Abriéndose

28 – Abriéndose

Ahora me encuentro en mi sala de estar, me encuentro meditando con los ojos cerrados.

De la nada una sonrisa se forma en mi rostro.

Hades: Al fin.

Digo mientras me levanto y me estiro.

Cortana: felicidades por tu recuperación pequeño hades.

Hades: gracias Cortana, ahora que mi alma está completamente recuperada puedo dejar este mundo.

Mientras hablo una mirada de tristeza aparece en mi rostro, recordando lo que paso.

(Flashback no jutsu)

Me encuentro en una plaza esperando a que Yuuko aparezca, hoy es un día donde tendremos una cita, pero hay algo extraño, ya pasaron más de 15 minutos desde que acordamos, normalmente está un poco antes, también la llame a su teléfono y no responde, entonces decido llamar al teléfono de su casa.

Después de un tiempo alguien contesta.

Hideyoshi: Hola, residencia Kinoshita.

Hades: Hola Hideyoshi, ¿esta tu hermana cerca?

Hideyoshi: Hola hades, ella salió, creo que hace una hora, ¿no está contigo?

Hades: luego te hablo Hideyoshi.

Digo y cuelgo, tengo un mal presentimiento.

No creo que pase uno de esos clichés donde unos rufianes la detuvieron ¿verdad?

Después de un tiempo mi preocupación aumenta y empiezo a pensar.

¿Qué puedo hacer para encontrarla?

Corro buscándola.

¿Puedo usar mis soldados sombras para buscarla?, no, no tengo los suficientes para encontrarla rápido, entonces me pongo cada vez más ansioso y mi pecho empieza a doler.

Cortana: cálmate pequeño hades.

Me acuerdo que tengo un sistema gracias a Cortana.

Hades: Cortana, dame algo para poder localizarla.

[Obtuviste talismán de rastreo x1 por 1000creditos]

En mi mano se materializa un talismán de papel.

Hades: Cortana como lo uso.

Cortana: solo rómpelo mientras piensas en la persona que buscas.

Agarro el talismán y lo parto por la mitad mientras me concentro en Yuuko, una pequeña bola luz sale de esta y empieza a volar dejando un rastro, yo la sigo con toda mi fuerza posible.

Después de un tiempo llego a una bodega abandona, sin dudar entro a la bodega.

Cuando entro me encuentro a un grupo de personas tratando de desvestir a Yuuko y ella gritando tratando de escapar.

Al ver esto mi cabeza me empezó a doler, como si quisiera explotar, siento como mi mente se empieza a desvanecer y la rabia dentro de mí se hace más grande.

Sin darme cuenta estaba sosteniendo mi Zanpakuto, jadeando trato de mantener la calma, pero luego escucho su ropa desgarrándose y ella llorando más fuerte.

Con eso no puede controlarme y lo siguiente que vi fue que apuñale al que desgarró la ropa de Yuuko, todo se quedó en silencio, hasta que uno de ellos grito, con ese grito saco la espada del delincuente y corro hacia los demás, algunos de ellos tratan de escapar mientras que los otros se abalanzan sobre mí, para mí no fue ningún problema encargarme de ellos, solo eran personas normales, después de un momento todos estaban en el piso muertos, fue entonces cuando recupere la claridad de mi mente.

Muevo mi cabeza hacia un reflejo de mí y pude verme.

Estaba parado ahí sosteniendo mi Zanpakuto, mi ropa y mi rostro estaban manchados de sangre, mis ojos rojos con tres tomoes en cada uno, pero lo extraño era que tenía una sonrisa, una sonrisa un poco perturbada.

Volteo la cabeza y miro a Yuuko que tiene una mirada de terror.

Siento que el sudor cae por mi espalda, trato de acercarme lentamente hacia ella.

Hades: tranquila, todo está bien.

Digo con una voz suave para tratar de tranquilizarla, ella parece asustarse más y retrocede, esa acción hace que mi pecho duela, pongo una cara amable tratando de ocultar mi tristeza que me da al pensar que ella me tiene miedo.

Hades: no te preocupes.

Digo dándole la sonrisa más amable que podría tener en este momento, ella parece reaccionar y se abalanza sobre mi llorando, yo solo podía consolarla, estuvimos un rato así hasta que se durmió.

Mire alrededor y vi los cuerpos de las personas que mate, pensando un rato decidí sacar sus sombras.

Hades: levántense.

Las sombras empiezan a acumularse y de ellas salen varios soldados sombras, veo a mi alrededor y veo 10 soldados arrodillados, al verlos me entra un poco de rabia al pensar quienes eran, pero pensándolo bien ya pagaron con su vida y es absurdo guardarles rencor, les ordeno que se metan en mi sombra.

Levanto a Yuuko como princesa y ordeno a una sombra que queme el lugar.

Llegando a su casa toco la puerta, Hideyoshi abre la puerta.

Hideyoshi: ¡¿Qué paso?!

Dice alarmada.

Hades: tranquila, primero llevemos a Yuuko adentro.

Ella parece calmarse y me deja pasar, me guía al cuarto de Yuuko, la dejo durmiendo en su cama, después vamos a la sala.

Nos sentamos en el sofá.

Hideyoshi: ¿Ahora me dirás que paso?

Hades: no lo sé muy bien.

Me tomo un momento para ordenar mis pensamientos.

