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CAPITULO 8: TU SANGRE EN MIS MANOS

Es un nuevo día, TOIRE revisa con cuidado los alrededores antes de partir.

Mientras ella le ayuda a guardar las cosas en su mochila.

Al saberse fuera de peligro, TOIRE vuelve con ella.

Ambos, se internan en el bosque, hasta ahora han evitado los caminos principales y se alejan de la gente, es muy poco lo que se han detenido a descansar, en el río TOIRE pudo pescar pero, para no hacer notar su presencia allí, lo comieron crudo, era un poco desagradable de tragar, aunque los dos saben que fue mejor que nada, además, conservó sus nutrientes intactos.

Por la tarde, van caminando cerca de una vereda, con el tiempo, TOIRE nota que ella se empieza a atrasar un poco.

No es muy notorio pero, TOIRE decide detenerse, ella aclara que puede continuar, aunque ambos saben que no es así, la herida de ella, aún sangra y sigue manchado sus vendajes, deben hallar un sitio más discreto para descansar, la joven insiste que, no es necesario, TOIRE le recuerda que revisar su herida, además, si bien no hace tanto calor, llevan horas caminando y que no está a discusión.

El es quien lleva las riendas de su cuidado, esto toma desprevenida a la joven quien se ruboriza un poco de la vergüenza y por la molestia, de alguna manera le gusta que el cuide de ella, también le incomoda sentirse de alguna manera aceptada, cuando ella siempre se crió en un régimen apartado de los lazos sentimentales como la compasión.

A ella no le gusta que le dé ordenes, pero piensa que tampoco está en posición de reclamar si sabe que él tiene razón.

Van buscando entre los árboles.

Ella se detiene un poco y ve a su alrededor, no muy lejos de ahí, reconoce una enorme enramada de hierbas secas entrelazadas que parece árbol, al acercarse apenas hay una pequeña entrada que de fuera no se distingue con facilidad.

Se acercan a explorar.

Ella dice a TOIRE que es un buen lugar para dormir, él está extrañado, nunca antes vió tal capricho en la vegetación.

Es un enramado extraño, como si fuera guiado.

Aunque la entrada es estrecha y ella tiene dificultad para entrar, lo hacen, el interior es mucho más amplio.

Dentro del terreno la hierba está ausente, el ve con asombro, el suelo de aquella pequeña cueva de madera es infértil, totalmente quemado.

La chica lo mira, le dice que hay un motivo triste por el que la tierra perdió su fertilidad, ella comenta que sin duda alguien murió justo ahí.

TOIRE llevado por su curiosidad, pregunta: ¿cómo lo sabe?

La joven guarda un breve silencio, lo mira a los ojos, con seriedad y algo de melancolía, le dice que esa enramada es el resto de un ataque, la tumba de alguien que se sacrificó, no cree que buscaran ahí.

Algunos creen que es terreno maldito, ya que durante siglos las almas de quienes se sacrifican aún vagan por algunas de ellas.

TOIRE mira hacia los lados del techo de la cueva, como si buscara algo.

La joven le dice que no se preocupe, quizá son solo mitos.

Muchas de esas almas, se van purificando cuando ellos aceptan el hecho de no pertenecer a este mundo y muy pocas de ellas, tardan en darse cuenta.

TOIRE embozando una sonrisa, le dice que ya sabía, lo cuál ella no le cree.

TOIRE tapa la entrada de la brecha con ramas.

El se estiran un poco y jala su mochila, le avisa que es tiempo de que revise esa herida.

Ella se sienta de rodillas y se comienza a quitar la camisa, al batallar con el brazo del lado herido, él le da ayuda de modo de al quitar su camisa, sus rostros quedan un poco cerca.

Los dos se ruborizan un poco al sentirse demasiado cerca en ese momento, luego de una pequeña pausa, ella voltea el rostro.

