Capitulo XI: Invasión a la Academia

Unos días después de aquella clase donde los más jóvenes comienzan a labrar su destino, por la noche, todos los Estudiantes descansan en sus habitaciones, el cielo estrellado y la tranquila reina por todo el lugar, mientras algunos profesores descansan también en su turno, y otros patrullan protegiendo la Academia, luego de lo acaecido Últimamente con los Mercenarios, la seguridad de los más jóvenes es la prioridad de todos.

Durante la madrugada y de forma insospechada, se escuchan explosiones por todos los rincones de la Academia, el lugar se comienza a sumir en fuego, humo y destrozos, esto alerto a todos y poco a poco el Caos se extendió por la zona, inclusive llegando a provocar alteración en el pueblo. Doncaster comienza a movilizar a los demás profesores y alumnos que se despertaron, para que puedan despertar a sus demás compañeros:

—Hiroshi! Busca a los alumnos del piso B, rápido! Olympico ve al piso A, Lucy ven aquí, necesito que vigiles las entradas, ira Oromu contigo, rápido — Doncaster

—Entendido! — Lucy

—De acuerdo, Olympico! Lleva a varios alumnos de último año — Hiroshi

—Bien, de acuerdo…ustedes vengan conmigo — Olympico

—Tenemos que impedir que el fuego se extienda mas allá, y protejan a los jóvenes! —Doncaster

El fuego comenzó a extenderse hasta el campo de Tiro, donde su intensa vegetación hizo posible crecer más aun el siniestro.

En su cuarto, Megumi despierta encontrándose con la impactante imagen del Fuego poco a poco tomando el lugar, el humo surte efecto, pues ella comienza a perder la conciencia y sin poder alguno para gritar o mantenerse despierta.

A unos metros cerca del Cuarto de Megumi, Kaizer y Kamata se encuentran entre la multitud que huye intentando buscar el dormitorio de Ella.

Al llegar intentan abrir pero el fuego ya tomo la puerta en su totalidad, peligrosamente el fuego continúa avanzando, y finalmente Megumi cae perdiendo la conciencia sobre el suelo, el siniestro continúa su paso destrozando la ventana y los vidrios cayendo sobre Megumi.

Ante la desesperación Kamata intenta cortar la puerta con su espada, pero parece más peligroso para Megumi, Kaizer por su parte intenta golpear la puerta intentando partirla aunque su propia mano por los golpes continuos se ve cortada y sangrando, la situación es crítica, ninguno de los dos puede forzar la puerta ni cortarla con sus armas, luego de unos breves momentos llega Lucian quien se encontraba buscándolos:

—Que sucede? El fuego sigue avanzando — Lucian

—Es Megumi…esta dentro y no podemos sacarla! —Kaizer

—Ni siquiera podemos cortar la puerta, este maldito humo no me deja ver ni pensar —Kamata

—Empujemos los tres quizás podamos lograr abrirla —Lucian

Los tres jóvenes se preparan para empujar con todas sus fuerzas, intentando forzar la puerta, Kaizer con su mano lastimada, Kamata confundido y perdiendo la conciencia por el humo, y Lucian exhausto, los tres comienzan a empujar forzando la misma puerta.

Poco a poco comienza a ceder, pero mientras cede, unas llamas se filtran por la abertura del marco y la puerta, inclusive Kaizer llega a sufrir una leve quemadura en la parte superior de la cabeza, pero eso no los detiene.

Finalmente logran abrir la puerta y ven el fuego casi llegando a Megumi quien se encuentra inconsciente con vidrios de la ventana sobre ella, Kaizer sin importarle su vida o los daños que le ocasionaría, corre hacia Megumi llegando a pasar sobre el fuego, levanta sobre sus brazos a la joven y sale velozmente hacia la puerta para increíblemente salir a salvo hacia el pasillo:

—Megumi…es…estas bien? — Kaizer

—No responde, murió? — Lucian

—Posiblemente siga inconsciente por el humo, debemos sacarla de aquí rápidamente, vamos — Kamata

—Vam… — Kaizer

—Kaizer? Qué esperas vamos! — Kamata

—Sí, vamos!...(Me estaré volviendo loco por este humo o acabo de sentir una presencia?) —Kaizer

Los cuatro jóvenes corren rápidamente hacia la salida, Megumi aun inconsciente pero a salvo siendo cargada por Kaizer en su espalda, Kamata y Lucian escoltando detrás.

Logran llegar a las escaleras y comienzan a bajarlas, pero un gran muro de fuego los detiene en el Piso A, a metros del pasillo que los lleva a la salida:

—Que hacemos Kaizer? — Kamata

—Busquen madera, debe haber por aquí, tenemos que formar un puente para poder sal… — Kaizer

Una voz siniestra y perturbante se escucha de entre las llamas, y una gran figura surge de entre ellas:

—Salir Kaizer? A Donde? Dime — Voz Siniestra

—Quien está ahí? — Kaizer

—Oh, ahora no me recuerdas? Jajaja! Te devolveré la memoria, me impediste mi gran movimiento en el Examen, lo recuerdas ahora? — Alexander

—No puede ser…Alexander! — Kaizer

—Acertaste niño! Ahora prepárate a morir aquí! Estúpido! — Alexander

De entre las llamas la figura aparece, Alexander el traidor aparece buscando su venganza por lo ocurrido en el examen.

