Devuélveme el niño

Gu Jingze dijo: "Yo tampoco puedo evitarlo. Solo quiero mirarte. Solo aguanta".

"..."

El personal gritó: "Oh, Dios mío, ¿cómo puede tu esposo estar tan enamorado de ti?"

Lin Che se quedó sin palabras. "Él, él, él, él está enfermo".

"Es, estoy enferma de amor". Gu Jingze agregó.

El personal gritó: "No puedo soportarlo más, no puedo soportarlo más. ¿Por qué no tengo tanta suerte de conocer a un marido tan dulce? Además, también es tan guapo. Realmente es el mejor hombre". en el mundo. Realmente he estado atormentado hoy".

Lin Che lo miró.

También miró a Lin Che. "Vamos. Te compraremos ropa".

"Ahh, también tengo mucha ropa. No necesito comprar más. También traje mucha de ella".

"Está bien. Me gusta verte en ellos".

Él tomó su mano, sus dedos entrelazados, y la miró con dulzura.

El personal les presentó de inmediato el área frente a ellos donde había ropa para mujeres de su misma marca, y eran especialmente buenos.