Cap 72: Cazafantasmas (2)

Miré el extraño techo y pensé para mis adentros: "Puesto que lo último que vi antes de perder el conocimiento fue el típico cielo sombrío de la ciudad, esto debe de ser una tienda provisional hecha para los pacientes. Debe de haber muchos otros heridos además de mí.

De hecho, cuando miré a un lado, pude ver muchas camas alineadas unas junto a otras. Comprendí naturalmente la situación. Una quietud ocupaba la tienda. La mayoría de las camas utilizables estaban vacías.

Eso significaba que debía de haber pasado bastante tiempo.

Así que mi tarea estaba decidida. Primero, tenía que comprobar cuánto tiempo había pasado. Mientras intentaba levantar el cuerpo lentamente para no sobresaltar mis músculos, sentí una extraña pesadez en el abdomen. En cuanto me di cuenta de lo que era, solté una risita.

Me preguntaba adónde habías ido...

Missha dormía sobre mi estómago, emitiendo su característico y sonoro ronquido. Por un lado, era encomiable que se hubiera encargado de cuidarme, pero por otro me parecía inútil.

Bueno, también debía de estar cansada.

Elisa, la sacerdotisa de Karui. Ser abandonada en el Bosque de las Brujas. La persecución del Señor del Caos, Riakis. No era difícil entenderlo cuando pensaba en lo que habíamos pasado.

"Missha, despierta." Ahora mismo, mi curiosidad era lo primero, así que sacudí a Missha para que despertara sin dudarlo.

"¿Hm? Mm... ¡B-Bjorn! ¡Estás despierta! ¿Cómo está tu cuerpo? ¿Está bien?"

"Como puedes ver, todo está bien". El tobillo izquierdo dañado se movía bien y el brazo desgarrado había recuperado su estado original. En ese sentido, mi primera pregunta fue: "¿Usaste una poción avanzada?".

"No, vino un sacerdote y te trató".

"¿Y el coste?"

"No te preocupes. El gremio proporcionó ayuda para catástrofes, así que no fue tanto...".

En realidad, sus palabras me preocuparon más. "¿Y cuánto?"

"...300.000 piedras."

"Ya veo." Uf, seguía siendo más barato que una poción avanzada. Me preocupé cuando mencionó a un sacerdote, pero por suerte, parecía que la subvención del gremio era bastante generosa. "¿Por qué pones esa cara? Lo hiciste bien".

"Pero a Bjorn le gusta el dinero..."

Bueno, sí, pero... Espera, ¿es así como piensa de mí?

"Aun así, el dinero no puede ser más importante que mi cuerpo, ¿verdad?"

No se trataba sólo de restaurar carne aplastada o de unir secciones cortadas, sino de regenerar un brazo desgarrado hasta los huesos, un brazo que había quedado atrás en el laberinto.

La regeneración natural habría sido imposible.

Borré todos mis remordimientos. Durante los pasados experimentos con Raven, tardó muchísimo tiempo en volver a crecer incluso un dedo amputado.

De todos modos, la segunda pregunta. "¿Cuánto tiempo ha pasado desde que salimos del laberinto?"

"Unas seis horas."

Hmm, no me extraña que todavía hubiera luz fuera de la tienda. Así que no había perdido un día entero. "¿Las mochilas?"

"Están bien. Y todo lo de dentro también".

"¿Las piedras de maná?"

"Convertí las tuyas y las mías en dinero."

"¿Vino alguien a verme mientras estaba desmayado?"

"¡Ah, Hikurod y los otros vinieron!"

"... ¿El enano lo hizo?"

Cuando ladeé la cabeza, Missha me explicó todo lo que había ocurrido. Resumiendo, Hikurod y los demás vinieron unas cinco horas antes por si acaso nos encontrábamos aquí y nos reuníamos con Missha.

"Me alegro de que los tres estén bien. ¿Y dónde fueron?"

"Después de confirmar que estábamos vivos, dijeron que estaban cansados y se fueron a descansar".

"Ya veo." Eso no me entristeció. Yo habría hecho lo mismo. No era como si fuera a despertarme más rápido sólo porque ellos estaban aquí. Podríamos discutir todo lo que nos perdimos en la reunión prometida dentro de dos días. "Entonces, ¿qué tengo que hacer para salir de aquí?".

"Sólo tienes que empacar tus cosas e irte. Ya me he encargado de todas las cosas problemáticas".

"Ya veo."

Cuando estaba a punto de retirar la manta y marcharme, Missha me detuvo apresuradamente. "¡Espera, no te levantes! P-ponte esto primero..."

