Volumen 8: Capitulo 190

Luego de que Yossu hablara con la emperatriz y con la concubina sobre la partida de ellas y sobre que se tenían que quedar dentro del palacio para mantenerse protegidas, el decidió usar su habilidad [Puerta] para dirigirse a la casa de Leon y ya no le importaba si la Familia del líder del gremio lo descubría, después de todo ya era momento de contarles y devolverles el favor que les prometió hace tres meses en el momento que Leon y Klara dejaron a Yossu y las sirvientas quedarse en su casa. Además, se podría decir que ahora eran grandes amigos entre ellos.

Zero, antes de ir al palacio del imperio Flamee, decidió no llevar a las sirvientas pero si darles la orden de volver a la casa en la que se quedaban para decirles a Leon y a su familia que tenía algo muy importante de lo que hablar y que lo esperaran.

Una vez traspaso el portal que había creado y aparición en el cuarto en el que dormía en la casa de Leon, el suspiro y con una sonrisa salió del cuarto.

Luego bajo las escaleras en forma de caracol para después encontrarse en frente a Leon, Klara y su hija sentados en un sillón

En frente de la familia de Leon estaban las sirvientas, pero ellas se encontraban detrás del sillón esperando a que su amo llegara y se sentara en el asiento que ellas tenían en frente.

En el momento en que Yossu llegó a la sala, Las sirvientas sonrieron con esta sonrisa encantadora que ellas siempre tenían y luego nuevamente se pusieron firmes y serias.

Yossu con una caminata tranquila pero a la vez potente y con su sonrisa cálida, se dirige a su asiento y después dice entre algunas palabras de lamento "Creo que es momento de contarles quien soy."

Leon al oír esas palabras agarra la mano de su esposa y ambos envuelven sus dedos.

"Siempre supe que eras una persona rara y que tenías motivos para ocultar del lugar de donde en realidad venías, ya que siempre algún fallo o algo raro tenían las cosas que me contabas o como las hacías, pero nunca quise entrometerme y por eso nunca pregunte. Además, debido a mi fuerte carácter, forma de ser y tratar de proteger a mi esposa e hija de los humanos, nunca tuve un amigo o con quien hablar. Se podría decir que soy una persona bastante cerrada y difícil de comprender, pero el bienestar de mi familia siempre va primero.

Durante mi vida sufrí mucho…

¿Sabes, Zero?

Yo crecí en los barrios bajos y jamás pude conocer el rostro de mis padres.

Estuve hasta los 13 años luchando en los barrios bajos para comer. Sin embargo, un día apareció ese hombre.

El hombre brillaba, era único y esplendido.

Ese hombre fue el que me enseñó el trabajo de un aventurero, de un mago y de esa manera logre convertirme en uno.

Luego, cuando adquirí los conocimientos básicos de un mago, el se fue de un día para otro.

Creo que ese mago es la única persona que puedo llamar padre a estas alturas.

De esta manera fui avanzando poco a poco en el trabajo de aventurero, hasta que se me dio la posibilidad de transformarme en el líder del gremio y como ves, Zero, me convertí en el líder del gremio de la capital.

Un tiempo después me dieron el titulo nobiliario y mientras hacia de líder de gremio, yo mejoraba mi magia.

Pero un día paso algo que jamás creía que me sucediera.

Cuando caminaba por la ciudad como era de costumbre para dirigirme al gremio de aventureros, vi algo que nunca pude dejar de mirar sin importar que, y hasta hoy en día todavía no puedo dejarla de ver."

Luego de haber dicho eso, Leon y Klara se dan un gran beso apasionado que duro unos segundos y a continuación el siguió hablando.

"Resulta que lo que me había dejado encantado, era esa preciosa Demi-humana con los ojos tristes y con la ropa desgarrada, que estaba en venta en medio de la calle. Ella era tan preciosa que no podía dejar de mirarla. Sin embargo, un día, después de haber estado mirándola durante un mes, decidí comprar a esa pobre esclava que hoy en día es mi esposa y con la que tengo una hija."

