La chica Maldita

Han pasado 5 años, ahora Ezio ya tiene 10 años, Lía 15 y su hermanita menor Hanna 5. Durante estos años Ezio se ha dedicado al 100% a su entrenamiento, haciendo que descubra cosas sumamente interesantes.

Por otro lado, su relación con su madre y su hermana se han vuelto mucho más cercanas, ya sea en la cabaña, en el rio o en el pueblo, no importa la hora, mientras no haya mucha gente que pueda descubrirlos, el les hará el amor sin importarle nada.

Eso ocasionó también que la familia Barone se ganará una rara reputación en todas las aldeas aledañas.

...

Ezio.- Como el narrador lo dijo, la mayoría de las cosas siguen igual, sin embargo algunas si han cambiado, por ejemplo mi fuerza, gracias a mi entrenamiento constante se realmente el tipo de magia que tengo, se llama Magia Nuclear, la nombré así pues es un tipo de magia que no está registrada en ningún lado según el Mago de la Torre, lugar donde se reparten los grimorios.

¿Por que la llame así? fue lo único que se me vino a la mente cuando el Mago me dijo que se trataba de una magia que hacía chocar partículas mágicas a gran velocidad, haciendo que se combinaran y al mismo tiempo liberando una enorme cantidad de energía además de dejar rastros de radiación mágica, por eso mismo no practico magia a menos que esté solo alejado de los demás.

...

Mientras Ezio entrenaba en lo profundo de bosque, escuchó un grito de una chica que parecía pedir ayuda, eso le hizo recordar la situación con los Silva por lo que rápidamente fue a revisar.

Cuando llegó, pudo notar que no eran los Silva, era una chica rubia semi desnuda de unos 16 años, parecía estar luchando con un grupo de bandidos, ya había derrotado a varios sin embargo los restantes, que eran al menos 20, la estaban acorralando.

Bandido.- ¿Qué sucede cariño? ¿por que no te dejas matar y nos evitas problemas?

Chica.- ¿Por que no mejor me dices quien te envió y te mato?

Bandido.- Supongo que lo haremos de la manera difícil.

Varios tipos se abalanzaron sobre ella, al ser tantos lograron someterla y desnudarla por completo. El jefe de ellos se dirigió hacía ella.

Jefe bandido.- Ha! ¿Eso es todo lo que pudiste hacer? ¿Después de todas las palabras valientes que decías? Iba a darte una muerte rápida pero viéndote mejor... tomaré tu cuerpo como propina por este trabajo...

El bandido se bajó el pantalón para mostrar un enorme pene erecto que ansiaba entrar en la chica, mientras tanto las manos rápidamente comenzaron a masajear pechos los cuales comenzaron a reaccionar poniendo los poniendo los pezones duros y sensibles ante cualquier toque.

Toda la banda de tipos se reía ante el acto, esa chica orgullosa que mato a varios compañeros ya estaba sometida y pronto llegaría su hora.

El Jefe tomó su pene y lo dirigió hacía la entrada, acariciando la vagina de la chica pudo notar como se lubricaba.

La chica nunca lo admitiría pero la sensación le comenzaba a gustar. Ya iba a iniciar con la penetración cuando desde atrás escuchó un grito de dolor.

Bandido.- AAAAHHHH!!!

Al mirar, noto como uno de sus subordinados era calcinado al instante para posteriormente explotar bruscamente.

Enojado por no poder completar el acto con la chica se alejó y se preparo para la batalla buscando al culpable, sin embargo antes de subirse los pantalones recibió un golpe en el rostro que lo mando a volar al menos 10 metros de distancia.

La chica, aliviada por haber sido salvada antes de que su pureza fuera robada, vio como un chico menor que ella golpeaba a los sujetos que la tenían retenida.

Aun así se preocupó, eran muchos para que un chico pudiera encargarse.

Chica.- O-oye tu! corre antes de que te maten!

Ezio.- No te preocupes, ya nada malo te pasará, yo me encargaré de todo.

Al escuchar esas palabras llenas de confianza, la chica no pudo evitar ruborizarse y sentir sentir más seguridad, seguridad que desde hace años no la hacían sentir.

No conocía a ese niño pero la hacía pensar que todo estaría mejor a su lado.

El Jefe, el cual tenía magia de tierra, lanzó un fuerte ataque a la chica, la cual solo pudo cerrar a los ojos y cubrirse con los brazos al no tener oportunidad de defenderse.

Sin embargo, justo antes del impacto Ezio se colocó en frente para recibir el impacto de lleno.

Bandido.- ¿Quién diablos es ese niño?! ¿Cómo sobrevivió a ese ataque?

Ezio.- No se que sucede pero es claro que ustedes son los malos.