No hizo falta más explicación. "Oh..." Mientras Missha me daba la espalda y miraba a otra parte, me puse un nuevo conjunto de ropa que estaba doblado sobre la mesa. No esperaba que preparara la ropa con antelación. Podía parecer torpe, pero supongo que también tenía un lado delicado.

"¿Te queda bien?"

"Me queda bien". Para ser sincero, era un poco pequeño, pero encontrar ropa que me quedara bien en la ciudad era difícil en primer lugar. De todos modos, cuando salimos de la tienda, el sol se estaba poniendo. "Missha, ¿dónde te alojas?"

"Distrito 8."

"Entonces podemos ir juntos".

Nos dirigíamos a nuestras posadas, que estaban en la misma dirección, cuando me di cuenta del contraste entre nuestro aspecto y el de los demás. La gente en las calles vestía ropas limpias y cotidianas en lugar de armaduras pesadas y duras.

"Bjorn, ¿qué estás mirando? Vamos, estoy super cansado".

Después de caminar unos 30 minutos por las calles limpias, llegamos a mi alojamiento. La posada de Missha estaba a unos diez minutos más. "Está más cerca de lo que pensaba".

"¿Verdad? ¿Por qué no lo supe antes?"

"De todos modos, ya puedes irte. Tú también debes estar cansado. Gracias por lo de hoy."

"¡Es-espera!" Cuando estaba a punto de entrar en la posada después de despedirme, Missha me agarró de la muñeca.

"¿Hay algo más que necesite saber ahora mismo?".

"No, pero..." Entonces, ¿qué? Cuando la miré como diciéndole que escupiera, Missha sonrió y me soltó la muñeca. " No importa. Sólo vas a decirme que deje de repetir lo mismo una y otra vez".

"¿Lo mismo?"

"¡Entonces nos vemos mañana!" Antes de que pudiera preguntar qué quería decir, Missha desapareció.

"¿Mañana?" ¿No habíamos decidido reunirnos pasado mañana? La última frase era un poco dudosa, pero no me molesté en preguntar qué significaba, así que entré rápidamente en la posada. Después de lavarme un poco, comí algo rápido en el primer piso.

Como siempre, sólo cuando me tumbé en la cama me di cuenta.

Así que esta vez también volví.

Volví vivo.

Joder.

***

Mediodía del día siguiente.

Me desperté con el sonido de golpes en la puerta. Quería ignorarlo, pero esa persona era demasiado persistente.

"... ¿Missha?"

"Sabía que estarías durmiendo."

"¿Por qué estás aquí? Quedamos en vernos mañana por la noche".

Missha sonrió ante mi enfado y abrió su saco sobre la mesa. Cuando miré, estaba lleno de comida. "Ven, siéntate rápido. Si no comes entre horas, es malo para tu cuerpo".

Los bárbaros no tenían ese tipo de problemas. Cuando la miré como si eso fuera absurdo, Missha acabó arrastrándome del brazo.

"Sólo ven. Puedes volver a dormir despuésss de comer".

Saltarse una o dos comidas no era el fin del mundo, pero obedecí por su sinceridad. El menú era verduras salteadas y carne a la parrilla con huevos.

"¿Cómo está?"

"...Está bueno. ¿Lo has hecho tú?"

"Por supuesto, ¿quién vendería algo así?"

Puedes decir que sí.

No tenía ni idea de que también sabía cocinar.

"Al principio cocinaba más para ahorrar algo de dinero, pero ahora lo sigo haciendo porque es divertido".

"Mm, ¿pero no te alojas en una posada?".

"Ah, sí, pero acabé haciéndome a-a-amiga del chef, así que me dejan usar la cocina de vez en cuando".

"Ya veo.

"Si tienes oportunidad más adelante, deberías intentarlo. Puedes ahorrar mucho más dinero del que crees, lo cual es bueno".

¿Cocinero? No deberías decirle cosas así a un bárbaro. ¿O tal vez ella no sabía mucho acerca de los bárbaros? "Cocinar es la vergüenza de un guerrero."

"¿Es así?" Cuando asentí con firmeza, Missha hizo una sugerencia con cautela. "Bueno, entonces, puedo hacerlo por ti..."

¿Qué estaba diciendo? "Está bien. ¿Por qué ibas a hacerlo? Puedo comprar mi propia comida".

"Cierto."

"Por cierto, ¿cómo sabías el número de mi habitación? No recuerdo habértelo dicho".

"¿Ah, eso? Cuando pregunté al posadero dónde se alojaba el bárbaro, me lo dijeron sin más."

