Prólogo, Antes del infierno

Recuerdo que estaba sentado en un parque, luego que me ahogaba en un río de agua morada arrastrado hacia las profundidades de la corriente en donde me desmayé, finalmente desperté flotando sobre un gigantesco lago, observado la magnitud del cosmos y lo pequeño que yo era.

Aun así, sentí paz, pero no me gustó.

Comencé a patalear hacia un rumbo desconocido, enojado y frustrado por esta desdichada suerte. En mi camino me crucé con otros seres, demonios y monstruos de pesadilla, pero no me detuve y seguí nadando hasta finalmente llegar a una orilla de una pequeña isla.

Tome un poco de aire y levanté la mirada, y me di cuenta de que a mi alrededor no había nada más que un infinito océanos, en donde los mismos demonios que me acompañaban morían ahogados y arrastrados hacia las profundidades.

Fue entonces que me di cuenta de que estaba muerto, recordé el incidente del niño y mi muerte por aplastamiento. Había muerto, pero de alguna forma seguía vivo y consciente, con mucha hambre, cansado de nadar y una fuerte frustración.

"Y a sí, mi hermano, fue como logré despertar en este mundo. Curiosos no crees"

"Un poco, pero eso qué tiene que ver conmigo, me trajiste a esta isla solo para contarme tu historia"

"O claro que no, solo te traje para abandonarte aquí mientras yo tomo el control de nuestro cuerpo para cometer a la aldea"

"¡Que! ¡De qué hablas Sombra! ¡Qué hiciste!"

"Tranquilo, cuando haya sometido a la aldea, te regresará el control y tendrás todo lo que siempre hemos querido. Poder, control y todas las taimanins que queramos para coger"

"Monstruo, así no funcionan las cosas. Si hacemos esto nuestra reputación y posición caerán en picada, dejaremos de ser el héroe para ser el villano, todos nos odiarán y nadie nos respeta. Hay que planear bien las cosas, tomarnos nuestro tiempo y planificar"

"Bla bla bla, no sabes decir otra cosa. Piensas mucho, pero actuamos poco, pero no importa. Tú solo descansa, que yo me encargaré de todo a partir de ahora y ni piensas en escapar porque no hay forma de que…"

Un corte parecido en mi pecho me desgarró, abriendo una grieta hacia el mundo humano.

"Mierda, esas Taimanin resultaron ser más fuerte de lo que supuse"

"Adiós Sombra, es ahora de recuperar mi cuerpo"

"¿Qué? Espera, no…"

Al cruzar la grita mi otro yo logro recuperar el control de nuestro cuerpo. Usando nuestra conexión pude ver a través de sus ojos. El agujero oscuro se había vuelto inestable y si no se cerraba absorberá todo hacia el mundo demoníaco.

"¡Alto! ¡No se me acerquen!" Grito Hito. "¡El agujero sigue siendo inestable, si dan un paso más serán absorbidos!"

No sé cómo lograron dañarme sin dañar el cuerpo humano de Hito, pero sabía que esa maldita hada y es Asagi tenían que ver con esto. Si logro tomar el control una vez más… me las pagarás.

En ese momento el tiempo y el espacio se detuvo, incluso el flujo del océano de mi isla se detuvo, apareciendo dos figuras divinas al frente de nosotros. Pude reconocer a una de ella, era Elsa, pero la hora no sabía quién era, aunque desprende la misma aura divina.

"Bienvenido, elegido" dijo Elsa. "Yo soy Elsa, la diosa del tiempo y el espacio"

"Y yo Ana" dijo la otra diosa "La diosa del espacio y el tiempo"

"Y que eso no es la misma cosa" dijimos los dos.

"No, no claro que no, impertinente. Bien, continuemos"

"Han sido elegidos y enviados a otro mundo para cumplir la misión de los dioses"

"Su camino estará lleno de peligro y desafíos"

"Pero como diosas bondadosas que somos les entregaremos un regalo"

"Con el que podrán cumplir su misión con éxito"

"Y no morir en el camino"

"Llegó el momento, elegido" dijeron en coro "Es hora de elegir un camino"

"o_o"

">_<"< p>

-_-

"Eh… Elsa, ¿qué significa esto?"