Hades: talvez la hayan secuestrado de camino a nuestra cita, pensando en eso fui a buscarla, encontrándola en un almacén abandonado con varios hombres alrededor y entonces la salve.

Hideyoshi me mira y con su mirada inspecciona mi cuerpo.

Hideyoshi: ya veo, gracias por ayudarla.

Dice apretando los puños y queriendo llorar, yo la abrazo y la calmo.

Hades: no te preocupes, hare todo lo posible para que no salgan lastimadas.

Al escucharme, ella me abraza.

Hideyoshi: gracias.

Nos quedamos un momento en silencio.

Hideyoshi: ¿te lastimaste?

Habla rompiendo el silencio.

Hades: ¿esto?

Digo mirando las manchas de sangre.

Hades: no es de mí, son de los otros tipos.

Hideyoshi: ya veo.

Después de otro silencio corto ella vuelve a hablar.

Hideyoshi: deberías darte una ducha mientras lavo tu ropa.

Asiento con la cabeza y la sigo.

Entro en el baño y empiezo a bañarme, después de lavarme voy hacia la bañera, una vez dentro me relajo.

Hades: Cortana que paso, porque no pude controlarme en el almacén.

Cortana: eso de debió a varios motivos, pero el más sencillo de explicar es por tu Sharingan, el cual aumenta en gran medida el estado emocional.

Hades: ya veo y cuáles son los otros motivos.

Cortana: no puedo decirte a menos que seas más fuerte para entenderlo.

Hades: eso suena un poco inquietante, parece que hay algo extraño dentro de mí.

Cortana: no te preocupes pequeño hades, podrás reducir los efectos meditando y entrenando tu voluntad.

Hades: ahhh, entiendo.

Digo soltando un suspiro de cansancio.

Hay muchas cosas que quiero saber, pero siempre recibo la misma respuesta, necesito más poder.

Ahora que lo pienso, no sentí nada por las muertes de esas personas, bueno de nada sirve pensar en ello, selo merecían así que no me lamentare por eso.

Saliendo de la ducha me dirijo hacia la sala, busco a Hideyoshi, pero no la encuentro, me acomodo en el sofá esperando a que aparezca, después de un tiempo ella aparece.

Hideyoshi: lo siento, estaba en la habitación de mi hermana.

Dice con una voz un poco triste.

Hades: no te preocupes, ¿Cómo se encuentra?

Hideyoshi: sigue descansando.

Hades: no te preocupes, estará bien.

Hades: bueno es hora de que me vaya.

Digo preparándome para irme.

Ella me sujeta de mi camiseta.

Hideyoshi: podrías quedarte por hoy.

Habla con un poco de duda.

Hideyoshi: quisiera que estés aquí por si pasara cualquier cosa.

Hades: está bien.

Hideyoshi: Gracias.

Hades: pero ¿Dónde dormiré?

Ella parece entrar en pánico.

Hideyoshi: no lo sé, talvez ¿en el sofá?

Hades: bueno.

Nos quedamos un tiempo hablando y tomando té hasta que escuchamos un ruido, nos levantamos y nos dirigimos hacia la habitación de Yuuko.

Al entrar pudimos ver a Yuuko un poco desorientada.

Hideyoshi: Hermana, estas bien.

Yuuko se voltea para ver a su hermana, entonces se levanta y va a abrazarla.

Yuuko: tenía tanto miedo.

Empieza a llorar de nuevo y Hideyoshi trata de calmarla.

Hideyoshi: no te preocupes, toda esta bien, Hades te protegió.

Al escucharla Yuuko se fija en mí, me mira con duda y un poco de cautela.

Eso hace que mi corazón me duela un poco, pero la entiendo, cualquiera actuaria así si me viera matando persona.

Pensando en eso me decido y hablo.

Hades: chicas quisiera hablarles de algo, esperare a que se calmen, las estaré esperando en la sala.

Digo con una mirada seria y me retiro.

Me vuelvo a acomodar en el sofá y espero a que vengan, después de un tiempo ellas llegan a la sala.

Hades: por favor tomen asiento.

Ellas se sientan frente a mí.

Hades: quiero hablarles sobre mí, así que escuchen, la verdad no soy de este mundo, vengo de otro universo, donde existe magia, monstruos, bestias y todo tipo de fantasías, pero también en ese lugar es muy peligroso, vine aquí para divertirme, pero pronto tendré que volver, sé que parece algo extraño, pero les digo la verdad, también les digo esto porque quiero que me acompañen, quiero que estén a mi lado, sé que es egoísta, pero sé que me arrepentiré sino lo hago.

Me detengo para que puedan procesar lo que acabo de decir, Hideyoshi es la primera en reaccionar.

Hideyoshi: ¿puedes probar que lo que dices es verdad?

Asiento con la cabeza y ordeno a una sombra que salga.

Un soldado sombra de pie aparece detrás de mí.

Ellas se sorprenden por la aparición repentina.

Como siempre Hideyoshi se calma más rápido, mira a su hermana y habla.

Hideyoshi: podrías darnos un tiempo, tenemos que pensar y procesar lo que acabas de decirnos.

Hades: entiendo, espero que descansen bien.

Ellas se levantan y se dirigen a la habitación de Yuuko.

Solo espero que decidan acompañarme, pensando en eso me preparo para dormir en el sofá.