Capítulo 87 - Aegon VS Apocalipsis

Apocalipsis si bien tenía confianza en su poder y su vasta experiencia, sabía que no sería capaz de enfrentar a todos los presentes. Además, la hechicera y el dios que habían venido eran un completo misterio para él y este tipo de seres podían resultar problemáticos. Pensándolo mejor encontró que la propuesta de Absalom podía servirle ya que encontrar un nuevo cuerpo era su prioridad en esos momentos.

Y resulta que ese momento varios mutantes de nivel Omega se encontraban reunidos a su alrededor. Obtener el cuerpo de uno de ellos haría que su poder se incrementara y nunca estaba de más el poder, esa era su meta por el momento. Eran cuatro los mutantes de nivel Omega que estaban a su alrededor (Magneto, Jean, Storm y Iceman) y tres de ellos eran bastante jóvenes por lo que serían más fáciles de someter, podía ver que el adulto tenía una fuerte fuerza de voluntad.

De los tres jóvenes que eran sus posibles candidatos sentía que la chica de cabellos rojos escondía algo dentro de ella y poseía una enorme cantidad de energía psionica, de seguro una telépata que ofrecería más resistencia que sus compañeros. De los dos restantes había podido presenciar una muestra de sus habilidades y ambas habilidades tenían su atractivo, pero de los dos la chica de piel morena poseía un físico más fuerte que el chico de hielo. Al final decidió que la chica de piel de morena era la mejor candidata. Su cuerpo era fuerte y sería fácil de controlarla rápidamente.

"No están equivocado, muy pronto necesitaré un nuevo cuerpo, pero hasta entonces puedo ejercer todo mi poder sin ningún problema." Él no mentía, si una pelea estallara Apocalipsis podría luchar como si estuviera en su mejor momento, es solo que la pelea aceleraría la degradación de su cuerpo.

[AEGON POV]

Y aquí estaba yo en medio del desierto en una reunión de lo más aburrida donde tres grupos de mutantes trataban de traer a sus filas a un arrogante calvo de piel gris, que mal gusto. Por la expresión de Magneto estoy seguro que no piensa ponerse bajo las órdenes de ningún desconocido. Apocalipsis no parecía agradarle a Shaw y Emma con su personalidad de 'yo soy el rey, alábenme'. Y seguro que no vendrá a dar clases a la escuela de Charles. Había pensado que este sería el día donde presenciaría una batalla épica entre mutantes. Que decepción.

Ahora que todos estaban en modo zen y se habían puestos sus trajes de políticos tratando de reclutar a Apocalipsis estuve por pensar que esto terminaría con todos regresando a casa después de haber perdido el tiempo con este viaje. Apocalipsis se marcharía solo a reclutar algunos seguidores y solo lo volveríamos a ver cuándo intentara algún plan de dominación mundial o alguna otra estupidez de ese tipo que los idiotas como él se les ocurre bastante a menudo. Desafortunadamente o no, ese no fue el caso.

Ya estaba por dormirme recostado a Rogue cuando el calvo gris dijo algo que selló su destino. "Aceptaré vuestra proposición de unirme a una de sus organizaciones si están dispuestos a proporcionarme el cuerpo que necesito." Les dijo a los miembros del Club Hellfire y luego miró en la dirección de Magneto que por su expresión estoy seguro de que algo así no es de su agrado. "Si pueden proporcionarme el cuerpo de ella, tienen un trato." Cuando miré a donde estaba señalando vi que estaba apuntando a Ororo. Este maldito imbécil quiere tomar mi diosa morena.

[TERCERA PERSONA POV]

Decir que Ororo estaba sorprendida al escuchar que el dios mutante quería su cuerpo sería poco para expresar como se sentía. El resto de sus compañeros estaban bastante enojados, Logan ya tenía sus garras afuera listo para atacar a Apocalipsis.

Los jóvenes miembros del Club Hellfire estaban aliviados de no ser uno de ellos el escogido pues temían que sus superiores podían elegir sacrificar a uno de ellos. El resto, excepto por Emma y Shaw no parecía importarle, el único problema era si tenían la fuerza suficiente para tomar a la chica, aunque si Apocalipsis podía luchar con todo su poder a su disposición, Absalom y Crule pensaban que las probabilidades estaban a su favor. Emma no estaba de acuerdo con algo así y Shaw no creía que fuera una buena idea, Charles y sus estudiantes siempre eran unos pacifistas por decirlo de algún modo, pero si ocurriera un evento que cambiara su posición, entonces serían un enemigo de temer.

