Año 2056, en una ciudad en el área de Yuan Jiang Su Jin. En la parte superior de una vivienda residencial de seis pisos, arruinada y destruida, se encontraba un adolescente vistiendo un chaleco de combate, pantalones militares y botas de combate de aleación. En su espalda había un escudo hexagonal y su equipo es una espada de combate de sombra-sangre. Estaba sentado allí, en silencio, al borde del tejado. En ese momento, el resplandeciente cielo brillaba y había un aliento refrescante en el aire que soplaba hacia él. Sin embargo, solo había silencio en la desierta ciudad en ruinas, con un aullido ocasional que hacía saltar corazones.
El cielo, de un azul intenso, parecía una gigantesca esmeralda; el sol estival, una enorme bola de fuego colgada en la cima de esa enorme esmeralda. Teniendo en cuenta la posición del sol, uno podía estimar que eran cerca de las tres de la tarde.
En la escuela secundaria número tres de la región Zhi-An, a medida que la sonora campana sonaba, el campus tomaba vida con conmoción y jaleo. De cada edificio se derramaban los estudiantes, riendo mientras se dirigían en grupos hacia el portón de la escuela.
—¡Hermano [1] Luo Feng! ¡Hermano Luo Feng! —gritó una voz gruesa.
—Feng, alguien te llama.
En medio del grupo de estudiantes, un adolescente que sostenía un marcador de libros caminaba junto con ellos. Llevaba un uniforme deportivo azul, nada especial, tenía unos 175 centímetros de altura y era un poco flaco. En ese momento, volvió la cabeza, vacilante. La persona que lo llamaba era un tipo de unos 190 centímetros, con hombros de tigre y una cintura de oso. Sus bíceps eran aún más musculosos y asombrosos.
—¿Tú eres? —titubeó Luo Feng al verlo acercarse y sin reconocer a la persona frente a él.
De estas dos personas, una era robusta y parecida a un oso marrón, mientras que el "Hermano Luo Feng" era una persona normal. Y la altura... La diferencia era inmensa. Sin embargo, este tipo de hombros amplios y extensa cintura parecía mostrar formalidad. Con cuidado, miró al "Hermano Luo Feng" que él admiraba.
—Al parecer, los rumores eran ciertos. El Hermano Luo Feng es una persona con la que se puede hablar sin dificultad. Hermano Luo Feng, yo… Yo tengo algo con lo que necesito la ayuda del Hermano Luo Feng.
—¿Con qué? —rio Luo Feng.
—Cuando estaba entrenando mis puños, sentí que algo estaba mal cuando golpeaba. Me preguntaba si Hermano tenía algo de tiempo para darme algunos consejos —el tipo rudo continuó—. Mi maestro del dojo dice que, con mi fuerza, yo debería ser capaz de liberar un golpe por encima del 50% en poder. Sin embargo, nunca puedo alcanzar ese valor, en absoluto.
El tipo rudo miró expectante a Luo Feng.
—Ah... Ya veo —Luo Feng pausó por un momento, asintiendo con la cabeza—. De acuerdo, este viernes al mediodía, encuéntrame en el dojo.
—Gracias, Hermano. Gracias, Hermano —, el tipo rudo le agradeció repetidas veces.
Luo Feng río un poco y luego se fue con sus amigos.
Viendo que Luo Feng se había ido, el tipo rudo mostró su emoción. Apretó su puño y, mientras las venas de sus bíceps parecían estallar, gritó con entusiasmo.
—¡Un éxito!
—¡Vaya! ¡¿El Hermano Luo Feng accedió tan fácilmente?! —exclamó un niño vestido con el uniforme del colegio.
—Los rumores sí son ciertos; el Hermano Luo Feng es una persona con la que se puede hablar sin dificultad, y es una buena persona —, sonrió el tipo rudo.
—Pero… Eso no puede ser. En nuestra escuela secundaria número tres [2], de los cinco mil estudiantes, solo tres son capaces de recibir el título de "Estudiante Élite de Artes Marciales". De esos tres estudiantes, los otros dos son Zhang Hao Bai y Liu Ting, pero ellos son demasiado orgullosos y no están dispuestos a usar su tiempo para guiarnos —dijo con dudas el niño en el uniforme del colegio—. ¿Pero el Hermano Luo Feng sí?
