webnovel

Capitulo 3: ¿Por qué no?

Es otro día más, el sol brilla, un poco de aire hace que el ambiente sea fresco, y hace parecer que ayer el mundo no estaba a punto de desaparecer por una estupidez, o tal vez si, por el llamado "capricho" de una diosa enfrentándose a el mal humor de un rey demonio, ahora Carmilla está en la esquina de la aun silenciosa academia, pareciese esperar a alguien, tiene una bolsa de papel, la coloca en la misma esquina sin dejar de mirar a todos lados, era parecido a una especie de negocio de contrabando.

—Toma y recuerda, nunca me viste

Una mano apareció en la esquina y tomo la bolsa muy rápido.

—Con eso que aquí están todos los del castillo, ¿no se te hizo fácil?

—Si fuese fácil en dos minutos te las hubiese dado, no al día siguiente

—Bueno, fue un gusto hacer negocios contigo

—No es negocio, es chantaje

"Momentos después"

Carmilla estaba recostada tranquilamente en una hamaca, balanceándose poco a poco mientras leía un libro, tenía su forma adulta de cabello largo rizado, más alta que de costumbre ya que la forma pequeña era solo para ahorrar energias, así que ocupaba casi toda la hamaca, aunque Azrael estaba encima de ella, boca abajo, con la cara entre sus pechos mientras respiraba su olor y sentía su piel, a ella no le preocupaba ya que al parecer no era la primera vez que pasaba eso, después de una de las pocos momentos de tranquilidad entre los dos, Azrael parecía despertar ya que se movió un poco.

—... ¿Eh? ¿Qué paso?

— Buenos días, ¿ya estás mejor? — pregunto ella sin mirarlo siguiendo su lectura

Él movió la cabeza y le miró, sabía por la posición en la que estaban que "eso" había ocurrido, dio la vuelta manteniéndose dode estaba y ella bajo el libro hacia el pecho de él, Azrael sabía lo que había hecho.

— ¿Que tan mal lo hice está vez? — pregunto preparándose a la respuesta

— Arrasaste con todas las emociones de todos tus alumnos... y una diosa, como se esperaba de un Rey demonio — dijo Carmilla —, un poco más y llenabas al mundo con caos con ayuda de la diosa de la guerra mas rápido de lo que esperabas

— ¿Tan mal? Rayos, tengo que disculparme con ella y otros

— Ni tanto, hablé con algunos alumnos y realmente se veía que si les afectó lo que les dijiste, pero dicen que mejorarán esos aspectos... aunque tampoco se le quitará del todo, así que mejor dales tiempo, y no los culpes si no vienen a tu clase, de esa Misteltyn... ya me encargué, no quiero que preguntes

— ¿Desde hace cuánto no me pasaba esto?

— Según escuchaba era cuando algún héroe o sujeto no satisfacía tu sed de muerte, casi siempre te pasaba esto, aunque después de que apareció Delta se detuvo y luego cuando vine, vi que te ocurrio cuando no volvieron a aparecer los héroes, aunque después te acostumbraste a eso y hasta ahora estabas limpio

— Ya veo, gracias por tu trabajo

—No hay de que

Azrael se volvió a recargar en el cuerpo de ella y suspiró.

—Pero ¿sabes? Creo que se por qué te paso eso, creo simplemente no estás acostumbrado a esto, a estar relajado... todo el tiempo

Él solo la escuchaba mientras descansaba sobre ella.

»Cosas que no has hecho contra las que siempre hacías, tu concentración se basa en lo que haces ahora y hace que empieces a pensar más en eso que en lo de siempre, eso es tener vacaciones, aunque tú solo lo tomaste de nombre y tener esto justo ahora es bueno ya que se ve que si funciona, aunque no me gustaría que ellos, muy aparte de los que te conocemos realmente vieran cuando realmente te enojas

Lo que había pasado antes solo era una muestra, el primer nivel, había mostrado muchas emociones, pero hasta él se tenía miedo a si mismo cuando eso pasaba... además que fue una de las razones por las que tuvo conflictos con los dioses y el infierno, la razón por la cual lo odian mas que a los anteriores reyes demonios.

