Capitulo 23

Los días pasaron y Madara pasaba sus últimos días de descanso junto con Kushina ya que a partir de ahora difícilmente iba a poder verse con tanta frecuencia con ella, así que aprovecho estos días para estar junto con ella.

Divirtiéndose, haciendo comida deliciosa y muchas cosas mas donde ambos se divirtieron como nunca, días inolvidables y pacíficos donde la pasaron realmente bien.

-Ahh.. Después de todo no es tan malo...-

No era lo habitual en la rutina de Madara, pero sin duda estos días donde no había nada mas que paz era bastante buenos para la mente y sobre todo cuando estabas acompañado de una chica linda como Kushina, sin duda era lo que necesitaba antes de adentrarse al verdadero mundo ninja. Antes de la tormenta había un momento de calma y así era como Madara lo estaba tomando en este momento.

"Kushina. Tengo un pequeño regalo para ti"

"¿Un regalo?"

"Si. Quiero darte un obsequio que creo que te servirá mucho en el futuro..."

"¿De que se trata?"

"Es simple. Te enseñare a usar un Jutsu"

"¡¡Un Jutsu!!" Ella grito emocionada al escuchar las palabras de Madara, estaba contenta y deseaba saber que era lo que Madara iba a enseñarle.

"Creo que te servirá mucho para mejorar tu potencial. Sin duda alguna creo que te beneficiara demasiado este Jutsu..."

"¡¿Y cual es el Jutsu?!"

Ella no podia soportar mas la emoción y brinco emocionada en donde se encontraba Madara para saber que Jutsu es el que le iba a enseñar.

Sin duda estaba emocionada y no podia esperar a saber que era lo que iba a mostrarle.

"Esta bien. Como te veo muy motivada te lo mostrare enseguida. Observa con atencion mis movimientos. ¿De acuerdo?"

"¡Por supuesto!"

"Bien..."

Madara se puso de pie y se preparo para lanzar su Jutsu.

Bastante concentrada, Kushina miraba a Madara completamente atenta para no perderse nada de lo que estaba a punto de realizar.

Madara cerro los ojos y rápidamente realizo su Kage Bunshin no Jutsu.

"¡¡Kage Bunshin no Jutsu!!"

"¡Bam!"

Al terminar de usar su Jutsu, varios clones de Madara salieron a su alrededor.

"..."

Kushina, quien estaba muy emocionada al inicio, se decepciono ligeramente al ver que eran Clones comunes y corrientes, no había nada de especial y su emoción bajo completamente por los suelos.

Ella sin duda alguna se encontraba decepcionada.

"Eso no es un simple Bunshin no Jutsu...?"

"Para nada"

"Este Jutsu se trata del Kage Bunshin no Jutsu. Un Jutsu muy superior al Bunshin no Jutsu que es de nivel Jounin"

"¡!"

"¡¿Pero que?!"

Kushina se sorprendió de sobremanera al ver que uno de los clones de Madara había comenzado a hablar.

Ella estaba segura de que el Madara original era el que estaba frente a ella pero ahora estaba muy confundida ya que no podia identificar al real.

"Estaba asegura que tu eras el original. Entonces. ¡¿Por que él puede hablar?!"

"Es por que soy el original"

"¡!"

Estaba simplemente confundida y ahora mismo no entendía nada de lo que estaba sucediendo.

Al inicio se veía muy decepcionada, pero ahora se veía bastante confundida y un poco interesada en este Jutsu.

"Veras. El Bunshin no Jutsu y el Kage Bunshin no Jutsu son Jutsus similares pero a la vez diferentes. El Bunshin no Jutsu solo crea clones de sombra en base a una ilusión mientras que los Kage Bunshin no Jutsu crean clones solidos que toman parte del Chakra del usuario para así hacer clones casi imperceptibles para el ojo humano que además pueden realizar tareas, recobrar información y además también pueden hacer Jutsus por cuenta propia. Son bastante útiles y es Jutsu mas interesante del que se ve a simple vista..."

"Increíble...."

"Quiero que lo aprendas ya que es algo que se que te será de mucha ayuda, es un Jutsu que te dará un enorme aumento en tu fuerza y aumentara en muchos niveles el potencial que tienes ahora mismo. Créeme que es un Jutsu que no te arrepentirás de aprender...."

"...."

"¿Quieres aprenderlo?"

"¡Por supuesto!"

"Es un regalo tuyo y no puedo rechazar tus buenas intenciones.... Todo lo que Madara-Kun me de, lo aceptare con mucho gusto~" Con una gran sonrisa, Kushina acepto el regalo de Madara.