En ese momento, alrededor del mundo entero y en cada región, prácticamente todos los estudiantes de secundaria recibían una educación básica y también se unían a un dojo de artes marciales para desatar el poder dormido dentro de cada persona.
La escuela secundaria número tres de la región Zhi-An tenía tres grados y alrededor de cinco mil estudiantes. En su mayoría, todos eran principiantes en el dojo. Solo un número extremadamente pequeño de ellos era "miembro intermedio". ¡Y solo tres podían alcanzar el título de "Miembro Élite"!
—Verlo es creerlo. ¿Ven eso? El Hermano Luo Feng es distinto a los otros dos —el tipo rudo rizó sus labios con una risita—. Zhang Hao Bai y Liu Ting vienen de familias muy adineradas. Desde que eran muy jóvenes, sus familias invirtieron una enorme cantidad de dinero en criarlos y entrenarlos, y es por eso que ellos son tan fuertes ahora. Sin embargo, Luo Feng es completamente distinto a ellos.
—Yo también escuché que el Hermano Luo Feng tiene un trasfondo normal. Incluso vive en una casa de alquiler —asintió el niño en uniforme.
—Sí, porque el Hermano Luo Feng llegó a donde está hoy únicamente con amargo entrenamiento, dependiendo de sus puños y pies; totalmente al contrario de Zhang Hao Bai y Liu Ting —el tipo duro apretó su puño y respiró profundo—. Mi meta es ser como el Hermano Luo Feng y, antes de graduarme de la universidad, en esos cuatro años, ¡pasaré el examen del dojo y alcanzaré el rango de "Miembro Élite"!
En ese momento, el Hermano Luo Feng del que hablaban seguía al chorro de personas que se dirigían al tercer portón, junto con otro niño en uniforme deportivo.
—Feng, cuando ese gran tonto que te estaba pidiendo consejos se fue, te estaba alabando —rió el niño en uniforme deportivo—. Alababa la gran persona que eres y cómo es tan fácil hablar contigo.
—¿Qué? ¿Estás celoso, Wei Wen? —rio Luo Feng.
—¿Celoso de ti? —Wei Wen tocó su nariz y rio—. En tus sueños. Estaba suspirando porque el tonto no conoce al verdadero "Hermano Luo Feng". Pero yo recuerdo en vívidos detalles aquella vez en la plataforma de competencia del dojo en la que el "Hermano Luo Feng" que él alaba peleó con tres personas consecutivas. Y esos tres estudiantes ni siquiera pudieron ponerse de pie otra vez.
Luo Feng rió. De hecho, esa competencia lo había alzado a la fama.
—Vamos a casa —dijo Luo Feng, dando un golpe al hombro de Wei Wen.
—Feng, más despacio, por favor. Con ese solo golpe, mi hombro está a punto de hacerse añicos —dijo Wei Wen con un temblor exagerado del hombro.
—¡Otra vez!
Wei Wen era el gran amigo de Luo Feng y el que había jugado con él desde que era pequeño. Aunque no eran hermanos de sangre, el sentimiento era tal como si lo hubieses sido. Escuela primaria, media y secundaria. Mirando atrás, se veía que esos dos de verdad compartían un vínculo profundo.
—¿Eh? —Wei Wen dijo al mirar repentinamente hacia adelante—. Feng, mira, es la niña que te gusta.
—¿Mm? —Luo Feng también miró y, de entre la multitud, solo vio a la niña con el cabello alzado, jeans y una remera polo blanca.
El corazón de Luo Feng dio un salto. Un nombre barrió su corazón: ¡Xu Xin!
Pocos conocían el secreto del enamoramiento de Luo Feng con Xu Xin, pero su buen amigo Wei Wen naturalmente lo sabía de hacía años.
Durante su primer año de secundaria, Luo Feng y Xu Xin estuvieron en el mismo grado. La primera vez que Luo Feng vio a Xu Xin, él sintió que había algo brillante frente a él.
Dicho esto, durante las clases, Luo Feng se sentaba atrás y, por alguna razón, no podía controlarse: sin darse cuenta miraba la espalda de Xu Xin. Solo la miraba en silencio y con eso estaba satisfecho.
