"Bien, es hora de que pongamos una pausa momentánea a este juego y discutamos algo que seguro será interesante"
Yuuma habló tranquilamente con una expresión relajada, trayendo confusión a los agitados corazones de ambos muchachos recién teletransportados.
En un inicio pensaron que serían brutalmente atacados debido a la aterradora presión que sintieron segundos antes.
Sin embargo, la forma en cómo se comportaba actualmente era diametralmente opuesta, sembrando algunas dudas en sus corazones.
"… ¿Qué cosa quieres discutir?"
Nagato habló después de un momento de silencio, sopesando la situación actual.
No tenía muchas opciones de maniobra y de las que tenía, todas eran poco alentadoras.
No necesitó experimentar por mucho tiempo el poder demostrado por ese sujeto, ya que con solo esas dos acciones pudo comprobar el nivel monstruosamente superior.
Este tipo no manejaba chakra, pero parecía no necesitarlo.
Para el pelirrojo, la forma en cómo podía ignorar todo el poder del legendario Dojutsu, incluso llegando a anular algunas de sus habilidades sin ningún esfuerzo, eran prueba fehaciente de cuan capaz era este ser parado frente a él.
"¿Ven cómo se puede conversar sin llegar a hacer tanto escandalo? Como pacifista, no me gusta la violencia, prefiriendo casi siempre la senda de la palabra"
Las palabras dichas por nuestro protagonista casi causan que el Uchiha se caigan por la sinvergüenza que estaba diciendo.
'¿No le gusta la violencia? ¡Las pelotas!'
Obito tenía que aguantar las ganas de no maldecir al oír tremendo disparate. Mujeriego, asesino, estafador, manipulador… el maldito desgraciado era todo menos un pacifista.
De primera mano había experimentado cuan violento y sádico era el demonio que estaba parado frente suyo.
¡Con cada golpe que le propinó aquella vez parecía que una parte de su vida escapaba de su desafortunado cuerpo!
Por ello es que no sabía si reír o llorar ante las palabras que estaba escuchando.
"El motivo por mi visita era debido a las tontas acciones que la juventud de ahora me está causando. Cuando me encontré por primera vez con el mocoso de atrás tenía una idea tan tonta como de liberar al Kyubi y destruir Konoha, algo que me afectaría directamente, por lo que decidí 'corregirlo' para que vaya por el buen camino y deje de pensar tan estúpidamente"
Nuestro protagonista habló mientras señalaba al enmascarado Uchiha.
"¿Mocoso? Eso quiere decir que Madara…"
Antes de que Konan terminara de hablar, fue interrumpida por Yuuma.
"Si, el enmascarado con el que han estado tratando se llama Obito Uchiha"
¡Los chicos de Akatsuki se quedaron quietos un lado mientras las miradas de ambos pasaban por el hombro de Yuuma y se clavaban en la máscara de Obito!
"Vamos, sé que ustedes son jóvenes, pero no puedo creer que se dejaran engañar por un chico mucho menor que ambos" – Con un tono burlón nuestro protagonista habló nuevamente.
Tanto Konan como Nagato tenían sus dudas sobre la identidad del enmascarado y no consideraban sea cierto el que sea el verdadero Madara, pero habían mantenido una pequeña posibilidad de que sea el verdadero Uchiha de las leyendas.
Si alguien que halla experimentado la verdadera fuerza del enemigo jurado de Hashirama hubiera visto a Obito, se habría dado cuenta de esa mentira, tal y como lo hizo el viejo Onoki en la historia principal.
Por ello no era vergonzoso que estos muchachos hallan considerado esa posibilidad.
Pero el saber que ese sujeto era alguien más joven que ellos… los dejaba ahora mismo muy mal parados.