Ella reacciona y empieza a desabrocharse los botones de su vestido sin verlo otra vez, TOIRE se siente muy nervioso, voltea su vista hacia su mochila, siente que sus manos tiemblan un poco, tiene miedo de que ella se dé cuenta, el debe tocarla para curarla, y si ella siente que sus manos tiemblan, quizá piense mal de el.

Se hinca frente a ella, ella mantiene la mirada fija por debajo del rostro de él, se siente extraña y no lo comprende, se siente demasiado cómoda con él, no le molesta que el vea su cuerpo desnudo pues cuando le hace curaciones no siente que el tenga malas intenciones, aunque hay momentos en que también siente un poco de vergüenza, es esto lo que no comprende.

Mientras el rasga otro poco de la capa de ella para hacer vendajes, TOIRE comenta que ni si quiera sabe su nombre, le incomoda un poco no saberlo, ¿acaso es tan feo? el no cree que sea peor que el de él.

Esto llama la atención de la chica.

Ella comienza a quitarse el vendaje que trae puesto, al sentirlo más flojo, vienen las punzadas, le duele, aunque no se queja, se le sale un sonidito apagado y se pone un poco roja.

TOIRE le pide que siga sosteniendo el trapo que cubre la herida, el jala el frasquito, los vendajes y agua, ahora él se hará cargo, nota que el trapo de la herida se ha pegado, así que lo humedece para quitarlo poco a poco con poca agua, hecho esto, viene lo mas difícil, la hierba que cubre la herida la debe cambiar, el la humedece también.

El roce con el agua fría, hace que la herida le de punzadas y eso duela, la joven aguanta ocultando su rostro de él, sin poder evitar un rictus de dolor.

Cuando va desprendiendo la hierba seca que uso le duele más a la chica pero no grita, emite algunos quejidos ahogados, no quiere hacer ruido, siente mucho dolor, se pone roja y toma un respiro cuando duele un poco menos, cuando ya ha acabado de quitar la hierba, ella el pide un momento de descanso, el primero nota que ya no sangra tanto, así que haciendo una compresión en la herida que el mismo sostiene, le dice que si, esperarán unos minutos.

Ella con poca fuerza deja reposar su cuerpo en el regazo del joven.

Con un hilo de voz, ella dice que se llamarse KEKI, a TOIRE le agrada mucho su nombre, por alguna razón cuando él lo pronuncio a ella le dio mucho gusto, aunque, no lo demostró, a él le parece que esa chica ruda ha de ser muy dulce por dentro en otras circunstancias, mas no lo dice.

Y también comenta que el mismo piensa que, el nombre de él no es bonito, que parece que se les ocurrió cuando fueron al baño.

Al cabo de unos minutos, se siente una brisa ligera, debe cubrir la herida.

KEKI se separa del chico y se acomoda de manera que el pueda volver a colocar las hierbas que ha machacado con aquella medicina de su frasco.

El unta las hierbas y procede a vendarla.

TOIRE nota que ella está muy agotada.

Fue muy doloroso y mas, después de andar tantas horas.

El comenta que deben descansar ya que no van a poder parar otra vez, su casa ya no queda lejos, pero falta camino.

Ella le toma la palabra.

Se recarga en alguna de las raíces de manera de no lastimarse.

TOIRE le cuenta que, el va a cazar a esa región porque hay mejores presas, llegando a casa van a recoger algunas cosas que necesiten, ella va a sanar y también llegaran por KAZIEL su caballo, no es joven pero, es muy fiel.

Por esta razón no lo lleva lejos, se cansa rápido.

TOIRE se sienta junto a ella que, casi al instante se queda dormida.

Ha sido muy agotador.

TOIRE se acomoda junto a ella y saca la manta tapándolos a los dos.

Realmente creería que se hace la dormida para no hablar con él si no fuera que está roncando por el agotamiento.

El se dispone a dormir también.

NOTA: los CHOSEN no saben mentir, no les es permitido más si pueden callar para evitar decir algo.

fin de capitulo 8