Bandido.- ¿Y que harás mocoso? solo mírate, ese ataque fácilmente te rompió el brazo y y varias costillas, apenas puedes ponerte de pie!

Lo que decía el bandido era cierto, Ezio tuvo que aguantar el ataque para que no alcanzara a la chica, sin embargo solo fue cuestión de segundos para que se recuperara por completo gracias a su regeneración, lo cual asustó en cierta medida a los enemigos.

Chica.- ¿Magia curativa?...

Bandido.- ¿Y que si tienes magia curativa?! Solo tengo que atacar otra vez!

Mientras el jefe de los bandidos se preparaba para atacar de nuevo, Ezio no le dio tiempo para hacerlo pues gracias a su fuerte físico llegó rápidamente al frente de su enemigo para posteriormente golpearlo con un poco de su magia.

En un inicio el golpe se sintió como cualquier otro, un poco más fuerte de lo normal pero solo eso, el bandido se iba a comenzar a burlar por tan patético ataque cuando sintió un ardor inmenso en el lugar del impacto para después no sentir nada.

La escena era grotesca, huesos, entrañas, piel y todo lo demás era carbonizado al instante mientras el tipo caía al suelo separado de sus piernas.

Todos los demás quedaron callados, nunca habían visto magia igual.

Ezio.- Parece que no saben lo que sucedió, les explicaré ya que de todos modos están por morir, se llama magia nuclear, hace chocar las partículas mágicas a gran velocidad permitiendo que se fusionen en un núcleo mucho más pesado que el original, esto en consecuencia libera una gran cantidad de energía en forma de calor y algo llamado radiación gamma.

Al ver esto los bandidos intentaron huir sin embargo Ezio no los dejó, matando a algunos pero noqueando a otros terminó por resolver la situación.

Una vez con la situación controlada, la chica se acercó.

Chica.- Mu-muchas gracias, no se quien eres pero de verdad agradezco que hayas aparecido, mi familia te recompensará, eso tenlo por seguro.

Ezio.- No hay problema, vi que tenías problemas y solo ayudé.

Chica.- Hiciste más que eso, permíteme presentarme, soy Charlotte Roselei, ¿me puedes decir tu nombre?

Ezio.- (Charlotte?! de las Rosas Azules?) Soy Ezio Barone, vivo en una aldea cerca de ahí, quieres ir para que descanses un poco?

Charlotte.- Ezio Barone, lo recordaré, gracias pero debo continuar mi viaje.

Ezio.- ¿Vas a algún lado?

Charlotte.- No realmente, estoy en un viaje de entrenamiento para hacerme más fuerte, en este momento como pudiste ver no estoy en mi mejor forma, le copié la idea a una noble de la casa Vermillion y pensé que esto me ayudaría. Por cierto, eres realmente fuerte, cuantos años llevas entrenando?

Ezio.- Al rededor de 5 años aunque aun me falta mejorar muchas cosas.

Charlotte.- 5 años? ¿Cuántos años tienes? 15?

Ezio.- Tengo 10 años.

Charlotte.- ¿Como?! (10 años y con ese físico y esa fuerza?! eso es!)

Ezio.- Bueno, entonces si te vas a ir déjame decirte el pueblo más cercano, aunque sería mejor que te pongas algo de ropa no?

Charlotte se miró a su misma y recordó que su ropa había sido arrancada por esos bandidos.

De inmediato su cara se puso roja por la vergüenza haciendo que se tapara al menos la entrepierna con sus manos.

Momentos después de conseguir un poco de ropa, la chica habló.

Charlotte.- Cambié de opinión Ezio, permite que me quede un poco más contigo.

Ezio.- Claro, no tengo problema pero ¿Porque? (SI!!!! Dios! si!)

Charlotte.- Eres tu lo que buscaba, alguien fuerte con talento nato para la batalla, se que eres un niño y que me acabas de salvar la vida pero por favor, concédeme un duelo!

Ezio.- Duelo? Por que quieres pelear contra mi?

Charlotte.- Quiero ser más fuerte, creo que si peleo contra alguien con tu talento puedo aprender muchas cosas. Por favor, si no eres tu sería una loca por las peleas llamaba Mereoleona o su maestra y ellas son horriblemente fuertes! No tendrían piedad de mi.

Ezio.- Entiendo... supongo que es lo que realmente quieres, prepárate entonces!

Charlotte se colocó en pose de pelea sin embargo apenas activando un poco de magia cayó desmayada, siendo sujetada por Ezio para evitar cualquier contusión.

Ezio.- Supongo que realmente estas agotada, ya habrá tiempo para nuestro duelo...

...