El primero en responder fue otra sorpresa para todos. "Nadie se está llevando a nadie aquí." Dejó en claro Magneto. Él y Charles podrían tener sus diferencias, pero no se quedaría viendo como uno de los estudiantes de su viejo amigo era entregada como sacrificio a nadie. Viendo la mirada que le estaban dando Apocalipsis y los otros dos miembros del Club Hellfire dio varios pasos al frente y estaba listo para cualquier acción que tomaran cuando todos escucharon la risa de alguien.

Todos miraron hacia el origen de la risa y vieron a Aegon riendo a carcajadas y encontraron que algo estaba mal con su risa. "Miren a esta maldita momia calva y gris. Acaba de despertar y con ese aspecto horrible y quiere tomar a mi mujer." La temperatura en el lugar comenzó a elevarse. La capucha que ocultaba su rostro desapareció dejando ver el atractivo rostro de un joven que algunos reconocieron como el joven millonario que recientemente había salido en las noticias. "Jean contacta con el profesor, es hora de que nos marchemos." Le dijo rápidamente Logan temiendo lo peor, el siempre confiaba en sus instintos y ahora estos le decían que este lugar era extremadamente peligroso.

"Si eso es lo mejor Jean." Afirmó Aegon para acto seguido darle una mirada a Morgana y luego el patrón de sus ojos cambió (el llevaba activo el Sharingan, ahora activó el Mangekyō). La hechicera no se demoró en levantar una barrera alrededor de todos los X-Men. Viendo que una batalla estaba por estallar Crule se lanzó a toda velocidad hacia Aegon mostrando garras similares a las de Sabretooth. A solo un metro de distancia de su objetivo Crule se detuvo, era como si estuviera paralizado.

Por otro lado, un portal de color rosado se abrió cerca de Jean. Adrienne Frost, la hermana mayor de Emma al ver que los X-Men pretendían escapar ordenó que atacaran, pero solo los jóvenes ahora algo nerviosos estaban por responder a su orden cuando fueron detenidos por Emma. "¡Deténganse!" Luego se dirigió a su hermana. "Si quieres enfrentarte a él es tu funeral." La temperatura continuaba incrementándose y se tornaba insoportable para algunos.

Solo faltaba Morgana por retirarse cuando Aegon le dijo a Magneto que se ahorrara el viaje de vuelta indicándole que podía marcharse por el portal. Magneto no estaba seguro si aceptar, pero él también podía sentir el calor que se estaba haciendo intolerable.

Una katana se materializó en la mano de Aegon y seguidamente intensas llamas azules brotaron de ella y parecía cubrir a Aegon y su alrededor. "Me gustaría aceptar vuestra oferta si es extensible para mis colegas y yo." Comentó Shaw al ver la arena comenzar a derretirse por las llamas. Los Helions no soportarían por mucho tiempo la temperatura que continuaba elevándose. Emma había adoptado su forma de diamante y Arianne de manera vergonzosa se había colocado detrás de ella.

"Esos dos se quedan." Fue lo que respondió Aegon y Shaw no tuvo problema con descartar a sus dos compañeros que los habían traído a este viaje inútil. "Por supuesto."

Crule se abalanzó sobre Shaw al ver como le había dado la espalda tan fácilmente, pero fue impactado por unas descargas de energía provenientes de Morgana que lo arrojaron varios metros. "¿Qué esperan?" Los apresuró la hechicera. Emma fue la primera en comenzar a caminar hacia el portal y luego fue seguida por el resto.

Al final solo quedaban Apocalipsis, Absalom y Crule frente a Aegon y Morgana que había decidido quedarse y observar todo. Ella ya había recuperado todo su poder así que no sentía que tuviera nada que temer, incluso los dioses serían precavidos con la legendaria hechicera. Aegon tampoco le dijo nada, ella era libre de hacer lo que se le antojara siempre que no le causara problemas a él. Porque ya saben… los problemas serían solucionados de manera permanente. Este mundo era para él divertirse, no para otros causarle dolores de cabeza.

