Golpea un bam

La señora Lian sintió su mandíbula temblar mientras recibía otro puñetazo, sus ojos se revolcaron mientras veía varias manchas negras bailar frente a sus ojos al mirar el cielo oscuro y sombrío sobre su cabeza.

Durante dos segundos no entendió qué estaba sucediendo, en su lugar, se sentó en el suelo y parpadeó, lentamente, muy lentamente, salió de su aturdimiento mientras sacudía el dolor que la sumergía, haciéndole imposible pensar con claridad.

Fue después de mucho tiempo que la señora Lian pudo salir de su aturdimiento, mientras discernía vagamente que algo acababa de salir volando de su boca —algo blanco y perlado, y luego miró los tres dientes sangrientos que estaban en el suelo y después levantó una mano temblorosa para tocar sus dientes delanteros. Cuando se dio cuenta de que en efecto le faltaban dos dientes superiores y uno inferior, la señora Lian no pudo evitar gritar fuerte.