Capítulo 259 - Refuerzos y trampas

De repente, en un radio de dos kilómetros, todos los cadáveres soltaron una niebla gris, que se reunió lentamente alrededor de Hila.

Hila abrió los ojos, que estaban cubiertos de un misterioso gris en lugar de la luz roja oscura. Sus huesos comenzaron a crujir, y sus heridas se curaron. En un abrir y cerrar de ojos, ella sanó sus huesos y la herida sangrante en su estómago también se cerró.

«¡Ajá, todavía está viva!», Han Xiao se sorprendió.

«Oh, ¿esta escena no se asemeja perfectamente a las palabras "Lo que no te mata te hace más fuerte"? Como cuando Gandalf volvió de la muerte como un mago blanco. No es de extrañar que ella sea la candidata a la diosa de la muerte. ¡Muéstrales tu poder chica!».

Hila se incorporó y la niebla gris se desvaneció. Sus ojos volvieron al color normal, y comenzó a toser intensamente. Ella dijo con voz frágil: —Vete, déjame ahora. Estoy demasiado débil para hacer cualquier cosa.

Han Xiao se mordió los labios.