Un mundo digno de proteger
Para el año 3029 CE, la tecnología de la Tierra había avanzado rápidamente, y las fronteras ya no existían. El planeta se había unificado marcando el inicio de la era de la Federación.
En ese entonces, una espada gigante voló por los cielos, perforando el cielo y causando gran conmoción en la tierra.
Tal vez porque el sable del mundo ya estaba hecho trizas, innumerables fragmentos se rompieron como consecuencia de la colisión con el Sol y se esparcieron por todo el universo. Muchos de estos fragmentos cayeron en diferentes lugares de la Tierra.
Con la llegada del sable de bronce y sus pedazos, una nueva fuente de energía ilimitada apareció en la Tierra. La misma fue llamada “Espíritu Qi”.
El Espíritu Qi es como el aire, pesado en algunos lugares y liviano en otros. Y mientras la federación recolecta más fragmentos, realizan más hallazgos sobre cultivación, refinamiento de pastillas y de piedras espirituales, así como otras técnicas.
Las palabras en el sable se sienten ancestrales, imponiendo el uso de un lenguaje antiguo.
La aparición del Espíritu Qi hizo rápidamente que las fuentes de energía originales sean obsoletas, cambiando así la vida de las personas. No solo ha sido formada, sino que ha cambiado el curso de la civilización, haciendo que las sociedades se adentren en el mundo de la cultivación.
Er Gen · Huyền huyễn