Un hijo ilegítimo había solicitado su presentación formal a la sociedad durante la fiesta de cumpleaños de la Matriarca Yu. ¿No era eso indirectamente una bofetada en la cara de ella?
Yu Yuehan se sentó allí sin hablar. Su bien parecido rostro lucía sombrío. Una tormenta parecía gestarse dentro del auto. El ambiente se volvió lúgubre en un segundo. Se vislumbraba una sensación de miedo terrorífica.
Abrió su boca ligeramente: —¡Debe continuar soñando!
—Pero Joven Amo, la Matriarca Yu ya ha aprobado eso —el asistente se armó de valor y le respondió, frotándo el sudor frío que se había formado en la frente de Yu Yuehan.
—¿Qué dijiste? —Yu Yuehan entrecerró los ojos y un rayo de luz oscura se percibió en ellos.
Hỗ trợ các tác giả và dịch giả yêu thích của bạn trong webnovel.com