¡Los grandes cinco discípulos personales!

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El burro tembló mientras miraba fijamente a Wang Baole. Era un miedo instintivo y básico. El «papi» que estaba parado frente a él era un completo extraño. La presencia que emanaba era similar a la de un mar de sangre, y una sola palabra del Wang Baole que se acercaba infundo el terror en el corazón del burro. Tembló y luego se desparramó sobre el suelo, aterrado de moverse siquiera un centímetro.

Wang Baole se quedó callado al ver esto. No estaba seguro de cuántas Ratas Infernales había matado en los últimos días antes de llegar al primer nivel de la herencia de la Armadura Tearca Robo de Llama. Había acumulado una cantidad alarmante de nutrientes para su armadura. También había conseguido un mayor entendimiento de la herencia de la Armadura Tearca Robo de Llama que en parte había inventado y en parte había heredado.