"Bueno, a lo que voy, este mocoso tenía unas ideas muy tergiversadas debido a que estuvo conviviendo mucho tiempo con la mente senil y trastornada del verdadero Madara Uchiha, quien le lavó el cerebro para que cumpliera su voluntad antes de morir. Por ello es que ha estado utilizando su nombre todo este tiempo"
Mientras Yuuma soltaba toda esta información, Obito no sabía qué hacer en estos momentos.
Aunque ya no era un niño, se sentía como uno al cual lo estaban regañando por hacer una travesura, pero al mismo tiempo lo estaban eximiendo de la culpa ya que alguien más era el responsable de todo lo que hizo.
"¿Quieres decir que el verdadero Madara Uchiha… estuvo vivo hasta hace poco? – Preguntó Nagato.
Una cosa era escuchar a Obito hablando sobre ser Madara y no tomarlo totalmente en serio y otra cosa era escuchar a este tipo que sobrepasaba el entendimiento Humano, a quien creerían inconscientemente cualquiera que conociera su fuerza.
"Claro que si Nagato, Madara ha estado vivo por un largo tiempo llevando a cabo algunos de sus planes mientras se mantenía oculto, incluso fue el quien te dio esos ojos que estas utilizando ahora mismo"
Respondió tranquilamente nuestro protagonista, soltando una bomba en la mente de los chicos Akatsuki.
"¡¿Qué quieres decir?!!" – Tanto Konan como Nagato se exaltaron como nunca al escuchar tal cosa.
"Pues lo que escuchaste niño, fue el quien te dio esos ojos debido a tu línea de sangre Uzumaki. Antes de su muerte ese viejo bastardo logró despertar esos ojos, pero ya estaba demaciado marchito para usarlos, tenía un pie en la otra, por lo que decidió utilizarte. Para mantener el Rinnegan necesitas enorme reservas de chakra, por ello te escogió ya que podrías sostener el consumo excesivo que demanda tenerlos activos"
La respuesta de Yuuma hizo que Nagato abriera los ojos con incredulidad.
"No… yo siempre he tenido estos ojos desde que tengo uso de razón, eso no puede ser verdad ¡tiene que ser una mentira!" – respondió airadamente el pelirrojo.
¡Escuchar esto era algo que no podia ser verdad, toda su vida había pensado que estos ojos eran la recompensa otorgada por el destino ante la crueldad vivida todos estos años!
Nagato pensaba que era el elegido para cambiar todo este mundo podrido, acabar con todo el dolor experimentado hasta ahora, mostrarles a los humanos cual era el verdadero camino hacia la salvación…
Este era su único propósito de vida, era lo que lo mantenía con vida... Pero estas palabras…
"Haaa… sabes, a veces me incomoda tener que explicar algunas cosas, pero lo haré ya que es un buen momento para que se enteren de algunas verdades de este mundo y dejen de lamentarse como adolescentes resentidos"
Nuestro protagonista habló mientras caminaba hacia un extremo en donde había unas rocas, sentándose sobre la más alta.
Con su mano les hizo una señala para que Konan, Nagato y Obito vengan y se ubiquen junto a él. cuando todos llegaron a su posiciones Yuuma comenzó a hablar.
"Para que entiendas el significado de esos ojos debemos remontarnos a más de diez siglos en el pasado, el momento en donde llegaron a este planeta una mujer llamada Otsutsuki Kaguya y su acompañante Otsutsuki Isshiki…"
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Tsunade había estado tan ansiosa que no pudo dormir. Su mente aun no había procesado toda la información dada por Mikoto, dándole más dolores de cabeza.
Pasó la noche en una posada, mientras pensaba en todas las cosas que había experimentado hasta ahora. Su objetivo inicial al haber venido a la aldea se estaba quedando rezagado ante los cambios ocurridos recientemente.
Y no es que la posible eliminación sistemática de su familia sea un tema que dejara de importar, el que un sujeto insanamente poderoso esté viviendo en la aldea mientras se satisface carnalmente con las muy dispuestas esposas de este lugar era algo alarmante para cualquiera.
