—Ya le dieron de alta.
—¿Cuándo? —preguntó Huo Mian, sorprendida.
—Antes de ayer.
—Oh, de acuerdo.
Huo Mian asintió y tomó su teléfono para llamar a Yingzi.
—Hola joven señora.
Yingzi trataba a Huo Mian con educación, muy distinto a como la trataba antes. No era solo porque Huo Mian era la joven señora de GK, era porque ella respetaba la manera en que Huo Mian lidiaba con las cosas.
Huo Mian era dura, apasionada y decidida. Luego de firmar con Ni Yang, ella ayudó a promoverlo, permitiendo que su carrera llegue a nuevas alturas. Luego de enterarse de que Ni Yang estaba enfermo, ella lo ayudó a encontrar un hígado a inclusive arregló su cirugía.
Huo Mian ayudó a Ni Yang con todo lo que pudo, nadie lo trató así en toda su vida. Por lo tanto, Ni Yang verdaderamente veía a Huo Mian como su hermana.
—Yingzi, ¿por qué le dieron de alta tan pronto a Ni Yang? ¿No se suponía que debía quedarse dos semanas?
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