Odisea en el Satélite XL
La nave se va desprendiendo en sus partes hasta solo quedar intacta la capsula que lleva a los viajeros. Una misión simple a fin de hacer las reparaciones pertinentes en el satélite XL.El radar indica unos movimientos que parecen normales a los sensores del mismo.- Aquí, a Alfa, ¿todo está bien por allí?- Contestando base Beta. Perfecto.- Cambio, y fuera.- Es hora de salir a hacer los arreglos.- Bien, estaremos monitoreando desde el tableroLa mini maquina se acerca muy cuidadosamente al ala principal del satélite averiado. German verifica un presentimiento no está bien, pero no presta atención. Algo se mueve velozmente, y desaparece. Pregunta a sus compatriotas. Ellos no ven nada. Dos de los tripulantes se disponen a salir del triángulo esférico.Comienzan las reparaciones entre tres. Cada uno en el sector correspondiente. El satélite confería una maquinaria sofisticada. Uno de ellos abre una escotilla de aquel, y se introduce para determinar las roturas.- ¡Alfa!, ¿me escucha? – pregunta Xavier –- Aquí, Alfa, ¿Qué ocurre?- Parece extraño, pero no hay ningún tipo de interferencia, ni desperfecto en la maquinaria. Incluso los sensores, y demás elementos electrónicos de señal, están en buenas condiciones. Seguiré verificando.Al comprobar el tablero, en su pantalla, ve algo que le llama la atención. Una masa amorfa se desprende, aparece, y desaparece.- ¿Aquí base me escuchan? – pregunta nuevamente Xavier – Se oye solo silencio– ¿Base?- Si Base. Aquí ¿Qué ocurre? -- Preciso que examinen el tablero, estoy comprobando una estructura que se mueve, posiblemente un asteroide.Al revisar el monitor, comprueban solo un espacio vacío.- Xavier, no hay nada suspendido.- Es extraño aquí la veo, y se dirige a Tomas en el ala derecha- Tomas ¿me escuchas? ¿Tomas?. -- Sí ¡Aquí!- Sal del sector del satélite. Algo se aproxima.- No puedo ver nada – Tomas –De la nada, una piedra gigante aparece encima de él como traspasando una puerta. Este intenta esquivar con lentitud aquella, y se aleja, pero es tarde y es lanzado suspendiéndose cerca de la nave.- ¡Tomas!, ¿Estas bien?- Afirmativo. ¿No sé de dónde vino? De repente, no había nada, y apareció una roca giganteTomas, suspendido, se encuentra, sin manera de regresar. La manguera sostiene afirmando que no desaparezca en la nada. El golpe lo tiene aturdido, y su traje se encuentra con un ligero corte. Harry, mientras en el ala derecha con la soldadora intenta cortar parte de los arreglos para ir por su amigo. Xavier dentro del satélite verifica lo sucedido. Algo no está bien. Nada bien. Una luz se hace presente cerca de Tomas.-- ¡Harry! ¡Me oyes vé por Tomas!, sigue el rumbo del propulsor de aire -Explica Xavier- ¡Perfecto!Harry se lanza muy lentamente traspasando el mecanismo del gigante aparato. Tomas presiente el gélido sentimiento del espanto en su piel. Aguanta Tomas, ya llegaré a ti, se dice, y a solo unos metros algo detrás de su amigo se mimetiza con cierto movimiento.- ¡Base!, ¿Me oye? - cita Harry –- ¡Si escuchamos!.- Hay algo detrás de Tomas. Una bola gigante. No parece un asteroide – explica -- No estamos pudiendo verificar nada. –- Desde aquí tampoco – manifiesta Xavier. –La bola desaparece, en un parpadeo de ojos, conflicto que le parece extraño a Harry. Al llegar a su amigo (que perdido en sentido, recupera un poco aquella sensación, por el golpe), lo toma por el brazo.-Vamos viejo. Te sacaré de aquí. –Éste sonríe, Harry le devuelve aquella mueca, y del espejo Tomas descubre que detrás de sí, una monstruosidad con alas aparece desde un diminuto hoyo. Harry grita al ver a la criatura. Ésta abre sus fauces y corta en dos a su amigo, tragando la mitad de su cuerpo. Parte de las piernas y el vientre se deslizan sobre el espacio. La sangre comienza a fluir en el exterior, y una línea de intestinos se suspende como moléculas que van y vienen misturándose con las heces del pobre Tomas.- ¿Base? ¡Base!. ¡Ayuda!- ¿Qué ocurre? ¿Qué ocurre?- Algo ataco a Tomas. Algo. Ah, algo allíSin tiempo de poder terminar, el monstruo aparece en un segundo y abraza a Harry clavando sus tentáculos cual bestia marina.- En el monitor logran captar lo sucedido -- Aguanta Harry. –Ambos salen desesperados de la nave, en su ayuda. Xavier llama a la central desde el XL.