CAPÍTULO 14- Daniela Ranmo.

Humanos contra demonios.

CAPÍTULO 14

Mi nombre es Daniela Ranmo, tengo 16 años y soy una chica normal de un pueblo normal… Aunque eso está a punto de cambiar… Nunca me imaginé que mi vida cambiaría tanto.

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Tiempo atrás.

Estoy caminando junto con un amigo de la escuela.

Ah… Mi vida es tan aburrida.

—Otro día aburrido en la escuela.

—Oye, ¿quieres ir a dar un paseo conmigo?

… Me gustan las mujeres, no me gustan los hombres… Pero eso nadie lo sabe… Lo rechazaré educadamente.

—No puedo, gracias.

—Está bien, adiós.

Ufff, no insistió.

El chico da la vuelta en una esquina y se va.

—¿Paseo? Qué aburrido.

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Minutos después.

Abro la puerta de mi casa y entro.

—Ya llegué.

Cierro la puerta y mi madre se acerca a mí.

—Hola, hija.

—Hola, madre.

Dejo mi mochila en el suelo.

—¿Está lista la comida?

—Sí, sírvete.

Uso mis poderes psíquicos para servirme comida en un plato y me siento en la mesa.

—¿Y cómo te fue en la escuela?

—Aburrido, como siempre.

—Yo tengo que salir, iré por unas cosas, no tardo.

—Está bien, madre.

Mi madre sale de la casa y cierra la puerta.

—Quisiera hacer algo divertido, me estoy muriendo de aburrimiento.

—¡Oh, ¿estás aburrida?!

De repente, escucho una misteriosa voz.

—¡¿Quieres tener una aventura?!

—Sí, quiero tener una aventura… ¡¿Quién dijo eso?!

Me levanto asustada… ¡¿De dónde salió esa voz?!

—¡No te asustes, soy Dios!

Un anciano aparece frente a mí.

—¡¿Dios?!

—Sí, quiero que me ayudes con algo.

—¿Ayudarte?

—Eres alguien puro de corazón, eres perfecta para un trabajo que quiero que tú hagas.

—¿Puro de corazón? ¿Trabajo? No entiendo nada.

—En el mundo 1 está pasando algo muy malo.

—¿Mundo 1? ¡Explica mejor, no entiendo!

—Es un mundo alterno, hay 63 mundos existentes.

—¡No entiendo nada!

—Tú eres del mundo 3, el mundo de los poderes psíquicos. En el mundo 1 pasará algo muy malo y pondrá en peligro a todos los mundos.

—¿Todos?

—Por eso necesito tu ayuda, podrías salvar a todos los mundos, serías una heroína… Por favor, ayúdame.

—Bueno… Esto es bastante raro e inesperado… Pero eres Dios… Supongo que no puedo rechazar a Dios.

Dios me acaricia la cabeza.

—Tomaste la decisión correcta.

Todo a nuestro alrededor empieza a dar vueltas y aparecemos en un bosque de repente.

—¡¿Eh?!

—Bienvenida al mundo 1, el mundo de la magia y los aventureros

—¿Magia y aventureros?

—Sí, en tu mundo las personas tienen poderes psíquicos, en este mundo las personas tienen magia.

—¡Increíble! ¡¿Como en los cuentos y novelas?!

—Sí, exactamente… Este mundo está en peligro porque unos demonios han aparecido. Esos demonios tienen poderes mágicos increíbles y, según mis cálculos, en unos 3 o 4 años, aparecerá un demonio tan poderoso que va a destruir este mundo. Si este mundo desaparece, los demás también.

—¿Exactamente qué debo hacer?

—Debes aprender todos los hechizos que puedas, matar a todos los demonios que puedas y matar al demonio que destruirá el mundo. Toma.

Una pulsera negra con un pequeño corazón rojo y un anillo blanco aparecen de la nada frente a mí.

—La pulsera te servirá para que puedas usar todos los tipos de magia.

Tomo la pulsera y me la pongo en la mano derecha.

—Es linda.

—Qué bien, porque no te la podrás quitar.

—¿Eh?

Me intento quitar la pulsera, pero no puedo.

—¿Por qué?

—Es peligroso que te la roben. Ponte el anillo.

Tomo el anillo y me lo pongo en el dedo índice derecho.

—Es un anillo mágico, incrementa tus poderes psíquicos.

—¿Incrementa mis poderes psíquicos?

Dios aparece un gran tronco de la nada.

—Intenta moverlo.

—Con mis poderes psíquicos solo puedo mover objetos pequeños, pero lo intentaré.

Intento levantar el tronco.

—¡¿Eh?!

Levanto el tronco unos metros.

—¡Lo logré!

Dios toca mi pecho… ¡¿Por qué me está tocando el pecho?!

—¡¿Qué hace, viejo pervertido?!

—Ahora tienes el poder de revivir, solo vas a revivir dos veces.

Dios toca mi frente.

—Ahora tienes una gran memoria, perfecta para aprender miles de hechizos.

Dios se aleja de mí.

—Bien, me tengo que ir.

—¡Espera, ¿ahora qué hago?!

—Investiga por tu cuenta, solo debes aprender a usar los hechizos y controlarlos.

Dios desaparece.

—Bueno, quería una aventura… No me despedí de mi madre, pero esto es muy importante…

Empiezo a caminar.

—Realmente no entendí nada de lo que dijo… ¡¿Por qué acepté tan fácil?!