"...Ya veo."

Después, charlamos y nos llevamos la comida a la boca, y el cuenco se vació enseguida.

"Entonces, ¿qué vas a hacer? ¿Vas a dormir un poco más?".

Reflexioné un rato y contesté: "Ahora que estoy despierto, pienso visitar el distrito comercial". En principio, iba a dormir hasta mañana, pero, aunque volviera a acostarme, no creía que fuera capaz de conciliar el sueño. Era una especie de trastorno obsesivo compulsivo. A menos que sintiera que iba a desplomarme de agotamiento de inmediato, no podía permitirme procrastinar y tomarme un descanso. "Es mejor así. Missha, ven conmigo".

"¿Eh? ¿Yo también? Iba a volver y dormir un poco más..." Missha interrumpió sus palabras con cara de sorpresa.

En mi experiencia, era necesario salir con fuerza en tales situaciones. "Fuiste tú quien me despertó. Asume la responsabilidad".

"Hnng, vale. Tengo que rrreparar mi equipo de todos modos..."

Ni siquiera pienses en huir.

***

En primer lugar, el equipo adquirido fue completamente eliminado. El dinero no era tan sabroso como esperaba, ya que antes había pagado al Dzarwi una cuota de protección de 2 millones de piedras por el equipo.

Con esto, el dinero del grupo de Hans tendrá que dividirse en cinco...

Aun así, después de vender el equipo y varios consumibles de los tres fanáticos religiosos, resultó ser un ingreso bastante considerable, sobre todo porque uno de esos tres poseía una mochila extensible. Esto también significaba que había más que pagar.

"... ¿La reparación cuesta 500.000 piedras?"

"Está hecho de lithinum. La corrosión es demasiado severa, así que no hay otra opción".

Pero, aun así, ¿cómo podía costar 500.000 piedras reparar un equipo que valía cuatro millones? ¿Este tipo estaba tratando de engañarme?

"Bjorn, no lo fuerces. No es que esté mal..." Me dejó un sabor amargo, pero al ver que Missha, una exploradora con cinco años de experiencia, decía eso, supuse que no era un precio escandaloso, así que lo pagué sin más.

... ¿Cuánto oro he perdido, entonces?

Todos los jugadores locos por la eficiencia temían perder oro. Conté uno por uno.

Dejé la maza en el laberinto junto con un brazo, y usé una poción avanzada por el camino, pagué 300.000 piedras por el tratamiento, y 500.000 piedras por las reparaciones...

Cuanto más lo pensaba, más me dolía. Si no hubiera tenido que pagar la friolera de dos millones de piedras en equipo por la cuota de protección, todo este dinero no habría sido nada.

"Bjorn, no te preocupes. Ganaré mucho más dinero en el futuro..."

Sí, pensemos en positivo. De hecho, el segundo mayor ingreso de esta expedición sería ella. Por supuesto, el primero fue la Esencia de Héroe Orco.

Conseguí muchos consumibles como pociones, así que en realidad no tengo mucho dinero para gastar después.

"Bjorn, ¿qué estás haciendo? ¿No vas a entrar?"

Terminé los cálculos y entré en la posada con Missha. No era mía ni de Missha, sino una posada situada en el distrito comercial de Kommelby.

"¿Quién iba a pensar que los carruajes dejarían de circular tan temprano?"

"Por eso dije que debíamos movernos rápido", regañó.

"Vale, deja de dar la lata".

Al entrar en la posada, pedí dos habitaciones en el mostrador, y Missha me dio una palmada en la espalda. "¡¿Estás loca?! ¿Sabes cuánto cuesta una habitación al día? Coge sólo una".

"... ¿Sólo una?" ¿No solía ser al revés?

"¿Crees que estamos en Ravigion? ¡Este tipo de posadas tienen cuartooos por 10.000 piedras por noche!"

"Ya veo. Una habitación debería ser suficiente."

Me merecía esa palmada en la espalda. Vinimos a esta posada porque parecía la más barata, pero ¿10.000 piedras por una noche? Los precios eran una locura en el centro de la ciudad. Mis gastos en comida el mes pasado fueron algo más de 20.000 piedras.

Así que por eso me insistía en que me moviera rápido...

Sin embargo, la habitación en sí bien valía el precio. No tenía la forma de la diminuta media habitación en la que me alojaba, sino la estructura de una sala de estar, un dormitorio y un cuarto de baño independiente. Obviamente, tenía una ventana y la sala de estar incluso tenía una pequeña terraza, y había un ligero olor a flores por todas partes.