Elsa dio un suspiro. "Lo siento, amo, pero mi hermana nos descubrió. Ella es un poco estricta y protocolar, me obligó a realizar esta presentación para que este mundo no sea destruido"

"¿Destruido?"

"Sí, pero no te preocupes, eso ya se solucionó. No es así, hermana"

"... sí…, pero solo por esta vez. Mortal, como ya se realizaron la presentación protocolares, puedes regresar con tu misión, pero antes debes escoger un regalo"

"Oh, no te preocupes hermana. El regalo soy yo"

"O_o"

"Me refiero a que como no pidió nada, yo me ofrecí a acompañarlo como su asistente"

"Así… ¿Y por qué le dices, amo?"

"Este… bueno…"

"Sabes que, no quiero saberlo" Ana miró a Hito "Como dicta el protocolo debes escoger un regalo, si no escoges nada se te otorgará uno de forma alzar. ¿Entendiste?"

"Sí"

"Perfecto, ¿qué quieres como regalo?"

"Te quiero a ti"

"Muy bien, solo tengo que… Espera, ¿qué dijiste?"

"Te quiero a ti Ana, al igual que a Elsa, quiero que me ayudes a cumplir mi misión"

"Je, lo siento mortal, pero eso no se podrá…"

"Ya lo hice" dijo Elsa mientras sostenía una tableta. "El registro ha sido aceptado, oficialmente ya eres la esclava de mi amo"

"¡Que está haciendo pequeña ingrata! ¡Dame mi tableta!"

"Toma, pero ya no puedes hacer nada. Mira, es el sello de nuestro jefe"

"Maldita sea… otra vez trabajo de campo"

"Sí, será divertido hermana"

"Divertido será ahogarse en Tártaro cuando regresemos" Ana miró a Hito "Bien mortal te ayudaré, pero ni pienses que te llamaré amo"

"Con que me ayudes y me ofrezca tu absoluta lealtad me basta"

"... no me das mucha confianza… Hito, pero qué más puedo hacer. Es hora de enviarte al mundo demoniaco"

"¡Que! ¡No! ¡Por qué!"

"Ese agujero oscuro está destruyendo la aldea, si no lo cierras, todo quedará destruido"

"Pero… no ah otra forma de cerrar el agujero"

"Sí, desintegrar tu cuerpo o partirte en dos, y hablamos de forma literal"

"Oh, bueno… si no hay otra alternativa lo haré"

"Bien, que esta sea una nueva etapa en tu vida mortal. Y estoy hablando por los dos"

"¿Dos?"

"Se refiere a mí, Hermano"

"¿Sombras?"

"Sí, hola, nuestro viaje aún no ha terminado y en el mundo demoníaco ten por seguro que vas a necesitar"

"Es probable demonio, pero no un hecho"

"Ja, ya lo veremos… hermano"

Si bien Hito no me odia, tampoco me aprecia como a mí me gustaría, pero seré paciente con él y esperaré el momento en que pierda el control.

"Elsa" dijo Ana "Esto es obra tuya"

"Creo que si"

"Realmente eres un caso perdido, pero qué más da. Dame la mano"

Ambas diosas se elevaron y juntas usaron sus poderes para regresar el tiempo y el espacio a su estado natural.

El agujero comenzó a absorber todo, todas las Taimanin presentes intentaron acercarse, pero Hito le volvió a gritar para que no se acercaran. En sus últimos momentos Hito miro a sus amigos y compañeros y les dijo.

"Gracias por todo, no se preocupen por mí. Regresaré, yo siempre regreso"

Dicho esto Hito saltó al agujero hasta desaparecer, luego el agujero colapsó y comenzó a encogerse hasta desaparecer. Para la desgracia de todos los presentes, sus amigos y compañero de armas Hito del clan Tetsuteku desapareció entre la oscuridad. Todos guardaron silencio y los más cercanos dejaron brotar una lágrima por la pérdida de su amigo.