CARLOTA
Hoy era el día de la exposición de Gabriela, y creo que se podría decir que todos estábamos emocionados por su logro. No es algo que no esperábamos que fuera a pasar, porque al menos yo tenía más que claro que llegaría a ser alguien importante en esto del arte.
Había ido a casa de Marcos porque habíamos quedado en que iríamos lo tres juntos, su hermano claro está, porque Gabriela debía estar antes allí, lo que no sé es si Ana también estaría ya que nunca se separaban.
Cuando llegué ni tuve que timbrar que estaba Marcos en la puerta esperándome y de pronto aparece Ana por detrás de él que viene corriendo para abrazarme.
- ¡Tía!
-Hola pequeña, ¿no has ido con Gabriela?
-Yo quería ir, pero no me despertó.
-Vamos Ana, no te enfurruñes, sabes que no le gusta despertarte, por eso te dejó en casa.
-Tú hermano tiene razón, no te despertaría a no ser que sea demasiado tarde, pero pronto estarás con ella, no te preocupes.
- ¿Por qué no vas a tocar la guitarra un rato Ana?
La niña sonrió y salió corriendo hacia el interior de la casa haciendo que yo quedase con una gran sonrisa en la cara. Es en ese momento en el que me fijo en Marcos que está serio, lo que es extraño, porque debería estar contento por Gabriela, por su hermana que era feliz otra vez.
- ¿Qué es lo que te pasa Marcos?
-Eso es lo que os debería preguntar yo a ti y a Gabriela ¿No crees?
- ¿De qué hablas?
-Lo sabes muy bien, no entiendo como le hacéis eso a la pobre Clara, ella no os hizo nada. Pensé que erais mejores personas.
-No entiendo nada, ¿Qué se supone que hicimos nosotras ahora?
-No te hagas la estúpida porque no lo eres, ella no os hizo nada para que la tratarais como lo estáis haciendo. Por dios, ¡Que es la mejor amiga de Gabriela!
-Perdona que te lo diga, pero se merece eso y mucho más. No sabes lo que han estado haciendo.
-No, no me vengas diciendo que ella hizo algo porque no sería capaz de hacer nada, ella misma me lo dijo.
- ¿Y tú crees en lo que te dice? Es una falsa Marcos.
-No lo es. No deberías de estar celosa, porque sabes que ella no logrará quitarte tu puesto con Gabriela, no puedo entender cómo es que no lo ves.
-Marcos no hables de lo que no sabes.
-Claro que lo sé, no soy estúpido, lo que no entiendo es como Gabriela te sigue el juego.
-Gabriela no me sigue nada, y mejor estate callado porque si supieras lo que pasa estarías del lado de Gabriela por mucho que te doliese la verdad.
- ¿Ahora me dices que Clara es mala persona?
-Básicamente, y si no te diste cuenta es que eres estúpido, de verdad te lo digo. ¿Te piensas que a Gabriela le dan ataques de ansiedad así por así? Estás equivocado amigo si es lo que piensas.
- ¿Y qué tiene que ver Clara en todo esto?
-Todo, ella y la zorra de su hermana tienen que ver en todo lo que le pasa a Gabriela.
En ese momento aparece Carlos que se pone entre nosotros supongo que para evitar que nos matásemos, porque en este momento le daría un puñetazo en toda la cara a Marcos. Puedo entender que no sepa nada de lo que pasa, lo que no me coge en la cabeza es que no se dé cuenta de que esa tipa odia a Gabriela, si prácticamente lo sabe todo el mundo.
- ¿Se puede saber que os pasa a vosotros dos para que estéis discutiendo?
-Díselo a ella que al parecer ahora Clara es mala persona.
-No entiendo. ¿Pero no erais amigos?
-Éramos, en pasado, yo por mí la mataría por todo lo que está haciendo.
-Pues que sepas que no dejaré que le hagáis nada, estoy hasta las narices de que hagáis lo que se os dé la gana. Esta vez Gabriela se está pasando.
- ¿Qué tiene que ver Gabriela en todo esto?
-Más de lo que piensas.
