Pruebas.

Despierto el domingo temprano. Hoy también será día de visitas, la verdad es que me siento mal por lo de ayer. Mi familia vino a visitarme, eso no es nada malo en realidad, lo que realmente me hace sentir así es lo que ocurrió con Daniela y Emily.

No tengo ánimos suficientes para levantarme de mi cama. Solamente puedo tomar mi teléfono para abrir la aplicación de mensajería y escribirle un mensaje a Emily esperando que conteste.

"Buenos días, ¿podemos hablar?".

Ella no contesta, puede que todavía esté durmiendo. Aun así, me pongo de pie, me doy un baño y me pongo un pantalón negro de mezclilla, una playera blanca lisa y mis tenis grises. Son las ocho de la mañana, debería ir a desayunar.

Tomo mi teléfono y mis llaves, entonces, salgo de mi dormitorio y me dirijo hacia el comedor. Al salir de mi edificio puedo ver a muchos padres de nuevo con sus hijos. No puedo evitar sonreír, la verdad es que siento gusto por ver a todos, incluyéndome, con sus padres.

Cruzo por el domo principal, sin embargo, entra la multitud puedo ver a una chica de cabello rosado. Sandra estaba allí con sus padres, un hombre de unos cincuenta, cabello negro, pero con algunas canas, algo claro de la piel y que viste formal mientras que la madre de Sandy es una mujer algo madura de cabello castaño, piel morena y vistiendo un Palazzo azul.

Sandra me mira y me sonríe con euforia agitando su mano a la distancia, a esto, le respondo con una sonrisa gentil y continuo mi camino. La temperatura es algo más baja que ayer, en todos lados puedo ver familias reunidas disfrutando del momento, parece que todos aquí aman a sus padres.

Al llegar al comedor, ordeno y recibo mi desayuno para sentarme en una mesa completamente solo, entonces, vistiendo una blusa violeta de tirantes, un pantalón negro ajustado y tenis blancos, Emily llega al comedor y se forma.

Es buen momento para hablarle, esperaré a que venga a comer conmigo.

Emily recibió su desayuno y en cuanto giró hacia mi nuestras miradas se cruzaron, pero ella me evadió, tal vez está apenada por lo de ayer. Sin embargo, ella camina hacia una banca muy alejada de la mía.

"¿Eh?".

Me quedo observando esto mientras sostengo mi tenedor con un trozo de melón sin poder meterlo en mi boca, quedé perplejo.

Emily se sienta en una silla dándome la espalda por completo.

¿Qué demonios está pasando? ¿Por qué me evade? ¿Debería ir a buscarla?

Tomo mi bandeja, me pongo de pie y camino hasta su mesa, me siento frente a ella, sin embargo, en cuanto hago eso, Emily me mira con una gran sorpresa, su cuerpo comenzó a temblar y su expresión facial cambió a una de tristeza evidente.

"¿Emi? ¿Estás bien?", pregunto.

Ella mira hacia otro lado, se pone de pie y me deja sin respuesta para irse con su bandeja del lugar.

¡Qué rayos está pasando!

Sentí mi corazón estrujarse como una botella de plástico luego de tomarte toda el agua. Las ganas de llorar inundaron mi cabeza, no puedo moverme, en ese momento, mi desayuno comenzó a tomar un sabor amargo y asqueroso.

Pasé la mañana intentando encontrarla, pero jamás logré contactarla, no contestó mis mensajes, ella realmente me estaba evadiendo. ¿Por qué lo hace? ¿Será que ella siente algo por mí? No, es imposible, ella no podría sentir algo por mí. Aunque, ¿por qué me duele que ella me ignore? No es como que esté enamorado, solo somos amigos, pero, cuando ella hace estas cosas siento que mi corazón se hace polvo.

¿Qué es lo que siento?

La tarde llegó y tomé la decisión de buscarla, solamente los guardias podrían decirme en qué habitación y en qué edificio vive Emily, por ello, recorro los edificios de las mujeres hasta encontrar el indicado.

"Buenos días", digo.

"Buenos días", responde el guardia del dormitorio femenino.

"Disculpe, supongo que este es el edificio donde Emily vive", digo.

"¿Emily? ¿La niña rara?", pregunta.

¿Rara? ¡Dejen de decirle así, malditos idiotas!

"Sí, ella", respondo, apretando mis puños conteniendo mis emociones. Realmente quería gritarle que no le dijera así.

"Sí, aquí vive, en el dormitorio 23", dice.

"Gracias, con permiso", digo, entonces subo las escaleras hasta llegar a la planta donde se encuentra su habitación, sin embargo, las mujeres que encuentro por aquí me miran con intriga, algunas sonríen, pero permanezco inerte ante sus expresiones.

Finalmente llego a su dormitorio, luego de suspirar toco su puerta, puede que ella no esté ya que está tardando demasiado en abrir, o tal vez simplemente esté evitando abrirla para no hacer contacto conmigo.

Sin embargo, tras unos minutos, cuando estoy decidido a irme, ella abre la puerta con miedo.

