Llevándose bien

—Han Liling tomó un trozo de panqueque de cebolleta y dio un mordisco, pensando en lo maravilloso que sería si su tío hubiera podido casarse con Lu Jueyu en aquel entonces. Si ese fuera el caso, tendría una tía que la amara y cuidara de ella. Entonces ella podría vivir con su tío y su tía. —Es una lástima que su tío sea un pedazo de madera. Dejó pasar una buena oportunidad y permitió que otro hombre se quedara con la chica. Pero en comparación con Li Chenmo, su tío realmente carecía de algo. Sin mencionar que él no sabe las intenciones que otras mujeres tienen hacia él, es demasiado amable con ellas, haciendo que piensen que le gustan. Este solo hecho ya ha deducido muchos puntos en los ojos de la familia Lu.

—Pensando en esto, dejó escapar un largo suspiro y miró pensativa por la ventana. Si no fuera porque mascaba comida como un hámster, uno podría pensar que era una mujer madura.