En dos golpes, Caña logró hacer un enorme agujero en la pared de piedra, dejando que los trozos y grandes rocas se desmoronasen al suelo del túnel.
—Ah, en esto... —dijo Iris, mientras se arrodillaba y agarraba una enorme roca antes de entregársela a Caña—. Hay una piedra mágica dentro.
—¿Cómo lo sabes? —No pudo evitar preguntar Aderan—. Simplemente esto no tenía sentido para él.
Iris sacudió la cabeza. —No lo sé. Solo sé que hay una dentro. —No podía explicar por qué lo sabía, ya que era casi como una segunda naturaleza para ella saber acerca de estas piedras mágicas. Podía sentir muchas piedras mágicas en este túnel, pero les llevaría años desenterrarlas todas.
La sensación era tan fuerte que la abrumaba, casi mareándola ligeramente.
—No tiene ningún sentido … —Aderan sacudió la cabeza y luego tomó la roca que Caña le entregó. No podía aplastarla de la forma en que lo hizo con la pared de piedra, porque podría romper accidentalmente la preciosa piedra de adentro.
Support your favorite authors and translators in webnovel.com