Este es Mason Mo

Después de escuchar las palabras de su gerente, Luna se negó a aceptar su destino; estaba enojada y sintiéndose agraviada. Por eso, la almohada en sus manos quedó doblada al igual que la expresión en su rostro.

—¡Lila sí que tiene suerte! —Luna soltó una carcajada incrédula—. Luego se dirigió a su gerente y pidió:

—Ayúdame a hacer una última cosa. Haz lo que puedas para conseguir el número de teléfono de Lila.

—Luna, ¿cuál es el punto?

Una sonrisa amarga apareció en la cara de Luna. Oceans Entertainment ya la había empujado hasta este punto y nadie de su agencia se preocupaba por su supervivencia, ¿qué otra opción le quedaba?

—Contacta a los medios. Voy a anunciar que me retiro de la industria del modelaje.

—No, no puedes Luna. No fue fácil llegar a donde estás hoy.

—Entonces dime, ¿tengo otro camino a seguir? —Luna giró la cabeza para preguntarle a su gerente—. La Lila que tenía a Mason era una persona que nunca podría superar.