1492 Poder de un Asesino de dragones

Después de ser repelido por Cola, Bloodhand Yama no evidenció ni el más mínimo cólera o frustración. Al contrario, se lamió los labios y reveló una expresión de emoción. Inmediatamente después, levantó su escudo y atacó a Cola nuevamente.

Esa vez, sin embargo, no hizo un asalto frontal.

En su lugar, justo cuando estaba a punto de enfrentarse a Cola, cambió repentinamente su juego de piernas, generando una imagen posterior en su ubicación original mientras daba vueltas y evitaba el ataque enemigo, dejando que golpeara el aire. Inmediatamente después, apareció a su derecha y el hacha de doble cabeza en su mano golpeó el costado de Cola, que no estaba protegido por su escudo, con la velocidad del rayo.

¡Pang!

Después, un crujiente estruendo resonó en los alrededores. También volaron chispas deslumbrantes.