*Mas tarde*

Charlotte.- *Despertando* ¿Eh? ¿Qué sucedió? estaba por tener un duelo con Ezio... por que estoy en una cama con ropa diferente?

Antonella.- Parece que ya despertó nuestra invitada Ezio, ¿Cómo te sientes niña?

Al despertar, lo primero que vio Charlotte fue una habitación de una pequeña cabaña mientras en la puerta se apareció Antonella, una hermosa mujer de cabello largo y negro, de grandes pechos y una figura atractiva para cualquiera, llevaba su habitual atuendo para el hogar, es decir, nada.

Charlotte.- Bien gracias... ¿Quién es usted? y por que... no tiene ropa? oh dios, ¿está es su pijama? no debió dármela si se iba a quedar desnuda! Discúlpeme!

Antonella.- No no! no te preocupes, tengo más pijamas, es solo que estoy más cómoda en mi casa así, y soy Antonella, la madre de Ezio, mi hijo te trajo estando desmayada. Ese niño... no se que hace pero si tan solo encontrara cosas normales en el bosque en lugar de personas.

Ezio.- Hola Charlotte! como estás?

Charlotte.- Ezio, estoy mejor, gracias.

Antonella.- Te traeré algo de cenar.

...

Charlotte.- De nuevo muchas gracias Ezio, no se que hubiera pasado sin ti, de camino pedía direcciones a los aldeanos que veía pero pocos se prestaban a ayudarme, eres el primero que hace esto.

Ezio.- Bueno, algunos aldeanos no tienen en buen termino a los nobles... pero no te preocupes por eso.

Charlotte.- Lo entiendo, los nobles no hemos sido muy buenos últimamente. Cambiando de tema, esos bandidos que me atacaron, parecían como si alguien los hubiera enviado... necesito investigar quien, reunir pruebas y llevar a la persona responsable ante la Corte Real para que pague por sus crímenes!.

Ezio.- No te preocupes por eso, ya descubrí quien fue.

Charlotte.- ¿Que?

Ezio.- Si, de hecho sobre eso te quería hablar, fue tu madre... ella ordenó a los bandidos para que fueran tras de ti.

Charlotte.- ¿Como?...

Ezio.- Entiendo que puede ser traumático, tu propia madre.

Charlotte.- No eso no! pero como lo descubriste?

Ezio.- No recuerdas que deje a unos bandidos noqueados? fue a propósito, cuando te desmayaste les pregunté sobre eso.

Charlotte.- Y ellos te dijeron tranquilamente todo?

Ezio.- Algo así...

Charlotte.- De verdad tienes 10 años?

Ezio.- Si, ya te lo dije, entonces, ¿Qué harás con tu madre?

Charlotte.- Sinceramente no lo sé, hace muchos años que no me habla.

Ezio.- Si lo deseas puedo ayudarte con eso.

Charlotte.- ¿Tu puedes hacer algo? ¿Como?

Ezio.- Bueno, dependiendo de lo dura que quieras ser con ella...

...

A la mañana siguiente Ezio y Charlotte partieron hacía la mansión de los Roselei, situada en una ciudad cercana a la capital, a una distancia de 2 días caminando.

Durante el camino ambos se acercaron cada vez más, Charlotte con 16 años y Ezio con 10 pero con una mentalidad de adulto pudieron encajar mejor de lo que esperaban, tenían muchas cosas en común.

Igualmente, ambos comenzaron a entrenar y tener combates de practica. Aunque claro, todos los ganaba Ezio.

Charlotte.- Realmente eres muy fuerte... no te he podido hacer nada.

Ezio.-Gracias pero creo que también tiene que ver el hecho que no controlas bien tu magia.

Charlotte.- Lo se... sigo siendo mala a pesar de tener ya años entrenando, si no fuera por esa maldición...

Ezio.- Platícame de eso, de que se trata?

Charlotte.- Conforme me voy haciendo mayor mi poder mágico se sale de control, lo peor es que no tengo ninguna pista para romper la maldición, solo se que cuando cumpla 18 años ya no habrá nada que hacer...

Ezio.- (Parece que su maldición sigue igual que en manga, significa que solo se romperá cuando se enamore, no habrá problema ya que se encontrará con Yami cierto?).

Charlotte.- ¿De verdad quieres seguir ayudándome? ¿aun sabiendo que estoy maldita?

Ezio.- Por supuesto que quiero, no me parece justo por lo que estás pasando.

Charlotte.- Gracias...

El viaje continuó, Ezio confiando en que Yami enamoraría a Charlotte al salvarla pero no contando que dentro de ella algo estaba cambiando.

Ezio era la primera persona que la quería ayudar de verdad y no solo porque fuera una noble o porque fuera a sacar algún beneficio, era ayuda real.

Continuará...

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