Madara le devolvió la sonrisa y entonces comenzó a enseñarle a como utilizar su Jutsu.

"Sigue mis pasos. ¿De acuerdo?"

"¡Hai!"

Madara pasó todo el día enseñando a Kushina el Kage Bunshin no Jutsu. Al ser Kushina el remplazo de Naruto, era un Jutsu perfecto para ella ya que podia usar miles de clones sin la necesidad de morir por el exceso de Chakra por lo que Madara pensó que seria una buena idea enseñarle este Jutsu a Kushina y tal como pensó fue una grandísima idea.

"¡¡Kage Bunshin no Jutsu!!"

"¡¡Baaamm!!"

"¡Excelente Kushina. Lo lograste!"

"¡Wow!"

"¡¡Lo hiceee!"

Cientos de clones aparecieron y ella mostro él por que este Jutsu era perfecto para ella.

Era tal como Madara lo tenia en mente, este Jutsu iba a servirle mucho y sin duda alguna iba a fortalecerla a largo plazo.

Estaba feliz con el resultado obtenido y por supuesto que también estaba feliz por ella.

"¡¡Madara. Lo logre!!"

Ella brinco a sus brazos y mostro su felicidad. Madara solo recibió su abrazo y felicito su enorme trabajo.

Así fue como ella aprendió el Kage Bunshin no Jutsu. Madara le explico todo respecto a este Jutsu, el como usarlo adecuadamente y todas esas cosas que a Naruto no le explicaron en su momento pero que ahora Madara podia explicárselas a Kushina para que su poder aumentara en gran medida respecto a lo que era Naruto a su edad.

Kushina solo escuchaba las palabras de Madara con mucha atención sin perderse ni un solo detalle.

Así siguieron durante un largo rato hasta que Kushina perfecciono el Jutsu en la medida de lo posible.

Madara le mostro todo lo que tenia que mostrarle y estaba contento de saber que ella podia aprender de esta manera.

Al final del día, logro enseñarle todo lo que tenia que enseñarle a Kushina y estaba feliz en saber que ella pudo dominar perfectamente el Kage Bunshin no Jutsu.

Además estaba contento de ver la sonrisa que se formaba en su rostro al utilizar dicho Jutsu, sin duda alguna eso era lo que mas importaba, ver esa sonrisa de felicidad en su hermoso rostro.

-Todos los riesgos valen la pena... Al menos vale la pena ver la felicidad y la sonrisa en su rostro. Eso es lo único que importa. Que ella verdaderamente sea feliz....-

Fue lo que pensó Madara al ver su hermosa sonrisa.

"Gracias Madara-Kun. Gracias por enseñarme este Jutsu. Estoy muy contenta de que me lo hayas mostrado. De nuevo. Muchas gracias..."

"De nada Kushina. Eso es solo muestra de lo mucho que te aprecio. Espero entiendas que eres importante para mi y esto es solo una muestra de lo mucho que me importas como persona"

"¡Yo igual!"

"¡Yo igual te aprecio mucho. Madara-Kun!"

"Es bueno saberlo..."

La noche fue cayendo y fue momento de volver a casa para descansar, así que Madara decidió que era momento de volver a casa para descansar. Por ello llevo a Kushina a casa para que ella descansara como era debido.

Se veía exhausta y por ello Madara decidió que era momento de terminar con el entrenamiento.

La cargo en su espalda y lentamente la llevo a casa para que ella pudiera descansar.

El cansancio de Kushina era tan grande que no pudo evitar dormirse en la espalda de Madara por el cansancio que ella estaba sintiendo ahora mismo, así que la mayor parte del camino durmió plácidamente en la cómoda espalda de Madara.

Tardo pocos minutos y finalmente llego a casa de Kushina.

Madara abrió la puerta de su casa. Fue a su habitación y lentamente la coloco en su cama.

Cubrió su cuerpo con una sabana y finalmente se despidió de ella.

"Buenas noches. Kushina..."

Le dijo antes de irse y volver rumbo a su casa.

Madara siguio su trayecto rumbo a casa y mientras recorría las solitarias calles de la aldea Madara comenzó a pensar en diferentes cosas que pasaban por su cabeza.

Sin embargo, algo lo saco de sus profundos pensamientos.

"Eso es..."

Mientras caminaba por las calles de la aldea de la hoja, Madara noto una silueta de una persona que le era bastante conocida.