"¡Emily!", digo, entrando de golpe y cerrando la puerta.

He estado sintiéndome tan mal que verla en este momento provoca que saque todo lo que llevo dentro.

Ella camina rápidamente hacia atrás y tropieza cayendo de espaldas al suelo y yo sobre ella, sin embargo, no puedo tomarle importancia, solo quiero respuestas.

"Emily, por favor, me estás matando", digo.

Ella balbucea y no puede articular ninguna palabra, simplemente tartamudea mientras mira mis ojos con los suyos completamente abiertos y su cuerpo tiembla como gelatina.

"¿Matándote?", pregunta, tartamudeando demasiado.

"¡Sí! ¡Me has estado evadiendo y eso realmente me lastima!", exclamo, cerrando mis ojos y presionando mis dientes con fuerza.

"No quiero que estés lejos de mí, solo quiero que estés conmigo como lo has hecho todo este tiempo, dime, ¿por qué me ignoras?".

Emily permanece temblando y sus lágrimas comienzan a brotar en silencio.

Carajo, creo que me he excedido.

"Eric, perdóname, realmente lo siento mucho. Pero… no sé por qué lo hago, verte me lastima", responde entre sollozos y tartamudeos.

"¿Por qué?", pregunto.

"¡No lo sé!", exclama, cerrando sus ojos con rabia.

"No sé por qué me duele verte, me da miedo".

En ese momento, mi cuerpo se pone flojo y me siento en el suelo recargándome sobre mis brazos, ella de igual forma lo hace y cruza sus piernas, pero se aleja un poco de mí.

"Lamento haberte atacado así… es solo que me sentía muy mal", digo.

Ella me mira expectante.

"Lo siento también…", dice.

El silencio nos invade, aún así, no sé por qué dice que le duele verme, realmente es extraño.

"…"

No sé que más decir, la verdad es que me estoy poniendo bastante nervioso, ahora que mi adrenalina disminuyó puedo prestar atención a mi alrededor, el cuarto de Emily es igual que el mío, pero tiene muchas cosas como peluches, posters de bandas musicales, además, un muro está pintado en mosaico con diferentes tonalidades de púrpura.

Tiene un pequeño televisor y una laptop en su escritorio. La verdad es que nunca me habría imaginado así el cuarto de Emily.

"¿Quién era ella?", pregunta, con timidez.

¿Eh? ¿A quién se refiere?

Me toma unos segundos darme cuenta de que ella en realidad está refiriéndose a Daniela.

"Ah, ella es una amiga, solo eso", respondo.

Digo eso evitando mirar hacia Emily, pero, puedo ver en reojos que aprieta sus puños en cuanto digo eso.

"¿Por qué… te estaba besando?", pregunta de nuevo tartamudeando.

"Porque aparentemente ella me quiere, pero, hace tiempo que yo no siento nada por ella, solo la veo como una amiga y nada más", respondo.

Emily aligera sus manos con mi respuesta.

"¿Estás diciendo… que en realidad no son nada?", pregunta, relajando su voz.

"Sí, ella y yo solo somos una amistad y nada más, en realidad, ella vino solo para declararme su amor, pero, cuando le di la oportunidad ella no me quiso, ahora no estoy interesado en ella", respondo, dejando salir un suspiro inmenso.

"Ya veo…", dice, relajando todo su cuerpo y su voz.

"¿Ella no te atrae?", pregunta.

La verdad es que el cuerpo de Daniela es hermoso, me parece muy atractivo, pero, ahora en realidad no me atrae en absoluto.

"No, no por el momento", respondo.

Emily sonríe ligeramente y me mira nuevamente.

Sus ojos brillan como siempre, su sonrisa es hermosa, su expresión relajada se ve incluso más destellante con la luz que entra por su ventana, mi corazón se acelera un poco al ver su rostro nuevamente.

"Perdón por haberte ignorado, no sé por qué lo hice", dice.

"Descuida, solo no lo vuelvas a hacer, si algo te molesta dímelo, estaré dispuesto a darte respuestas", digo con una gran sonrisa.

"Me lastima que no me hables, quiero que seamos amigos, muy buenos amigos, Emi, no quiero que te alejes de mí", digo, dejando salir un rostro lleno de felicidad.

Sin embargo, Emily comienza a ponerse roja como un tomate, su cuerpo empieza a temblar de nuevo y me evade la mirada otra vez.

"Yo… yo también quiero estar siempre contigo, gracias por ayudarme en todo momento, Eric, eres un buen amigo", dice.

Con esto, sé que mi amistad con ella se ha recuperado. Tras eso me pongo de pie, me despido de ella y salgo de su habitación.

Ah, hermano, me siento mucho mejor, Emily no me odia, no es nada de eso, fui un tonto al imaginar cosas que no eran. Tal vez ella simplemente pensó que no querría ser más su amigo, pero ¿por qué le lastimaría verme? No entiendo nada. Las mujeres son complejas.

