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Yo no soy de plástico (Dipper x Pacifica) [LEMON]

电视同人
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摘要

-la siguiente historia no tiene nada que ver con la historia: Asuntos del corazón que actualmente se encuentra en desarrollo. No, está es una historia aparte que nace gracias al arte del artista: Banjabu con su pieza: I am not plastic; en donde aparece estos dos insultándose, pero con ganas de tener aquello, así que nosotros nos tomamos la libertad de hacer una historia así para rendirle tributo al artista y antes de que te lo preguntes, si, si incluye LEMON-

Chapter 1Capitulo Único

Eran las cuatro de la tarde en Gravity Fall, y todo parecía normal en aquel pueblo, pero no había sido una tarde normal para un chico castaño que se encontraba caminando hacia su temporal casa, mientras escribía en un libro todo lo que había encontrado, todos en el pueblo lo conocían y algunos lo saludaban, pero él no devolvía el saludo porque se encontraba escribiendo. Muchas chicas querían estar con él e incluso hablarle, pero ellas sabían que aquel chico tenía novia y se llamaba Ciencia, o eso creían ellas.

Por otro lado, de la acera venía una chica rubia y ropa elegante, la cual cargaba en su mano una hilera de bolsa de compras que tenía grabadas marca reconocida en todo el mundo, su caminar era delicado incluso tal vez presumido, pero así daba a demostrar sus dotes femeninos, los cuales no pasaban desapercibido por los chicos del lugar, pero aquellos pueblerinos sabían que jamás estarían al nivel de aquella señorita. ¡Y aunque lo hiciera! Ellos creían falsamente que lo novios de aquella chica eran Armani, Dior y Oscar de la renta, pero ello se equivocaba.

Ambos caminaban si mirar hacia adelante e iban en curso de colisión, pero aun así continuaron su camino, todos sabían que aquello no sería nada bueno y por ello dejaron de presta atención. El fatídico desenlacé llego, ambos jóvenes chocaron y al verse, aquello jóvenes comenzaron su riña que todo el pueblo sabía que era de vieja data.

–¡Pero si es el tonto del pueblo! – proclamo la rubia.

–¡Tenía que ser la oxigenada! Replico el castaño.

–Oxigenada tu mama – protesto la chica.

–¡Hui, se puso sensible la reina del drama! – remedo el castaño.

–¡PÚDRETE PINES! – grito la rubia.

–¡Ay que ingenioso! —exclamo— no tenía un mejor insulto – añadió.

–Lo estoy guardando para otra ocasión – determino la joven.

–La ocasión perfecta es esta no lo crees "reinita" – apunto el chico.

–¡Anda a joder a otra parte, estúpido teletubis! – vocifero.

–Si yo soy un teletubi, tu eres una umpalumpa – añadió este.

–¡Ay Pines! —exclamo la rubia— no vales mi tiempo – apunto la chica.

El castaño se paró primero del piso para ayudar a su archirrival, algunas chicas que aun veían el espectáculo decidieron no seguir viendo, porque sabían que aquella chica rubia le daría una fuerte bofetada en la cara del castaño, pero tal cosa nunca paso. Pines ayudo a la rubia a pararse del suelo, mientras esta decía: espero no haber arruinado mi ropa.

–Tranquila, eso es puro aire como lo que tiene en tu cabeza – destaco el chico.

–No tienes nada mejor que hacer con tu vida Pines – comento la chica.

–¡Quizás! Plastifica – comunico el castaño.

–Es Pacífica, estúpido nerd – protesto la joven.

–¡Hui, se pudo intensa otra vez! – remedo Pines.

–No me ayudes enclenque – enfatizo Pacífica.

–Enclenque, es lo mejor que pudo lanzar la reina plástica – puntualizo el chico.

–Si enclenque, porque nunca estaría con una diosa como yo – determino la rubia.

–¡Ja!, ¿diosa tú? Pufs, no me hagas reír –

–Claro que soy una diosa, no vez que todo esto es cien por cierto natural – determino Pacífica.

–Sera cien por cierto sacado de un quirófano – puntualizo.

–Lo dice el enclenque desnutrido sin musculo –

–Pues no tendré músculos físicos, pero si lo tendré mentalmente –

–¡Aquí viene el discurso patético de que la mente puede más que los músculos! —exclamo— eres patético Dipper Pines – añadió esta.

–Por lo menos no soy una bolsa de estrógeno oxigenada y plastificada –

–Te digo que esto no es platico, esto es cien por ciento natural, sino pregúntale... –

–¡A tu cirujano! —proclamo Dipper graciosamente— ¡Oh, pero claro que lo hare! – añadió.