— Tendrías que ser un completo, pero completo idiota el cuál piensa que solo llegue a lo de este momento para hacerme enojar de verdad— dijo como si nada

"En otro lado"

La risa en aquel sitio era sonora, el ruido retumbaba en las paredes al igual que golpes dados a la madera fina de la cual estaba hecha aquella gran mesa circular, quienes estaban alrededor estaban controlados, había unas cuantas más pero estaban tratando de ser reprimidas mientras presionaban las mejillas con fuerza, la única persona que no reía estaba furiosa, casi llegando al límite de querer matarlos a todos, pero eso sería un gran problema y mucho papeleo, aquel cuarto estaba iluminado un candil en el centro con velas, las luces en la esquina hechas por lámparas artesanales, ventanales cubiertos por cortinas celestes, el piso de mármol con imágenes de solo una línea cual laberinto en forma de alas y alas sin plumas, un cuadro de un gran lago con el agua color esmeralda, el cielo azul y un poco de terreno pastoso estaba encima una chimenea, no había sirvientes solo las personas que estaban presentes ahí.

— ¿Podemos continuar? — dijo una mujer mientras controlaba su respiración para no hablar de manera rara controlando su ira ya que era quien desprendia su intensión asesina en el aire

— Si, lo... lo siento, en serio lo siento, saben que soy el que se toma las cosas en serio, pero... no pueden negar que esto nadie se lo esperaba — dijo el sujeto mientras acomodaba su cabello castaño hacia atrás, con algunas lágrimas en los ojos y acomodando su ropa tipo esmoquin—, dioses que no habia escuchado algo asi antes

— También nosotros, este tipo de situaciones es realmente inusual — dijo otro sujeto vestido de manera virreinal, una casaca roja hecha con hilos de seda y bordes llamativos dorados, un pantalón café claro, chaleco bordado, camisa blanca, puños con volantes y medias de seda, además de zapatos negros, el cabello totalmente negro, una mirada tranquila pero una sonrisa como si siempre ocultara algo.

Los demás no hablaron, tal vez por qué sabían que con solo las disculpas de aquellos eran suficientes.

— Continuando con lo dicho — dijo el sujeto del esmoquin que había tenido su ataque de risa —, Los informes indican que aquel Dullhalan estuvo ocupado jugando en las tiendas y divirtiéndose junto a la generala Zartremist, los alumnos que llevo también estaban como si nada, el niño que contratamos para vigilarlos también dice que no vio algo extraño en todos ellos, aunque la desaparición de quién se suponía tenía que ser el agente encargado de obtener la armadura, !aun cuando... disculpen... aun cuando ya estaba al alcance de su mano... eso y después el repentino ataque a una cuadrilla preparada, además del evento principal, la resurrección del dragón de la perdición fueron en total... un total fracaso, no hay forma de decirlo de otra manera

Podía sentirse el ambiente queriendo volver a reírse, pero esta vez lo soportaron ya que sabían que ella no se controlaría esta vez.

— Acepto toda la responsabilidad de esto, no estaba en mis cálculos que todo eso pasara, a pesar que lo medí perfectamente para que saliera bien —dijo aquella mujer con una voz furiosa y culpable — es la primera vez que me pasa, y sé que no volverá a ser así

— Lo entendemos así que calma — dijo una voz más animada y no por el ambiente

Aquella mujer asintió y todo mundo callo al escucharla.

— Entonces, ¿ese tal nuevo rey demonio hizo un movimiento o solo fue una coincidencia? — pregunto de nuevo la voz

Nadie quería responder a eso, a pesar de la obviedad del tema, las cosas que se informaron eran verídicas, él no había hecho nada que fuese amenazante a lo que ocurría a su alrededor, ni siquiera sus alumnos, así que era una pregunta casi sin respuesta.

