Capítulo 28 – ¡Expuesta, En Tu Cara!

Las piernas de Fang Zhenyi estaban entumecidas por estar de pie toda la mañana.

No se atrevía a interrumpir bruscamente sin instrucciones de Yu Yuehan al respecto, así que todo lo que podía hacer era esperar.

Sólo podía levantar su cabeza en secreto y mirar al hombre que parecía emitir un tipo de encanto malvado y real. Uno tan irresistible que los espectadores eran incapaces de alejar sus miradas de él.

El amor de ella por él se hacía más profundo con cada mirada.

Sacando los pensamientos de casarse con Yu Yuehan, volverse la joven ama de la familia Yu, y al mismo tiempo, transformarse en la mujer más respetada de Ciudad H. Su amor por él quedaría inamovible, incluso aunque ella no tuviera ningún estatus en la familia. Todo lo que él tenía que hacer era mirarla a la cara una sola vez.

Luego de un periodo desconocido de tiempo estando de pie, finalmente vio que Yu Yuehan dejaba el documento que tenía en las manos. Él alzó la vista de la mesa del estudio.

Sus ojos estaban escondidos en las profundidades, y su expresión era fría como el hielo.

Le lanzó una mirada, pero al mismo tiempo, parecía no haber visto nada.

Era como si ella fuera totalmente indigna a sus ojos.

Con un leve movimiento de su mano, él tiró una pieza de documento sobre la mesa.

Antes de que Fang Zhenyi pudiera registrar qué era, oyó su voz indiferente: —¿Cómo te llamas?

—¡Joven amo Han, mi nombre es Fang Zhenyi! —deleitada, ella dio un paso adelante y habló con entusiasmo—. Significa "cuadrada" por la palabra Fang, "verdad" por la palabra Zhen...

—¿Tú fuiste quien llenó de agua la caja de medicinas de Xiao Liuliu? —Yu Yuehan habló fríamente, antes de que Fang Zhenyi pudiera terminar su frase, interrumpiéndola con rudeza.

De su comportamiento muy excitado de hacía un momento, la expresión de ella cambió de pronto, luego de oír eso.

Aunque fuera culpable, apretó los puños, intentando mantener una expresión compuesta todo el tiempo.

—Joven amo Han, ¿de qué está hablando? NO comprendo. ¿No fue Nian Xiaomu quien mojó la caja de medicinas? Usted incluso la despidió por eso.

¡No entres en pánico, no entres en pánico!

Ella y Nian Xiaomu fueron las únicas en esa escena en ese momento. ¡Mientras ella lo negara de plano, Nian Xiaomu no tendría más elección que admitir su error!

Al pensar en esto, el último trazo de culpabilidad desapareció de su rostro.

Alzó la cabeza. Justo cuando quería decir algo, se encontró con la mirada cínica de Yu Yuehan.

Él parecía estar burlándose de su ingenuidad...

*¡Pam!*

Yu Yuehan agarró los documentos en la mesa y se los lanzó a ella.

—Piensa con cuidado antes de responder mi pregunta.

—…

Fang Zhenyi estaba sorprendida.

Estupefacta, miró los documentos en el piso y finalmente los levantó luego de un rato.

Su rostro se volvió horrorosamente pálido con sólo una mirada.

Miró fijo a los documentos en sus manos. El miedo se filtró en sus ojos...

—¿Por qué es así?

Ella había pensado que, dado a que no habían cámaras de seguridad en la habitación de Xiao Liuliu, nadie sabría que ella había sido quien llenó de agua la caja de medicinas a propósito.

Pero nunca habría pensado que Yu Yuehan enviaría a sus subordinados a revisar la habitación de Xiao Liuliu. La taza que ella había usado para verter el agua había sido enviada a analizar, ¡y habían logrado encontrar las huellas dactilares de ella en la taza!

Fue un sirviente quien había llevado la taza a la habitación, pero eran las huellas de ella las que habían sido encontradas por última vez en la taza.

¡Nian Xiaomu nunca había tocado la taza desde el principio!

—Joven amo Han, éste no fue el caso. ¡Por favor, escuche mi explicación! —Fang Zhenyi se aferró a los documentos en sus manos y corrió hacia adelante—. Tenía mucha sed en ese momento, así que bebí de la taza que estaba en el dormitorio de la Pequeña Señorita. Esa es la razón por la que mis huellas digitales fueran encontradas en la taza. Nian Xiaomu ya había llenado de agua la caja antes de que yo entrara a la habitación...

—¡Suficiente! —Yu Yuehan bajó la voz y la impaciencia destelló en sus ojos.

Una sola palabra fue suficiente para que Fang Zhenyi se pusiera de rodillas con un ruido sordo.

Gateó hacia él. Su rostro pálido por el pánico.

—Joven amo Han, sé que hice mal. Por favor, deme una oportunidad más. De verdad espero poder cuidar de la Pequeña Señorita.

—...

—Aún más, soy más profesional comparada con Nian Xiaomu. Joven amo Han, ¿ha olvidado eso? Ella es sólo una aficionada cuando se trata de enfermería. Ella no será capaz de cuidar bien a la Pequeña Señorita...