"¡Bjorn, mira esto! ¡Jabón Artian Studio! ¡Esto es gratiiiis!" Al principio Missha me regañaba por gastar dinero innecesario, antes de descubrir algo y desaparecer en el cuarto de baño. Cuando salió, parecía muy satisfecha. "Bjorn, deberíamos ganar mucho dinero en el futuro".

Me pregunté por qué hacía tanto alboroto, pero cuando me tumbé en la espaciosa cama, no pude evitar darle la razón. "Sí... hagamos mucho dinero". Así es como debería sentirse una cama.

¿Cuándo podré dormir en una cama así todos los días?

Había un largo camino por recorrer. Esta era una ciudad donde coexistían la barbarie y la civilización. ¿Cuántos depredadores y monstruos más tenía que matar para vivir aquí de forma más humana que ahora?

¡Honkkk!

Antes de que pudiera pensar profundamente, mis ojos se cerraron lentamente.

***

En un momento en que la mayoría dormía, los que se compadecían de sí mismos eran tan ruidosos o más que de costumbre.

"Oye, ¿has oído las noticias?"

"¿Estás hablando del Señor del Piso que apareció en el tercer piso?"

"Sí. Dicen que más de 30 Dzarwis murieron por culpa de ese monstruo".

"¿A quién le importan 30? El gremio probablemente lo anunciará mañana, pero se dice que el número total de muertes es de cientos."

"¿Así que el culpable que invocó al señor del suelo aún no ha sido capturado?".

Como explorador, era una noticia intrigante. Sin embargo, además de lo que todos sabían, había una historia que se extendía lentamente y sin que los cotillas se dieran cuenta.

"¿Saben qué? Esto es algo que escuché de uno de los supervivientes... La razón por la que tantos Dzarwi pudieron sobrevivir es aparentemente gracias a una persona."

"¿Está hablando del León de Hierro, subcomandante McGrain?"

"No, he oído que fue un explorador del tercer piso que estaba allí por casualidad".

"Hmm, ¿hay alguien entre los exploradores del tercer piso que pudiera hacer algo así? ¿Cómo se llama?"

"Su nombre es..."

Bjorn, hijo de Yandel. Un bárbaro que entró en el tercer piso después de sólo tres meses. La historia de la increíble valentía que mostró al salvar a tanta gente de la crisis era a veces exacta, y a veces un poco exagerada al difundirse. Sin embargo, cada relato terminaba con una cosa.

"El mago que me contó la historia no dudó en decir esto sobre el bárbaro".

"¿Qué?"

"Puede que no haya logrado la hazaña de un héroe, pero siendo joven, está claro que seguirá sus pasos, y por eso toma prestado el nombre de un héroe que fue más valiente y más grande que nadie...".

Un apodo, un segundo nombre que sólo los exploradores con habilidad y fama podían obtener.

"Será apropiado llamarle Pequeño Balcánico".

Ese apodo siempre acompañaba a los relatos.

***

[𝗧𝘂 𝗿𝗲𝗽𝘂𝘁𝗮𝗰𝗶ó𝗻 𝗵𝗮 𝗮𝘂𝗺𝗲𝗻𝘁𝗮𝗱𝗼 +𝟭.]

[𝗧𝘂 𝗿𝗲𝗽𝘂𝘁𝗮𝗰𝗶ó𝗻 𝗵𝗮 𝗮𝘂𝗺𝗲𝗻𝘁𝗮𝗱𝗼 +𝟭.]

[𝗧𝘂 𝗿𝗲𝗽𝘂𝘁𝗮𝗰𝗶ó𝗻 𝗵𝗮 𝗮𝘂𝗺𝗲𝗻𝘁𝗮𝗱𝗼 +𝟭.]

[𝗧𝘂 𝗿𝗲𝗽𝘂𝘁𝗮𝗰𝗶ó𝗻 𝗵𝗮...]

[𝗔𝗱𝘃𝗲𝗿𝘁𝗲𝗻𝗰𝗶𝗮: 𝗟𝗮 𝗽𝗿𝗼𝗯𝗮𝗯𝗶𝗹𝗶𝗱𝗮𝗱 𝗱𝗲 𝗾𝘂𝗲 𝗼𝗰𝘂𝗿𝗿𝗮𝗻 𝗲𝘃𝗲𝗻𝘁𝗼𝘀 𝗲𝘀𝗽𝗲𝗰𝗶𝗮𝗹𝗲𝘀 𝗵𝗮 𝗮𝘂𝗺𝗲𝗻𝘁𝗮𝗱𝗼].