–Claro —respondió sarcásticamente— como tú no te ejercita, no reconoces el nivel de dedicación que tengo yo para conservar un cuerpo como este – agrego.

–¡Oh vamos Plastifica!, tu eres tan falsa que podría reconocer tu maquillaje barato a la vuelta de la esquina –

–Barata será tu ropa de cuarta clase, este maquillaje es de marca de profesionales no como lo que usa tu hermana –

–A Mabel la dejas fuera de esta conversación – proclamo Dipper molesto.

Pacífica sin querer puso el dedo en una vieja herirá que aun ha podido cicatrizar y tenía que cambia de tatica antes de que Dipper no quisiera seguir con el juego, entonces dijo: El rey de los nerds se puso sensible, ¡oh que lastima! El nunca reconocería lo auténtico ni que lo golpeara.

–Claro que lo haría, pero lo que pasa es que eres tan falsa que no hace falta – respondió Dipper.

–¡Oh eso crees! —exclamo— ¡porque no me lo demuestra —añadió— ¿O será que temes que este cuerpo sea demasiado para tus estándares? – se preguntó.

Dipper no caería tan fácil en la trampa de Pacífica y siguió tratando de seguir el juego: Lo dice la perra campirana con maquillaje barato y ropa de tercera clase.

–¡QUE NO ES BARATO! —reclamo— barata será tu ropa que de seguro sacaste de un basurero – añadió la rubia.

–Y es que si lo haya sacado de un basurero no importa, lo que importa es que por lo menos sea real, no como ciertos personajes que son platico que rebotarían de la pared de solo golpearlos – apunto Dipper.

–Eso lo dice el nerd solterón que la única novia que tiene brilla por su ausencia ya que esta es tan ficticia que rada vez sale de tu computadora – expreso Pacífica.

–Ficticia será tu vestido y tu cabello oxigenado – replico Dipper.

–¡Oh vamos Dipper admite que nunca podrás con el cuerpo de esta diosa! –

–Tal vez tenga razón, porque nada bueno podría sacar de algo tan plástico como tu – expreso Dipper.

Pacífica se había hartado, agarro a Dipper por la cabeza para luego besarlo, el castaño por su parte agarro el cuerpo de su amante y con ternura se puso a explorarlo; luego de aquel beso el joven le pregunto: ¿Quiere ir a otro lugar?

–Por supuesto – contesto Pacífica tiernamente; – ¡ten mis bolsas! – agrego está entregándole sus compras.

–Debí saberlo – replico Dipper.

–Tranquilo Dipper, valdrá la pena que lleves mis compras – dijo Pacífica con un tono seductor.

Dipper se hizo una idea de lo que habían dentro de aquella bolsa, pero tampoco quería sacar conjeturas tan rápido, entonces aquel castaño ya se encontraba listo para seguir a la "reina del drama", mientras que susodicha reina se zafó del agarre del "rey de los nerds", ambos jóvenes se encaminaron hacia él este en búsqueda de su lugar favorito el motel G-fall.

El motel G-fall, era un lugar de mala muerte, su servicio era pobre y su categoría podría decirse que ni siquiera llegaba a la de una estrella, pero para aquellos jóvenes se había convertido en su nido de amor. Al llegar a su recibidor Dipper saco de su cartera un billete de 50 dólares y se lo dio a la chica de la recepción para continuar con su rumbo; la recepcionista mascando chicle agarra el billete para guardado en la caja registradora, para posteriormente anotar el abono de sus clientes habituales.

Al llegar a la habitación Dipper saca de su bolsillo la llave y rápidamente entran para dejar la bolsa en la cama, mientras la rubia lo veía seductoramente y ahí le pregunta: ¿Desde cuándo no lo hacemos?

–Cinco o seis días, —contesto— me estoy volviendo loco – añadió.

–¡Pero, tanto que te quejas de plástico y no puedes vivir sin él! –

–¡Oh vamos Paz! Tú sabes que todo aquello era parte del juego – expreso Dipper volteándose para ver a Pacífica semi-desnuda.

El pulso de Dipper se elevó al ver a Pacífica usando lencería tan atrevida y digna de una pasarela de Victoria Secrect, y hasta por un minuto se preguntó si aquel espejismo era real, no fue hasta que Pacífica le dijo: ¿Aun crees que esto sea de plástico?, ¡¿Oh tendré que desmostártelo otra vez?!