Aunque ya no sabía si confiar en las palabras de Mikoto sobre que Yuuma no había utilizado algún método desleal para lograr tal hecho, si que podía creer en el poder del Mangekyo Sharingan mostrado por la pelinegra.
Que Yuuma la halla ayudado a despertar tal habilidad genética sin sufrir ningún efecto secundario, a pesar de que ella no tenía el nivel ni la habilidad para hacerlo, decía mucho de lo capaz que era ese hombre.
¡Sin embargo, aun no podía comprender como, en el nombre de Rikudo Sennin, las mujeres en este lugar parecían haberse vuelto tan estúpidas!
Tratando de despejar la mente, salió de la posada en donde se estaba quedando para ir y visitar la antigua residencia Uzumaki, lugar en donde vivió una buena infancia en presencia de su quería abuela Mito.
La ultima vez que pisó ese lugar aun estaba habitado por la ultima de los pelirrojos en la aldea, Kushina Uzumaki, de quien se enteró se había convertido en la esposa del actual Hokage.
Para Tsunade, Kushina podría considerarse una pariente lejano, y fue a ella junto con Mikoto a quienes la Senju les daba algunos consejos de entrenamiento cada que podia debido a la alta estima que le tenía.
Cuando llegó al pórtico de la residencia se llevó una sorpresa al encontrar a la muchacha a quien minutos antes habia estado pensando.
La pelirroja estaba de pie mirando la entrada del recinto, con unos ojos apacibles, mostrando la verdadera luz que su personalidad debía irradiar.
De inmediato, Tsunade se dio cuenta del estado en el que se encontraba.
Verla en este estado de embarazo avanzado la hizo tener sentimientos encontrados.
Por un lado estaba realmente feliz de saber que el linaje Uzumaki no se había extinguido; por otro lado, el ver como la niña a quien había considerado como una prima menor ahora se había convertido en toda una mujer y futura madre, le trajo a la mente todo lo que ella misma había dejado pasar por estar sumida en el dolor.
Claro que Kushina no era la única mujer embarazada que había visto la ojimiel, solo que ver específicamente a Kushina volcó todo los sentimientos acumulados en su corazón.
Moviendo la cabeza, la Sannin y su alumna llegaron hasta el lado de la mujer, quien se jiró y miró con sorpresa a las dos mujeres que estaban a su costado.
"¡Lady Tsunade! ¡¿Cuándo volvió a la aldea?!"
La pelirroja dejó de estar parada y se acercó para darle un fuerte abrazo a la rubia, quien le sonrió y le contestó el saludo.
"Kushina, veo que ya hasta te olvidaste de mí ¿Acaso no te dije que me trataras como siempre lo hiciste?"
Tsunade habló tranquilamente. Sin embargo, al instante siguiente se le congeló la sonrisa aun estando en el abrazo.
"B-Bueno, entonces no seré cortes ¡Me da gusto verte Tsunade-nesan!"
La pelirroja habló con una gran sonrisa, ya que ver a la Senju le traía buenos recuerdo que había compartido en esta casa con su ancestro Mito Uzumaki.
"¿Humh? Tsunade-nesan ¿estas bien?"
Sin embargo, justo cuando Kushina abrazó a la ojimiel, esta se tensó y ya no respondió al saludo, haciendo que tanto la pelirroja, como Shizune a su costado, se sintieran extrañas.
Separándose y rompiendo el abrazo, Kushina pudo ver los ojos abiertos de Tsunade, quien la estaba mirando a ella y luego a su abultado vientre.
El entrecejo de la Senju estaba arrugándose y relajándose, como si no supiera que hacer en estos momentos.
"Tsunade-sama ¿todo está bien?" – Preguntó Shizune.
"¿Qué ocurrió Tsunade-nesan?" – Preguntó la pelirroja.
Ambas muchachas no entendían por qué la Sannin estaba así actualmente, quedando muy confundidas. Pero había una explicación para esto.
