Los mares y océanos, lugares idílicos... Hermosos, casi perfectos, completamente mortales. La vida debajo el agua, en un delicado equilibrio... Ahora extinta. Adra, huérfana al momento del gran desastre tendrá que sobrevivir a las hambrientas criaturas del mar que ahora rodean su hogar. Adra es sorda, sin embargo, percibe el sonido de otra forma... Como si fueran auroras de colores, y las auroras del océano forman la imagen de sus pesadillas.