CAPÍTULO 62.5- Ángel y el fantasma de las hadas.

(Nota del autor: ¡¡Weeeeeyyyyyy!! El arco se está alargando demasiado. XD Y lo malo, es que no puedo hacerlo más pequeño. Creo que faltan unos 10 capítulos más para terminarlo. Se agradecería mucho si me dejan sus opiniones y comentarios, por favor. Escribo más rápido y les entrego capítulos más pronto cuando me doy cuenta de que dejaron comentarios. Por favor, dejen comentarios, se los agradecería muchísimo. Y si dejan una opinión en general de la novela, ufffff, me ayudarían muchísimo para mejorar la novela. Muchas gracias. Y también, por favor, dejen su like en mi página de Facebook "Ángel Pikas" y sígueme en Twitter @HectorAngelAlv2. Muchas gracias.)

La leyenda del héroe Ángel y sus reencarnaciones.

El héroe destinado a sufrir.

Su verdadero nombre no es Ángel, es Jesús, nombre que le pusieron por Jesús, el hijo de Dios, pero siempre ha odiado ese nombre porque odia a Dios y a la religión en general, y prefirió adoptar el nombre de su vecino, Ángel, y aunque es un nombre religioso, no le importa, pues su vecino era un hombre que Ángel admiraba por ser un gran guitarrista y cantante, algo que a Ángel le encantaba: la música.

La primera vida de Ángel fue una mierda en todo sentido, comenzando por la pobreza extrema que enfrentaba su familia, lo que lo obligó a trabajar desde pequeño para poder comer algo, al menos una vez al día.

Nunca fue a la escuela, pues sus padres no lo enviaron porque no querían "desperdiciar" dinero en eso, así que Ángel se mantuvo ignorante por muchos años y nunca aprendió a leer.

Trabajaba 10 horas al día y regresaba a casa, y después de darle el dinero que reunió en el día a su padre, pues él lo obligaba a dárselo, se iba a la casa de su vecino y él le enseñaba a tocar la guitarra.

Su vecino era un chico problemático en todo sentido, se metía con mujeres con esposos y novios, se peleaba seguido con cualquier persona que le resultara molesto, y desperdiciaba su vida teniendo sexo y drogándose. Pero él era muy amable con el pequeño Ángel, pues él sabía por todo lo que pasaba ese pequeño niño, trabajar bajo el sol por horas y solo ganar lo mínimo, ganancia que su padre se lo gastaba en alcohol y cigarrillos. Él al principio solo sentía lástima por el pequeño Ángel, por eso le permitió observarlo mientras tocaba la guitarra o cuando cantaba con su banda, pero con el paso del tiempo vio en él un pequeño hermano, pues Ángel lo admiraba y soñaba con ser como él, alguien que disfruta de su vida.

—¡También quiero disfrutar de la vida como tú!- Fue lo que dijo Ángel, cuando él le preguntó el por qué lo admiraba.

El pequeño Ángel vivía una vida muy mala en general, llena de carencias, violencia, hambre y cansancio, pero cuando él veía tocar a su vecino, veía en él a alguien feliz, alguien que disfrutaba hacer lo que le gusta. Veía en él a alguien que disfrutaba vivir.

Al conocer sus motivos, el vecino decidió enseñarle todo lo que sabe sobre la música a Ángel, le daba comida y lo invitaba a los eventos en donde su banda tocaba. Le pagaba lo mínimo por ayudarlo en los eventos, pero porque sabía que su padre le quitaría el dinero, pero lo recompensaba con comida y hasta le compró una guitarra.

Ángel finalmente sentía felicidad... Al menos cuando estaba con su vecino.

En casa, veía a sus padres ebrios y hasta drogados, y lo golpeaban por cualquier razón estúpida, simplemente para desquitarse con él por cualquier problema que ellos tuvieran.

Su padre no trabajaba, robaba. Era un ladrón... Y un violador. Un asqueroso criminal que disfrutaba violar a sus víctimas después de robarles.

Y su madre era una prostituta barata, que abría las piernas para conseguir drogas.

Ángel odiaba a su familia, pero tenía miedo de escapar, pues sabía perfectamente lo peligroso que su padre era. Tenía miedo de morir.

—¡M-muchas gracias!- Dijo Ángel, cuando un hombre le entregó el hot-dog que compró.

El vecino de Ángel le regaló su primera guitarra, y con esa guitarra tocaba en las calles y esperaba conseguir algo de dinero.

Y cuando le iba muy bien, tomaba algo del dinero y compraba algo de comer en la calle, para tener energía y seguir tocando.

En momentos como ese, cuando todo iba bien, siempre era acompañado con la desgracia.