— Interesante, ese sujeto es realmente alguien digno de mi interés, dejando a un lado lo que pasó me gustaría saber lo que están haciendo con respecto a lo otro si no es mucha molestia

— Si, como usted ordene Joven Amo

A quien se dirigía era un joven de tan solo 17 años, bien vestido, de manera elegante, un collar con una piedra verde y una especie de runa nórdica en ella, vistiendo una playera negra con un carácter de signo de interrogación, y una camisa grisácea abierta, ojos verdes con una mirada turbia, de tez blanquecino casi pálido, pero con un aspecto deportivo aunque el rostro mostraba un aspecto jovial.

«Es igual de poderoso que yo, es inteligente, y además es alguien que podría ser un problema» pensó mientras miraba y escuchaba el cacareo de los que eran sus encargados de relaciones exteriores e internas «Estos idiotas aún no son rivales para él, así que solo los dejaré ser, así podrán provocar que el venga a mí y tener todas las piezas que necesito para mí meta personal, espero y la siguiente jugada me dé un resultado jugosos y entretenido, justo como las anteriores»

La reunión termino y cada uno volvió a dónde tenía que estar, unos alegres, otros complacidos y otros ya pensando cómo arreglar sus errores.

— Todo mal, todo mal, tengo que pensar en algo, algo que me ayude a destruir todo esto, ese poder... si tan solo ya me dieran ese poder podría cumplir mi sueño — la mujer hablaba consigo mismo mientras salía de su habitación

Por donde estaba era una gran mansión, tan extensa de punta a punta como un estadio de fútbol moderno, miró alrededor y vio a niños jugar, a más personas y semi-humanos hablar entre ellos, y a otros tanto haciendo el aseo o revisando el lugar.

— Ludobe, ¿Ya estás mejor? — pregunto una niña al mirarla

Ella la miró y sonrió, le acaricio la mejilla.

— Si, solo fue un resfriado, gracias por tu preocupación Eribel

La niña sonrió complacida por el alago y tomo la mano de Ludobe.

— Bien, nuestra ama está a punto de llegar, hay que recibirla, vamos —dijo la niña emocionada

«Cierto, escuché que ella iría a hablar con ese Dullhalan, ¿me preguntó si le fue bien o que pasó?»

Vio como los demás iban hacia el mismo lugar que ellas dos, era la recepción de aquella mansión, desde la entrada afuera hasta aquel lugar, todo estaba cubierto y en dos filas de hombres, niños y mujeres, ansiosos y esperando la llegada de ella.

«Todos como siempre tan fieles a ella, como yo, si, así debe ser» Pensó Ludobe al suspirar tranquilamente

La puerta se abrió y la miró, se veía tan galante, no había ningún día que no mirara ese rostro lleno de amor, lleno de bendiciones hacia todos y lleno de una sonrisa pura y una expresión alegre de verlos, paso tranquilamente y saludo a todo mundo cuál princesa de carnaval, subió las escaleras y les ordenó volver a sus actividades, todos obedecieron tranquilos, tanto como se había llenado se había vaciado el lugar... salvo por una persona, ella estaba embobada, se había quedado estática, la saliva empezó a salirse de su boca, los ojos abiertos y una expresión de asombro y alegría estaba en su rostro, como si hubiese tenido una catarsis.

«Ella... ella... esa expresión... Esa magnífica y débil expresión... si, !si¡ ¡Eso servirá!» pensó tan fuerte que las venas de su cerebro casi estallaba por la presión «mi deseo... mi señora... ha~~~ hermoso~~»

Camino mientras dejaba detrás de sí un río de saliva a su paso.

Mientras tanto Kyle descanso en su cama, y liberó un suspiró deliberadamente largo y cansado.

— Tanto tiempo ha pasado y aun así sigo sintiendo esto... esa chica, tenía la misma aura que... pero no, es una huérfana y si hubiese sido familiar de él o algún podría sentirlo un poco aunque sea, y en ningún momento lo sentí — pensó en voz alta

Se recostó y miró su mano, ahí había una marca en forma de espiral, en el centro estaba un triángulo, ella misma se lo había hecho para no olvidar lo que había pasado hace mucho, pero le dolía observarlo ya que le recordaba a otras cosas por igual.