En el momento en que ella abrazó a Kushina, fue asaltada por el aroma que se había grabado en su cerebro desde ayer.
Desde que se quedó en la casa de Mikoto se mantuvo inconscientemente expuesta a esta fragancia, pudiendo reconocerla a cualquier lugar al que fuera… y la pelirroja estaba empapada por esta muy gustosa sensación.
"Kushina, tú… ¿tú también?" – Fue lo que dijo Tsunade mientras que su mirada se endurecía.
"Esto… ¿Me disculparas Tsunade-nesan, pero ¿de que estas hablando?" – la pelirroja había estado tan feliz de ver a la Senju que no entendió las palabras.
Ella había estado en la felicidad máxima hasta hace algunas horas, por lo que su cerebro aún estaba inundado por endorfinas.
Tsunade no supo cómo reaccionar al ver el rostro dubitativo de la pelirroja.
Si bien ayer dijo que no podia decirle al resto de mujeres como vivir sus vidas… el saber que la chica a quien consideraba como un familiar directo había cometido, muy posiblemente, adulterio, la estaba sacando de sus casillas.
Era casi de su familia… era alguien a quien se le habían inculcado los valores de los Uzumaki… la memoria de su abuela… esto no era algo que podía tolerar.
"¿Como pudiste?" – Tsunade se tomó el puente de la nariz mientras cerraba los ojos.
"Del resto de mujeres no me importa que diablos hagan con sus vidas… ¡pero a ti te crio mi abuela! ¿Acaso no te enseñó sobre la lealtad y respeto de los Uzumaki? Haaa… ¿Cómo diablos te pudiste meter también con ese hombre?"
Exclamó derrotadamente la ojimiel.
Kushina, quien no sabía en que situación estaba metida, pudo comprender cual era el motivo de esta ofuscada reacción por parte de la Senju…
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"Mentira… ¡esto debe ser una mentira!"
Konan estaba con los ojos abiertos de la conmoción mientras balbuceaba.
"Esto… ¿cómo puede ser esto verdad?"
Nagato no estaba mejor que su amiga, pero podia mantener algo de compostura a pesar de enterarse de toda la verdad de este mundo.
"… simples… marionetas…"
Obito, quien tenía entendido parte del plan establecido por Madara, sintió una sensación ominosa al saber quien era la persona detrás del telón, además de los seres de la misma raza que aún vagaban por el universo.
"Así es muchachos, la verdad apesta, por eso las personas generalmente prefieren vivir una hermosa mentira" – Dijo calmadamente Yuuma mientras se bajaba de la roca sobre la cual estaba sentado.
El Uchiha vio como nuestro protagonista tenía una postura tranquila, como si no hubiera revelado la noticia más impactante y aterradora de todo el mundo.
Era como si hablar de seres interplanetarios no le afecte demasiado.
Es más, era como si no le afectara en nada.
"¿Tú… cómo es que te has enterado de esto?" – Preguntó Obito.
Konan y Nagato dejaron de atormentar sus cerebros con todas esas frases negadoras y se centraron en la posible respuesta dada por Yuuma.
Ellos entendían que todo lo dicho por este sujeto, a quien el poder del Rinnegan le parecía una broma, era casi cien por ciento verdad.
No había propósito engañarlos ya que tenía el poder para doblegarlos completamente.
Todo lo que les dijo no es algo que se encuentre escrito en un pergamino cualquiera, el grado de detalle era tal que parecían ser experiencias personales más que algo aprendido.