Entonces, despierto de mis pensamientos y noto que las mujeres me miran algo sorprendidas, es como si estuvieran esperando a que saliera solo para obtener alguna respuesta de lo que estaba ocurriendo dentro del dormitorio de Emily.

No me interesa lo que piensen, así que me doy la vuelta y salgo del edificio de dormitorios para regresar a mi habitación.

Pasé la tarde jugando con mi consola de videojuegos, la verdad es que extrañaba mucho esto, por supuesto, me encargué de jugar algo de fútbol o disparos. Mi vida no está tan mal, tengo una amistad sincera, tengo poderes, bueno, tendré poderes, mi mejor amigo que es mi primo se casará, voy a ser tío, ¿qué me falta? Creo que nada.

Ya es lunes, las pruebas comienzan a las diez de la mañana. Las indicaciones son sencillas, todos pueden observar las pruebas si gustan o permanecer realizando cualquier otro tipo de actividades. Anoche Emily me dijo que sus pruebas serían el martes, pero Diana las tendrá hoy. Sandra las tendrá el mismo día que Emily y Rodrigo el jueves. Yo, por supuesto, debo esperar hasta el siguiente mes solo para realizar alguna prueba.

Emily ha fallado anteriormente, puede que esta vez sea la definitiva, espero que sea así, muero de curiosidad por saber qué tipo de poderes tendrá cada uno de mis amigos.

Tras tomar mi desayuno en compañía de mis amigos, nos dirigimos hacia el campo, el cual tiene grandes estructuras como muros, sierras enormes, trituradoras, cañones, y muchas cosas más.

Yo visto ropa civil, un pantalón de mezclilla azul, una camisa manga larga azul abierta y una playera debajo de color rojo. La verdad hoy el clima está favorable, no hace tanto calor y corre mucho viento.

Sin embargo, Diana tendrá sus pruebas y lleva ropa deportiva. Todos nos sentamos en las gradas junto a Diana.

"¿Estás nerviosa?", pregunto.

Ella no me mira, solamente permanece fija en el circuito de pruebas.

"No, estoy lista", dice.

Ella miente, puedo ver como todo su cuerpo tiembla.

"¡Diana no vayas a morir!", exclama Sandra abrazándola.

"Sandy, el circuito está diseñado únicamente para hacernos daño, no para matarnos, ¿no es así Emily?", pregunta.

Emily asiente tímidamente.

"Ninguna flecha, bala, sierra u obstáculo te matará, he fallado dos ocasiones, aquí sigo, sin mencionar que perdí un brazo en mi primera prueba", dice.

¿Eh?

"Emily… ¿perdiste un qué?", digo, completamente frito por lo que dijo.

Ella sonríe burlonamente.

"Sí, una sierra logró cortarme mi brazo, me estaba desmayando al ver mi brazo tirado en el suelo y mi sangre chorreando por montones, pero, la doctora Fabiola tiene el poder de la regeneración y curación".

Ahora tengo un poco escalofríos. Sin embargo, lo que Emily dijo solamente dejó paralizada a Sandra y por supuesto, también a Diana.

"¡No quiero que te pase nada!", exclama Sandra entre llanto.

A veces creo que Sandra es como una niña pequeña.

Diana acaricia la cabeza de Sandra y la abraza.

"Ya, no seas tonta, no me pasará nada", dice.

Las pruebas estaban por iniciar y Diana tuvo que irse a formar con el grupo de los que hoy participarían. Hay diferentes profesores situados en el circuito de forma estratégica.

Marco está en un lugar de esos, Fabiola también, el profesor que me separó de David en aquella pelea también se encuentra allí, y por supuesto, el director.

"Atención, todos los participantes deberán terminar el recorrido pase lo que pase. El circuito no está diseñado para acabar con la vida de ningún participante, pero sí puede provocar daño severo. Todo el sistema está diseñado para cualquier tipo de habilidad que pueda surgir, desde telepatía hasta control temporal", dice la subdirectora por los parlantes.

"Si sufren algún daño deberán resistir a terminar toda la prueba, una vez alcanzada la meta final serán tratados médica, psicológica y fisiológicamente. Buena suerte a todos, les deseamos éxito".

Las pruebas comenzaron, muchos chicos de mi clase despertaron sus poderes, pero fue aterrador, tengo que admitir que vi como algunos cañones eran detonados y sus balas atravesaban las extremidades de ellos. Uno incluso perdió ambas piernas, pero terminó todo el circuito arrastrándose hasta conseguirlo, pero, eso hizo que despertara su poder, el poder de la regeneración.

Mutantes que pueden volar, otros con super fuerza, super velocidad, telequinesis, control elemental, cambia formas, entre otros. Sandra no toleró ver tanta sangre y terminó yéndose a vomitar.

Emily cubría sus ojos al igual que yo, no toleré ver tanta carnicería. Entonces, llegó el turno de Diana. Ella se posicionó en la línea de salida, puedo ver su rostro serio de siempre, sin embargo, sé perfectamente que está tan asustada como cualquier persona podría estarlo, en realidad el hecho de que pueda mantenerse de pie y moverse habitualmente es sorprendente.

