Pecado 130: Ayuda a tu Onee-sama

"¡Acabaré contigo demonio, nadie puede oponerse a mi dominio mundial Muhahaha!"

En el cielo se podía vislumbrar la silueta de un joven pelirrojo con una larga capa negra quien reía histéricamente como un loco.

Pocos metros más lejos del joven había una mujer, específicamente una joven vestida con traje de chica mágica "No dejare que un humano conquiste el mundo, protegeré al inframundo y todos los demonios que lo habitan, soy la protectora de la justicia" aquella era Serafall Leviatan quien encarnaba su papel como heroina del infierno en su propio programa televisivo, por otro lado el antagonista ahora mismo no era otro que Haru.

[Horas Antes]

En la mansión Sitri comenzó a brillar el suelo revelando el emblema del maou leviatán, aquellos que estaban allí fueron sorprendidos pero antes de dar cualquier aviso apareció la figura de la maou levitan, Serafall.

"¡Ya estoy aquí!" exclamó Serafall con una sonrisa y sus dos dedos en forma de V en su ojo izquierdo.

"Leviatan-sama..." El primero en acercarse fue un mayordomo para intentar ayudar a Serafall y también para mantener todo tranquilo en la mansión.

"So-tan y Ha-tan tienen que estar en la mansión, quiero ver a Ha-tan" mencionó Serafall con confianza.

El mayordomo comenzó a sudar a montones "Creo que deberíamos visitar a Sona-sama antes de buscar a Haru-sama, se expresó firmemente que no se puede molestar al joven maestro"

"¿Joven maestro?...." Serafall pensó un momento y pronto una luz se encendió en su cabeza "Mamá y papá aceptaron el compromiso con Ha-tan, ahora si sere se Onee-sama" al terminar Serafall inflo su pecho con orgullo mientras el mayordomo se limpiaba el sudor de la cara con un pañuelo.

Serafall comenzó a caminar por la mansión con una sonrisa en el rostro "Llevame con Ha-tan"

"pero..."

"No tienes nada de qué preocuparte, no es nada malo" Serafall río contenta mientras la expresión del mayordomo se hacía cada vez más oscura

"Es es lo que temo" murmuró el mayordomo con miedo

Dentro de la habitación especial para los invitados se ubicaron siete personas, cinco clones de Haru que estaban entre pergaminos y documentos, el Haru original que dormía en su cama y Saji quien roncaba en su cama como si un mañana.

De la nada la puerta de la habitación se abrió de golpe "¡Buenos días!"

"¡Ah!" Saji saltó de su cama asustado. Los clones que habían estado estudiando pergaminos y otras cosas miraron a Serafall, y estallaron en humo.

"...."

Por otro lado, la versión real de Haru abrió los ojos y miró a Serafall sin levantarse de la cama "¿que sucede?"

"¡Ha-tan!" exclamó Serafall saltando sobre la cama de Haru con fuerza "¡Ha-tan!" Serfall apretó la cabeza de Haru a tal grado que incluso el pelirrojo tenía problemas para respirar correctamente "¡Ha-tan, necesito tu ayuda!"

"¿huh?" incrédulo Haru miró a la reina demonio

"Quiero que seas el antagonista en mi programa de televisión" Serafall tenía una sonrisa en su cara mientras Saji y el mayordomo estaban mirando la situación intrigados.

"No quiero" Con la respuesta de Haru fue como si todo el ambiente se volviera frío y ambos espectadores miraron a la reina demonio con temor, las historias de las rabietas de Serafall eran conocidas en todo el infierno.

Serafall por otro lado enterró su cabeza en la cama de Haru en silencio, los dos espectadores estaban esperando para ver lo que sucedía, para ambos ya era suficiente con tener a la reina demonio frente, por supuesto nadie quería hacerla enojar.

"Ha-tan..." Serafall llamo otra vez sin levantar la cabeza

"¿uh?"

Serafall levantó su cabeza lentamente mostrando en su rostro una expresión triste y ojos lagrimeantes "Ha-tan... tu onee-sama necesita de tu ayuda, eres el único que puede ayudarla"

"Ugh.... mmmm..... Sigh.... Bien, ayudare a mi Onee-sama" la expresión de Haru no era la mejor pero a Serafall no le importaba, ella solo jalo el brazo de Haru y lo sacó de la cama corriendo con él por el pasillo como si el pelirrojo fuera una cometa.

Mientras Serafall corría por el pasillo arrastrando al pelirrojo una voz se escuchó desde atrás "¡Alto ahí Onee-sama!" la reina demonio se giró para mirar a su hermana menor, Sona Sitri.

"So-tan necesito que Ha-tan me ayude en mi programa, será el antagonista" Serafall dijo emocionada sin soltar el brazo del pelirrojo.

"Sigh..." Sona suspiró y sacó sus anteojos para limpiarlos "Onee-sama no puede solo ir por ahí y secuestrar a las personas p.... ¿dónde estan?"

Serafall-sama sonrió y siguió corriendo, supongo que ahora debe estar escapando con su círculo mágico.

Justo como Tsubaki había indicado Serafall escapó de la mansión Sitri con Haru a cuestas hasta donde estaba su equipo de producción.

Sona dio otro suspiro antes de tranquilizarse: "Bien, prepara todo. Haru estara con mi Onee-sama por todo el dia, iremos a la cascada de siete colores"

"¿puedo preguntar la razón?" pregunto Tsubaki, Sona recogió un pergamino que cayó de los brazos de Haru cuando este estaba siendo arrastrado.

"Haru no nos dijo todo sobre la cascada, algo de ese lugar lo tiene inquieto y pienso descubrir la razón" Sona tenía una sonrisa "Si es una persona será un buen activo para mi nobleza sino por lo menos sabremos el secreto de la cascada y un poco más de Haru"

Pasó alrededor de media hora antes de que todos estuvieran preparados y listos fuera del bosque en el que se ubicaba la cascada, pero solo mirar al bosque desde el exterior les decía que había algo mal en el interior.

"Presidenta algo está mal" dijo Saji tomando una hoja de un árbol "es como si el bosque estuviera secando..."

"Vamos, la cascada no está lejos" Sona siguió el camino que conocía de memoria y todos los miembros del consejo la siguieron de cerca, todos con la guardia alta pero sin darse cuenta que estaban siendo observados desde lejos.