La razón por la que Ángel odia a Dios y a la religión, es porque odia que Dios lo haga sufrir aunque él nunca haya hecho nada malo. Odia a Dios por darle esa vida y a esa familia... Y odia a Dios por siempre darle sufrimiento cuando él se siente feliz.

—¡N-no! ¡¡Por favor, no lo hagan!!- Gritó Ángel, con los ojos llenos de lágrimas, mientras dos adolescentes destruían su guitarra.

Ellos intentaron robarle el dinero a Ángel, pero como él se negó a dárselos porque sabía que su padre lo golpearía mucho si se enteraba que se dejó robar, ellos le arrebataron la guitarra y la destruyeron ante sus ojos.

Y después de destruirla, ellos le quitaron el dinero y lo golpearon.

Lleno de moretones, sintiendo un gran dolor en todo su cuerpo y con la guitarra destruida en sus manos, llegó a casa, y desafortunadamente, sus padres estaban drogados y ebrios. Al enterarse de que llegó sin dinero, sus padres le dieron una brutal paliza, que casi terminó con su vida.

Ángel pasó días encerrado en su casa, y solo salió cuando sus heridas eran menos visibles.

Sus padres no lo dejaban salir de su habitación por miedo a que él los denuncie con la policía, y tampoco le dieron de comer durante esos días, solo agua. Ángel apenas logró sobrevivir, y cuando salió, lo primero que hizo fue ir a visitar a su vecino, pues escuchó que él preguntó por él y sus padres le dijeron que estaba en casa de un amigo.

Al llegar a su casa, vio una nota en la puerta que decía que estaría de viaje por una semana, y llegaría justo ese día.

Se apresuró y corrió hacia la estación de autobuses, en donde lo esperó por más de 5 horas, hasta que llegó y él alegremente corrió hacia él.

Su vecino se sorprendió al verlo más delgado que antes y con algunos moretones en el cuerpo, pero Ángel se veía tan feliz y emocionado que no le preguntó nada al respecto para no hacerlo sentir triste.

—¡¿Cómo te fue en el viaje?! ¡¿Tocaste en algún concierto?! ¡¿Tienes un vídeo?!

—Yo... ¡Sí, y nos fue increíble! Vamos, en casa te lo mostraré.- Le dijo su vecino, mientras acariciaba la cabeza de Ángel.

Pero, al llegar a su casa, encontraron al padre de Ángel siendo arrestado por sus crimenes, al igual que su madre, que fue arrestada por complicidad.

Ángel fue llevado a un orfanato y nunca más volvió a ver a su vecino. Su vecino intentó adoptarlo, pero por la mala fama que tenía, se lo negaron.

Ángel fue adoptado por una familia cercana a su vecino. Él los convenció de adoptarlo.

Le dieron un hogar y por fin lo enviaron a la escuela... Pero lo peor estaba a punto de suceder.

Ángel estaba muy feliz y emocionado, pues esa noche volvería a ver a su vecino, que no pudo verlo antes porque estaba de gira por el país, pero el dolor regresó a él.

Algunos niños de la escuela lo rodearon y comenzaron a golpearlo. ¿Por qué? Porque uno de ellos era el hijo único que tenía la familia que adoptó a Ángel, y odiaba a Ángel, no quería tenerlo en su casa, pero como no logró convencer a sus padres de regresar a Ángel al orfanato, decidió hacer de su vida un infierno.

—¡P-por favor, detente!- Gritó Ángel, al ver sus cuadernos siendo destruidos.

Lo estaban pateando, mientras un cuarto niño estaba destruyendo los cuadernos y libros de Ángel.

—¡No!

Al verlo lleno de lágrimas y sangre saliendo de su nariz y labios, dejaron de golpearlo, simplemente para darle el golpe final.

Lo estaban orinando en la cara, mientras todos se reían de él.

—¡Hahahahahaha! A la próxima, no vayas de llorón con el profesor.- Dijo uno de ellos.

Una mentira que él dijo porque sabía que sus amigos no lo ayudarían si supieran la verdadera razón detrás de su odio hacia Ángel.

Lleno de tristeza y humillado, Ángel no se atrevió a regresar a casa y solo caminó y caminó, sin ningún rumbo en específico. Solo quería encontrar un lugar en donde pudiera descansar, pero lo inesperado sucedió.

El inicio del verdadero infierno.

—¿Eh?

Un círculo negro apareció debajo de él y unos brazos salieron de ese círculo, brazos que impidieron su escape.

—¡¡Ayuda!!- Gritó desesperado, pero ya era demasiado tarde.

Los brazos lo metieron a la fuerza dentro del círculo y desapareció de ese mundo.