Como las clases se volvieron a mezclar en el segundo año, él y Xu Xin ya no estaban en el mismo grado. Sin embargo, cada vez que Luo Feng la veía, no podía sacarle los ojos de encima.
«Solo queda un mes hasta los exámenes», se dijo a sí mismo Luo Feng. «Nunca he tenido el coraje ni el tiempo para el romance. En el mes final, todos están repasando frenéticamente y Xu Xin quiere mejorarse a sí misma. ¿Cómo podría ella distraerse con romance? Igual para mí. No puedo perder la concentración, o lo lamentaré por el resto de mi vida. Como sea, este amor… Solo será un recuerdo.»
El amor... es amargo. La flor ni siquiera había florecido y ya se había marchitado. Luo Feng solo quería poner todo eso al fondo de su corazón, silenciosamente.
—Tuviste tu oportunidad de ir tras ella. Ahora que solo queda un mes —dijo Wei Wen , sacudiendo su cabeza—, me temo que nunca la volverás a ver. En el futuro, será demasiado tarde para siquiera arrepentirse.
—Wei Wen, detente —Luo Feng dijo, también sacudiendo su cabeza—. Sin haber alcanzado el título de "Luchador", no me distraeré con romance.
—Hermano, eres bastante cruel. ¿"Luchador"? En toda nuestra escuela de cinco mil personas, ni una sola fue capaz de alcanzar ese rango. ¿Te atreves a decir que, si no lo alcanzas, no te distraerás con romance? ¡Vaca! ¡Eres una vaca!
—¿Mm? —Luo Feng lanzó una mirada hacia un grupo de cinco personas en la multitud fuera del portón—. ¿Zhang Hao Bai?
Del grupo de estudiantes al otro lado del portón, había cinco personas que eran muy llamativas, cuyo líder medía al menos 180 centímetros, vestía una remera blanca y pantalones blancos y tenía enormes pectorales. Las cuatro personas que lo rodeaban, ya sea por musculatura o por tener cicatrices en el rostro, eran igual de temibles. Y ese adolescente de remera blanca era, de hecho, uno de esos tres de la escuela secundaria número tres de la región Zhi-An que ostentaba el título de "Élite": Zhang Hao Bai.
—Luo Feng —bufó Zhang Hao Bai.
Si alguien preguntaba a Zhang Hao Bai a quién odiaba más en toda la escuela, ¡la respuesta claramente iba a ser Luo Feng! Como uno de los tres que habían ganado el título de "Élite" era una niña, solo dos niños ostentaban el título. Además, Zhang Hao Bai venía de un trasfondo adinerado, mientras que Luo Feng era solo una persona normal que vivía de alquiler en una casa barata.
En cuanto a notas académicas, Luo Feng estaba muy por delante de Zhang Hao Bai. En fortaleza, tanto Luo Feng como Zhang Hao Bai habían ganado el título de "Élite", pero Luo Feng había desafiado a tres estudiantes consecutivos y les había golpeado hasta que ni siquiera se podían poner en pie. Uno de esos tres estudiantes había sido Zhang Hao Bai. ¡Hasta había perdido un diente en esa ocasión!
En cuanto a condiciones en la casa, claramente Zhang Hao Bai tenía el dinero. Un buen trasfondo, pero, al comparar notas y fuerza, Luo Feng era muy superior. En la escuela, siempre que alguien le hacía un cumplido a Zhang Hao Bai, ¡alguien más mencionaba a Luo Feng para comparar!
¡Resentimiento! El resentimiento que Zhang Hao Bai tenía hacia Luo Feng era enorme.
—Vámonos —, dijo Zhang Hao Bai pasando su lengua por uno de sus dientes, el cual le dolía ligeramente. Aquella vez que Luo Feng lo golpeó, su boca había estado llena de sangre y Zhang Hao Bai perdió un diente.
—Zhang Hao Bai se comporta mucho mejor desde aquella vez que recibió una golpiza en el dojo. Ya no se meterá contigo otra vez —dijo Wei Wen a Luo Feng mientras el grupo de cinco se alejaba cada vez más.
