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Bajo una increíble potencia que ni siquiera los tres señores de la guerra principales sabían de dónde había salido...

El ejército vampiro arrasó completamente la primera fortaleza fronteriza armada de el territorio del Clan Asura. Luego la segunda ciudad, y después otra ciudad todavía más grande, muy cerca de la capital enemiga...

Maryam estaba algo atónita porque por más que hubiera estudiado, comprobado, y realizado guerras... nunca pensó que sería tan fácil una invasión completamente frontal y sin desvíos.

Los vampiros soldados estaban dando definitivamente el 200% de sí, y esto desvinculó a Maryam de sus pensamientos.

¿Qué es lo que estaba pasando?

Así, tan fácil como podía ser, logísticamente hablando, la fuerza principal de el Clan Amod derribó las tres fortalezas armadas que el Clan Asura poseía en todo el camino hacia su capital...

¡Esto ya no era simplemente increíble, sino absurdo!

En todos estos combates los vampiros tuvieron un rango muy por debajo de lo normal en bajas, solo teniendo veinte mil heridos que luchaban con la fuerza de un soldado normal incluso con su condición y aproximadamente dos mil quinientos muertos en batalla, antes de que estos últimos derribaran al menos el triple de soldados en sus momentos finales...

¡Maryam, Amadora, y Holand no lo podían creer!

Ellos, como gobernantes de todo un Clan, habían participado en todo tipo de guerras, con todo tipo de estrategias y técnicas combativas y demás...

Incluso, habían jugado con la moral de su grupo para hacer pensar que iban a vencer en una batalla perdida, o que iban a regresar vivos de un lugar totalmente imposible...

¡Pero no se esperaban nada como esto para esta guerra!

Compartiendo una mirada, los tres solo se fijaron en dirección a Daniel... este destestable mocoso que lo único que hacía era lanzar de vez en cuando un trueno cuando algún regimiento experimentaba una ardua batalla... y que fuera de eso solo disfrutaba de los masajes de Rossede...

¡Incluso aunque uno tuviera resistencia, todavía hacer masajes por más de 10 horas debería cansar a esa persona!

Pero Rossede... esta princesa del Clan, ¡en realidad tenía una sonrisa feliz en su rostro!

¡Era como esa niña amiga de la infancia que estaba contenta de jugar con su amigo!

¡La mierda!

Amadora en este momento tenía serios problemas psicológicos, de hecho, incluso había llegado a halarse un poco el cabello, con una mirada desesperada...

Holand solo parecía sorprendido todo el tiempo... y Maryam no se quedaba por detrás.

Así, estos tres señores de la guerra tuvieron que verse apartados de el grupo principal para una reunión.

"¡¿Cómo es posible que esto esté pasando?!"

"En realidad... ¿ese maldito fue realmente aceptado por el Clan? ¿Incluso siendo tan vulgar y arrogante? ¡No lo puedo creer!"

Holand apretó sus dientes, mirando a Maryam.

"¡Maryam, ¡¿por qué no han llegado los refuerzos de la capital todavía?!"

"¡No lo sé, pensé que para nuestro primer encuentro ya estaban preparados! ¡Nunca me esperé en primer lugar que este bastardo atacara tan repentinamente y con la velocidad de un maldito rayo! A lo sumo, pensé que se trataría de semanas o meses como mínimo antes de algo de esta escala..."

"Por Satán... Maryam, lo peor no es algo así, sino que incluso aunque nos deshagamos de este hombre en el próximo ataque frontal al Reino de Asura, por nuestros previos combates... ¿los del Clan Asura simplemente nos dejarán ir solo así, tomando nuestro lugar en el poder de este Reino infernal? Todo está mal... está tan mal..."

En desesperación, los tres señores de la guerra estaban cada vez más estresados mientras de hecho, Daniel estaba cada vez más relajado.

Incluso, dormía en pequeños intervalos de tiempo en el regazo de Rossede, con esta acariciando su cabello en este caso...

Daniel no veía nada extraño, puesto que la única persona en que confiaba en todo este maldito infierno era Rossede.

Si, solo porque ella siempre era la más sincera para hablar con él, es que Daniel se permitía cruzar tantos límites de confianza con Rossede.

Porque Daniel siempre mantenía activa la primera técnica de poder que escogió ese día en la biblioteca... la que le permitía ver las intenciones de los que hablaban con él.

.....

Finalmente, luego de empezar a organizar las tropas, el ejército vampiro se vió detenido en seco porque estaba semi rodeado, en una formación parecida a la "U", por la élite de el ejército Asura, e incluso a personas de alto rango de su Clan, pero esto no era lo importante...

Detrás, ¡era posible ver un regimiento completo de gárgolas!

En especial, el orgullo y fuerte frente de un hombre gárgola que se sentaba tranquilamente en un trono sobre un estandarte.

¡Por fin, el magistrado Gárgola estaba aquí!

Holand, Maryam y Amadora tenían miradas severas en su rostro, pero por dentro estaban extasiados.

Pensando en que finalmente este triste teatro podría acabar de una vez y por todas.

El ejército vampiro estaba obviamente en una gran desventaja numérica, y geográfica, pero aún así estaba repleto de soldados tan feroces como nunca lo había estado. Solo detuvieron su sangrienta marcha porque Daniel mismo había dado la orden de parada.

"Rossede, ¿quién es ese?"