No murió, lamentablemente. Su destino no iba a ser tan bueno con él.

Él fue llevado a otro lugar, un lugar completamente diferente a su mundo. Lo llevó a un oscuro bosque, en donde lo estaban esperando ciertas criaturas humanoides. Demonios.

Al darse cuenta de que él estaba ahí, esos demonios se acercaron a él con intenciones maliciosas. Paralizado por el miedo, Ángel no pudo moverse y cayó al suelo porque toda la energía de su cuerpo se fue por el miedo.

Ángel, asustado, comenzó a gritar de nuevo y los demonios lo capturaron.

Lo llevaron al calabozo de un castillo y el infierno comenzó para él.

Día tras día, Ángel sufría de todo tipo de torturas, tanto sexuales como físicas.

Era penetrado por los demonios sin piedad alguna, violado oralmente, violado por mujeres Súcubos por días completos, le quitaban los dedos a mordidas, los testículos también... Lo dejaban casi muerto y lo mantenían vivo con magia solo para que siguiera sufriendo. Regeneraban las partes del cuerpo que perdía, así que Ángel sufrió lo mismo miles de veces, solo por diversión.

Día tras día, por más de 10 años, sufrió infernales torturas. ¿Por qué? Para crear armas mágicas con los sentimientos negativos que Ángel expulsaba de su cuerpo, como lo es el dolor, la tristeza, la furia, el resentimiento... Era un simple objeto para ellos.

Día tras día, era lo mismo para él, y llegó a un punto en donde no le importaba lo que le hicieran, pues ya se había acostumbrado... Y eso sería lo que condenaría a los demonios para siempre.

A los 20 años, Ángel conoció al ser que cambiaría su vida para siempre. Conocería a Slim, un slime.

—Fufu. Sigues duro, ¿eh? Lo siento, pero tengo algo importante que hacer. Nos vemos mañana.- Dijo una gorda y horrible mujer Slime, mientras se ponía la ropa y Ángel estaba en el suelo, con esa expresión vacía y simplemente no le tomaba importancia lo que le hacían a su cuerpo.

—Tsk. Que asco. ¿No te da asco tener sexo con esa cosa?- Dijo una mujer demonio, mientras veía con asco a Ángel.

—Nah, nuestros cuerpos son muy compatibles. Además, es divertido y placentero. Deberías intentarlo, Sol.

—Tsk. Prefiero morir.

—Oh. Fufu. Lo siento, olvidé que eres una virgen. ¡Hahahahahaha!

—¿Y qué?

—¿En serio seguirás respetando esa tradición de tu familia? Ningún hombre se enamorará de ti por culpa de esa personalidad tuya.

—Tsk. Como sea. Vámonos, los héroes pronto serán invocados.

—Sí, sí, vámonos.

Las dos salieron del calabozo y cerraron la puerta, dejando a Ángel solo... O eso ellas creen.

—Puta gorda de mierda.

Se sentó en el suelo y tomó aire.

—Solo me violas porque ningún hombre tendría sexo contigo por voluntad propia. No te comportes como si fueras valiosa... Ah...

Ángel suspiró y volteó a su izquierda.

—¿Cuánto tiempo seguirás escondido? Ya se fue. Aprovecha y escapa.

Un pequeño Slime salió detrás de un plato vacío y saltó hacia Ángel.

—¡M-muchas gracias por no acusarme! ¡No quiero seguir con ella! ¡Me da asco!- Dijo el Slime, que tenía voz femenina.

—Sí, como sea... ¿Y qué eres de ella?

—¡Soy un Slime! No tengo nombre, pero puedes llamarme como quieras.

—Ya veo... Ah, pensé que ella era un solo Slime, pero ahora creo que son cientos de Slimes compartiendo un cuerpo, ¿verdad?

—Algo parecido. Su cuerpo principal es el de un demonio, pero puede controlar Slimes y nos obliga a estar en su cuerpo.

—Ya veo... ¿Y cómo te liberaste de su control?

—¡Cuando llegó al orgasmo, se distrajo y pude escapar! ¡Muchas gracias! ¡Pude escapar gracias a ti!

—Sí... Gracias a mi violación, alguien fue feliz... Ah, bueno... Supongo que hacer feliz a alguien hace mi desgracia un poco menos desgracia.

—Ouch. Perdón, no quise...

—No te preocupes... Ah... Más de 10 años... Estoy más que acostumbrado a esta vida... Tener sexo, ser torturado, obligado a beber mi orina, a comer mi excremento, bañarme con fuego... Llegó a un punto en que ya nada me importa en realidad. Pronto dejaré de ser útil y me matarán. Por fin podré morir. Si no tuviera este estúpido collar de esclavo, hace mucho tiempo me habría suicidado... Ah, bueno... Admito que se siente bien hablar con alguien de forma civilizada, aunque seas un monstruo.