Pero, supongo que el escuchar todos los días sobre los mutantes nos va preparando psicológicamente para este evento.

Punto de vista de Diana.

Me encuentro de pie justo en la línea de salida, mi cuerpo tiembla, me siento mareada, mi sentido auditivo se encuentra aturdido, siento que me desmayaré en cualquier momento. No quiero esto, quiero una vida normal, sin embargo, sé que eso es realmente imposible. Quiero vivir.

La corneta suena indicando la línea de salida y rápidamente corro sobre el pasillo principal, la primera parte son flechas que salen de un muro a mi izquierda, solo tengo que deslizarme por el suelo.

Esquivo las flechas y me levanto a gran velocidad para seguir corriendo, sé que el siguiente obstáculo es una cuchilla afilada que emerge del suelo a gran velocidad. Saltando justo al momento logro evitar ser cortada, pero en cuanto caigo al suelo de nuevo, una bola de acero se columpia justo a mi abdomen a gran velocidad.

¿Saltar hacia atrás? No, no puedo, la cuchilla me rebanará como milanesa, debo pensar en algo, rápido, maldición. Ya sé.

Salto hacia el frente evitando ser golpeada por la bola, así mismo, rodo en el suelo, pero al levantarme, encuentro cañones que se detonan ni bien me detectan y las balas logran perforar mi brazo derecho y mi pierna izquierda.

"¡Argh!".

Caigo al suelo mientras veo como mi sangre brota rápidamente. Dijeron que debo continuar, debo hacerlo, no puedo detenerme, si lo hago me dejarán morir aquí. Comienzo arrastrándome por el suelo, mezclando mi sangre con la de mis compañeros que pasaron antes de mí.

El dolor es insoportable, no puedo evitar gemir de dolor mientras avanzo con pasos cojos, es realmente molesto.

"¡Vamos, Diana! ¡Tú puedes!", exclaman Eric, Sandra y Rodrigo desde las gradas.

Sandra está llorando, es muy infantil, hace dramas por todo, pero no la culpo. Del muro derecho son disparadas cinco sierras, de las cuales puedo evadir solo cuatro, una se incrusta en mi brazo izquierdo muy profundo.

"¡Ah!".

No debo retirarla, si lo hago comenzaré a desangrarme más de lo que ya con las balas.

"¡No puedo ver!", exclama Sandra ocultando su rostro en el pecho de Eric.

Él me está mirando con un rostro de impotencia, es como si quisiera entrar aquí y sacarme él mismo. Tengo que seguir, tengo que hacerlo, no puedo detenerme. Mi oído se ensordece, no escucho nada más que un pitido, supongo que estoy perdiendo poco a poco mis sentidos porque voy a desmayarme.

No puedo rendirme, así muera desangrada, debo avanzar. Vamos, yo sé que puedo.

"¡Muévete, cuerpo de mierda!", exclamo, moviéndome lentamente, pero avanzando poco a poco.

Entonces, algo comienza a resonar en mi cabeza, es como si estuviera en un túnel, el ruido hace eco.

"Si me escuchas, entonces sabrás que la siguiente parte tiene dos sierras enormes, una saldrá del suelo y otra del muro derecho, te recomiendo que en cuanto salga una entonces esperes tres segundos a que salga la otra para no ser alcanzada por esta".

¿Eh? ¿Quién está hablando?

Miro a todos lados, pero la voz es femenina. Es realmente femenina, esa voz la conozco. La única mujer aquí es la doctora Fabiola que se encuentra encima de uno de los muros. Mi mirada se dirige hacia ella.

"Jeje", ella me sonríe gentilmente.

No ha dicho nada, ¿por qué escuché eso?

"Si puedes escucharme entonces di que me escuchas".

No entiendo lo que ocurre, pero, tomo una bocanada de aire para gritar, "¡Puedo escucharte!".

La doctora Fabiola me sonríe alegremente y me mira con determinación.

"¡Entonces sigue avanzando, ya te dije lo de las sierras, te curaré!".

Ella estira sus manos hacia mí y libera un brillo verdoso de sus manos, entonces, mis heridas se cierran, las balas y la cierra caen al suelo y me he recuperado.

"¡Ahora corre, te diré todo el circuito, sigue avanzando!".

Tomo impulso y comienzo a correr a gran velocidad, esquivando todos los obstáculos mientras ella me los dice.

"¡Sierra en el suelo, brinca ya! ¡Cañones a la derecha, deslízate!".

No obstante, mientras corro por todo el circuito, la doctora Fabiola levanta un pañuelo verde mientras lo sacude de un lado a otro. Así, logro terminar el circuito, mi corazón late con fuerza, apenas y puedo respirar.

"Diana Hernández Rodríguez, resultado favorable, poder obtenido: telequinesis", dice la subdirectora por medio de los parlantes.