-Mirad chicos, abrid esas orejas y escuchado muy bien lo que os voy a decir. Vais a dejar esta gilipollez por la que estáis discutiendo porque hoy es el día de Gabriela y no pienso dejar que se lo jodais por tonterías vuestras ¿entendido?
-Pues yo paso de ir.
-Tú vas porque te lo digo yo, asique arreando.
-No me puedes obligar a ir.
-No quieras probar, mueve tu culo de una vez Marcos.
-Eres una mierda de hermano.
-Me alegro de que lo sepas.
Con eso Marcos se fue a la casa a no sé dónde, pero tampoco me importaba, se había pasado. Se lo diría, no estoy segura de que me fuese a creer, pero se lo tenía que decir porque ahora parece ser que las otras le están comiendo el coco a este inútil, y no pienso permitir que jodan la amistad que hay entre Marcos y Gabriela.
-Tú y yo hablaremos después de la exposición y me explicarás que es lo que coño está pasando con vosotros tres. ¿Entendido?
-Luego quedé con Gabriela.
-Pues después de que hables con ella.
-Como quieras, pero no debería de ser yo la que te lo explicase sino Gabriela.
-Pues ahora me lo cuentas tú, y con lujo de detalles.
-Como quieras.
Un par de minutos después, salimos de la casa y nos dirigimos a donde sería la exposición de Gabriela. Cambié mi cara porque no quería que ella se enterase que algo me pasaba. No quería arruinarle el día como estoy segura que lo haría contándole lo de Marcos, como dijo Carlos, hoy era su día y merecía disfrutarlo.
Me fui con los chicos hacia donde estaba ella y en cuanto Ana la vio salió corriendo en su dirección. Gabriela la coge en brazos y le dice algo que no logro entender, pero pude ver con la sonrisa que quedaron las dos.
-No se te ve nerviosa al menos, eso es un avance.
-Pues estoy nerviosa, esto es demasiado.
-Venga hermanita que no lo es, es lo menos que te mereces por tu arte.
-Eres un exagerado, por eso lo dices. A veces me pregunto cómo es que me rodeo por tantos exagerados.
-No es que seamos exagerados, solo te queremos hermanita, lo deberías de saber.
-Y lo sé, pero eso no implica que deba gustarme que exageréis.
- ¿Quién es el que está intentando quitarme el sitio de exagerado con Gabriela?
Pude ver como la sonrisa de Gabriela se ampliaba y nos giramos todos para ver a Alex. Puede ser que en un principio no me caía nada bien, pero después de darme cuenta de lo feliz que hace a Gabriela y de darme cuenta de que era una gran persona, pues acabé por hacerme su amiga también.
Estuvimos hablando por un rato hasta que la representante de Gabriela llegó diciendo que era hora de abrir al público, que fue cuando se puso más nerviosa aún.
El día fue transcurriendo rápidamente y pude escuchar algunas de las opiniones de las personas, y eran buenas, estoy segura de que a Gabriela le gustará eso.
En un rato que Gabriela estuvo libre hablé con ella para que se tranquilizara un poco y le conté las opiniones que había escuchado. También me preguntó por Marcos, que al parecer no lo había visto en todo el día después de que llegáramos, pero no le conté, seguía pensando que debía disfrutar de su día, ya le contaría mañana lo que pasaba con Marcos.
Cuando la exposición terminó, estuvimos todos juntos un rato hasta que Gabriela y yo decidimos irnos a una cafetería para hablar como hacíamos antes. Yo más que nada era para investigar y descubrir su posible respuesta para que Alex se quedase tranquilo. Estoy más que segura que aceptará, pero al parecer él no está tan convencido, por lo que iba a hablar con ella y ver que descubría.
Fuimos a una cafetería que quedaba cerca del lugar donde exponía, nos sentamos en la primera mesa que vimos y pedimos unos cafés.
-Bueno, ¿Qué es eso tan importante que tenemos que hablar?
-No es nada importante, solo echaba de menos esos momentos en los hablábamos y todo eso.
- ¿Pero si es raro que no hablemos?
-Lo sé, pero siempre estás con alguien, quería pasar una tarde de chicas.
-Bueno, pues ya la tienes. Ahora cuéntame que es lo que pasa con Marcos porque no lo he visto en todo el día.