» Necesito saber si ahí está la persona que sucederá a Delta... y así asesinarla para calmarme por fin... solo ver ese estúpido rostro o esa aura hace que haga cosas que no quiero hacer, y eso no va conmigo, tengo que igual prepararme para atacar a Jezabel, ese bastardo también no se salva de esto

Se levantó y se dispuso a cambiar su ropa, tenía que mostrar que estaba tranquila, que no había pasado nada, tener un rostro normal, sonriente y poderoso, por el bien de sus sirvientes y compañeros, de un vestido paso a una camisa arrugada y un pantalón de mezclilla.

— Sí, tengo que prepararme, dejar de pensar cosas innecesarias y centrarme en lo que mi familia necesita

Tomo un delantal y lo guardo en una bolsa, guantes, lentes y todo lo necesario para la limpieza del hogar.

— Ayudar a mi familia es lo primero, no importa si soy de la realeza, tengo que...

Su mente se nublo por momentos.

«Eres tan estúpida que quieres estar ciega a la fuerza» dijo Delta a ella en el recuerdo

Ambos estaban de frente, ella herida el de pie con una ametralladora y una espada en la cadera.

«Esto, cielos lo que has hecho es realmente malvado, espeluznante, atroz y sádico, ha,ha,ha, y a mí me dicen malvado, que ironía» respondió Jezabel sonriente apenas mostrándolo debajo aquella gran capa que le cubría totalmente el cuerpo justo a un lado de Delta

Eran dos oraciones dichas por ellos, justo después de terminar con todo lo que ella tenía aquella vez, aquella vez cuando el fuego se apagó, ya nadie había sobrevivido más que ella y otros de sus sirvientes, todo por la mano de aquellas personas. Su mirada volvió al presente.

— Les enseñaré... !Les enseñaré que puedo ser mejor... !Lo hare!

Dio un portazo y salió de ahí, su sonrisa fue forzada, pero después se calmó, sin ver qué en el otro lado donde ella se había ido, Ludobe le observaba mirando por una esquina cuál acosador a su víctima mientras se tocaba su parte baja y salivaba sin parar con ojos llenos de éxtasis total.

— ¿Quién es Delta?... ¿Debo saberlo, debo matarlo?... No, aún no se si es necesario... pero, es quien hace que ella esté así... hahh~~~ más, muéstreme más mi señora... más de ese rostro moribundo de dolor hhaa~~

Había llegado al orgasmo solo de seguir pensándolo mientras bajaba poco a poco al piso.

»Mas~~... por favor

Mientras tanto, en otro lado, había un acosador más, pero a la inversas.

— Ra-ven, ¿Puedes decírmelo ahora? — pregunto el acosador sin pena

— Aléjate, das más miedo que de costumbre — respondió la víctima alejándolo una décimo octava vez... en máximo 5 horas.

Todo mientras caminaban por los pasillos llenos de alumnos que habían vuelto a sus actividades.

— Hazlo y entrenare tantas veces quieras y al modo que quieras, ¿Si?

— !Haces sonar eso como si me quisieras chantajear o de una forma rara y asquerosa! — le grito en la cara

— Pero admites que es tentador

— ¡Lo es!... Pero no quiero, por más que mi deseo me destruya después... no quiero hacer nada

— De acuerdo... ¿Quieres hablarlo?

— No soy sentimental, además, ¿por qué tan interesado de repente en esto? Pensé que no le hacías caso a nadie que no fuera ti mismo

Azrael dio pasos hacia adelante y detuvo a Raven.

— ¿Que dices? Tomé este trabajo por qué estaba aburrido, viviendo sin emoción alguna y sin nada que hacer, pero una vez que tomo algo como esto, lo hago de manera sería... la mayoría de veces

— Hasta tú mismo dudas de lo que haces

— Ahem, el punto es que si tomo un trabajo como profesor tengo que serlo, y un profesor es alguien que se preocupa por sus alumnos... al menos eso dice una profesora con la que tomo el té ya que yo no tengo idea, más que mostrar mi poder y enseñarlo

— !DISCULPATE CON TODOS LOS PROFESORES QUE LO HACEN DE CORAZÓN!, ¡¡YA!! — grito Raven a todo pulmón al escuchar eso

— Lo haré después, mientras, ¿aceptas? Solo será entre alumno y profesor... ¿o quieres a Carmilla en mi lugar?

