Capítulo 23

GABRIELA

En todo momento notaba la mirada de Alex en mí y yo no podía echarle un vistazo de vez en cuando. Se veía casi mejor que el modelo más guapo de todo el mundo allí apoyado contra el marco de la puerta con un vaso en mano. Carlota se había ido hace un par de segundos a por más bebida y no sé qué más dijo y para mi sorpresa cuando llega, con ella viene un chico con él, se acerca a nosotros y noto la mirada de ese chico clavada en mí, debo admitir que no me gustaba nada.

"Gabriela, este es Carlos, un chico mono y con mucha personalidad." Esas simples palabras ya me hicieron pensar que Carlota quería presentármelo a mí a propósito, solo esperaba que no fuese para que tuviera un royo con él o que en algún momento fuese mi pareja. Espero que no fuera ninguna de esas, porque entonces sí que me enfadaría y no sería bueno para nadie de los que estaban presentes.

"Encantado, no sé si lo que dice tu amiga es cierto." dijo con una sonrisa que prácticamente enamoraría a cualquier chica "Son cosas de Carlota." respondí secamente "Bueno, yo os dejo hablar un rato a solas."

Y con eso se fue dejándonos solos. No tenía ni idea de qué hacer y el al parecer tampoco lo sabía, así que nos quedamos mirando un rato hasta que aparté la mirada para mirar en la dirección en la que estaba Alex que se notaba algo tenso.

"Bueno, lo que dicen de ti es cierto." dijo y pasé a centrar mi mirada de nuevo en él, porque no tengo ni la menor idea de que estaba hablando "¿Lo que dice quién y el qué?" pregunté "Todo el mundo, no paran de hablar de ti todos los de la fiesta y que eres hermosa."

"No creo que sea para tanto." respondí por millonésima vez en la fiesta "Si, sí que lo es." dijo con la sonrisa plantada en su rostro "Yo creo que no, pero cuéntame de ti. ¿De qué conoces a Carlota?" pregunté intentando apartar el tema "Carlota en una compañera de una de las clases y bueno, la conocí...."

En ese momento desconecté y me quedé mirando para Alex. Esa mirada siempre hacía que me enganchase y no pudiese apartar la mirada de él. Me sonrío y hace que automáticamente yo lo haga. Me encantaba verlo así, contento y todo.

No sé muy bien cuanto tiempo llevábamos mirándonos hasta que noto que alguien me coge del brazo, lo que hace que aparte la mirada de Alex. Para mi sorpresa no era el chico con el que estaba hace un momento, si no que era Carlota y tenía una cara de mosqueo.

"¿Se puede saber qué es lo que miras tanto que no le haces ni caso a Carlos?" preguntó molesta "No está aquí, ¿que más te da lo que mire?" pregunté irritada "Si que me importa, necesitas sacar a ese tío de la cabeza."

"Yo me saco a quien quiera de la cabeza, y puedes tener por seguro que si es Alex el que quiero tener en mi cabeza, lo voy a hacer y nadie podrá evitar que no lo haga." le aseguré y ella rodó los ojos "¿Ahora si reconoces que estás enamorada de él?" bufó "¿Pasa algo porque lo esté? Tu sabías que me gustaba y tenías una sospecha de que estaba enamorada de él y aun así vas en busca de tíos para que tenga algo por ellos. "

"TE HIZO DAÑO GABRIELA, ¿DE VERDAD PRETENDES SER SU PAREJA?" gritó y fue la gota que colmó el vaso "LO PRETENDA O NO, SI QUEREMOS PUEDES TENER POR SEGURO QUE LO SEREMOS. NO TE METAS EN MI VIDA TANTO CARLOTA PORQUE QUIÉN DECIDE COMO LA VA A VIVIR SOY YO, NADIE MÁS. ES HORA DE QUE DECIDA COMO QUIERO VIVIRLA SIN QUE NADIE ME DIGA COMO LO TENGO QUE HACER."

En ese momento llega Marcos que me agarra para que no me lance a Carlota, porque no es que le fuera a hacer algo, pero es que al parecer es que cuando me enfado no sé muy bien lo que hago, eso según ellos. Yo sé que me controlo de maravilla.

"¿Se puede saber por qué estáis discutiendo? Está todo el mudo mirando." nos preguntó "Eso me da igual Marcos, dile que no intente hacer lo que siempre hace desde hace ocho años, porque no pienso dejar que pase por encima de eso, si es lo que quiero lo haré y punto."

"No estoy entendiendo nada Gabriela, explícamelo y cálmate." pidió, pero me solté de él "Yo mejor me voy, no quiero seguir discutiendo y decir algo de lo que me vaya a arrepentir." Con eso me doy la vuelta y salgo de la fiesta y me pongo a andar por la acera. No sé muy bien cuanto tiempo llevaba andando cuando escucho como alguien me llama, pero no hace falta que me gire para saber quién es el que me está llamando.

"Oye Gabriela, deberías parar. Espérame un momento, por favor." No le hice caso y seguí andando hacia no sé dónde hasta que de un momento a otro aceleró el paso y me agarro suavemente por el brazo.

"Oye, espera. No te vayas así de enfadada." dijo y bufé, porque no necesitaba que nadie me lo recordase "Es que estoy enfadada Alex, y ahora déjame, quiero estar sola." respondí y empecé a caminar de nuevo "Pero no te voy a dejar sola, deberías saberlo."

"Pues haz lo que quieras, pero no te voy a hacer caso." Seguí andando y el a mi lado en todo momento mirándome, pero por lo menos sin hablar hasta que parece ser que se cansó de hacerlo. "¿Me dices ahora el porqué de que estés tan enfadada?" preguntó y negué, porque no quería hablar de ello en este momento "Cosas mías Alex, cosas que no te importan."

"Todo lo que tiene que ver contigo me importa, la verdad. Solo quiero que estés bien." aseguró, haciendo que rápidamente me girase en su dirección "¿Solo quieres que este bien?" pregunté "Claro preciosa, es lo único que quiero." respondió y podía ver que era cierto "No me vuelvas a llamar así, y si es lo que quieres déjame en paz y vete." dije "No lo voy a hacer y lo sabes."

"PUES TE DIGO UNA COSA Y ES QUE ME DA EXACTAMENTE IGUAL QUE DIGAS ESO DE QUE ME QUIERES Y QUE LO ÚNICO QUE QUIERES ES QUE ESTE BIEN, PORQUE POR TU CULPA YA HE SUFRIDO POR TODA UNA VIDA. NO HACES OTRA COSA QUE CONFUNDIRME Y HACERME DAÑO ALEX, POR LO QUE ME PUEDES DEJAR EN PAZ E IRTE A DONDE NO ME MOLESTES." Ahora sí sé que me pasé con lo que le dije, pero de verdad que necesitaba estar sola. Me sentía peor de lo que me sentía tras la discusión con Carlota, porque era Alex a quien le había dicho esas cosas horribles.

A él que me demostraba que me quería y yo como gilipollas le dije eso para herirlo y ver si así me dejaba en paz. Yo seguí andando mientras él se quedó parado en medio de la acera, hasta que lo escucho gritar.

"¡¡¡¡¡¡CUIDADO GABRIELA!!!!!!!" gritó Alex y es en ese momento veo las luces de un coche en frente mía y como alguien me agarra por detrás para apartarme de su camino, y como no, esa persona es Alex.