¿Zhang Hao Bai? Luo Feng nunca se había preocupado por esa persona.
—Prefiero lidiar con menos que con más —dijo Luo Feng mientras caminaba a casa con Wei Wen.
Camino a casa, la bocina de un vehículo sonó en la calle. En ese entonces, todos los vehículos ya usaban energía eléctrica, así que al menos no había olor a gasolina en las calles.
—Wei Wen, hay un mes más antes de los exámenes. Durante este mes, hagamos nuestro mejor esfuerzo —Luo Feng dijo a Wei Wen mientras caminaban—. En ese dojo de ahí, podemos relajarnos por un tiempo, hacer un entrenamiento reconstituyente todos los días, mientras nos concentramos principalmente en los estudios de cultura. Nuestros doce años de trabajo han sido para este examen.
—Sí, doce años de estudios de cultura. Este examen determinará nuestro futuro —suspiró Wei Wen—. Exámenes, exámenes. Como un ejército de diez mil caballos cruzando un puente de madera. [3]
—Sip —asintió Luo Feng.
Las condiciones en su casa no eran muy buenas, aunque él tuviese el título de "Élite". Sin importar cuán mala fuese su nota de cultura, siempre podía conseguir un trabajo como "Guardaespaldas Élite" y ganar fácilmente un salario anual de veinte a treinta mil dólares. Pero ¿estaría satisfecho Luo Feng siendo solo un guardaespaldas?
En ese momento, alrededor de diez mil metros por encima de la región Zhi-An, una enorme águila de corona negra pasaba volando por encima de la ciudad. Su cuerpo tenía alrededor de veinte metros de largo, como un enorme jet de lucha; las plumas de su cuerpo tenían un lustre frío y metálico; las plumas de su cabeza eran de un negro apagado, como una corona negra. Sus enormes garras eran doradas.
Un par de afilados y brillantes ojos azules miró hacia abajo, hacia la ciudad humana, escondiendo una brizna de intención asesina.
¡Pum!
El águila dorada de corona negra, que ya estaba volando muy rápido, de repente aumentó su velocidad exponencialmente, atravesando la barrera del sonido y alcanzando una velocidad asombrosa. Al mismo tiempo, un sonido extremadamente agudo emergió de dentro de su boca. La espantosa onda de choque, que podía verse a simple vista, se extendió rápidamente hacia abajo.
En la región de Zhi-An, en la intersección de la calle Zi-Tian, Luo Feng estaba esperando la luz roja con Wei Wen. De repente, se escuchó un aullido penetrante que no era exactamente como trueno. El sonido del trueno es grande y ensordecedor. Este sonido perforaba los oídos, tanto que Luo Feng sintió un ligero dolor en sus tímpanos y algunas arrugas de malestar aparecieron en su frente. Muchas personas en la calle ya se estaban cubriendo los oídos.
—Ese es el grito de un ave —dijo Luo Feng, mirando hacia el cielo.
Bajo la presión de ese aullido, un enorme pedazo de vidrio de un rascacielos en esa calle se quebró. Un montón de vidrio empezó a caer del cielo. Algunos pedazos cayeron en la vereda, o golpearon a las personas que se encontraban abajo, o inclusive estallaron al chocar con las luces de la calle. Por doquier, se escuchaban sonidos de explosión.
Uno de los pedazos de vidrio cayó por una luz de la calle que estaba justo al lado de Luo Feng.
—¡Ah! —Wei Wen rápidamente tomó dos pasos hacia atrás, esquivando un pedazo de vidrio resquebrajado.
Uno de los pedazos se quebró contra el piso y salió volando como un cuchillo, justo hacia Luo Feng.
—¿Mm? —Luo Feng lo vio por la esquina de su ojo.
Sin embargo, no había cómo evadirlo. Solo se quedó parado y con calma. En un instante, su mano derecha, como un relámpago, atrapó el vidrio que volaba hacia él. El pedazo reflejó la mirada de Luo Feng. Le dio dos golpecitos y luego lo arrojó. Como un arma escondida, el pedazo de vidrio voló directo hacia un basurero alejado y con precisión entró en él.