— No, ella está ocupada con los Himikake, así que no puedo interrumpir si trabajo

— Hoo~~ ¿No será por otra cosa que no quieres?— pregunto Azrael

— ¿Cuál? — pregunto ahora Raven son entenderle

Azrael lo miro de manera divertida y dio la vuelta, caminando el solo.

— No lo diré, haré que ella hablé contigo si es que así quieres, si no, solo no vengas, no habrá problema y noto que lo que hiciste te pego duro, eres más abierto que de costumbre cuando estás de este modo

— !Que no soy sentimental!...

— ¿Lo ves? Rayos, eso paso y yo me oculte como un cobarde

Raven se quedó ahí, ni siquiera él sabía por qué le había dicho eso a Kyle, solo fue algo extraño, pero no quería que nadie le mirara de esa manera tan de guardia baja... aun cuando los que estaban en el pasillo le veían de manera tanto comprensible como de burla.

— Es una pérdida de tiempo

"Momentos después"

— Podemos ir a la habitación de Azrael si no quieres que nadie se entere es la mas sellada — dijo Carmilla sentada debajo un árbol e igual a un lado de una línea de arbustos.

—... ese maldito— era muy raro que Raven lanzara maldiciones de corazón hacia alguien

— Deberías ya empezar a acostumbrarte, él gusta de jugar con las emociones de otras personas o enemigos... y aliados... y gente importante... inclusive puedo decirte que él está cerca escuchando esto... — dijo Carmilla con la voz cansada

Raven miró a todos lados buscando furtivamente con sus sentidos y lo que podía buscar aunque sea un poco de aquella presencia molesta, y esa presencia estaba encima, en la rama, junto con Gabriele ya que le estaba enseñando a como compartir su habilidad casi recién descubierta, solo que ella tenía unos audífonos anti ruido para que no supiera la verdad de aquella prueba.

—Bueno ya dejando de lado todo eso, escuché que mandaste sin rodeos al demonio a la condesa de Yireila, ni siquiera a mí me dices eso y con los entrenamientos que te pongo a hacer debería ganar al menos un insulto — dijo Carmilla sonando desilusionada

Raven miro a Carmilla, si estaban "solos" podía decirlo.

— Que yo recuerde, no soy así solo porque si, solo que... no lo sé, mientras ella hablaba de cariños, besos y abrazos, yo sentí como si me insultara, como si todo lo que dijera solo fuera algo vacío, tan vacío e incómodo que me hizo sentir tan mal por dentro, como si a la siguiente palabra quisiera golpearla hasta la muerte, pero nunca me sentía de esa manera, ni siquiera con Azrael que es más maldito que nada — respondió Raven explicando el problema

— Pues para mí suena como si no fuese la primera vez — dijo Carmilla

— Explica

— Cuando alguien habla a la otra parte, está tiende a responder de una manera muy distinta a la otra, si conoces a quien habla puedes saber si miente, si no la conoces, es muy claro que puedes caer, pero si no conoces a esa persona pero si entiendes lo que dice o explica más que otras personas, puedes saber las verdaderas intenciones de esa parte o como realmente se siente al respecto de lo que habla, tu aparentemente lo entendiste de una manera más o menos así, es difícil entender a otros, aun mas difícil entenderse uno mismo, pero veo que tu al menos sabes diferenciar algo de esas personas

Raven se quedó pensando sobre eso, se quedó un rato meditándolo, hasta que pareció tener una revelación.

— Creo que se por qué creo qué...

— Alto, hasta aquí la dejamos — interrumpió de golpe ella

— ¿Eh? ¿Por qué? — pregunto Raven ante lo repentino de ello

— Esto serviría más si se lo dices de frente, aunque tendrías que disculparte con ella y después decirle el por qué

— Es alguien ocupada, poderosa y no creo acercarme así otra vez, menos si sus gorilas no me dejan después de lo que hice

— Ya habrá un momento para eso, sabes que a Azrael le encanta llamar la atención bastante y pienso que ella volverá

— Cierto, entonces me retiro... ¿Cómo se dice? ¿Gracias?