La doctora Fabiola pone su mano en mi hombre y puedo sentir como mi ritmo cardíaco se regula.

"¡Bien hecho, Dianita!", exclama dándome un fuerte abrazo.

Su aroma es a mujer femenina y madura debe usar un perfume caro, realmente huele genial, es relajante.

"¡Diana!", escucho que alguien exclama a la distancia, entonces, me giro para ver a Sandra corriendo hacia mí a gran velocidad. En cuanto está a una distancia óptima ella simplemente se lanza contra mí derrumbándome al suelo sin previo aviso.

"¡Sandra, espera, me lastimas!", exclamo.

"¡Tenía mucho miedo por ti, no quiero que me dejes sola!", exclama.

Bueno, a pesar de todo, realmente la aprecio, qué más da si me aplasta un poco.

Punto de vista de Eric.

Estoy fascinado por la intensidad de la prueba, al ver que ella simplemente terminó el circuito me hace sentir genial. Pero, durante el proceso realmente me sentí estresado, pensé que algo podría salir mal, si resbalas y caes mal sobre una sierra puedes morir cortado en dos.

Afortunadamente nada pasó, pero, realmente me sentí estresado. Emily, quien tenía su rostro escondido en mi pecho finalmente me suelta.

"¿Estás bien?", pregunto.

"Sí, gracias", responde.

Tras eso, intentamos hablar con Diana, pero, simplemente fue llevada por auxiliares a la enfermería. No entiendo por qué no nos dejaron verla. Según Sandra, se la llevan como a todos aquellos que logran despertar sus poderes y no los dejan salir durante días ya que les hacen pruebas de todo tipo para verificar sus poderes.

Ahora es un nuevo día, le toca a Emily, me levanto muy temprano por la mañana. La verdad es que creo que estoy más nervioso que nadie, tengo miedo, no quiero que le pase nada, aunque, ella ha sobrevivido antes a esto, sé que podrá.

Sé que realmente podrá.

Tras vestirme, desayunar y reunirme con todos mis amigos a excepción de Diana, solo falta encontrar a Emily, quien no la hemos visto ni siquiera en el desayuno. Voy a su dormitorio, pero nadie abre, toco diez veces con fuerza, pero simplemente no abre la puerta, tal vez ni siquiera está aquí.

Me veo en la necesidad de regresar con los chicos, y para mi sorpresa ella ya está aquí.

"Emi, ¿dónde estabas?", pregunto.

Ella está temblando, me mira a los ojos por un instante y luego evade mi mirada.

"Tenía miedo, pero logré tomar algo de valor, dice Sandra que ya han desayunado así que creo que por el momento comeré sola", dice, con una voz temblorosa como su cuerpo.

"Sí, pero no necesariamente debes comer sola, vamos a hacerte compañía", digo.

Acompañamos a Emily para que desayune, pero ella simplemente no deja de temblar, parece un pequeño chihuahua.

Tras el desayuno, caminamos a las gradas y nuevamente nos sentamos, en todo momento intento hacer reír a Emily, los chicos se dan cuenta de mis intenciones y comienzan a contar anécdotas vergonzosas o graciosas simplemente para que Emily se relaje un poco, aparentemente está funcionando ya que ella simplemente deja de temblar de un momento a otro y empieza a reírse con nosotros, claro, tan suave como siempre.

Tras unos minutos, la llamada de los participantes sonó por los parlantes, Emily ya no está tan nerviosa como antes.

"Tengo que ir", dice mientras tartamudea.

"Emily, mucha suerte", digo.

Ella me mira con un rostro pálido pero sorprendido por algún motivo, entonces deja salir una linda sonrisa que penetra mi corazón. Así, ella se marcha rápidamente y reúne con todos en el inicio del circuito.

"¿Realmente creen que pueda despertar sus poderes?", pregunto.

"No lo sé, espero que sí, sino entonces se quedará contigo", responde Sandra.

Es verdad, si vuelve a fallar ella simplemente tendrá que quedarse conmigo en la clase de novatos, no es como que me moleste, pero, siento que eso le impedirá avanzar, además, ya lo dijo el director, debemos cumplir con un mínimo de misiones para poder egresar de aquí es obligatorio que despertemos nuestros poderes.

"¿Qué tipo de poder tendrá?", pregunto.

"No lo sé, es rara, así que su poder debe ser raro", dice Rodrigo.

Yo le doy un gran zape que termina tirándolo sobre el escalón de las gradas.

"¡Ay!", exclama.

Eso te lo mereces por imbécil.

Sandra lleva su mano a su cabeza y comienza a rascar su cabeza.

"La verdad es que no sé, pero, creo que tiene razón, aunque, poderes raros aquí solamente son los Timekeeper", dice Sandra.

Timekeeper, el director es de esa clase.

"¿Crees que ella lo sea?", pregunto.

"No lo sé, Emily parece ser más del tipo defensivo, probablemente solo sea un mutante de tipo elemental", responde, mirando hacia el cielo azulado.