"He derrotado a dioses antes." Mencionó Apocalipsis listo para enfrentarse a Aegon. Absalom y Crule comenzaron a rodearlo mientras no descuidaban a la hechicera. Aegon observó a Crule, las heridas que había recibido por las descargas de energía ya habían sanado. Él recordó que Apocalipsis pertenecía a un grupo de mutantes llamados Externos, mutantes inmortales que incluso si eran destruidos volvían a la vida.

Pensando en una posible teoría Aegon hizo un movimiento rápido en dirección a Crule. La onda expansiva generada por su movimiento levantó la arena al alrededor obstaculizando la visión de Apocalipsis, Absalom y Morgana. Una vez pasado después de Crule, este ahora se encontraba con dos heridas, una que comenzaba en su hombro derecho y se extendía de manera perpendicular hasta su cintura y la otra era una puñalada en su costado izquierdo, Aegon continuó hasta Absalom y lo golpeó con un Rasengan lanzándolo varios metros hacia atrás.

Su rápido ataque fue interrumpido al tener que desplegar una barrera que detuvo ataques de energía provenientes de Apocalipsis, pero sirvió a su propósito. Continuó sin prestarle mucha atención a Apocalipsis y observó las heridas de Crule. La primera de las heridas en solo unos segundos casi había sanado por completo, su regeneración no era inferior a la de Logan.

El problema estaba en la segunda herida que a pesar de ser mucho más pequeña estaba sanando lentamente. Con esto había confirmado lo que sospechaba.

La intensidad de las llamas continuaba creciendo y Morgana reforzó la barrera que la protegía, de repente dos copias de Aegon aparecieron, cada una observando a Absalom y Crule respectivamente mientras el original ponía toda su atención en Apocalipsis. "Así que puedes replicarte, he visto este tipo de habilidades antes, suelen ser bastantes molesta." Apocalipsis había crecido hasta los 3 metros de altura y estaba flotando a unos pocos centímetros sobre la superficie.

[CON ABSALOM]

Absalom también se había recuperado sin problemas del ataque que había recibido y ahora tenía 2 espadas hechas de sus propios huesos en sus manos. Esta era una de sus habilidades, la manipulación de los huesos en su cuerpo. Era como ver de cierta manera a un miembro del clan Kaguya. "Esto es una estupidez, porque no hablar y llegar a un arreglo. Estoy seguro de que hay mucho de lo que podemos beneficiarnos mutuamente." Pero no recibió ninguna respuesta de Aegon.

Después de haber vivido por tantos años él era capaz de reconocer cuando una persona no estaba interesada en otra cosa que no fuera terminar con su vida. No era la primera vez que se encontraba en una situación así, pero pensó que al igual que en las ocasiones anteriores también saldría de esta, aunque no creía que con vida, probablemente estaría reviviendo en los próximos años. Si solo hubiera algo que pudiera hacer para enfrentar la llamas que rodeaban a su oponente tal vez tendría una oportunidad.

Nuevamente el primer movimiento lo hizo Aegon y eso fue todo para Absalom. Aegon lo cortado en dos de manera vertical y su cuerpo fue consumido por un pilar de llamas.

[CON CRULE]

Crule encontró molesto que la copia que estaba enfrentando estuviera también cubierta por llamas con la que su regeneración no podía competir. Sin embargo, su ánimo cambió cuando las llamas y la katana desaparecieron, ahora podría golpearlo tanto como deseara y se abalanzó sobre Aegon. Pronto se dio cuenta que su situación no había mejorado mucho pues su velocidad de movimiento y reacción eran inferior a las de oponente, también ese era el caso de su fuerza física, durabilidad y resistencia. Pronto era Crule el que estaba recibiendo una golpiza unilateral.

[RETORNANDO CON APOCALIPSIS]

Al mismo tiempo que Absalom y Crule eran eliminados Aegon y Apocalipsis estaba en una batalla cuerpo a cuerpo, el dios mutante había probado ser muy superior a sus viejos amigos siendo capaz de regenerar sus heridas mucho más rápido que los otros Externos y de poder seguir los movimientos de Aegon, prueba de su impresionante visión dinámica. Sus defensas gracias a la armadura que lleva también habían probado ser excelente.

