demasiadas después de un rato era cansado. También la gente que encontraba un mundo ideal se metía en él. Otros iban a investigas el mundo donde veían que se metía alguien y unos entraban como otros pasaban.

Así fueron pasando los minutos abriendo y cerrando puertas. Y en ellos se podía ver como un mar infinito, en otro las plantas lo cubrían todo, otro de puro desierto, uno donde se veía un mar de nubes y un dragón pasando por ay, uno de los más raros fue donde en una pradera muchas mujeres con músculo perseguían a un solo hombre y otras tres más normales persiguiéndolos. Los mundos si venían en todo tamaño y color era complicado encontrar uno adecuado al cual entrar. Así que decidimos regresar al centro del coliseo para sentarnos y platicar un poco y ver que decía el otro.

"Entonces qué opinas" comencé

"De que" respondió Lua

"Digo ¿Qué si has visto una puerta o mundo que te interese?" volví a preguntar

"La verdad es que no. Muchos de ellos están en guerra otros tantos son desérticos., aquellos que se encuentran la paz tienen tecnología demasiado avanzada, otra gran parte tienen muchos animales fantásticos. En pocas palabras ay muchos, pero tan pocos" decía Lua mientras se sentaba recargada en una pared.

"Si te entiendo es frustrante el simple hecho de tener que decidir sin ninguna explicación más concreta. Por ejemplo, ay lugares que ya están en el caos y uno no entiende por qué es así" también comencé a quejarme sentándome junto a ella

"A eso es a lo que me refiero, uno no sabe nada de ellos y aun así tenemos que decidir a cuál entrar, Por amor a los dioses en uno asta avía gigantes luchando contra humanos" seguía quejándose Lua moviendo sus brazos de aquí y allá haciendo poses raras

"jajajaja" no pude evitar reír después de escuchar esas palabras, porque tiene razón mucha de la gente que está aquí perteneció a uno de estos mundos irracionales y ahora están aquí decidiendo su nueva vida.

Lua se me quedo viendo un instante hasta que a ella también le ganó la risa y ambos nos reíamos de todo corazón por lo dicho.

"Cambiando de tema como sabemos que nosotros vivíamos en la tierra original y no en una variante. Por que como ya hemos visto muchos mundos tienen mundos hermanos que son similares y a la vez no" Me pregunto Lua con tono más serio

"...."

Esa pregunta me llego por sorpresa porque siempre nos han dicho que es la tierra, pero eso no quiere decir que sea la única tierra. Me puse de pie y tranquilamente me acerqué a una persona hala zar.

"Oye amigo esto está muy loco no crees" llegue preguntando casualmente a un chico

El tipo después de escuchar mi pregunta se me quedo viendo con duda en su expresión. Y se quedó pensando un momento antes de responder

"Si hombre, la verdad esto es muy raro. Nunca me imaginé tener un sueño así" respondió ya un poco más confiado y calmado

"Con que el piensa que es un sueño" murmuré para mí mismo y comencé a seguirle la corriente.

"Si verdad ya que tenemos que elegir por donde ir sabes cómo era tu mundo anterior"

"La verdad es que si era un mundo donde nunca hubo guerras, la tecnología prospera, la mayoría de las cosas ya está digitalizada y nadie pelea por el poder"

"Suena como un mundo fantástico y ¿cómo se llamaba tu mundo? A todo esto" volvía a cuestionarlo

"Era la tierra por supuesto. Pensé que los sueños compartían la información que ya tenía" se preguntó mirándome con algo de sospecha.

"Bueno amigo te deseo que encuentres tu camino y mucha suerte" le agradecí y me aleje de él mezclándose entre la gente.

"Que te digo" cuando llegue Lua me recibió con esa pregunta. Más en su cara se podía ver que ya sabía la respuesta.

"Me digo que su mundo era la tierra pero que en ella no hubo ninguna guerra y que tienen mucha tecnología" le respondí amargamente.

"Entonces estoy en lo correcto, no sabemos cuál es el nombre original de nuestro mundo" dijo Lua exasperada.

"Así párese ser" dije de igual manera sentándome una vez más.

Ambos nos vimos derrotados en el suelo con la cabeza gacha, y cada uno pensando en sus cosas. Así pasó el tiempo estando en el mismo lugar. Cuando levante mi cabeza ya la mayoría de la gente que estaba se avía ido a un lugar, ya solo quedaban aproximadamente cien personas de las cuales unas pocas entraron a una puesta. Párese ser que hicieron amigos.

Pero ¿Qué pasara al momento de entrar? ¿perderán sus recuerdos y nacerán desde cero? O ¿tomarán el control de una persona del otro lado? O ¿simplemente llegarán como ellos mismos al otro lado con recuerdos con personalidad y con su mismo cuerpo? Preguntas como esas fueron las mismas que se repetían una y otra vez dentro de mi cabeza.

"Por qué cuando uno quiere respuestas no aparece un cartel como las anteriores veces". Gruñí entre dientes y en voz baja para que nadie más me escuchara y al parecer nadie lo hizo ni siquiera Lua que estaba a mi lado con su mirada lejana asía algún lugar.

Parecía que el mismo lugar le gustase jugar, porque en ese momento debajo del gran pilar apareció un cartel que solo yo pude notar. Le di unos golpecitos a Lua en un hombro para que regresara a sus sentidos. Cuando lo hizo me volteo a ver y yo solo señale al pilar para que viera lo mismo que yo. Ella al mirar se le abrieron mucho los ojos y sonrió amargamente como si le hubieran contado un mal chiste.

Me puse de pie al igual que Lua y ambos fuimos a donde se encontraba en pequeño cartel. En él se encontraba las respuestas de todo lo que había pensado en las últimas horas.

"Todos aquellos que crucen una de estas puestas volverá a nacer sin recordar quien era. A excepción de lo tocado por lo divino sea quien sea"

"Bueno ya no tengo dudas. Jejeje" dije mientras una risa despreciativa salía de mi

"Yo algunas pocas. Pero estoy conforme" dijo Lua sin más

"Crees que allá un límite de tiempo para escoger" pregunte volteando a ver a mis alrededores

"Lo dudo si no lo hubieran puesto aquí" respondió sin más.

Después de nuestra conversación nos volteamos para ver al resto de personas y preguntarles que avían decidido. Pero al mirar mejor no había ni una sola alma en los alrededores solo se podría escuchar el cerrar de una puerta al fondo. Ambos nos quedamos perplejos con puntos en nuestros ojos cerrándolos una y otra vez.

"Párese que solo somos tú y yo" dije vacilante

"Así parece" respondió dio ella de la misma manera.