"Al principio me costó bastante acostumbrarla a que no se comportara como una esclava, pero poco a poco Klara se fue amoldando, hasta el punto en que ella fue la primera en declararse que le gustaba y bueno…así es como ahora están las cosas."

Había dicho el un poco avergonzado mientras la linda y tierna Klara se le pegaba a el brazo y con su cara se frotaba en él.

"De esta manera hice la familia que tanto amo y este también es uno de los motivos por los que no hago amigos. No me importa no poder relacionarme con los demás siempre que pueda estar con mi familia."

"Sin embargo, desde que viniste a nuestras vidas junto con tus sirvientas a excepción de una, nuestras vidas se han hecho mas divertidas, ya que ahora hablamos mucho y nos divertimos un montón con ustedes, así que no importa quien seas o que hayas hecho, Zero. En nuestro corazón, lo único que importa es nuestra amistad y al Zero que conocemos."

"Además, Diana y las demás sirvientas tuyas, son las primeras amigas de mi esposa e hija y tu eres el primer amigo que he tenido y todo eso lo valoro mucho."

Zero estuvo muy feliz con cada una de las últimas palabras que Leon dijo, incluso se sorprendió con lo que escucho al principio, es decir, aquello de que el había nacido en los barrios bajos.

El siempre pensó que Leon era noble de nacimiento, pero al parecer el pensó mal en esto y Bueno…Se dio cuenta de todo lo que hizo Leon para poder llegar en donde el ahora se encuentra.

"Sin duda alguna eres una buena persona Leon."

"Fuiste amable en cada momento conmigo."

"Nunca preguntaste sobre quien era o sobre toda mi historia."

"Nos brindaste tu casa y tu amistad."

"Te considero un gran amigo, Leon, aunque nuestra amistad haya comenzado gracias a nuestras relaciones con los Demi-humanos."

Dijo Zero con una sonrisa tranquila y cálida

"Sin embargo, debo de admitir que yo también soy un Demi-Humano."

Había dicho entre risas y un poco avergonzado.

Tanto Leon como Klara quedaron con la boca abierta y segundos después gritaron al mismo tiempo y en un tono muy fuerte, sorprendido y de no creerse lo que su amigo había dicho…

"¡¡¡¡Queee!!!!."

"¡¿Qué parte de ti se supone que es Demi-Humana?!."

De repente su hija les pregunta muy preocupada desde los brazos de ambos…

"¿Están bien, papa y mama?."

Pregunta en un tono muy preocupado

 Zero no logra contener su risa y comienza a golpear su pierna mientras las carcajadas no paraban de salir de su boca.

Ahora los dos dueños de la casa no sabía lo que sucedía y tampoco el motivo de su risa.

Por lo que ambos esposos preguntan muy confundidos…

"¿Acaso eso fue una broma, Zero?."

Zero con su sonrisa y entre risas, les dice "Si se refieren a lo que dije con respecto de no ser un humano, entonces no es una broma porque en realidad soy un Demi-humano."

"Puede que ahora no lo noten ya que en estos momentos estoy usando una apariencia falsa y de momento no pueden ver mi verdadera apariencia."

Leon, luego de estar un par de segundos reflexionando y meditando sobre esto, él dice en un tono serio y un poco confundido con todo lo que estaba sucediendo en tan solo unos minutos desde que comenzaron a hablar.

"¡Ahhhh!…Esto es bastante raro, pero si me estas contando todo esto es por algún motivo ¿Verdad?."

"¿O me confundo?."

Yossu nuevamente se ríe y le responde con mucha alegría.

"¡Tienes razón, Leon!."

"Ya ni me acordaba de ese Leon tan directo y que siempre prestaba y escuchaba atención a cada palabra que decía, Incluso antes tenia que cuidarme con mi forma de hablar para que no descubrieras lo que en realidad hacía. Bueno, mejor pasemos a lo que importa."

"Resulta que el motivo de contarles todo esto es para devolverles el favor de haberme dejado vivir en su casa y espero que acepten mi regalo, pero si no es el caso, entonces no hay problema, después de todo seguiremos siendo amigos ¿Verdad?."

-Continuara-