Pecado 24: Ángeles caídos y exorcistas

"Retirada" dijo Haru envolviendo nuevamente en rayos mientras salía de la casa evitando varias lanzas de luz que cayeron en el punto donde antes estaba de pie.

Fuera de la casa varios ángeles custodiaban la casa al igual que varias personas con túnicas largas que ocultaban sus rostros "Supongo que todos son compañeros del psicópata" dijo Haru con una sonrisa que mostraba su nerviosismo.

Todas las personas con túnicas dejaron salir espadas de luz apuntando hacia el trío de personas "Ugh" se quejó Haru con molestia dando miradas de reojos hacia las dos personas a su lado, en el lado derecho estaba Issei con una expresión complicada un completo novato en cuanto a los poderes de los demonios por lo que no podía contarse como un elemento para luchar, por otro lado estaba la monja de nombre Asia quien no mostraba ninguna aptitud para luchar.

"No podré luchar mientras los cuido a ustedes dos, en cuanto los suelte deben huir de este lugar, los cuervos intentan desviar la atención de los ángeles caídos mientras yo lidiare con todos los demás" murmuró Haru en un tono de voz leve únicamente perceptible para sus dos costales de equipaje.

La monja seguía en un estado de incredulidad y no comprendía la totalidad de las cosas que sucedían mientras que por el otro lado Issei quería replicar las decisiones de Haru pero ya estaba demás que mencionaran lo débil que era ahora mismo, sabiendo que sería un peso en el camino de Haru decidió seguir el plan de su hermano mayor.

Pronto antes de que Haru liberara a sus cargas entre los ángeles caídos apareció una silueta conocida "Oya Oya, Oya. Pero miren que casualidad, la propia Raynare se presentó frente a mí para enfrentarme" dijo Haru mirando hacia la ex-novia de Issei.

"No seas arrogante sucio humano, no estas al nivel de ser importante para mi, ahora vengo por mi juguete" dijo Raynare con el ceño fruncido mientras miraba en la dirección de Haru específicamente a la monja que estaba en su brazo "Asia, espero que no estés intentando escapar..."

Los ojos de Haru se ampliaron al escuchar las palabras de Raynare y una sonrisa se formo en sus labios "Viniste hasta este lugar únicamente por esta pequeña monja, supongo que es muy importante para tu plan aún cuando no es tu aliada y mas bien seria un rehén" las palabras de Haru llamaron la atención de todos los presente

"¡¿que estas diciendo?!" exclamó Raynare enfadada mientras miraba al shinobi que reía levemente.

Pronto Haru dejó libre a las dos personas de sus brazos y exclamó "¡Corre Issei, CORRE Y NO DEJES QUE SE LLEVEN A LA MONJA!" el grito de Haru desvió la atención hacia el dúo que comenzó a huir.

Varios ángeles y exorcistas se movieron para capturar a la monja pero en el momento que pasaron por el lado de Haru este giro rápidamente.

"¡Ocho Trigramas Palma de Retorno al Cielo (Hakkeshō Kaiten)!" murmuró Haru en voz baja golpeando a todos los enemigos dentro de su área.

Por otro lados aquellos quienes se salvaron del ataque de Haru fueron impactados por los cuervos que rasgaron sus caras, algunos incluso perdieron sus ojos por los ataque de los cuervos.

Haru creo varios clones que comenzaron a luchar contra todos los enemigos, Raynare tenía una expresión compleja en su cara, ella sabía muy bien la habilidad de Haru pero ahora mismo su experiencia en combate se vio mejorada en gran medida.

"¡Ahhhhh!" el grito hizo que todos se quedaran quietos del lado contrario de la batalla Freed quien se había zafado de la multitud alcanzó a Issei y atravesó sus piernas usando una bala en cada pierna.

"¡¡¡JAJAJAJAJA!!!" Reía Freed a carcajadas mientras pisaba la cabeza de Issei como si se tratara de una perro "Mira angel caido-chan, tengo a la puta monja ¿supongo que puedo divertirme con ella antes de que tengas que usarla, verdad?" la voz enfermiza de Freed se filtraba en el campo de batalla.

Haru no podía moverse a salvar a Issei cuando tenía tantos enemigos frente a él, incluso estaba siendo reprimido por los ángeles caídos quienes usaban las lanzas de luz para impedir la huida del pelirrojo.

Raynare no prestó atención a las palabras de Freed y solo extendió su mano "Termina el trabajo y mata a ese demonio" dijo Raynare

La expresión de Freed no podía considerarse una agradable pues Raynare no había respondido a su petición "Sigh...." liberando un suspiro hizo brillar su espada "Si si, si... me encargare del demonio-chan" dijo Freed clavando su espada en la espalda de Issei pero antes de que pudiera volver a repetirlo una esfera roja apareció lanzando a Freed lejos en la distancia.

Freed se quejó varias veces para luego levantarse y limpiar su ropa levemente "¡Dos veces me interrumpieron para matar al mismo demonio, siendo un demonio debo decir que dios te dio mucha suerte!"

"El que tiene suerte eres tu exorcista renegado" la severa voz femenina llamó la atenci��n de Haru quien estaba bloqueando varias espadas de luz usando un kunai envuelto en elemento viento.

Una mueca de alivio fue mostrada en la cara de Haru al ver que había llegado Rias junto a su nobleza para salvar a Issei antes de que este fuera asesinado.

"Te ves un poco ocupado" se burló Rias al ver que Haru estaba rodeado de enemigos.

"No necesitas preocuparte de mí, en cambio tu sirviente parece muy herido para seguir en el combate" dijo Haru señalando al herido Issei que estaba en el suelo y había perdido el conocimiento.

Rias no era tonta y sabía a lo que se refería Haru "Yuuto, koneko aseguren el espacio para la retirada, Akeno libera un poco de carga en Haru-kun" ordenó Rias mientras tomaba a Issei en sus brazos y un círculo con extraños grabados de color carmesí apareció en el suelo.

Un fuerte rayo descendió sobre los exorcistas que tenían limitados los movimientos de Haru, asi quedo completamente liberado el movimiento del pelirrojo "Muchas gracias Himejima-senpai" agradeció Haru con una expresión de alivio.

"Gremory senpai, lleva a la monja contigo es parte del plan de los ángeles caídos" dijo Haru señalando a la rubia que estaba escondida detrás de un árbol con un cuervo en la cabeza.

Rias miro a la monja pero luego negó con su cabeza "Mis círculos de transporte solo pueden llevar a los que pertenecen a mi clan es decir a mis sirvientes"

"Entiendo" Haru se le quedó mirando a la monja y luego miró a Issei "Yo me encargare de la monja en el caso de que no pueda protegerla terminare con su vida. Supongo que eso es mejor que dejársela a los ángeles caídos para que hagan de las suyas" mencionó Haru levantando sus hombros mientras Rias y su nobleza desapareció del lugar.