La telekinesia de Apocalipsis no era lo suficientemente poderosa para detener a Aegon al estilo Darth Vader, pero podía utilizarla para protegerse del contacto directo de las llamas.

El dios mutante se había visto forzado a una batalla salvaje y sangrienta que lentamente sentía que estaba perdiendo pues, aunque su cuerpo continuaba regenerándose cada vez que sufría una herida aun así se sentía más débil, como si hubieran heridas que no habían sanado, pero no encontraba ninguna. Apocalipsis no estaba equivocado, habían heridas que no estaban sanando rápidamente y estas heridas habían sido infligidas sobre su alma.

Esta era la teoría que Aegon había confirmado. Los Externos eran inmortales capaces de recuperarse de cualquier herida física, pero las heridas sobre el alma eran otro tema. Si bien este tipo de heridas sanaban, sus poderes regenerativos poco influían sobre el alma de aquí la demora. Y si el alma era destruida, la muerte era permanente, ni siquiera había un más allá. Ellos eran inmortales porque cuando sus cuerpos eran destruidos sus almas no iban al reino de la muerte, sino que reencarnaban directamente en un nuevo cuerpo.

La batalla continuó por más de media hora, los ataques de Apocalipsis poco o casi ningún efecto tenían sobre Aegon; y los ataques de Aegon, aunque si le habían ocasionado daño a Apocalipsis no eran letales gracias a la protección de energía psionica y cósmica con la que estaba cubriendo su cuerpo. Parecía que la pelea continuaría por mucho más tiempo hasta que uno de los dos terminara exhausto, pero todo cambió cuando un pilar de energía de color azul cayó sobre Apocalipsis debilitando sus defensas lo suficiente para que Aegon atravesara su pecho con su zanpakuto e incinerara su cuerpo desde adentro hacia afuera.

El dios mutante trató de resistir tanto como pudo, pero era inútil. Incluso él no podía resistir el poder las llamas de Aegon. Para luchar con Aegon antes que nada se necesitaba alguna habilidad para resistir las altas temperaturas de su zanpakuto cuyo shikai había sido liberado con todo su poder algo que no podría hacer dentro de la ciudad, no sin la destrucción que traería como resultado tal acción (para este punto el poder destructivo de su shikai es superior al de Yamamoto).

"¡No sé de qué panteón eres, pero estás cometiendo un grave error, este no será mi final!" Gritó Apocalipsis lleno de rabia. "Nos volveremos a encontrar maldito dios y te haré pagar por esta humillación. Lamentarás el día en que nos conocimos." Aegon nunca le respondió haciéndolo sentir frustrado y aún más lleno de rabia y odio, él sabía que Apocalipsis no retornaría, el dios mutante solo estaba delirando pensando que su muerte solo sería algo temporal, pero estaba equivocado ninguno de los 3 volvería a ver la luz de un nuevo día.

Cuando los últimos de restos de Apocalipsis fueron incinerados Aegon se giró hacia donde estaba Morgana. "¿Si ya terminaste podrías detener las llamas?" La hechicera no quería admitirlo, pero no podría mantener la barrera que la protegía por mucho tiempo, pronto estaría sin energía. Nunca había esperado que Aegon tuviera tanto poder, ella había conocido a otros dioses en el pasado incluido Apolo el dios del sol griego y ni siquiera Apolo podía mantener llamas tan poderosas por tanto tiempo. Esa era la parte aterradora, muchos seres en el universo podían generar poderosos ataques, pero mantener un ataque de área como eran las llamas rodeando a Aegon por más de media hora era algo de lo que ella no tenía conocimiento.

Aegon volvió a sellar su zanpakuto y luego se katana se desvaneció. "Debiste haberte marchado junto con el resto." La hechicera comenzó a sonreír de manera picara. "¿Y perderme tal espectáculo? Claro que no. Sabes lo caliente que me he puesto y te diré… no es por el calor." Aegon no pensó estar de humor, pero al ver a la hechicera comenzar a desvestirse ambos terminaron en la habitación de un hotel, seguro a nadie le importaría si se demoraban un poco más.