Camina rumbo hacia Kaizer y los demás jóvenes, sin dudarlo Kamata desenvaina su espada y se dirige a atacarlo, a pesar de que los movimientos cortantes del joven espadachín sin rápidos, Alexander quien posee una habilidad de Gran velocidad le permite esquivarlo sin problemas, poco a poco Kamata comienza a cansarse dejando de mantener alzada la espada, con una sonrisa diabólica Alexander avanza velozmente hasta el Espadachín y lo golpea fuertemente en su estomago enviándolo unos metros dejando la pared agrietada por el impacto e inconsciente al Joven, Lucian por su parte desenfunda sus armas y comienza a disparar:

—Oh, armas de fuego no? Será interesante vencerte a ti también! — Alexander

—No te creas que eres la gran cosa! — Lucian

Para sorpresa de Alexander uno de los disparos llega a perforar uno de los pliegues de su ropa, logrando enfurecer al mercenario.

Usando su habilidad de gran velocidad comienza a golpear a Lucian salvajemente hasta dejarlo de rodillas:

—Detente Alexander! Eres a mí al que quieres! — Kaizer

—Te dejare algo en claro, no me importa lo que digas, porque yo matare a quien este contigo! — Alexander

—Enfréntame si tienes orgullo — Kaizer

Aquellas palabras molestarían mucho mas al Mercenario que los disparos de Lucian, pero lejos de enfurecerlo, le dio motivos para sonreír.

De una patada en su rostro, Lucian es enviado unos metros sobre el pasillo:

—Bien Kaizer, que tienes para decir? — Alexander

—Enfréntate a mí, pero ya no los ataques a ellos, deja que se vayan, deja que ella se vaya— Kaizer

—Sí…pero en cuanto te mate, ella deseara no haber nacido junto con tus Amigos! Ven estúpido! — Alexander

Kaizer deja a Megumi recostada lejos del peligro del fuego y del humo, muy cerca de donde hay oxigeno, arrastra a los demás hacia ese lugar, mientras el Mercenario espera impacientemente con su rostro enfurecido pero mostrando una sonrisa tétrica, El joven Asesino desenvaina su Daga, con sus manos temblorosas y mirada de temor se dispone a atacar a Alexander, quien gracias a su velocidad golpea con un fuerte rodillazo su rostro provocando que la sangre brote de su nariz:

—Para que sepas, el incendio lo he ocasionado yo…hace falta valor para atacar una academia, pero la inteligencia es superior no lo crees? —Alexander

El Mercenario continúa golpeando con una serie de puñetazos sobre el rostro y estomago del Joven Asesino, cada golpe lleva a Kaizer a perder gran cantidad de sangre de su boca, uno de los fuertes golpes que le propina Alexander provoca que caiga de rodillas ante el peligroso Traidor.

Alexander toma del cuello a Kaizer y lo arroja contra el vidrio de la ventana que conecta con el gran Patio central destrozándolo, pero de forma inexplicable para el Mercenario logra levantarse y volver a empuñar su Daga, como si el temor que sentía antes lo impulsara cada vez más:

—Así que eres un hueso duro de roer verdad? — Alexander

—Esto no termino, y lo sabes — Kaizer

—Si…lo sé! — Alexander

En las afueras de la Academia los estudiantes y profesores finalizan la evacuación esperando a los Asesinos rescatistas y especialistas en desastres de ese tipo.

No obstante Doncaster se encuentra preocupado, se acercan los Profesores más cercanos al Director:

—Doncaster, tenemos un grave problema! — Lucy

—Que sucede? — Doncaster

—No están Kaizer, Kamata, Lucian tampoco Megumi — Lucy

—Qué? Oh No, es imposible — Doncaster

—Que pudo haber pasado? Tenemos que ir por ellos, aun deben estar caminando por los pasillos y con el humo dudo que puedan ver! — Hiroshi

—Hiroshi, tu y Olympico vayan a buscarlos — Doncaster

—Yo también iré, son mi responsabilidad — Lucy

—Entiendo, vayan! — Doncaster

—Vamos rápido! — Hiroshi

— (No puedo creer si llega a ser verdad, en verdad es una situación peligrosa) —Doncaster

Dentro de la academia ocurre un peligroso combate entre El Futuro de los Asesinos y El Traidor de la Orden, Alexander continua golpeando a Kaizer mientras el trata de sostener su Daga y esperar a que alguien los salve.

Todo depende de cuanto pueda resistir Kaizer, pero de forma sorprendente el joven muestra una voluntad de un nivel distinto.