"Si, señor Walker, parece ser el hijo del líder del Clan Gárgola, que se desempeña como magistrado actualmente en el Clan Asura. Se han contado historias sobre su poder, y se piensa que es un señor de la guerra desde hace más de dos mil quinientos años, y uno de los más fuertes en eso, también... es el apoyo que el Clan Gárgola a enviado al Clan Asura, y la principal razón por la que hemos estado perdiendo la guerra últimamente."

Rossede habló tranquilamente, toda esta información ella ya la sabía de antemano.

"Ya veo, entonces, supongo que según la ley, tenemos que hablar los líderes, ¿verdad?"

Los libros antiguos habían hecho de Daniel una persona mucho más sabia que antes. Aunque era relativamente normal, ya que más que deseo era simplemente por una cruda necesidad.

Justo de después de que Daniel había hablado tales palabras, el ejército que los rodeaba tuvo un cambio, varias personas, así como el magistrado Gárgola en su trono sobre el estandarte movible, se acercaban.

Daniel igualmente hizo algunas señas con tranquilidad.

Los soldados dejaron el carruaje en el suelo, y así Daniel, Maryam, Holand y Amadora se dirigieron hacia allí, hasta el lugar de encuentro, bajo la mirada conjunta de varios millones de personas.

Aunque la gran mayoría quería quitar sus cabezas de sus hombros.

.....

"Bueno, como supongo que mi rango es el mayor aquí, empezaré yo."

El magistrado Gárgola habló con calma, delante de Daniel, Rossede y los tres señores de la guerra del Clan Amod.

Miró específicamente a Daniel con una mirada divertida, y después de reírse, preguntó.

"Tu, Walker, ¿cómo quieres ser ejecutado?"

"¿Oh? ¿Seré ejecutado?"

"Ah, espera, ¿no lo entiendes?"

El magistrado Gárgola sacudió su cabeza y suspiró, actuando como si estuviera regañando a un niño que se portó mal.

"Su majestad, ¿puede explicarle a este hombre por qué va a ser ejecutado?"

Un hombre del Clan Asura, vestido con ropas honorables, apretó sus dientes con una rabia extrema, pero aún así, respondió con voz normal.

"Han quebrado el tratado entre los ancestros... ¡solo esto ya es suficiente para eliminar todo su Clan hasta que no quede uno solo de ustedes vivo! Pero... no solo eso, sino que también marchan completamente por un territorio que no les pertenece, y aquí, justo delante del majestuoso magistrado Gárgola, ¡en realidad vienen con la disposición de rebelarse! ¡Solo merecen una muerte humillante!"

Daniel escuchó esto, pero no lo puso demasiado en su cabeza.

En realidad, Daniel pensaba acerca de el nivel en el que estaría este hombre delante de él.

Daniel era muy bruto para percibir el nivel de fuerza que poseía las demás personas.

Sus sentidos no estaban tan desarrollados.

Pero bueno, eso literalmente importaba una mierda.

Daniel habló, lentamente haciendo correr por su cuerpo el éter, este poder sobrenatural que había adquirido en este horripilante lugar...

"Me puede decir, magistrado Gárgola, ¿cómo sería ejecutado?"

"Jajajajaja... ¡Jajajajaja!"

Ese hombre gárgola en realidad reía tanto que su cara negruzca se retorcía bastante. Incluso se tuvo que limpiar las lágrimas al final.

"Okey, okey, te explico, mira hombre, al principio pensé que este señor Walker iba a ser un guerrero misterioso ya que controló completamente el Clan Amod tan rápidamente, pero... jajaja, nunca me imaginé esto, haber... ¿qué querías saber? Ah, es cómo vas a ser ejecutado, ¿cierto? Eso es fácil, ya verás, como tu malicia y tus actos son demasiado deplorables, una muerte honorable está muy lejos de tu final, ¿qué significa esto? Simple, que morirás de la forma que más humillante consideres, por lo que veo eres un puto niño muy orgulloso, ¿no es así? En tu caso, la ejecución sería siendo violado sin parar por algunos orcos de bajo nivel o algo así, ¿ya vas teniendo una idea?"

Daniel se quedó callado, el magistrado Gárgola finalmente tranquilizó su risa y continuó diciendo con aburrimiento.

"Como sea... esa será tu muerte, luego el Clan Amod en su totalidad será penalizado por todos los poderes de este Reino infernal, y finalmente será eliminado de su estado como tercera potencia Infernal, también, bueno, muchos de ellos serán tomados como esclavos, ya que últimamente ha habido una disminución seria en la población general de los extranjeros así como en su destreza, y demás..."

Los ojos del magistrado saltaron de Daniel, simplemente considerándolo como algo aburrido, y se posaron maliciosamente sobre Rossede.

"Bueno, ya que tu ejército se va a rendir en este momento... ¿esta no es la famosa hija bastarda, Rossede Amod? Bien, la tomaré como esclava en este momento, y por cierto, lo siento hombre, posiblemente me pasaré toda la noche dándole muy fuerte, aunque parecía ser tu esposa o algo así, bien, ¡sesión suspendida!"

Así, sin más, sin necesidad de algo adicional, el magistrado dió por hecho la finalización de la rebelión bajo su comando.

Luego, él empezó a caminar pacientemente en dirección a Rossede.

Cuando llegó a ella, estiró su mano.

Aunque no se dió cuenta...

Cuando sintió un ruido raro justo delante y miró bien, ¡enseguida su expresión cambió!