Tan pronto como el Director Xiao salió del edificio, la multitud se movió al unísono para echarle un vistazo. Cuando vieron que era un hombre y que estaba con otros cuatro hombres fornidos, dejaron de mirarlo y esperaron a que alguien más entrara o saliera del edificio.
Los paparazzi, sin embargo, sintieron que algo andaba mal con la expresión tensa del Director Xiao. Lo que era aún más misterioso era que había hombres a su lado como si estuvieran protegiéndolo. ¡Estos hombres eran definitivamente guardaespaldas contratados por el Director Xiao!
Pero, ¿por qué los había contratado y para quién?
Cuando estos pensamientos cruzaron sus mentes, los paparazzi, que estaban acostumbrados a ver a celebridades siendo custodiadas por este tipo de hombres fornidos, activaron sus radares.
En cuanto vieron al Director Xiao apresurándose hacia el estacionamiento, se colgaron las cámaras alrededor de sus cuellos y se apresuraron detrás de él.
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