El enfrentamiento entre Otsutsuki Kaguya y Otsutsuki Isshiki…
La cosecha del Shinju (Dios árbol) …. La creación del chakra…
La fusión de Kaguya con el Shinju para formar el Jubi (Diez colas)
El enfrentamiento entre el Jubi contra Hagomoro y Hamura, con el consecuente sellado su chakra en el primero y su cuerpo en la luna…
Hagomoro, conocido como Rikudo Sennin, dividió el poder del diez colas en los nueve Bijus…
Como Zetsu negro comenzó con el plan para controlar a Indra (ancestro de los Uchiha) y Asura (ancestro de los Senju) con el propósito de revivir a Kaguya, incluso haciendo esto con las consecuentes generaciones…
El enfrentamiento entre Madara Uchiha y Hashirama Senju, con el consecuente despertar del Rinnegan por parte del primero al fusionar sus cuerpo con células del segundo…
El darle los ojos a Nagato y dejar a Obito a cargo para que se ejecute el plan 'Ojo de luna'…
¡Todos esos momentos dolorosos de los implicados, todas esas experiencias traumáticas que adjudicaron al destino… no eran nada más que las manipulaciones establecidas por esa entidad llamada oscura, quien controló a todos los descendientes de Indra!
¡¿Cómo diablos este tipo se llegó a enterar de esto?!
"Es fácil mis estimados jóvenes, cuando llegas a un cierto nivel de poder, el tiempo deja de ser una cosa misteriosa e inhóspita, para convertirse en un camino fácil de transitar"
"¡¡!!"
Los ojos de los tres muchachos se ampliaron mientras que sus bocas se abrían lentamente ante esta declaración.
No necesitaban de más palabras para entender que es lo que les quería decir.
'Este tipo… ¿puede controlar el tiempo?'
Estas simples palabras fue lo que cruzó por la mente de los tres adolescentes.
"Bueno, bueno, nos fuimos por las ramas. Es hora de volver a los asuntos que nos importa" – mientras hablaba, Yuuma alzó una de sus manos, apuntando hacia Nagato.
En el instante siguiente, una matriz color azul.
"Qué es eso?" – Preguntó Konan la ver el espectáculo de luces apuntando hacia su amigo.
*Zasssss*
Sin mediar respuesta, la formación azul salió disparada hacia el pelirrojo, quien no pudo reaccionar.
La estructura compleja impactó de lleno en su pecho, para luego dar lugar a varios patrones en forma de runas saliendo desde su interior por toda su piel.
"¡¡AAAAAHHHHHGGGGG!!"
Con un grito doloroso, Nagato se retorció mientras su cuerpo comenzaba a desprender horribles crujidos.
Su piel comenzó a tornarse rojiza, como si estuviera dentro de un sauna, mientras que el sudor caía de su frente por todo su rostro.
"¡Nagato!" – Konan gritó al ver la situación de su amigo. Cuando quiso acercarse sintió todo el calor que su cuerpo desprendía, no pudiendo avanzar más.
"¡Maldito! ¡Que le estas haciendo!" – Girando su rostro, Konan volvió hacia Yuuma con una mirada furiosa mientras que cientos de papeles eran lanzados rápidamente.
"Silencio" – Pero con una sola palabra, nuestro protagonista detuvo todos eso papeles en el aire, al mismo tiempo que Konan era 'inmovilizada' en su posición.
'¿Q-Qué diablos? ¡Suéltame monstruo! ¡tengo que salvar a Nagato!'
¡Sin poder pronunciar palabra alguna, la mente de Konan estaba soltando maldiciones al sentir tanta impotencia de no poder ayudar a su amigo, pero sin poder siquiera mover sus dedos!
Como habia girado para atacar a Yuuma, solo podia escuchar los lamentos de su amigo. Sus ojos comenzaron a llenarse de lágrimas al sentir el dolor opresivo en su pecho, debido a que se sentía inútil ante el sufrimiento de Nagato.
Así, pasaron varios minutos en donde solo se escucharon los agonizantes sonidos del pelirrojo.
Obito, quien había presenciado esto, solo pudo lanzar una plegaria irónica para que el líder de Akatsuki pudiera soportar la tortura.
El había pasado algo similar para poder recuperar su ojo perdido, así como la parte de su cuerpo aplastado por esa gran roca, por lo que entendía el dolor por el que estaba pasando Nagato.