El joven castaño se quedó inerte, no sabía cómo actuar en aquel momento; una parte quería estrenar esa lencería tan atrevida y sexy en la suavidad de la cama, pero otra parte quería seguir el juego de su amada y a veces odiaba novia. Dipper tuvo que elegir la segunda, ya que de toda manera la segunda lo llevaría a la primera, entonces como pudo se puso serio y le contesto: Si, aun creo que eres plástica.

–Pues te demostrare que yo no soy de plástico – respondió Pacífica.

Pacífica se acercó a él bailando eróticamente y cuando llego a esta a unos centímetros, aquella fémina se dio cuenta que un invitado más estaba disfrutando del espectáculo, y allí dijo: ¡Veo que tu amigo opina todo lo contrario! Dipper se vio la entrepierna y se dio cuenta que su órgano viril estaba reto y listo para empezar la acción, pero, aunque tuviese tantas ganas, este quería seguir con su juego, y astutamente dijo: Es una reacción natural, no puedo controlarlo. La rubia siguió bailando eróticamente y poco a poco acerco su cuerpo semi-desnudo hacia el castaño y lo único que faltaba era que este cediera, ahí nuevamente volvió a poner sus pechos cubierto por aquel corsé azul turquesa encima del torso de inmutable caballero y le pregunto: ¿Aun crees que soy de plástico?

–Si – respondió Dipper con voz entre cortada.

La chica detuvo su baile para encimársele a su chico y volver a preguntar, esta vez con una voz más suave y más delicada: ¿Aun crees que soy de plástico? Dipper no quería caer tan fácilmente ante la tentación que le estaba ofreciendo su novia y nuevamente le contesta: Si.

Aquel si, ensimismado y ahogado, dejo ver a Pacífica que Dipper estaba listo para el siguiente nivel; entonces, ella quien había ido a fiestas latinas, puso en práctica un baile que para su gusto le parecía demasiado vulgar, pero en esa situación lo tenía que poner en práctica para así terminar de atraer a su novio, entonces se dio vuelta y agitando sus nalgas contra la pelvis de chico, le pregunto: ¿Crees que esto sea de plástico?

–S-s-s-s-sa —balbuceo Dipper— no – contesto este agarrando las caderas de la rubia.

El gimoteo de Pacífica fue leve y espontaneo, mientras Dipper recorría con sus manos la escultura cadera de su novia, mientras esta respiraba agitadamente y ahogaba cada indicativo de placer; quizás para indícale a este que aun debía quitarse la ropa. Dipper intuyendo aquello fue quitándose todas sus prendas de vestir, Pacífica pudo ver hacia atrás y noto con ello que no solo su novio la deseaba, sino que también quería hacerle lo insano, porque antes de dejar su pantaloncillo de mezclilla tirado en el piso, saco de su bolsillo un condón y tan rápido lo tuvo en su mano procedió ponérselo.

Finalmente, puesto el preservativo en su lugar, Dipper estaba más que listo para penetra a su dama, y para su sorpresa encontró que esta se estaba masturbado con sus dedos para luego decir: ¡Necesito a mi rey! El castaño sonrió maléficamente y le pregunto: ¿Cuánto me necesita?

–Mas -¡ah!- de lo -¡oh!- que tu -¡uh!- crees – expreso Pacífica con dificultad mientras se masturbaba.

–Entonces te esperara un momento más, mientras disfruto de tu amiga – determino Dipper quitando la mano de su pareja, la cual entraba y salía de su órgano reproductor sin antes quitarle sus bragas, y acto seguido comenzó a lamerla hasta incluso chuparla.

La boca de Dipper mojaba de saliva los labios mayores de la vagina de su compañera, mientras su lengua entraba por los labios mayores hacia el vestíbulo, lo cual enloquecía a su mujer, y más cuando su lengua rosaba su clítoris; el castaño también añadía masaje suave y delicado al monte venus de su amante para hacerla relajar y evitar que su lengua se quedara atrapada dentro de la paredes vaginales de su novia, aunque también hacia aquello para darle más placer a ese punto débil de ella, ese olvidado por su lengua. Pacífica gemía y gritaba el nombre de su novio, esta deseaba con cada lengüetazo dentro de su ser, que finalmente la penetrara, no fue hasta que por fin pudo gritar: ¡DIPPER YA CÓGEME! El castaño adoraba el sabor de la vagina de su novia, pero sabía que ya era hora de darle su premio mayor. Este separo su boca de la vagina de pacifica, se incorporó hasta que lentamente fue metiendo su órgano viril hasta la base y allí fue que el comenzó su embestida.

