Hija en Lugar de Hijo

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La cabeza de Finley latía cuando su padre lo miraba de esa manera. Sabía que se iba a desencadenar una larga y pesada charla. 

Finley estaba a punto de responder, pero entonces su padre se impacientó. Agarrando la muñeca del chico, Evan tiró de su hijo hacia él. 

—¡Fin! ¡Respóndeme! Los ojos rubíes del atractivo papá se enrojecieron, casi convirtiéndose en los de un diablo del infierno. Finley no pudo evitar estremecerse, y su rostro inocente se volvió serio. 

—¡Cálmate, papá! ¡No es como si estuviera embrujado o algo así! Finley sacudió el agarre de su padre en su muñeca y rápidamente se alejó, creando distancia de su papá. 

Aunque todavía están sentados en el mismo sofá…

Sintiendo que su agarre no tocaba nada, Evan miró sus palmas y entrecerró los ojos. 

—...Fin. Explica. El hombre ya no miraba a Finley y simplemente apretó sus puños con fuerza. Sin embargo, el aura helada a su alrededor empeoró, asustando incluso a Percival, su hada contratada.