Capítulo 339: El Ojo de la Mente es Tan Solo Eso, Pequeño

Como un niño pequeño solo en un centro comercial lleno de gente, es difícil garantizar que no se encuentre con gente mala.

En ese momento, Adrián Zhekova dijo —Yo iré contigo.

Los ojos de Cindy Clarke se iluminaron.

—¡Eso es! —exclamó ella—. ¡Adrián Zhekova puede ir con él!

Esta es la ventaja de que un niño tenga padre.

Antes, cuando llevaba a Morgan Zhekova, podía llevarlo al baño de mujeres cuando era muy pequeño.

Pero a medida que Morgan Zhekova crecía y se volvía más consciente, ya no podía entrar al baño de mujeres.

Así que, Cindy Clarke tenía que esperar por él fuera del baño de hombres cada vez.

Pero no importaba cuán capaz fuera Morgan Zhekova para manejar las cosas por su cuenta, Cindy Clarke seguía preocupada si no podía verlo.

Especialmente cuando Morgan Zhekova empezó a ir al baño de hombres solo por primera vez, Cindy Clarke siempre estaba preocupada afuera.

Se preocupaba de que no hubiera un lavabo a la altura de un niño allí dentro.