Mantén la Línea (Parte 1)

Sintiendo el Caos que comía su espada, el Dragón Esmeralda la liberó pateando a Lith directamente en el pecho. El impacto lo envió unos metros hacia atrás y le quitó el aire del cuerpo, disipando la ráfaga de Llamas del Vacío que tenía preparada.

Entre la herida y la posición inestable, la Abominación estaba a la defensiva, abierta a otro ataque.

—Se acabó. Ríndete ahora y haré que esto sea indoloro. —Jormun pudo ver con los Ojos de Dragón que Lith aún no había completado un hechizo y que el agujero en su cuerpo aún no se había cerrado.

Esto le dio confianza y, por lo tanto, avanzó para no dar al enemigo tiempo para un solo aliento de Invigoration. Solo había una pequeña abertura entre el casco y la protección del cuello de la armadura de Caminante del Vacío, pero Garra del Dragón la encontró.