"haaa…haaa…haaa"
Después de un tiempo, se pudieron escuchar los gemidos casia apagados del pelirrojo, momento en el cual las restricciones sobre el cuerpo de Konan Fueron levantadas.
"¡Nagato!" – Al no sentir inmovilizado su cuerpo, Konan se movió rápidamente para llegar al lado de su amigo, abrazándolo y llorando, cayendo al suelo desde el lugar en donde se encontraban.
"Konan… tranquila" – Nagato habló pausadamente mientras sonreía y abrazaba a su amiga.
Esto fue algo que le dio una emoción de felicidad, no como un sentimiento romántico, sino porque ahora podia movilizarse sin dificultades-
"Nagato… tu cuerpo… ¡estas … ¿curado?!"
¡Konan, al sentir el abrazo de su amigo, se sorprendió, separándose momentáneamente y mirando con sorpresa al pelirrojo, quien había dejado de tener esa apariencia famélica!
"Bueno ¿Qué tal? ¿Tu cuerpo está en perfectas condiciones verdad?" – Yuuma exclamó con una sonrisa mientras se acercaba a los dos jóvenes, quienes se ponían de pie.
"¿Por qué… hiciste esto?
Nagato preguntó mientras pensaba cuidadosamente en las palabras que diría.
Escuchar que este tipo era poderoso era una cosa; verlo ejercer su poder, no solamente en la batalla, era otra.
El pelirrojo sabía que, sin importar lo que hiciera, el Rinnegan no podría hacer lo que este tipo hizo con un simple gesto de sus manos.
Con solo levantar la palma, restauró su cuerpo dañado debido a la exposición al Gedo Mazo, un objeto monstruoso ante el cual cualquier humano moriría horriblemente.
"Te diría que lo hice por diversión ya que estoy aburrido estando en este lugar, pero ¿la verdad? Estoy intentado seleccionar a algunas personas prometedoras, en quienes pienso invertir algo de tiempo para ver hasta donde puede llegar su potencial" – Dijo Yuuma con una pequeña sonrisa en el rostro – "Y ustedes tres son algunos de ellos"
"¿Por qué nosotros?" – Exclamó Konan mientras ahora esta realmente avergonzada por haber perdido los papeles hace unos minutos.
"¿Umm? Esa pregunta está de más mi querida Konan, ya que ustedes son los muchachos más talentosos en su rango de edad, por lo que vale la pena ponerles atención" – Respondió Yuuma con un tono tranquilo mientras caminaba hacia un extremo.
"…Gracias…"
Nagato habló con un tono bajo mientras agachaba levemente miranda para ver sus manos totalmente recuperadas
"Pero si estas buscando a gente con talento, es por qué quieres aprovecharlos, así que dime ¿Qué tendremos que hacer para ti?"
Nagato estaba agradecido por la recuperación de su cuerpo, pero sabía que en este mundo nada es gratis, o al menos casi para todo el mudo era así.
Solo su antiguo maestro Jiraiya les había dado todo lo que pudo sin pedirles nada a cambio. Pero este tipo no era igual al viejo sapo, por lo que no esperaba que Yuuma sea un buen samaritano.
"¡Bueno!" – Exclamó Yuuma mientras daba una palmada – "No debes agradecerme aun, ya que las tareas que enfrentarás son muy peligrosas, incluso podrían ser mortales" – Tanto Nagato como Konan escucharon atentamente lo que estaba diciendo Yuuma.
"Les diré lo mismo que le dije a Obito" – Yuuma habló mientras señalaba al Uchiha enmascarado – "Si no quieren ser parte de este grupo, no habrá problemas, no los lastimaré, simplemente les borraré la mente y dejaré que su tortuoso destino se cumpla. Al final terminarán muriendo en su debido momento, tal y como había estado predestinado"
¡Estas palabras fueron como puñales clavándose en la mente de los tres muchachos ya que era un augurio de un oscuro destino!
