La ayuda de una persona inesperada

—¿June? —preguntó Jay sorprendido cuando vio a June todo arreglado temprano en la mañana. —¿Vas a algún lugar?

June asintió, colocando su bolso sobre su hombro.

Akira sacudió la cabeza al ver una de las costuras de las correas deshaciéndose.

—¿Desde cuándo tienes esto? —preguntó, tocando el bolso negro.

June miró hacia su espalda y se encogió de hombros.

—No lo sé —dijo—. Probablemente desde que era aprendiz.

June realmente no estaba seguro. Este era uno de los bolsos que tenía el cuerpo original, y June comenzó a usarlo tan pronto como transmigró a su cuerpo. Recibió muchos bolsos de diferentes compañías, pero este bolso era su favorito de todos.

Lo triste era que la marca ya se había borrado, por lo que no sabía dónde comprarlo de nuevo. Por lo tanto, decidió usarlo tal como estaba. ¡Probablemente era el mejor bolso que tenía, incluso con su costosa colección!

—Vas a ser rico con esa mentalidad —dijo Akira, dándole una palmada en la espalda.