—¡No soy un monstruo, soy un hada! ¡Mira, mira...! Ah... Cierto, ¡ahora soy un Slime! ¡Ahhhhhhhh! ¡No es justo!

—¿Eras un hada?

—¡Síp! Pero mi estúpida hermana menor me transformó en Slime para quedarse con la posición de primera princesa. ¡Algún día me vengaré de ella!

—Si es verdad lo que dices, te deseo suerte... Bueno... Espero que tengas una buena vida.

—¡Gracias!

Ella se fue saltando alegremente y estuvo a punto de escapar por debajo de la puerta, pero se detuvo y regresó con Ángel.

—O-oye, estamos en el país de los demonios, ¿verdad?

—Considerando que solo he visto demonios desde que llegué aquí... Bueno, excepto esa ocasión que me obligaron a comerme a un bebé humano... Sí, estamos en el país de los demonios.

—Ah... Oh... ¡Ahhhhhhhh! ¡No puedo escapar! ¡Me matarán! ¡Aquí hay monstruos peligrosos de clase S, incluso SS! ¡Me comerán si me descubren!

—¿Y qué harás?

—Mmm... Oh... Fufu. Dime, ¿cuándo te matarán?

—No lo sé... Mi sentido del dolor ya casi desaparece, y ya genero muy poca energía... Creo que en uno o dos años.

—Ya veo, ya veo... Fufu. ¿Me regalas tu cuerpo cuando mueras?

—Sí, claro.

—¡Por favor, regálame tu cuerpo, ya no lo ocu...! ¿Eh? ¡¿Aceptas tan rápido?! ¡Ni siquiera sabes para qué lo usaré!

—Ya no lo necesitaré, así que no me importa.

—¡M-muchas gracias! ¡Me salvarás la vida! ¡Prometo llevarte flores a la tumba!

—Ah... Sí, como sea... ¿Y para qué lo quieres?

—Como soy un Slime, no puedo usar mi poder mágico, ¡pero si me apodero de tu cuerpo, podré usarlo! ¡Volveré a ser poderosa y los monstruos de clase S me los pasaré por mis nuevos huevos que tendré cuando me apodere de tu cuerpo!

—Oh... Ya veo... Espero que tu plan funcione.

—Fufu. Funcionará. ¡Muchas gracias!

Ella saltó a la cabeza de Ángel.

—... ¿Qué haces?

—¿Eh? Nada, aquí tranquila, ¿y tú?

—Me refiero a qué haces aquí. ¿Por qué no te vas? No moriré todavía... Oh, es cierto, mátame. Tal vez puedas matarme.

—Lo haría, pero así no funciona. Para poder apoderarme de tu cuerpo a la perfección, debo conseguir cierta conexión contigo. Es decir, ¡debemos convertirnos en amigos! Cuando nuestra conexión se fortalezca, tu cuerpo no me rechazará y nuestra fusión será perfecta. ¡Por favor, déjame ser tu amiga y vivir contigo!

—Ya veo... Bueno, está bien. Pero te advierto que verás cosas asquerosas si te quedas.

—Fufu. No me juzgues sin conocerme. ¡Soy invencible, puedo soportar ver cualquier cosa!

—Yo te lo advertí... Entonces... ¿Ni siquiera como hada tenías nombre?

—Sí tenía, pero renuncié a ese nombre. ¡Ya sé! ¡Ponme un nombre! ¡Así seremos amigos más rápido!

—Un nombre... Mmm... ¿Slim?

—... ¿Por Slime?

—Sí.

—...

—No tienes creatividad, ¿verdad?

—No mucha.

Ella suspiró.

—Está bien, me llamaré Slim. No es tan malo, así que está bien. ¡No te enamores de mí, ¿eh?! ¡Me gustan las mujeres!

—No te preocupes, no creo que me enamore de un Slime. No estoy tan loco.

—Fufu. Te volvería loco con mi belleza de hada. ¡A partir de hoy seremos mejores amigos! Espero que me trates bien.

—Sí. Igualmente.

Y así, la vida de Ángel, aunque siguió siendo una mierda, se volvió un poco más alegre gracias a la compañía de su nueva y extrovertida amiga, Slim.

Aunque Slim tuvo que soportar ver muchísimas cosas asquerosas mientras estaba con él.

—Fufu. Apretabas muy rico.- Dijo un demonio Orco, mientras salía del calabozo.

Ángel suspiró y Slim saltó hacia su cabeza.