El sonido de sus órganos uniéndose en uno solo lo alentaba a seguir adelante, y mientras Dipper penetraba a su novia este iba quitando el corsé azul turquesa para finalmente dejar a descubiertas las amigas de Pacífica, y al hacerlo este dijo con voz excitada: Mamá las dejo mucho tiempo enceradas. Obviamente aquellos órganos femeninos no le iban a responder, pero el hecho de esta libre de su prisión de tela le daba libertad al castaño para agárralas y estrujarlas como le viniese en gana.

La rubia gemía y gimoteaba con cada embestida del pene de su novio, mientas las manos de este se obsesionaba por sus senos; aquella chica no paraba de decir: "llena mis adentros" y "no pares, ¡sigue!" Ambos estaban llenos de tanta excitación de la cual no podía escapar, sus órganos se fundían en uno solo y la sensación de esta lleno abarcaban sus cuerpos.

Las manos de Dipper dejaron de juguetear con los senos de Pacífica para así comenzar un lento y majestuoso recorrido por el cuerpo de aquella chica albina, por su parte Pacífica agarraba sus nalgas para recibir las embestidas de la pelvis del caucásico, mientras aun gemía en voz alta el nombre de su amado; la voz de ella emitiendo eso: ¡ah! ¡oh! Estaban tan cargados de lascivia que era imposible no escucharla, y cuando el pene de castaño llegaba a eso lugares tan recónditos de su vagina, eso la hacía temblar y más cuando su amado recorría su cuerpo con sus suaves manos. Las yemas de los dedos de Dipper recorría el escultural dorso de su pareja, la sensación para él era como estar en un pasto suave y delicado, y el aroma que esta expedía le recordaba al castaño que eso lugares era completamente suyos y de nadie más; por su lado el muy leve olor varonil del castaño le recordaba a la rubia que él estaba ahí para hacerla suya y de ninguna otra, las manos de caucásico había llegado a las caderas de Pacífica en donde se quedaron aprisionada para ayudarlo a embestir con más fuerza las nalgas de la fémina encontraba de su ingle.

¡Oh si Dipper! – exclamo la rubia luego de tanto "oh" y "ah"; –Dame más fuerte – pidió esta.

Dipper obedeció a su novia, sabiendo que se aproximada el momento del clímax, este sabía que en cualquier momento su mano derecha iría hacer el trabajo de hacer que aquella fémina tuviese su tan esperado orgasmo y así terminar su aguante. Él había descubierto hace tiempo atrás como hacer que su querida novia tuviese su éxtasis final, pero él debía esperar a que el acto sexual se terminara, él sabía que estaba lidiando con una ninfómana, pero si ella lo era él podía serlo también, Dipper hacía tiempo también descubrió el secreto para mantenerse reto para su novia, y él en ocasiones lo había utilizado para seguirle el ritmo a su amada, y aquella no era la excepción.

El miembro viril salía y entraba a toda velocidad de la vagina de la chica y con cada penetración ella gritaba: "DAME MAS FUERTE" hasta incluso la oía decir: "ve hasta el fondo". Cosa que el joven seguía al pie de la letra, no fue hasta que la chica finalmente dejo su excitación y le dijo: ¡Cambiemos de posición!

–Pensé que nunca lo ibas a pedir – expreso Dipper con voz excitada y de cansancio.

–Pues ahora lo exijo – proclamo Pacífica.

–¡Como lo ordene, su majestad! – replico este.

El castaño la soltó de su agarre y esta se acomodó en posición horizontal, ya Dipper se estaba imaginando la pose que iban hacer, pero cuando Dipper iba a levantar la pierna de su amada, esta lo detuvo con su pie y le dijo: Antes tienes que quitar esa cosa. Dipper se extrañó al principio, él tanto como ella había acordado tener relaciones sexuales con protección para así evitar un embarazo, pero ahora su novia y prometida le pedía a él que se deshiciera de aquel plástico que los separaba, así que con delicadeza pregunto: ¿Por qué?

–Dipper, guapo de mi vida —expreso ella tiernamente— quiero sentirte completamente al natural —añadió— deseo, –pidió– deseo que me rellene con tu carga de semental, deseo que liberes dentro de mi toda tu virilidad – termino su petición.

–¿Esta segura? – pregunto Dipper.

–Completamente – contesto Pacífica.