Si este sujeto no hubiera aparecido... ¿Morirían tormentosamente?
¿Cuándo se supone que morirían? ¿Cómo lo harían?
Estas preguntas comenzaron a rondar en la mente de los tres adoscentes.
Ya habían presenciado demaciadas locuras como para dudar de las palabras de este sujeto.
Si este tipo decía que estarían muertos, es por que con toda seguridad era verdad.
Ahora la pregunta que caía por su propio peso era... ¿La presencia de este tipo evitaría que murieran?
"Entonces... aun si comenzamos a 'trabajar' para ti, nuestra probabilidad de vivir es muy baja ¿Entonces por qué tendríamos que hacerlo?" – Preguntó Konan mientras fruncia el ceño.
Había escuchado todo esto y no estaba contenta.
Estaba contenta de que Nagato esté recuperado, pero no estaba dispuesta a morir por un tipo descocido aun sabiendo que este es demasiado poderoso.
Si iba a morir, quería que fuera bajos sus propios términos.
"Ahí está el asunto mi querida Konan" – Yuuma sonrió mientras miraba a la muchacha – "si ustedes deciden no participar, morían horriblemente, incluso si no les borro la memoria, morirán hagan lo que hagan. Si deciden venir conmigo, podrán decidir su propio destino, sin que algo o alguien intente decidir cuando viven y cuando mueren, incluso yo"
Las palabras de Yuuma hicieron que los ojos de Nagato se entrecerraran, ya que sonaba todo muy bueno como para ser real.
Algo así fue lo que Obito les dijo en el pasado, pero a diferencia de él, Yuuma si tenía el poder suficiente para poder cumplir con lo que dice.
"Si quiero que ustedes vivan, nada podrá matarlos; si quiero que mueran, nada podrá evitarlo. No los mandaré a una misión suicida sin que estén preparados, ya que no tengo motivo de invertir mi valioso tiempo en algo que desecharé caprichosamente"
Los lideres de Akatsuki analizaron estas palabras mientras estaban pensado en que hacer. El destino de sus vidas estaba en juego en este momento.
Luego de un tiempo, ambos se miraron y asintieron entre sí.
"Haaa… que diablos… ¿acaso tenemos otra opción?" – Respondió Nagato mientras suspiraba agotado – "Aceptamos tu esquema, pero, si en algún momento sentimos que algo no está bien, así nos mates ¡mi alma vendrá para atormentarte des el infierno!"
Con una mirada aseria, el pelirrojo terminó de hablar mientras sus mirada se endurecía.
Yuuma, quien escuchó todo, sonrió mentalmente.
Este era el método que prefería, el de buscar como encausar las mentes de sus objetivos a su favor sin tener que estar utilizando la aburrida habilidad de lavado mental.
"Créeme, cuando sepan más de las verdades del mundo, sabrán que el mundo ninja es una mota de polvo en todo el basto océano cósmico" – Respondió Nuestro protagonista.
"Bien, ahora que hemos aclarado los inconvenientes, volvamos a lo de antes" – Yuuma volvió a hablar, sacando miradas extrañas de los tres involucrados.
"¿Volver a lo de antes?" – Preguntó Obito mientras su cuerpo se tensaba inexplicablemente.
"Sip, es hora de que reanuden su pelea. Ahora enfrentarás a Nagato, sus caminos y a Konan, todos juntos ya que, como el miembro mas antiguo de esta nueva organización, debes darles el ejemplo ¿no lo crees?"
Las palabras del Trascendente hicieron que la anterior tranquilidad del Uchiha salieron volando por la ventana.
"…Carajo…"
Perdón por andar desaparecido, las cosas se estan poniendo un poco complicadas con las vísperas de navidad. Ya de por sí la política de mi pais es un desastre, el ministerio de Salud es un caos completo, por lo que las reorganizaciones están a la orden del día.
Al menos pude encontrar un tiempito y escribirles un capítulo, espero puedan disfrutarlo :3