—¡Guacala! ¡Ni siquiera te saludó ni nada! ¡Solamente vino, te la metió y se fue! ¡¿En dónde está el cariño y el amor?!

—¿Tienes retraso mental? En una violación no hay cariño ni amor.

—Ouch... Lo siento... Tu vida es una mierda.

—Lo sé. Dime algo que no sepa.

—¡Hmmmmh! ¡Que grosero! ¡Yo solo trato de hacerte sonreír!

—Pues no lo estás logrando... Ah... ¿Cómo es el mundo, Slim? Cuéntame sobre tu vida.

—¿Nunca has estado en el exterior?

—Nop. Yo vengo de otro mundo.

—¡¿De otro mundo...?! Ay... Que mala suerte tuviste. Te tocó ser invocado por los demonios y no por los humanos. Si te hubieran invocado los humanos, te habría ido mucho mejor, ¡incluso tendrías un harem!

—Sí, lo sé, aunque odio eso del harem. Un asqueroso demonio con muchas esposas viene seguido a violarme y sus esposas solo se la pasan burlándose de mí. Nunca sería como él.

—Ya veo, ya veo... ¡Hagamos un trato! ¡Yo te cuento historias de este mundo y tú me cuentas cómo es tu mundo!

—Es un trato.

Y así, con el paso del tiempo, ambos llegaron a ser muy buenos amigos. Mientras no era torturado o violado, Ángel pasaba la mayor parte de su tiempo hablando con Slim de diferentes temas, jugando juntos cualquier juego que se les ocurría y contaban historias.

Y al primer año, mientras Ángel dormía, Slim sintió que ya tenía la suficiente conexión como para tomar el cuerpo de Ángel, pero...

—... Creo que... Sí, un poco más de tiempo.

Ella no quería que Ángel muriera todavía. Ella quería seguir hablando con él y seguir siendo amigos.

Una decisión muy egoísta, pues Ángel quería morir, pero esa decisión cambiaría la vida de Ángel para siempre, y ella no lo sabía todavía.

Pasaron los años y a los 23 años Ángel dejó de ser útil para los demonios.

Lo llevaron al centro del bosque, le quitaron el collar de esclavo, lo ofrecieron como sacrificio a su Dios y lo descuartizaron ante la estatua del Dios del infierno... La estatua del fantasma legendario número 99, el fantasma del dolor.

Y cuando todos se fueron, Slim, bastante triste por la trágica muerte de su amigo, saltó sobre los restos de su difunto mejor amigo.

—Ángel... Espero que estés descansando en paz... Te extrañaré.- Dijo bastante triste, mientras su cuerpo se metía dentro de la cabeza de Ángel por la nariz.

Cuando se metió por completo, tentáculos slime comenzaron a conectar y unir el cuerpo mutilado de Ángel, para regresarlo a la normalidad.

Después de unos segundos, Ángel, o más bien, Slim, volvió a ponerse de pie y suspiró, mientras sus ojos se llenaban de lágrimas.

—Gracias por todo, Ángel. Siempre te recordaré con cariño... ¿Eh...? ¿Por qué me siento tan rara...? ¿Eh...? Ah... Ah... ¡Achú!

Slim estornudó fuertemente y de su nariz salió un hada de fuego... O más bien, salió Slim del cuerpo de Ángel.

—¡¿Eh?! ¡¿Por qué mi cuerpo es de fuego?! ¡Volví a ser un hada, pero mi cuerpo es de fuego! ¡¿Por qué?!

—No lo sé. ¿Magia?

—¿Eh?

—¿Qué?

—¿A-Ángel?

—Sí, ¿por qué?

—¿E-estás vivo?

—Sí. ¿Por qué...? Ah... ¿Eh? ¿Estoy vivo?

—¡Estás vivo! ¡Estás vivo!

Slim abrazó la mejilla de Ángel y le dio un beso en la mejilla.

—¡Estoy tan feliz! ¡No sé cómo, pero estás vivo!

—Bueno, ya no tengo el collar de esclavo. Ahora sí puedo suicidarme. Adiós.

—¡Uwaaaah! ¡Espera, espera, espera! ¡Ya no es necesario morir! ¡Volví a ser un hada! ¡Los demonios no son rivales para mí! ¡Te voy a proteger! ¡Por favor, no te mates!

—Lo siento, ya tomé mi decisión. Adiós.

—P-por favor, no lo hagas. Eres lo único que me queda en esta vida.- Le dijo Slim, mirándolo a los ojos, mientras sus ojos se llenaban de lágrimas.