Dipper quería seguir preguntando cosa, pero dejo el tema fuera de discusión, así que tan rápido como pudo se quitó el condón para dejar su miembro viril completamente desnudo, ahora este podía disfruta de su acto, aunque él sabía que aquello lo llevaría a ser padre, pero este no se preocupaba por eso porque si futuro estaba más que garantizado. Fue entonces que el castaño reanudo el acto el cual fue concedido por su amante y tan rápido tuvo su objetivo entre sus ojos, este fue por él. El pene de Dipper reingreso a la vagina de Pacífica con la única diferencia que este ya no estaba cubierto por ninguna membrana plástica, ahora el órgano del castaño al natural, y con ello podía sentir como la rubia se podía húmeda solo para él.

La pose del (...) los llevaba hasta limite, pero ninguno quería ceder, así es que Dipper tuvo que utilizar la gran técnica secreta para que Pacífica tuviese su orgasmo, fue entonces que este llevo el dedo menique a la boca para mojarlo de saliva y con aquel dedo posicionarlo encima de clítoris de la chica, entonces el joven con agilidad lo movió de izquierda a derecha y viceversa hasta que posteriormente lo hundiera como si fuera un boto, aquello hizo gritar a la chica quien inmediatamente coloco su mano izquierda sobre la nuca de su amado e inmediatamente jalar su cabello para que ambos tuviese su tan preciado orgasmo; ellos dejaron que sus órganos se fundiera en un solo, tras aquel agite, su respiración era agitada y irregular, pero se debía al gran trabajo de cardio, mientras que por su parte Dipper recorría con su manos la piel de la rubia albina, ahí está dice: ¿Me extrañaste?

–Como no hacerlo – respondió Dipper con voz de complacencia total.

–Yo sé que no puedes vivir sin mí, mi rey – comento Pacífica atrayendo a Dipper hacia ella para darle un beso en la boca.

Dipper correspondió al gesto, aunque tímidamente, y al terminar el beso, él dijo: ¡Paz, creo que no deberíamos seguir jugando así!

–¿Por qué? – pregunto Pacífica.

–Tengo miedo de que algún día digamos algo que no nos guste y no queramos hacerlo más – explico este.

–Dip, no te preocupes por ello —replico Pacífica— nosotros somos adulto y sabíamos en lo que nos metíamos, por ello te dijo que no te preocupes que por mí no hay problema – explico ella.

–¡Plastifica hablando inteligentemente! ¿Quién eres y que le hiciste a Plastifica? – bromeo Dipper con ese tono sensual que hacía vibra a Pacífica.

–¡Oh nada!, ella sigue aquí Diptonto, aunque ya te demostré que no soy de plástico – contesto Pacífica siguiéndole el juego.

–Creo que necesitare otra ronda —apunto— creo que me quedaron dudas – añadió.

–¡Pues te quitare esas dudas!, y hare que solo te queden certeza —replico— ¿aunque crees que tu compañero resista? – se cuestionó.

–Nena, él y yo resistiríamos hasta los ataques terrorista más fuerte, ¡oh necesitamos probártelo! – respondió.

–¡Pues, aun no tengo completa pruebas y aún tengo mis dudas! – comento.

–¡Con que sí, he! —proclamo el castaño sarcásticamente— pues yo te daré la prueba y te quitare las dudas – añadió el, parándose de encima de Pacífica, para inicia nuevamente otra ronda.

–¡Pues adelante! – indico Pacífica con voz excitada y agarrando la espalda de Dipper para dar comienzo a otra ronda de sexo, aunque ya ellos estaban más que acostumbrado.

–¡Oh Dipper te demostrare que no soy de plástico! – vaticino Pacífica antes de comenzar el acto, sabiendo que ambos se perderían en la pasión más recalcitrante de todas, pero por algo eran novios.

—Fin de la historia—

Seguro dirán: ¡Espera no hay más! A lo cual responderé: Si, pero lo estoy guardando para la semana aniversario número ocho. Me gusto esta historia más la imagen que la acompaña, creo que describe al 100%, por lo cual me dio las alas para continuar y no perder esta historia, aún tengo que mejorar mi escritura caliente, pero creo que eso es lo de menos, ahora que estoy escribiendo por gusto y no por obligación, me salen más las historias.

Si te gusto la historia, hazme saber en los comentarios, y también hazme saber qué es lo que tengo que mejorar para poder seguir sacando material de calidad. Si esta historia reúne las cien estrellas en wattpad hare secuela de esta misma con el título: Yo no soy de plástico X2¸ ahora si esta historia reúne las doscientas estrellas en wattpad, hare esa historia + Lo que importa es la resistencia; y si llega aún más alto como quinientas estrellas, hare esas dos historias + Amantes Clandestino. ¡Uff! Esto se va poner buen.

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