Él se fue de ahí mientras pensaba en lo que ella le había dicho, Azrael bajo del árbol junto a Gabriele y ambos aparecieron a lado de Carmilla.

— Olvide que te encanta el dramatismo— dijo Azrael

— Ya me parezco a Fearry cuando lee las novelas de su hermana sobre aventuras románticas, si no hay otra cosa, me voy a dónde estaba

— ¿Eh? ¿No preguntarás nada del por qué estoy interesado?

— No hay necesidad, absolutamente todos en el castillo saben de lo que tú y Delta hicieron, masacrar a los sirvientes de la Duquesa del infierno más fuerte, torturar a los sobrevivientes, destruir el castillo arrasando con quién sea y dejar viva a la duquesa junto a unos cuantos más solo para no romper tu preciado equilibrio... es demasiado fácil que quieres buscar pelea otra vez sin importar que

Azrael la miró, pero era una mirada pesada llena de alegría enfermiza de ser descubierto, realmente daba un aire aterrador a quien le mirara, menos quien le conocía.

—Primero, no la dejamos viva del todo, solo herida, Delta ayudo un poco al curarla, pero no pensé que había sobrevivido y menos después de ver todo eso, y la otra... No sabes cuánta razón tienes, pero solo lo haré si ella me atacar primero, esa será la condición, no importa el método tan rastrero que haga, yo la haré y la dejaré tan rota y destrozada que me reiré de solo verla, me regocijare cada vez que vea esa mirada sin alma y sin esperanza— su tono de voz era de ultratumba, grave y demoníaco

Salivaba de manera más abundante que Ludobe, no tenía éxtasis en los ojos o al menos esa emoción, parecía solo guardarla para una ocasión especial.

— Tu sí que estás loco — dijo Carmilla dándole la espalda

— Gracias por el cumplido

Sintió un pequeño jaloneo de su manga que lo hizo controlarse más para volver de golpe a la normalidad.

— ! Profesor! !¿Puedo ya quitarme esto!? — grito Gabriele ya que por tener los audífonos sentía que no la escuchaban

Él los quito.

— Si, disculpa eso, quería hablar con Carmilla un poco más

— No hay problema

— Bien, hay que regresar a la clase, controlas esa habilidad de forma tan natural que me sorpre...

Pero no dio un paso sin que sintiera otro jaloneo, miró hacia atrás, Gabriele estaba con la cabeza agachada, el cabello no dejaba ver su nuca o frente, después tomo la misma manga con la otra mano.

— ¿Qué pasa? ¿Te sientes mal? — Pregunto Azrael extrañado de lo que ella hacía — no debí hacer que usarás mucho tu habilidad

— No, no es eso... ehm... Profesor, sabemos que las vacaciones no tardan en llegar...Así que... ehm...

Tomo aire y lo miro, ella tenía una cara tan sonrojada que parecía al color del tomate, ojos llorosos y un sudor recorriendo su cara.

— ¿!PODRIA VENIR A MI CASA UN DIA DE VACACIONES!?

Lo había gritado tan fuerte que le zumbaron los oídos a Azrael.

— Rayos, eres la segunda persona que me grita de esa manera

— ¡Si! !Es sobre eso¡ ¡Le pregunté a mi abuela e investigué demás sobre ese esta habilidad donde más pude, y descubrí... ¡que es un ancestro mío! — siguió gritando

Pero después se calmó de repente.

— Así que... el amigo de usted que lo hizo cambiar... y la razón del por qué está aquí... es mi familia y yo... ¿Verdad?

Azrael sonrió, no era una sonrisa de siempre llena de dientes filosos, sino una tranquila, como si se quitará un peso de encima, ella vio eso e igual sonrió sabiendo el resultado, ya que le acaricio el cabello de manera gentil.

— Sí que tardaste — dijo él demasiado complacido y aliviado de ello

Pero sin que se enteraran había un tercero en discordia que les observaba y escucho todo eso, justo en la esquina de la escuela agrietando esa esquina solo con los dedos de su mano.

Chương tiếp theo