—... Bien... Posiblemente me arrepienta de esta decisión, pero ya he sufrido de todo. Un poco más de dolor no importará. Pero te advierto que me voy a suicidar si intentan violarme de nuevo.

—¡Yo misma te mataré si no logro protegerte, no te preocupes! ¡Gracias, gracias!

—Además, siento un poco de curiosidad por este mundo y sus héroes invocados. Quiero conocer el mundo.

—¡Vayamos a explorar el mundo juntos!

Slim creció de tamaño y el fuego desapareció. Se volvió una hermosa chica con una apariencia joven, cabello rosa y corto, pechos pequeños y con hermosos ojos de color rosa.

Su ropa era un simple vestido rojo, zapatillas rojas y medias negras.

—¿Es tu apariencia normal?

—Sí y no. Por alguna razón que desconozco, tú estás vivo y yo tengo un nuevo cuerpo mejorado hecho de fuego. Esta es magia de transformación... Un momento... Creo que ya sé por qué pasó esto... Oh... Sí, ya veo... Tiene sentido.

—Es cierto, ¿por qué estoy vivo?

—Creo que tu alma seguía en tu cuerpo cuando me fusioné con tu cuerpo, y cuando lo arreglé y me fusioné contigo, tu alma expulsó a mi alma del cuerpo y en el proceso me dio un nuevo cuerpo.

—¿Es posible?

—Bastante. Es raro que un alma se quede en un cuerpo muerto, pero creo que tu alma sabía que iba a revivirte. ¡Y como somos mejores amigos, tu alma me permitió crear indirectamente un nuevo y mejorado cuerpo para mí!

—... Lo repito, ¿eso es posible?

—Fufu. Te dije que nuestra conexión mejoraría la fusión. Solo que hay un pequeño problema.

—¿Y cuál es?

—B-bueno... Resulta que sí, mi cuerpo es muchísimo más poderoso gracias a nuestra fusión especial, pero es porque tu alma tomó de regreso los sentimientos negativos que te quitaron.

—¿Eh?

—Y pues, no solo yo soy muchísimo más poderosa que antes, también lo eres tú.

—¿Soy poderoso?

—Esa es la buena noticia.

—Pero, ¿cómo sabes que tomé de regreso los sentimientos negativos?

—¡¡Porque tu aura demoníaca me lo confirma!!

—¿Eh?

Ángel observó sus manos y brazos. Todo su cuerpo estaba rodeado por una enorme aura negra.

—¿Estos son mis sentimientos negativos?

—S-sí... Y bueno... Ah... ¿C-cómo lo explico...? E-es una situación muy chistosa.

—Slim...

—¡Ahhhhhhhh! ¡Lo admito, puedo derrotar monstruos de clase S, pero los demonios son más poderosos que yo! ¡Y cuando descubran que sus armas mágicas creadas por tus sentimientos desaparecieron, ellos...! ¡Uwaaaah!

Ángel cargó en sus brazos a Slim y comenzó a correr en dirección contraria del castillo.

—Vámonos de aquí antes de que nos encuentren.

—¡Esa era mi idea! ¡La robaste de mi mente! ¡Ladrón!

—¿Por qué mi alma tomó los sentimientos negativos de vuelta?

—Se llama supervivencia. Cuando me fusioné contigo, mi poder mágico se unió a tu cuerpo y tu alma usó el poder mágico para traer de regreso lo que le robaron, y como era muchísimo lo que te habían robado, pues yo me quedé con la mitad, por eso conseguí un cuerpo nuevo.

—Eso significa...

—Sí... Somos igual de poderosos. ¡Hahahahahaha! ¡Juntos seremos invencibles! ¡¿Qué quieres hacer?! ¡¿Nos unimos a los héroes y matamos a los demonios?! ¡Pero primero matemos a mi estúpida hermana menor!

—Prefiero no involucrarme con demonios ni héroes. Sé que solo sufriré si sigo por ese camino. Solo quiero explorar el mundo e ignorar los problemas.

—Ah... Bueno, es tu decisión. ¡También me encanta la idea de explorar el mundo! Pero también quiero matar a mi hermana. ¡Exploremos el mundo y después matemos a mi estúpida hermana!

—Está bien.

—Pero primero debemos conseguirte ropa.

—Ah, es cierto... Desde que llegué a este mundo no he usado ropa. Vámonos.

—¡En marcha!- Dijo Slim, levantando los brazos.

Y así, la nueva vida de Ángel comenzó.

Y quedan 3 restantes.

•

(Pov- Kevs.)

Wow... Vaya vida de mierda tenía.

Me dio tanto asco que desactivé lo +18. Ángel tuvo una vida de mierda, que me siento mal por odiar mi nueva vida.

