"¡Uhaaaa!" un largo y ruidoso bostezo salió desde la boca de Haruta mientras caminaba hacia el baño de la casa como era usual en sus mañanas antes de asistir a la escuela.
Fue en el momento que entró en el baño cuando noto algo raro, en el suelo del baño había ropas familiares para Haruta "Jejeje" una risa llena de malicia abundó en Haruta quien se acercó con lentitud a hacia la ducha donde podía ver la silueta femenina.
'¡Esa no es Kiyoko!' Exclamó Haruta deteniéndose de golpe a solo pasos de la ducha, sus manos comenzaron a temblar sin control demostrando que ahora mismo tenía un gran miedo, la cara de Haruta estaba de color rojo '¡Es.... Es, Es la presidenta del club!' exclamó Haruta en su mente mientras daba un paso atrás retrocediendo lentamente sin llamar la atención de Asuna, pronto escucho como la llave de la ducha se cerraba y el agua dejaba de caer.
'¡Mierda!' exclamó Haruta nuevamente mientras su cerebro a toda velocidad pensaba en una posible solución para salir de aquel problema '¡Impulso eléctrico!' exclamó Haruta haciendo que todo se volviera más lento a su alrededor, como si fuera un vendaval Haruta escapó de golpe del lugar.
"¿uh?" pregunto Asuna al abrir la puerta de la ducha y ver como la puerta del baño se cerraba de golpe, pero luego de pensarlo por un segundo su cara se tornó de color rojo.
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Haruta en silencio preparó el desayuno evitando pensar en lo que sucedió antes, como no tenía claro el tiempo que Asuna estaba en su casa debía ser más cuidadoso, ahora mismo la situación era muy diferente a cuando Kiyoko lo visitaba.
Cuando Kiyoko se queda en la casa de Haruta ambos terminan en la misma habitación por ende no existe la privacidad, sin mencionar que Haruta es quien despierta primero una de las causas de ello debe ser la vitalidad que posee gracias al sistema.
Con Asuna en la casa la situación es muy diferente ya que es la presidenta del club y no tienen ningún tipo de relación sentimental o algo similar, ambos solo son compañeros de club y Asuna está en la casa de Haruta debido a un problema familiar.
"Sigh..." suspiro Haruta mientras rascaba la parte posterior de su cabeza con vergüenza mientras recordaba la situación en el baño "jejeje" rio Haruta para luego sacudir su cabeza con fuerza "No no no, no esta bien que yo haga eso"
"¿hacer que?" la suave voz femenina apareció al lado derecho de Haruta justo en su oído sorprendiendo a este.
"¡Hik!" Exclamó Haruta dando pasas atrás golpeándose la cabeza con una sartén que estaba colgada detrás "¿P-Presidenta?" tartamudeo Haruta sorprendido al ver a Asuna cerca de él.
"¿Te encuentras bien Haruta?" pregunto Asuna acercándose para ver el estado de Haruta con preocupación.
"No es nada" respondió Haruta levantándose "¿qué vas a hacer ahora presidenta?"
Asuna dudo un momento de su respuesta ya que no tenía nada planeado "Realmente.... no quiero ser una molestia-"
"No tengo problema alguno en que te quedes aquí, la casa es muy grande y tiene espacio de sobra" Haruta interrumpió las palabras de Asuna, mientras miraba hacia un lado con vergüenza y rascaba la parte trasera de su cabeza nervioso "Así que puedes quedarte lo que necesites"
"¡Muchas gracias!" agradeció Asuna juntando sus manos mientras hacía una pequeña reverencia, Haruta por otro lado parecía algo incomodo con lo sucedido.
"Tu casa es realmente gigante, me sorprendí mucho la primera vez que la vi" dijo Asuna mirando el pasillo donde estaban las habitaciones el cual parecía no tener un final, luego miró a un lado donde comenzaba la sala para el restaurante del papa de Haruta "¿Este es el restaurante que hablaste antes?
"Si, este es el restaurante de la familia Ichijou, realmente esta casa es de mi padre al parecer mi abuelo se la heredo para que se encargara del negocio familiar pero mi padre decidió ser cocinero, ese era su sueño" dijo Haruta mientras encendía las luces que estaban en los bordes del restaurante para iluminar una sala de aspecto rústico, todas las paredes tenían ventanas en semicírculos que iban desde la parte superior de la pared hasta el mismo suelo con bordes en madera, grandes mesas y sillas hechas de madera, candelabros colgando del techo con varias velas desgastadas.
Al final del restaurante se podía ver la cocina, un lugar amplio de color blanco donde perfectamente podrían trabajar siete u ocho personas.
"¡Es hermoso!" exclamó Asuna mirando la sala con atención
"La verdad lleva un tiempo sin ser utilizado así que no está en óptimas condiciones" dijo Haruta avergonzado de la apariencia del restaurante "Aunque todos los permisos siguen al dia"
"¿de que estas hablando?" pregunto Asuna dándose la vuelta con las manos en su espalda "Hiciste tu mayor esfuerzo para mantenerlo limpio, deberías estar feliz de que se vea tan hermoso" las palabras de Asuna obligaron a que Haruta girara la cabeza rascando la parte trasera con vergüenza.
"Quiero ver el resto de la casa" declaró Asuna con una gran sonrisa
"Sigh..." suspiro Haruta sabiendo a que llevaría esta situación, pero a fin de mantener a Asuna lejos de sus problemas decidió aceptar guiandola afuera del restaurante.
Ambos caminaron por el corredor pasando pasando por una puerta en el final del corredor, así finalmente Haruta dejo el ala este de su casa para ver lo que ofrecía la casa realmente.
Justo al otro lado de la puerta estaba otro corredor en horizontal, que rodeaba un pequeño extenso jardín marchito, el corredor estaba envuelto en polvo lo que cambiaba el aspecto de la casa a un lúgubre con la sensación de que había sido olvidado.
La expresión de Asuna no era la mejor en este momento mientras contemplaba el seco jardín, la cara de Haruta no tenía una expresión notable y solo camino hasta la otra intersección la cual guiaba a otro corredor específicamente el ala norte
"Vamos, no podemos quedarnos aquí mucho tiempo sino tardaremos todo el dia en ver la casa" dijo Haruta abriendo la puerta para entrar en el otro corredor.
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