Lucha

Lin Yu no tenía miedo a la amenaza de Jing Chen. Aún sonrió como una brisa primaveral. —Sr. Jing, aunque también tengo sentimientos por la Señorita Su, no llego al punto de ser un villano.

Al ver que Lin Yu no parecía estar mintiendo, la ira en el corazón de Jing Chen se disipó un poco.

Justo cuando la atmósfera entre ellos dos se relajaba un poco, el teléfono de Jing Chen sonó.

Llamó Xu Chen.

Tan pronto como Jing Chen contestó la llamada, escuchó una voz exasperada al otro lado. —Jing Chen, ¿te han puesto los cuernos? ¿Qué pasa con ese vídeo? ¡Fue ascendido al top de las búsquedas tendencia en cuanto se lanzó!

¿Qué?

¿Qué cuernos?

¿Qué vídeo?

Jing Chen se quedó atónito por un momento. Miró a Lin Yu frente a él y pensó en el secuestro de Su Wan la noche anterior. Inmediatamente encendió su teléfono y vio el vídeo en la cima de las búsquedas tendencia.

En el vídeo, dos cuerpos desnudos estaban entrelazados en la cama. Solo la manta cubría un poco de su cuerpo desnudo.