Esa persona vestía con una pequeña capa que tapaba parte de su rostro, sin embargo, su cabello sobresalía y se podia ver de quien era que se trataba esa persona.

Esa persona no era otra que Mikoto Uchiha.

"Extraño.... A donde ira con tanta prisa...?"

Mikoto estaba yendo con bastante prisa a un lugar que Madara desconocía.

No era de su importancia a donde era que ella iba, pero su vestimenta y estar a altas horas de la noche hizo que a Madara le entrara un poco de curiosidad sobre donde era que ella estaba yendo así que en silencio, Madara la siguio para saber en donde era que ella iba a ir.

Madara se desvió de su camino habitual y siguio en total silencio a Mikoto quien iba a toda prisa hacia un lugar que Madara desconocía.

Estaba confundido sobre a donde era que esta chica iría a tan altas horas de las noches, por ello la siguio intentando averiguar a donde era que ella iba a ir, sin embargo, cuanto mas se acercaban, Madara se iba dando cuenta a donde era que se estaban dirigiendo.

-Uchiha clan...-

Mikoto se estaba dirigiendo al clan Uchiha, un antiguo lugar donde muchos recuerdos amargos pasaban por su mente.

Recuerdos antiguos que con el tiempo se habían borrado por completo.

Recuerdos hermosos que ya había olvidado hacia bastante tiempo, recuerdos con su padre, con su madre y los momentos felices que vivo con esta segunda familia que a pesar de no considerarlos como su verdadera familia eran personas a las cuales amó con todo su corazón.

Nunca había venido aquí desde el día de aquel incidente y hacerlo luego de 6 largos años le hizo sentir un extraño sentimiento de amargura en su corazón.

Madara quería irse de aquí, sin embargo, al ver su antiguo clan y lo que alguna vez fue su casa, Madara no pudo evitar ir a lo que alguna vez fue su hogar.

Siguio el camino y luego de unos minutos finalmente llegaron a su destino.

Lo que alguna vez era el glorioso clan Uchiha, ahora solo eran ruinas destrozadas de lo que alguna vez fue algo glorioso.

"...."

"¿Por que te sigues escondiendo?"

"¿Acaso crees que no te he visto?"

"Madara"

"...."

"Je... Supongo que no puedo ocultarme de ti. Mikoto..."

"¿Por que me estabas siguiendo?" Dijo fríamente y con algo de molestia en su voz. 

"Te vi a lo lejos y se me hizo extraño que vistieras de esa forma... Por ello intente seguirte para saber que era lo que estabas haciendo. Ya sabes..."

"¿Por que te importaría lo que yo hago?" Ella seguía con su característica voz fría, sin embargo, en el interior, la respuesta de Madara era algo que ella esperaba profundamente.

"Bueno... Somos compañeros y por supuesto que me preocupa el bienestar de estos... Quiero decir. Una hermosa chica saliendo a altas horas de la noche es algo que preocuparía a cualquiera y fue por eso que decidí seguirte para corroborar que no estuvieras haciendo nada malo..." Madara rascaba su cabeza mientras le decía esas palabras, tenia sonrisa tonta en su rostro mientras le decía esas palabras, realmente no sabia que decirle por lo que lo primero que vino a su mente fue lo primero que salió de su boca.

Mikoto no dijo absolutamente nada, solo giro su cabeza mientras seguía su rumbo.

Madara no entendía lo que estaba pasando, no sabia nada ya que no podia ver su rostro, sin embargo, una pequeña sonrisa salió desde su rostro. Una sonrisa que Madara no podia ver.

"Este era mi antiguo clan... El clan Uchiha.... Aquí era de donde provenía antes de que mi propio hermano eliminara por completo a mi familia y a mi clan..."

Sus palabras mostraban dolor, sufrimiento e ira que sentia a la hora de hablar sobre dicho tema, era palpable la ira que sentia al mencionar a su hermano y todo el odio y sufrimiento que sentia se veía en la silueta de su cuerpo.

Madara tenia un poco de lastima al ver a la pobre chica, sin embargo, no dijo nada y simplemente dejo que ella siguiera hablando.

"Ahora busco eliminarlo... Busco eliminar al bastardo que destrozo mi clan.. Aquel que arrebato mi felicidad... El que me quito todo lo que tenia... El que me hizo ser de esta forma..."

"Cueste lo que cueste eliminare... Incluso daré mi vida para vengarme de lo que le hizo a mi clan..."

"Cueste lo que tenga que costar matare a mi hermano y honrare el nombre de mi clan"

"...."