Ángel me parece un personaje plano, pero es entendible después de sufrir todo eso. Espero que tenga un buen desarrollo de personaje.

Hasta el momento, mi personaje favorito es Slim. Me parece la más interesante, pues su pasado me parece muy misterioso. Espero que no quede como pareja de Ángel, combinan muy bien como amigos, si se vuelven pareja se arruinaría la química que tienen.

Bueno, terminé el primer capítulo. Veré los demás después.

Guardé el libro en la mochila y suspiré... Bien, la diversión terminó, a regresar al infierno.

—P-princesa, ya debemos regresar al salón de clases.

Intenté despertar a la princesa, que estaba dormida sobre mí. Me acosté en el suelo boca abajo para que ella me use como cama. ¡Ahhhhhhhh! ¡He caído tan bajo! ¡Soy una desgracia para mí mismo y mi abuelo!

¡No, Kevs, recuerda, Ángel sufrió más y siguió adelante!

¡Pero él tenía una hermosa hada a su lado que lo consideraba su mejor amigo, él se sintió obligado a estar con ella! ¡Yo no tengo a nadie...! Bueno, solo tengo a Daisy, mi amiga imaginaria muda... ¡Ahhhhhhhh! ¡Kevs, no tenemos amigos reales!

¡Lo sé! ¡Somos un fracaso!

Oh, escucho a la princesa bostezar. ¡Sí, no tuve que tocarla para que despierte! ¡Me ahorré un golpe!

—¿Ya pasó la hora?

—Sí, princesa.

—Tsk. Quería dormir más. Vámonos.

—S-sí.

Ella se levantó del suelo y yo también. Ay, me duele la espalda. La princesa pesa, pero no lo diré en voz alta, definitivamente me mataría si digo algo sobre su peso.

—Debo admitir que tu cuerpo es cómodo, insecto. Esa grasa tuya tiene sus ventajas.

—G-gracias.

Supongo.

—Pero debemos deshacernos de ella.

—¿Eh?

—Das asco. No quiero que mi reputación se vea manchada por tener a un sirviente gordo. Te obligaré a bajar de peso. No puedo cambiarte la cara, pero sí el cuerpo.

¡Tu reputación ya ha sido manchada, princesa!

Pero no creo que sea mala idea bajar de peso. ¡Necesito un mejor cuerpo para soportar los abusos de las Elfas! Necesito un cuerpo más fuerte.

—Hoy mismo iniciaremos con tu entrenamiento.

—S-sí.

Ouch, ya me duele el cuerpo con tan solo escuchar eso. Espero no morir.

•

—¡Ahhhhhhhh! ¡No te soporto, idiota!

—¡El único idiota aquí eres tú, pechos caídos!

—¡No los tengo caídos, estúpido pene pequeño!

—¡No es pequeño! ¡¿Quieres que te lo muestre?! ¡Oh, no, eso sería un premio para una perra abre piernas fáciles como tú, perra!

—¡Ahhhhhhhh! ¡Estás muerto!

Bell y Evelyn comenzaron a pelearse, después de discutir sobre quién buscaría comida.

Como no se ponían de acuerdo, ambos se enojaron y llegaron a los golpes... Bueno, solo Evelyn, Bell no se atrevía a golpear a una mujer y recibía los golpes.

—¡Idiota, no quiero activar el brazalete! ¡Deja de golpearme!

—¡Hahahahahaha!

Evelyn comenzó a reírse y se alejó de él.

—Fufu. ¿Qué? ¿No te atreves a golpear a una mujer?

—¿Mujer? ¿Dónde? ¡Solo veo a una prostituta!

Ella, al escuchar eso, le dolió el pecho y estuvo a punto de llorar.

Evelyn se dio media vuelta y bajó la mirada.

—... Tsk. Yo conseguiré comida para mí misma.

—Tsk. Haz lo que quieras, perra.

Ambos se alejaron caminando, tomando caminos opuestos.

—Estúpido virgen de mierda. ¿Cómo se atreve a hablarme así? No tiene derecho a criticarme... Nadie lo tiene... Nadie.

Evelyn cerró el puño con furia mientras sus ojos se llenaban de lágrimas.

—¡Nadie!

Epílogo.

(Pov- Bell.)

Tsk. Estúpida perra. ¡Es insoportable! Admito que al principio me encantó la idea de estar a solas con ella en una isla, ¡pero ya no la soporto! ¡Es odiosa, gritona, se enoja por cualquier tontería y violenta! ¡Ahhhhhhhh! ¡¿Por qué me tocó con ella?!

Tsk. El lado bueno es que sus pechos son grandes y me da material para masturbarme, ¡pero dejando de lado su apariencia, es una idiota insoportable!