Probablemente tenga razón, ya lo veremos. Aunque, fuera del director, no conozco a ningún otro Timekeeper.

"¿Hay algún Timekeeper a parte del director en la escuela?", pregunto.

"Sí, pero solo uno, es la clase más rara descubierta, y el director es un Timekeeper de retroceso temporal, el mutante que estudia aquí es uno de clarividencia", dice Sandra.

¿Eh? Así que hay ramas de los Timekeeper. Ese sujeto que dice tiene clarividencia, lo que significa que puede ver el futuro, debe ser genial.

Los candidatos comienzan a pasar uno por uno, pasaron cerca de tres horas, entonces, llegó el turno de Emily.

"¡Vamos, Emily tú puedes!", exclamamos desde las gradas.

Ella nos mira con una pequeña sonrisa y agacha su mirada.

Estoy tan nervioso, mi corazón late con fuerza.

Punto de vista Emily.

Los chicos me apoyan desde las gradas, eso realmente me hace feliz. No es mi primera vez en estas pruebas, sé lo que hay que hacer, sé que puedo, el problema es que los profesores cambian el circuito con sus poderes con cada estudiante que pasa por aquí, así evitan que memoricemos el camino.

Estoy tan nerviosa, siento que me podría desmayar aquí, mi vista se pone borrosa, mis piernas se doblan.

La corneta de inicio suena y no puedo dar un paso siquiera, estoy congelada, entonces, una especie de cañón sale del suelo apuntando hacia mí, es la trampa que te obliga a avanzar.

El cañón en realidad es un lanzallamas, rápidamente lo esquivo y comienzo a correr de forma desesperada, no puedo pensar con claridad, aunque realmente ya he hecho esto anteriormente siempre es tan traumatizante.

Mi corazón late con intensidad, me falta el aire, voy a morir, voy a morir realmente.

Del muro izquierdo un par de cuchillas son lanzadas contra mí, una se dirige a mi abdomen y la otra a mi pierna, no puedo hacer nada, solo salto instintivamente hacia el frente y caigo sobre mi barriga en el suelo. Justo debajo de mí, cinco hornillas comienzan a sonar como una tetera hirviendo y me ruedo hacia mi derecha ya que todas liberan una inmensa cantidad de fuego, me hubiera rostizado si no lo hubiera hecho.

Me pongo de pie, pero mis piernas no responden adecuadamente provocando que me caiga de nuevo en un par de ocasiones. Mi corazón late tan fuerte que siento mi sangre fluir por todo mi cuerpo, es como si tuviera una bomba de al menos 10 caballos de fuerza dentro de mi pecho. Mi adrenalina está por las nubes, mi cuerpo tiembla y ya no sé si es por miedo o por ello. Sigo corriendo, más cuchillas son lanzadas, muchas sierras salen de todos lados, balas, flechas, todo iba bien, pero, no puedo despertar mis poderes. Estoy tan cerca del final que siento que otra vez fallaré.

¡Necesito hacerlo! ¡No quiero fallar de nuevo!

Sierras aparecen de la nada frente a mí y solo puedo brincar encima de ellas, pero, mi salto no fue tan alto y mi pierna derecha es cortada a profundidad, en cuanto caigo al suelo me derribo sobre mi espalda y miro mi pierna.

Tengo una gran fisura en mi pantorrilla, mi sangre brota a chorros, mi respiración no cede. El dolor comienza a hacerse tan intenso, no puedo hacer nada, realmente estoy congelada.

Entonces, puedo ver como un par de cañones emerge de ambos muros justo a la altura de mi cabeza, si no me muevo me van a asesinar.

"¡Muévete, Emily!", exclama Eric desde las gradas.

Intento ponerme de pie, pero, realmente no puedo, solo me queda agacharme por completo.

Me recuesto en el suelo, sin embargo, más cañones aparecen, la única solución es realmente moverme de aquí, no puedo más, realmente no puedo. El doctor Marco me mira con desesperación, no puedo escucharlo, pero está gritando algo a los demás.

Sobre los muros aparecen más auxiliares, pero solo me observan, ¿qué está pasando aquí?

"¡Déjame!", exclama Eric.

Mi mirada se fija en Eric, quien está forcejeando con Rodrigo, él está desesperado, simplemente está perdido en la rabia. Sandra intenta detenerlo, pero él no los deja, empuja a ambos y corre hacia acá.

No te metas en más problemas por mí, por favor.

"¡Eric, basta!", exclama un profesor, apareciendo frente a él y deteniéndolo al poner una mano en su frente. Eric simplemente se relaja un poco, es como si el profesor fuera un mutante de control mental.

No quiero más problemas, ni para mí ni para él, ni para nadie.

¡No quiero sufrir más!

Mis lágrimas se derraman por mis mejillas, pero, en cuanto abro mis ojos, todo se ha puesto oscuro, como si se hubiera nublado repentinamente. La temperatura comenzó a descender y todo el sonido se esfumó, no hay aire, es como si el tiempo se hubiera detenido.

