La subasta

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Qin Yan entró a la sala de subastas con Wu Qi y consiguieron asiento. Pudo escuchar las burlas de los artistas de Starlight Entertainment por parte de Skylark Entertainment.

Cuando la asistente femenina se burló de los artistas de Starlight Entertainment, la gente de alrededor rápidamente se sumó. —¡Por supuesto! Shao Heng tiene el respaldo de Skylark Entertainment. No importa cuán arrogante fue Gong Tianhao en el pasado, no tiene más remedio que bajar la cabeza ante Shao Heng.

La asistente femenina cruzó los brazos sobre su pecho y miró fríamente a todos. —¿Desde cuándo cualquiera podría ser mencionado en la misma frase que mi Shao Heng?

En cuanto Ling Shaozhe escuchó eso, aprovechó la oportunidad para acercarse con una expresión aduladora. —¿Qué dices, Hermana Ying? ¿Cómo se pueden comparar pedazos de basura como estos con el Hermano Shao? Actualmente, Starlight Entertainment apenas logra sostenerse porque tienen a un dios como el Hermano Shao con ellos.