1851
La mañana siguiente.
Era fin de semana, así que ni Zhixin ni Huo Mian tenían que ir a trabajar. Por lo tanto, la familia entera disfrutaba de un buen desayuno en la mesa.
El desayuno occidental de Qin Chu era muy auténtico y a las gemelas les encantaba, por lo que a veces se los cocinaba. Freía huevos, rostizaba salchichas y tostaba rollitos de queso. Incluso había croissants de mantequilla y miel y todo sabía auténtico.
Las gemelas se tomaban su tiempo y disfrutaban su leche...
—Mian... es sábado, ¿por qué tienes que salir? —preguntó Yang Meirong.
—No tengo mucho que hacer en la mañana pero tenemos que visitar a la familia Su esta tarde. El señor Su quiere que vayamos a cenar porque el abuelo Su dice que extraña a Frijolito y a Pudin...
—Eso está bien también... La familia Su cuidó de nosotros durante mucho tiempo y tienen una relación cercana con las gemelas... Deberías ir más seguido para que no digan que no somos agradecidos.
Hỗ trợ các tác giả và dịch giả yêu thích của bạn trong webnovel.com