Creo que voy a renunciar a la prueba. Sí, renunciaré en un par de días.

Es que... Ah, realmente no la soporto. Lo único bueno de ella son sus pechos, pero eso es todo.

—Maldita sea, todo lo tengo que hacer solo.

Ya casi termino el agujero para hacer del baño. ¡Es mi agujero propio, no lo compartiré con esa perra!

—Fufu. Soy un genio.

Hacer un agujero en la tierra muy profundo, hacer mis necesidades y después ponerle tierra para que el olor no salga. ¡Soy un genio! Y mis padres decían que sería un bueno para nada. ¡Pues este bueno para nada se volverá un genio!

Bien... Creo que necesitaré un poco de agua más.

Me fui al lago que está a unos metros del agujero y recolecté agua con la boca y manos. Bien.

Regresé al agujero y le metí el agua, para que la tierra se humedezca y sea más fácil de sacar. Solo debo esperar un minuto.

Me senté debajo de un árbol y suspiré.

Ah... Evelyn, si tan solo no fueras tan odiosa, me enamoraría de ti.

Sylphie tiene a Saik, así que no me puedo enamorar de ella.

Ram está lejos de mi alcance y posiblemente me odie por idiota.

Ah... Quiero una novia. Mi amiga de la infancia se enamoró de otro hombre y terminó conmigo cuando comenzamos a salir. ¡Quiero una novia!

Y no soy guapo... Ni inteligente... Ah, Saik, te tengo envidia. Eres el más inteligente de la escuela y tu cuerpo es perfecto. No he visto tu cara, pero apuesto a que eres guapo.

En cambio, yo no soy guapo y soy un idiota... Ah... Bueno... Tengo dinero. Tal vez no pueda enamorar a una chica de mi clase, pero creo que podría comprar el amor de una chica pobre desesperada por dejar de ser pobre.

... Ah... ¿En serio caeré tan bajo? ¡Quiero una novia, Dios! ¡Dame una novia!

•

(Pov- Evelyn.)

Tsk. Estúpido pene pequeño. ¡Es insoportable! ¡Ahhhhhhhh! ¡¿Por qué me tocó él?! ¡Es insoportable! ¡Yo quería estar con Saik, no con este idiota!

Si me hubiera tocado con Saik, lo habría seducido con mis encantos y él me hubiera ayudado a pagar mi deuda, ¡incluso me podría proteger con su dinero y así dejaría de vender mi cuerpo! Pero no, ¡la estúpida escuela me dio a este pene pequeño como compañero! ¡Es insoportable!

Y lo odio tanto que me niego a pensar en la posibilidad de seducirlo para que él pague mi deuda. No puedo convencerlo para que pague mi deuda sin darle algo a cambio. Estoy más que segura de que me va a chantajear con cobrarme el dinero o incluso me obligaría a vender mi cuerpo otra vez si no me caso con él o me sigo acostando con él.

No soportaría estar al lado de alguien como él.

Saik no es un lujurioso, no mostró ninguna reacción al verme, al contrario de Naok y Bell, que no dejaban de comerme con la mirada. Ludius tampoco mostró ninguna reacción, pero por la forma en la que mira a Saik, estoy segura de que nunca se fijaría en mí... O en alguna mujer.

Naok es igual a Bell, así que también lo descarto.

Quiero casarme con el hombre que pague mi deuda, así no tendría que preocuparme por nada... No quiero seguir vendiendo mi cuerpo... No quiero... No quiero.

—Solo quiero ser feliz.

Saik, por favor, enamórate de mí. Eres mi última esperanza... No quiero estar encadenada para siempre con un idiota ni con un pervertido, ¡mucho menos con un idiota pervertido! Solo quiero ser feliz, al lado de un hombre amable y que me trate bien. Que me trate como un ser humano y no como un objeto sexual.

Solo quiero ser feliz... Es lo único que quiero en la vida.

Y si no lo consigo... me suicidaré en un año.

Por favor, Saik, ayúdame.

—Te lo suplico.

(Nota del autor: Fin del volumen 9. ¡Muchas gracias por su apoyo! En serio, muchas gracias por seguir leyendo lo que escribo. Espero sus comentarios en mi Facebook o Twitter. Ya saben, entre más comentarios, más rápido publicaré el siguiente volumen. Y si quieres apoyarme más, puedes donarme :3 No es obligatorio ni dejaré de publicar capítulos si no me donan, simplemente es por si gustan apoyarme y que no me corran de la casa XD. https://ko-fi.com/angelpikas

Y si no pueden, un comentario vale muchísimo más para mí. Se los agradecería mucho.)