Ella tiene apetito y se alimentará de quienes visitan su habitación. ¿Acaso ella es humana? Ni siquiera Aly puede estar segura de su propia naturaleza. Aly vive de la noche, sin embargo, en sueños las voces de su memoria la acechan mientras que tras su ventana los hombres del fuego blanco andan cazándola para traerla de vuelta a casa... En varios pedazos.