Me arrastro por el suelo por un momento, cerca de diez segundos después, todo regresa a la normalidad. Los cañones se detonaron y dispararon de forma inmediata, si yo no me hubiera movido habría muerto.

Entonces, la corneta sonó, indicando que la prueba se interrumpe de la nada.

"Emily Vigil Ruíz, resultado favorable", dice la subdirectora a través de los parlantes.

El director se acerca a ella y le dice algo al oído, ella entonces abre sus ojos de par en par.

"Mutante clase Timekeeper, poder obtenido: retención temporal".

Entonces, ¿puedo detener el tiempo? ¿Es eso por lo que todo se vio de esa forma? ¿Detuve el tiempo? Es increíble, mi cuerpo entero está temblando, todos los profesores me miran con asombro, pero, ni siquiera terminé el circuito, me faltaron unos cuantos metros, desconozco si había más objetos o no.

La doctora Fabiola me cura y entonces me pongo de pie, creo que los nervios aún no se me pasan. Me toman mis signos, pero, de cierta forma no escucho nada de lo que dicen, aun así, me siento ligera, me siento mejor, no sé, es como si algo hubiera abandonado mi cuerpo.

Miro hacia Eric, quien me mira con una especie de miedo, ¿por qué? ¿Qué te hice? No me mires así, por favor, mírame de otra forma, pero no así, me lastimas. Sandra y Rodrigo yacen sentados en las gradas hablando entre ellos. Eso me está molestando, con Diana todos fueron diferentes, ¿qué rayos les pasa?

¿Realmente nadie puede quererme?

Punto de vista de Eric.

Emily está allí, en el suelo.

¡Ponte de pie! ¡No te rindas! ¡Por favor, no lo hagas!

Instintivamente me levanto de mi asiento y comienzo a caminar rumbo al circuito. Entonces, Rodrigo me toma del brazo.

"No, déjala, no le pasará nada, los profesores se interpondrán", dice.

Mi mirada se pinta de un desagrado total, es como si estuviera viendo a una cucaracha.

Suéltame, infeliz.

Golpeo la mano de Rodrigo y sigo mi camino, entonces, me sujeta con fuerza del mi abdomen.

"¡Eric, basta!", exclama. Sujetándome con fuerza.

"¡Déjame!", exclamo, forcejando contra él.

Así, Sandra se une y me sujeta por la cintura.

"¡Eric, detente!", exclama.

"¡Suéltenme, carajo, suéltenme!".

Sin más, los empujo a ambos contra el suelo y comienzo a correr a gran velocidad, sin embargo, un profesor aparece repentinamente frente a mí y coloca su mano en mi frente, de alguna forma, mi corazón late con normalidad, es como si me hubiera relajado de forma instantánea.

"Ella estará bien, debes relaja-".

¿Eh? ¿Relajarme? Espera.

El cielo se oscureció, no, no es que se haya oscurecido, todo se está tornando de un tono gris, la temperatura comenzó a descender, no hay viento, no hay ruido, y, sobre todo, el profesor frente a mí es como si estuviera congelado.

Miro a mi alrededor, todo luce congelado, entonces recuerdo aquella noche.

"Nos veremos pronto", fueron las palabras de ese sujeto.

Recuerdo esa noche, esta sensación, es exactamente igual, no fue un sueño, fue real, es imposible, no puede ser. ¡Es imposible!

Mi corazón comienza a latir con velocidad, mi respiración se acelera, ¿por qué? ¿Por qué tengo tanto miedo? Miro desesperadamente hacia todos lados, ¿han regresado? ¿Quiénes son? ¿Por qué me buscan? Necesito respuestas.

El sonido de cada latido de mi corazón lo escucho en lo más profundo de mis oídos, es realmente perturbador. Es como si cada latido fuera una campanada y mi respiración se asemeja con el ruido de la turbina de un avión.

Entonces, la temperatura regresa a su estado original, el aire comienza a correr de nuevo, la luz parece regresar de igual forma.

"-te. Tranquilízate, Eric", dice el profesor.

Es verdad, se había quedado a media palabra, realmente el tiempo se detuvo, pero ¿quién fue?

Mi mirada se fija en el circuito de pruebas donde Emily se encuentra, y entonces la corneta suena de nuevo. ¿Fue ella? ¿Realmente fue ella? Mi cuerpo está temblando, no puedo evitar mirarla con miedo, no es que me asuste, pero, realmente me siento confundido y alterado. Entonces, solo el aviso de la subdirectora puede confirmarlo, Emily realmente fue quien detuvo el tiempo. Ella me mira, su mirada es algo diferente a la de siempre, en cuanto cruzamos miradas, ella deja salir una expresión de decepción y agacha su mirada.

Maldición. Mi cuerpo no reacciona, quiero ir con ella, se la llevarán y no podré verla hasta el viernes, maldita sea.

Puedo ver como se llevan a Emily justo como a Diana, ella ni siquiera me mira nuevamente. Ahora, solo me queda esperar a que la dejen salir de nuevo de donde sea que la lleven.