-A la mañana no se encontraba demasiado bien, igual por eso no lo viste en todo el día.
-Ana me dijo que estaba bien hasta que llegaste a casa de ellos. ¿Discutisteis de nuevo?
-No te preocupes por eso, no es nada. Ahora cuéntame algo que debo de saber.
- ¿El qué exactamente?
- ¿Te has acostado…?
-Ni se te ocurra acabar la pregunta porque te mato. Sé lo de la apuesta y creo que dijeron que ganaras tú.
- ¿Hemos ganado? Ángela tenía razón.
-Espera, espera, espera. ¿Mí abuela está metida en todo esto?
-Si, ella me ayudo a acertar, ¿de verdad piensas que yo sola hubiese acertado?
-Es que os mato.
-Pues puedes hacerlo con todos, porque estaban Carlos, Marcos, tu abuela, yo, los gemelos y tu madre.
- ¿Ellos también?
-Si, si estamos felices por ti, eres feliz después de mucho tiempo.
- ¿Por qué se os dio por hacer apuestas conmigo y Alex?
-Sinceramente no lo sé, creo que empezó como una coña y acabo siendo serio.
-Pues que ni se os ocurra volver a hacer apuestas conmigo, porque os mato a todos, y no es coña.
-Vale, vale, ahora hablemos de algo más serio.
- ¿Tú seria? No me lo puedo creer la verdad.
-Pues esta vez es cierto.
-Pues dale, ¿qué es eso tan serio de lo que quieres hablar?
- ¿Qué piensas de casarte?
- ¿A qué viene esa pregunta?
-Tu solo contesta.
-Sabes lo que pienso de casarme.
-Sé lo que piensas de casarte, lo que no sé es lo que piensas de casarte con Alex.
-Es muy temprano para que eso pase Carlota.
-Lleváis meses juntos, no es temprano para nada. Además, os amáis más que nada en el mundo, ¿Qué es lo que te impide casarte con él?
-Nada.
- ¿Entonces que contestarías en caso de que él te lo dijese?
-Pues teniendo en cuenta lo que pienso de eso y de que amo a Alex…
- ¿Qué?
-Pues no lo sé Carlota. No sé qué es lo que haría en caso de que Alex me lo pidiera. Me daría un infarto primero de todo, pero no sé qué contestaría.
- ¿Alguna vez pensaste que eso pueda ocurrir?
- ¿La verdad?
-Sabes que sí.
-Pues sí, lo he pensado, pero lo que pienso de casarme sigue siendo igual.
-Eso no implica que aceptaras casarte con él.
-Lo sé, pero me da miedo ¿sabes?
- ¿Por qué te da miedo exactamente qué te pida matrimonio?
- ¿Qué pasa si digo que no? Estoy más que segura que me dejará, le romperé el corazón y yo acabaré otra vez en la mierda y no quiero que ninguno de los dos volvemos a sufrir. No quiero que Alex sufra de nuevo por mi culpa Carlota.
-Te puedo asegurar que en caso de que le digas que no él no te dejará. Vamos Gabriela, él te ama más que a nada en la vida, y si le contaste todo lo que piensas de casarte, menos lo hará. No sé qué es lo que te preocupa exactamente la verdad.
-Es que ni yo misma lo sé Carlota. Desde que estoy con Alex, lo que pensaba de casarme está cambiando.
-Y eso quiere decir…
-Que estoy más o menos convencida de que en caso de que me lo pregunte diría que sí. Lo quiero mucho, como nunca lo quise antes y no me gustaría perderlo por nada del mundo, no después de todo lo que me costó recuperar mi felicidad.
-Y estoy segura que no la perderás nunca más amiga.
-Eso espero.
Luego de esa conversación estuvimos hablando por una hora más hasta que Gabriela quiso irse para casa y pasar algo de tiempo con Ana, cosa que estoy más que segura que disfrutaría, y yo iría con ella porque quedé con Carlos en que le contaría lo que pasa con Marcos y nosotras, que bueno, no pasaba nada hasta ahora que estoy segurísima de que Clara le está llenando la cabeza de estupideces y mentiras, pero no permitiría que eso pasase, era mi amigo y no permitiría que nadie le metiese ideas falsas en la cabeza, por nada del mundo.