En la calle, los vehículos que fueron afectados al principio regresaron rápidamente a la normalidad. Las personas en la calle estaban discutiendo. Algunas de ellas, desafortunadamente, estaban heridas, pero la mayoría no se había lastimado en absoluto.
—Qué fuerza —Luo Feng dijo, mirando hacia el cielo—. Tanto poder en un solo aullido. Debe haber sido una bestia poderosa. Wei Wen, ¿acaso tú no eres bueno con las bestias? ¿Sabes qué tipo de bestia era esa?
Wei Wen echó un vistazo hacia arriba, con una luz de emoción en la abertura de sus ojos.
—Feng, hay un sistema de defensa quinientos metros por encima de esta ciudad. Esa bestia definitivamente estaba volando por encima de esos 500 metros. Aún a esa distancia, su aullido tuvo tanto poder. ¡Y bestias normales no se atreverían a aullar sobre una ciudad humana! Con tanta fuerza y arrogancia, y teniendo en cuenta el sonido, si estoy en lo correcto, ¡esta debería ser una de las temibles "águilas de corona negra"! —dijo Wei Wen solemnemente.
—¿Águila de corona negra? —preguntó Luo Feng con los ojos brillantes.
Por supuesto que él había escuchado de la infame águila de corona negra.
—El águila de corona negra está en el tercer lugar de las especies Diao monstruosas —dijo Wei Wen, también con los ojos brillantes—. El cuerpo de un águila de corona negra adulta mide alrededor de 21 metros. La envergadura de sus alas es de alrededor de 36 metros y su velocidad de vuelo puede llegar a ser 3.9 veces la del sonido. Si la velocidad del sonido es de 340 metros por segundo, eso es 4.774 kilómetros en una hora.
Luo Feng sabía que el águila de corona negra era poderosa, pero una vez que escuchó sobre su extrema velocidad de 1.326 metros por segundos, aguantó su respiración. Un segundo, lo cual es un parpadeo, y ya estaba a mil metros de distancia.
—Las plumas de un águila de corona negra son más duras que un diamante. Probablemente sea tan resistente como una aleación Ke Lei de tercer grado— agregó Wei Wen emocionado—. Hay videos en internet. El águila de corona negra ha seguido a hordas y se ha encontrado con ejércitos. Ha recibido balas de un cañón "Dios del fuego" de 20 milímetros. Un cañón "Dios del fuego" puede disparar siete mil balas por segundo. ¡Siete mil balas por segundo es un torrente de balas! Y cada bala puede atravesar una placa de acero de cincuenta milímetros de grosor. Sin embargo… Aún bajo el bombardeo del cañón "Dios del fuego", ni una sola pluma del águila de corona negra fue herida. Después de eso, un misterioso artista marcial, sosteniendo un cuchillo de batalla de aleación Ke Lei de tercer grado hizo un haz de luz y ¡cortó al águila por la mitad!
El corazón de Luo Feng estaba latiendo más rápido. Ese video se había compartido por todas partes, así que él también lo había visto.
«Definitivamente alcanzaré el título de luchador algún día… Quiero ser como él, capaz de tomar un cuchillo de batalla y abrir por la mitad a monstruos como el águila de corona negra y el poderoso gorila diablo», Luo Feng pensó para sí mismo. Todos los adolescentes tenían ese sueño, y por supuesto que era el sueño de Luo Feng, también.
Sin embargo, de acuerdo con la internet, ese misterioso y poderoso luchador que había abierto por la mitad al águila de corona negra estaba entre los mejores cien a nivel internacional. ¡Un luchador excepcional!
—Feng, Feng, ¿qué estás haciendo? ¡Ya llegamos! —gritó Wei Wen.
Escuchando eso, Luo Feng emergió de la profundidad de sus pensamientos y observó el área repleta de edificios con forma de tubo: Sector Costa Sur Pequeña. El gobierno había construido esa zona pequeña de alquileres económicos. Y Luo Feng había estado viviendo ahí por 18 años.
[1] "Hermano" en este caso no se refiere al parentesco, sino más bien es una expresión de respeto.
[2] "Número tres" no refleja ningún ranking, es solo la numeración de la escuela secundaria.
[3] Esta frase significa que algo es un dolor de cabeza.