- ¡S.O.S¡ Aquí desde la Alfa a Beta. Estamos teniendo problemas. Repito estamos teniendo problemas.Nadie responde los llamados. La transmisión se encuentra cerrada.Ofelia, e Igor abren la escotilla. Nada puede observarse más que la negra desolación del espacio, y el satélite.Ambos se separan, cuando Ofelia observa con susto como partes de lo que parece ser Harry viajan si poder reaccionar a la estrellas. Su cuerpo totalmente destruido. Del pánico, y sin pensarlo va en busca de Igor cuando descubre en segundos que algo estaba devorándo, en cuanto lo masticaba sosteniéndolo con sus garras tentaculares. La gran bestia teníaunos ojos gigantes como sus dientes afilados. Sus alas se batían como si fueran las de un dragón. La criatura parecía estar entre una abertura cósmica.- Xavier ayuda. Algo está atacando a Igor. – Comenta con terror Ofelia.La pantalla de Xavier apenas puede mostrar la embestida que verifique aquella impresión de su compañera.- Voy por ti – le dice. –Se abre la escotilla, para ir en ayuda de Ofelia. Ella retrocede ante lo que presencia. Y la bestia la asalta sigilosamente. Conforma sus fauces, y expresa un alarido fatal. Extiende sus alas y vuela hacia ella. Desesperada, intenta introducirse en el centro del XL. Las puertas se abren, y Xavier enfrente puede divisar el horror. Toma su mano como puede en rescate de su compatriota, cuando el monstruo clava en una estocada en el cuerpo de Ofelia, perforando todo un estómago que se expande en gotas hacia el espejo del casco de Xavier. Luego siente el tentador crujido de los huesos arcanos que se parten. Solo resta una falange de su brazo, huyendo en la desesperación inexorable de la fatalidad. Con la mano izquierda limpia el vidrio. No hay nada alrededor, solo el miembro resquebrajado. El espanto amedentra su psiquis, y se acerca a las afueras de la oscura y tenebrosa noche espacial. La cosa aparece, y éste nada hacia atrás introduciéndose en la escotilla. Cierra las puertas, e inmediatamente en un eterno pavor se aproxima al radio a fin de pedir ayuda, titilando su pupila y en su poros sudados. El artefacto sigue sin contestar en lo absoluto. Respira hondo; la adrenalina del miedo solo le resta hacerlo pensar en ¿cómo escapar de allí? La transmisión no se logra establecer para su asombro. Un fuerte golpe se presenta en el centro de la XL En su monitor puede visualizar como aquella criatura amorfa direcciona de un lado al otro, teletransportándose. Aparentemente en alguna manera se conduce. Como un Vorterix. La inverosímil figura se mofa en la mórbida mente de aquelsobreviviente que apenas sabe su futuro. Los choques se hacen más intensos. Debe llegar ala Alfa. Y así escapar. Toma una vara puntiaguda, y abre con esfuerzo aquella compuerta. El vacío del espacio, nunca fue tan seductor al espanto de las situaciones anómalas que se gestan.Poco a poco se va deslizando hasta logran tener desde el satélite el alcance de la Alfa. El ruido de un grito aparece de la nada. Algo lo abraza e intenta sostenerlo al sentir el calor de la masa disforme, éste intenta zafarse. La fuerza de aquel, era tal que parecía imposible. Logra darse vuelta, y verse cara a cara con eso que los atacaba. El reflejo del vidrio no mentía. Era un ser de otra galaxia, tal vez, o un demonio. Xavier apunta su lanza en dirección a la boca de aquel que al intentar engullirlo, y recibe el metal de lleno, atravesándolo.El astronauta ayuda con el impulso clavando más y más con potencia el metal. La alimaña suelta aquel, símbolo de presa, y lentamente desaparece introduciéndose en el agujero negro que se lo traga. El aliento de la desesperación y el alivio empañan el vidrio de la máscara. De a poco se traslada al Alfa. Cierra las compuertas. Se despoja del casco que sofocaba su respirar, y se comunica con base logrando establecer contacto.- Base algo terrible ha ocurrido – estoy regresando. Hemos perdido a todos los tripulantes. ¿Base me escucha? - pregunta Xavier. –Al sentarse tranquilamente en el asiento, se prepara para retornar a la tierra. Abrochasus cinturones de seguridad. Y emprende el regreso. El reflejo de la capsula denota la tierra, las estrellas, y la luna menguante brillando en plena acción. Y una sombra por detrás. Una sombra que le da calor cortando con un filo sigiloso y exquisito su cabeza.- Aquí base central, a Alfa. Regresen. Hemos detectado unas anomalías. configuraciones de orificios negros que se abren, y cierran en toda la zona ¿No sabemos qué puede ocurrir?, ¿qué puede haber?, ¿qué les puede suceder? Algo no está bien. Les repito regresen. !REGRESEN!Esas eran las últimas palabras del locutor de la base central. Un mensaje viejo, a los enviados, mientras el satélite XL averiado se desliza por sobre el mundo, junto al Alfa