CAPÍTULO 77- Patle.

Humanos contra demonios.

CAPÍTULO 77

Mundo 22.

El mundo 22, es un mundo de tecnología y de vampiros. Es como el mundo 15, pero en este mundo existen seres parecidos a los vampiros, pero aquí se les llama: "Hunmers". Se les llama así porque un hombre llamado "Kimura Hunmer" los creó por accidente. Kimura era un científico loco, experimentaba con humanos. Él creó a los Hunmers, que básicamente son humanos super fuertes, rápidos y tienen un gran poder de regeneración. Comen carne humana, no pueden comer otra cosa.

Son parecidos a los vampiros, pues los Hunmers solo salen de noche.

Solmar y Sinfer están caminando por las calles de una ciudad, es de día y todo parece tranquilo.

Están vistiendo con ropa normal, usan la misma ropa, un pantalón rosa, una camisa rosa y zapatos blancos.

Usan lentes negros y ahora tienen el cabello negro.

Están vistiendo así para no llamar la atención de las personas.

—Él debe estar cerca.- Dijo Solmar.

—Me siento incómodo con esta ropa, no me gusta el rosa.- Dijo Sinfer un poco sonrojado.

—El rosa es un color hermoso, es el color favorito de Daniel.- Dijo Solmar sonrojado.

—¿Es su favorito? Daniel definitivamente es muy raro.

Solmar y Sinfer se detienen.

—Llegamos.

Se paran frente a una pequeña casa blanca.

Se dirigen a la puerta.

—Espero que sea guapo.- Dijo Solmar sonriendo.

Sinfer intenta abrir la puerta.

—Está abierta.

Sinfer abre la puerta y observan a un niño pequeño devorando el cuerpo de una mujer, a su lado se encuentra también el cuerpo de un hombre muerto. Los cuerpos están desnudos.

El niño tiene 10 años, tiene el cabello negro y muy largo. Usa una camisa roja y un pantalón negro. Sus ojos son muy raros, son completamente negros.

—Es un pequeño niño... Vaya, vaya... Interesante... Es lindo, pero no me gustan los niños pequeños.- Dijo Solmar.

—Es un niño pequeño, pero según la información, tiene el poder de un Rey Demonio.

Cierran la puerta y se dirigen a él.

—Hola, Patle.- Dijo Solmar.

El niño los observa y sonríe, es una sonrisa dulce y linda.

—Esa alma... ¿Solmar?- Dijo el niño con una dulce voz de niño, no tiene una voz rara o demoníaca.

—Sí, soy yo.

—Realmente te ves diferente... Antes eras una adorable chica... ¿Qué quieres?

—¿Chica? Él era hombre en su vida pasada.

—Ignora eso. Necesito tu poder.

—¿Lo intentarán de nuevo?

—Claro que sí.

—Fransme los detuvo la primera vez que lo intentaron, ¿quién es el que los detendrá ahora?

—Se llama Daniel, es el único problema que tenemos. Ya resolvimos los otros dos problemas.

—Daniel... ¿El poseedor de Fetoca?

—Es el poseedor de Cano.- Dijo Sinfer con una expresión seria.

—Ya veo...

El niño se limpia la boca y se dirige a ellos.

—Acabo de despertar, el niño descubrió a su madre engañando a su padre con su compañero de trabajo... Sentí una gran satisfacción al matarlos, odio a las personas que engañan a otras.

El niño se truena los dedos y sonríe.

—Deberán derrotarme si quieren mi poder.

—Lo sabemos.- Dicen los dos sonriendo.

Los tres están sonriendo, parece que les emociona la idea de pelear.