Me resigno, dejando caer mis brazos y caminando hacia el dormitorio.

"Eric, espera, ¿a dónde vas?", pregunta Sandra.

"Estoy agotado", respondo.

Llego a mi habitación y me acuesto en mi cama, ignoro por completo el hecho de que tengo que ir por mis alimentos al comedor, aún así, no salgo, ella me miró y solo pudo ver un rostro de miedo en mí. Ella buscaba cualquier otra mirada, menos esa.

"¡Mierda!", exclamo, golpeando mi cama.

Otro día más, no pude dormir anoche, la luz ya entra por mi ventana, no puedo levantarme de mi cama, ni siquiera tengo apetito, solo quiero que ella me mire como siempre lo hace. ¿Por qué? ¿Por qué me duele? Nunca me había sentido así, fuera de las demás personas con las que me he relacionado, jamás me he sentido así. Es como si Emily me hiciera sentir cosas diferentes. No, no es como si lo hiciera, ¡Ella realmente me hace sentir cosas que nadie jamás había logrado!

¿Por qué? ¿Qué es lo que siento por ella? ¿Es amor?

Alguien toca a mi puerta, entonces puedo escuchar a Rodrigo.

"Eric, amigo, ¿vamos a desayunar?", dice desde afuera.

"Te perdiste la prueba de Sandy, es increíble, Sandra es una mutante de tipo curación, se puede curar a sí misma, o bueno eso vi".

Mi silencio absoluto responde por mí mismo.

Sandra es una mutante de curación, increíble, parece que nuestro grupo de amigos al final podrá formar un equipo de mutantes.

"Iré al comedor, si vas conmigo, podremos comer juntos, por fin sin chicas eh, un desayuno de puros hombres, espero verte", dice.

Para este momento, Rodrigo se ha marchado. Miré a Emily con miedo y no estuve allí para Sandra, ¿qué clase de amigo soy? Al menos debo estar para Rodrigo.

Me levanto de mi cama, tomo un baño, me visto y salgo de mi habitación para dirigirme rumbo al comedor, me reúno con mi amigo y entonces desayunamos juntos. Aunque me duela el hecho de que Emily me miró de esa forma, no debo permanecer abatido solo por esas cosas, podré solucionarlo cuando vuelva a verla, el viernes podré verla de nuevo. Pasé todo el día con Rodrigo mirando las pruebas, por supuesto, como no estuvieron las chicas, él aprovechó para comportarse de una forma pervertida y grotesca, mirando lascivamente a las mujeres.

Es jueves, el día de pruebas de Rodrigo, aparentemente él es el único que para este momento ha estado tan relajado, es como si ni siquiera estuviera preocupado, como si no le importara morir.

"¿Estás bien?", pregunto.

Él simplemente me mira abriendo su boca y sacando su lengua haciendo una expresión obscena.

"¡Wahh! ¡Amigo, venimos a esta vida a morir! ¡No voy a sentirme mal por algo que realmente no me matará!", exclama.

No cabe duda, es un imbécil.

Rodrigo sale corriendo rumbo a la agrupación para las pruebas finales. Es como si estuviera resignado, tal vez realmente es eso. Para sorpresa de todos, el primer participante fue él.

La corneta suena y Rodrigo corre a través de todo el circuito como un caballo desbocado, no es que no tenga miedo, puedo escucharlo gritar por su vida.

"¡Ahhh!", grita, mientras corre desesperadamente.

Tal vez no es que esté listo para esto, simplemente no piensa en ello para no tener miedo. Rodrigo apenas y puede esquivar los obstáculos por mera suerte, en lugar de sentirme preocupado me causa mucha gracia y no puedo evitar reírme de él.

Simplemente es gracioso como corre levantando sus brazos al aire. Entonces, Rodrigo repentinamente desaparece del circuito y choca con un muro al final donde se encuentran algunos profesores y médicos auxiliares. A la distancia que me encuentro, el sonido tarda un poco en llegar, pero, es como si algo hubiera explotado.

Los médicos rápidamente corren a auxiliarlo y lo curan, pues, se hizo daño con el impacto y tiene un trozo de madera perforando su abdomen.

"Rodrigo Guevara Suárez, resultado favorable, poder obtenido: super velocidad", dice, la subdirectora.

Es increíble, en realidad rompió la barrera del sonido y por eso pude escuchar como si algo hubiera explotado.

En cuanto curan a Rodrigo, lo toman entre varios, pues, aunque lo han curado, él está desmayado, ya sea por el golpe que recibió o por el poder que despertó, aun así, él simplemente parece estar dormido en un sueño profundo.

Ahora estoy solo, no puedo esperar a ver a Emily, Diana, Sandra y Rodrigo de nuevo, mañana los van a liberar, muero de ganas por salir de este lugar y visitar la ciudad con ellos.

Camino hacia mi habitación, pues, ya no me importa la participación de los demás, todos mis amigos han sido llevados a sus estudios finales, así que, no tengo nada que hacer aquí.