Sigo caminando… Este lugar es silencioso.

—Aunque hace unos días soñé con las palabras "Dios", "magia" y "aventura".

Mis poderes psíquicos son tres.

Telepatía: Puedo hablar telepáticamente con alguien, aunque solo puedo hablar, no puedo escuchar lo que piensan.

Profecía: Puedo predecir el futuro con palabras que aparecen en mis sueños.

Telequinesis: Puedo mover objetos con la mente.

—¡¿Por qué acepté?!

Salgo del bosque y veo un gran pueblo.

—Supongo que ya no hay vuelta atrás.

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Llego al pueblo y veo a muchas personas raras… Usan armaduras… Supongo que son los aventureros.

Es muy diferente a mi mundo… Este lugar huele raro.

Sigo caminando.

—¿Con qué empiezo? ¿Qué debo hacer…? Creo que debo aprender hechizos.

Veo mi anillo.

—¿Solo incrementará mis poderes psíquicos?

Lo toco y una voz de mujer me habla en mi mente.

—"Arches Nexus", te permite volar. "Muslar asio", te permite tener una gran fuerza física, una gran resistencia y una increíble agilidad. Y, por último, "Espada Dix" te permite aparecer una espada que es capaz de usar el viento como una espada, es muy eficaz para hacer daño.

La voz deja de hablarme.

—¿Eran hechizos…? Lo intentaré… Supongo que solo debo decir esas palabras. ¡Espada Dix!

Una espada hecha de viento aparece en mis manos.

—¡Increíble…! Ya sé, solo debo encontrar a personas que sepan hechizos y pedirles que me enseñen.

Veo a una chica y me dirijo a ella.

—Señorita, ¿sabe en dónde puedo encontrar a personas que sepan hechizos?

—¿Personas que sepan hechizos? Creo que quieres ir al gremio. Es ese lugar de ahí.

Me señala el lugar.

—¿Ahí hay personas que saben hechizos?

—Sí.

—Gracias.

Mi espada desaparece.

—Creo que desaparecen cuando ya no los necesito.

Entro al gremio… El lugar parece un restaurante, a excepción de que hay tres mujeres sentadas en escritorios… Supongo que son las empleadas del lugar.

—¿Aquí habrá personas que sepan usar hechizos?

Me dirijo a una chica, que parece que es una empleada.

—Disculpe, ¿aquí hay gente que sepa usar hechizos?

—Claro, todos los aventureros aquí saben hechizos. ¿Se quiere registrar?

—Supongo que necesito dinero para registrarme, pero no tengo, gracias.

—No se preocupe, el registro lo puede pagar con trabajo.

Supongo que registrarme me ayudará a encontrar a personas que sepan hechizos.

Le sonrío… Creo que me voy a registrar.

—Claro, me voy a registrar.

—Por favor, ponga su mano en la esfera.

—Claro.

Pongo mi mano derecha en la esfera.

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Un minuto después.

Una tarjeta aparece de la nada y la empleada la toma.

—Daniela Ranmo. Edad, 16 años. Tipos de magia… ¡¿Todas?!

Todos los aventureros del lugar gritan.

—¡¡¿Eh?!!

—¡Pero eso es imposible!

Vaya… Llamé mucho la atención en este lugar… Creo que eso es bueno, lograré conseguir ayuda rápidamente.

—Creo que eso es bueno.

—¿C-cómo lo logró?

La voz de Dios me habla en mi cabeza.

—Tienes prohibido contarle a alguien lo que te dije, inventa algo.

Era lógico que tenía prohibido decir algo.

—Lo siento, es secreto.

Me entrega la tarjeta.

—¿Con qué clase de trabajo le pagaré?

—E-elija una misión en el muro de misiones… C-con su poder mágico, puede tomar cualquiera.

—Ya veo…

Veo el muro de misiones… Es una pared con papeles pegados… Aunque no entiendo las letras… La escritura es diferente en este mundo.

No entiendo su escritura… Tomaré cualquiera… Mmm… Este se ve bien.

Tomo un papel y se lo doy a la empleada.

—Haré esta misión.

—¡¿Quieres matar a los Orcos?!

—¿De eso trata?

Me pongo nerviosa… ¿Podré hacerlo?

Aunque puedo revivir… Y tengo una espada que se ve muy poderosa… Y mis poderes psíquicos mejoraron… Siento un buen presentimiento, debo intentarlo.

Mis nervios se van.

—Sí, lo haré. ¿En dónde encuentro a los Orcos?

—Están en el pueblo Zeiss.

—¿Pueblo Zeiss?

Unas imágenes aparecen en mi mente… Son imágenes de un camino.

—¿Es el… camino al pueblo Zeiss?

Recuerdo el camino… Creo que podré llegar.

—Gracias, adiós.

Salgo del gremio.

—¿Es un poder psíquico nuevo? ¡Genial!

Me detengo… Puedo volar… ¡Puedo volar!

—Puedo ir volando. ¡Arches Nexus!

Empiezo a flotar.

—¡Increíble! Creo que… solo debo pensar en cómo quiero volar.

Empiezo a volar a dirección al pueblo.

—¡Lo logré!

Los habitantes del pueblo me observan asombrados.

—¡Esa chica puede volar!

—¡Increíble!

—¡¿Será un demonio?!

Sigo volando mientras tengo una gran sonrisa… ¡Esto es genial!

—¡Este lugar me gustará!

¡Mis días de aburrimiento terminaron!